—Hee, recuerdas lo
que a los monos les gusta tirarles de vuelta a los turistas, ¿no? Escúpelo
ahora
—gruñó Donghae.
—Él me desafió a
darle una razón para matar a alguien si llegara la hora de que él me llamara
Virgin
y ya no tuviera
nada que ver conmigo.
Cuando Donghae y Teukkie
no dijeron nada, Hee levantó la mirada hacia ellos y vio que ambos
estaban con los
ojos como platos, con la boca abierta
—¿Van a decir
algo?
Donghae se levantó
y empezó a pasearse por la habitación, mordiéndose el labio inferior y
murmurando
en voz baja. Teukkie
siguió luciendo perplejo.
―¿Hola? Esta es la
torre de control llamando a todos los insistentes amigos que saben cómo
intimidarme para decirles algo
que no comprendo por mí mismo y ahora están actuando como los monos a los que
se referían
anteriormente.
Eso efectivamente
logró cerrarle la boca a Teukkie y finalmente reconoció a Hee.
―Lo siento, estuve
como descolocado por un momento. Simplemente no puedo creer que haya dicho
eso.
―¿Qué quiere
decir? ―preguntó Hee, su voz extrañamente suave.
Donghae miró hacia
Hee y luego a Teukkie.
―¿Quiere decir lo
que creo que significa?
―No lo sé, Hae. Quiero decir, ¿por qué otra cosa iba a importarle cuál era su estado de virginidad? ―respondió Teukkie.
―Tal vez sea una
cosa de hermano pequeño, como si él sintiera que tiene que ser su hermano mayor
―dijo Donghae, asintiendo como si eso de alguna manera lo haría cierto.
―Lo he visto
mirarlo, y si lo ve como un hermano menor entonces Kangin tiene que rematarlo a
golpes porque parece que está considerando el incesto.
Hee observaba el
intercambio entre sus dos amigos mientras se comunicaban como si él no
estuviera sentada justo en frente.
―Oye, estoy sentado
aquí. ¿Podrían dejar de hablar como si no estuviera en la habitación?
―Cierto, lo siento
Hee. ―Donghae se puso de rodillas frente a Hee y colocó las manos en sus
rodillas para mantener el equilibrio―. Teukkie y yo creemos que Siwon está
siendo posesivo contigo.
―¿Esa es tu
investigadora en acción? ¿En serio? Bueno, maldita sea, ¿por qué no se van a
resolver
el misterio de la
muerte de Kenedy viendo como ustedes son tan buenos en entender las cosas y
todo eso?
―Hay mucho más de
eso que sólo posesividad, Hee. ―Teukkie se puso de pie y reanudó el paseo de
un lado al otro
que Donghae había abandonado―. Él te trata como… ―Teukkie hizo gestos con las
manos como si
tratara de animar a alguien a escupir lo que no podía conseguir que su boca
dijera.
―Es como si él
piensa, tal vez… ―comenzó Donghae, pero luego abortó su pensamiento.
―Sólo escúpelo ya.
¿Él piensa y me está tratando como qué?
―Compañero ―soltó Teukkie
tan rápido que parecía que alguien le había dado una palmada en la
espalda para que
salieran las palabras―. Él te está tratando como lo haría un compañero.
Hee se sintió como
si hubiera recibido un puñetazo en el estómago. Trató de tomar aire, pero sus
pulmones no
funcionaban.
Pensó que escuchó
voces, pero sonaban ahogadas, como si vinieran del otro lado de una puerta
cerrada. Sus pensamientos
estaban saltando de una imagen a otra, como uno de esos libros de imágenes
donde mueven las
ilustraciones haciéndolos ver con vida cuando van más rápido, pero esto no era
un libro, esta era su vida.
Vio a Siwon venir
hacia su cama cuando le preguntó si estaba bien, un giro, él estaba arrodillado
a su
lado observando la
piel en sus piernas, un giro, él estaba de pie en el pasillo del hospital
prácticamente gruñéndole, un
giro, él estaba poniendo una manta sobre él mientras yacía en la cama del
hospital temblando.
Una y otra vez las
imágenes llegaron. Había un denominador común en cada imagen: Siwon estaba
prácticamente
gruñéndole en todas ellas. De repente, sintió una fría humedad en su rostro.
Jadeó,
tratando de
orientarse, llenando sus pulmones con precioso y vivificante oxígeno.
―Mierda, Donghae
―farfulló Hee―. Mejor que haya una apestosa razón de cambio mundial para que tires agua en mi
rostro.
―No estabas
respirando y no respondías a nuestro llamado. Iba a darte una bofetada, pero Teukkie
decidió que la
marca de una mano estropeando tu piel puede no ser lo más prudente en estos
momentos ―explicó Donghae
con nerviosismo.
―He encontrado un
fallo en tu razonamiento ―dijo Hee, mirándolos como si más les valiera estar de
acuerdo con él.
Cuando Teukkie le entregó una toalla para secar su cara, explicó su teoría―.
Cada vez que Siwon está en
la habitación conmigo, me mira como si me quisiera estrangular. Ni una sola vez
ha aparentado
siquiera estar interesado en mí de esa forma.
―Tú mejor que
nadie debes saber que una expresión de deseo intenso se puede confundir con una
de estrangulación ―dijo Teukkie, con toda naturalidad.
Hee ladeó la
cabeza, levantando las cejas.
―Oh, lo dices en
serio, Teuk. ¿En qué momento de tu vida, llena de oportunidades increíbles y
desconcertantes,
has experimentado a un hombre mirándote donde pensaste, es esto deseo por mí, o
por el
estrangulamiento que él podría estar pensando en darme? Realmente, por favor
dime para así
poder avivar la
pequeña llama de esperanza que mi sentido común está tratando desesperadamente
de sofocar con la
fría realidad de que Siwon, ¡NO ES Y NUNCA
SERÁ UNA OPCIÓN,
EN MI “NO
SOY UN PUTO HOMBRE LOBO” VIDA!
Hee maldijo las
lágrimas condenatorias que revelaban la profundidad de sus emociones con
respecto
al lobo
melancólico que era una sombra constante en su mente.
―Hee, lo siento
―susurró Teukkie mientras se sentaba en la cama y le pasaba un brazo por los
hombros ― No sabía que
tenías sentimientos por él.
―Por supuesto que
tengo sentimientos hacia él. Siento que es un pomposo, peludo, infestado con
pulgas cabeza dura.
Hee pensó que si
lo decía en voz alta, entonces, tal vez lo podía creer. No hubo suerte.
La habitación se
quedó en silencio sin la ruidosa voz de Hee para llenar los espacios vacíos.
―Entonces, ¿qué
tal este clima que hemos estado teniendo? ―dijo Donghae, siempre la que trataba
de suavizar las
cosas.
De repente, Teukkie
se levantó, haciendo que Hee casi cayera al suelo.
―¿Qué mierda, Teukkie?
―escupió Hee. Luego miró a la cara de Teukkie y pudo ver que algo andaba muy mal.
―Voy a vomitar.
―La voz de Teukkie era desesperada y afligida.
Hee puso sus manos
sobre los hombros de Teukkie y comenzó a guiarla hacia el baño, todo el rato
gritando órdenes a
Donghae.
―Ve a buscar a Kangin,
consigue algunas toallas y paños fríos, luego consigue a el doctor Lee.
Donghae se dirigió
hacia la puerta, pero esta se abrió de golpe, gracias a Dios, antes de que
estuviera lo suficientemente cerca para ser golpeado por ella.
Kangin entró como
una tormenta de energía. Pasó junto a Donghae, siguiendo los sonidos dolorosos
y enfermizos
procedentes de su compañero. Siwon entró detrás de Kangin y se detuvo al lado
de Donghae.
―¿Qué está
pasando? ―preguntó, con una voz tan autoritaria como siempre.
―Estábamos sentados,
hablando sobre… ―Donghae hizo una pausa, recordando lo que habían estado hablando antes de
que Teukkie hubiera enfermado―. Nada importante, y luego Teukkie se levantó y
dijo que iba a vomitar.
Hee lo llevó al baño y yo iba a buscar a Kangin pero él ya estaba entrando en
la habitación.
Siwon sólo asintió
en respuesta. Donghae se dio cuenta entonces que tenía que conseguir toallas y
un
paño frío. Se
dirigió a la puerta de la habitación
y luego hizo
una pausa para volver la mirada
hacia Siwon
―¿Puedes contactar
con el doctor Lee de alguna manera?
―Sí.
―Un “hombre de
pocas palabras” sería un eufemismo para describir a ese lobo ―murmuró Donghae
mientras
continuaba en su búsqueda por las toallas.
―¿Qué pasó? ―le
gruñó Kangin a Hee mientras se acomodaba a sí mismo en el lugar que él acababa
de ocupar. Se hizo
cargo de sostener a Leeteuk mientras vomitaba cualquier cosa y todo de su
cuerpo.
―No sé lo que
pasó. Estábamos hablando y todo el mundo estaba bien y luego bam, Teukkie
estaba enfermo. ―Hee
dio una palmada juntando las manos en énfasis.
«Angel, ¿puedes decirme qué está mal?»
le preguntó Kangin, su voz llena de la angustia que sentía al
verlo tan enfermo.
«Se siente como si mis entrañas están tratando de salirse a
arrastras por mi boca. ¿Cuán descriptivo
es eso?»
Teukkie envió sus
pensamientos y gimió en voz alta al mismo tiempo que otro espasmo se apoderaba
de su estómago, y
comenzó a tener arcadas porque no quedaba nada en su interior.
Kangin le puso la
mano en la frente, cuando él comenzó a temblar.
«Estás ardiendo, Leeteuk.»
Kangin no sabía
nada acerca de la fiebre, pero estaba seguro de que su temperatura iba más allá
del
punto de ser sólo
una fiebre leve.
―Toma, tengo
toallas húmedas. ―Donghae entró en el cuarto de baño y abrió el agua fría,
empujando las toallas bajo
la corriente, luego exprimió el exceso y le dio una a Kangin.
―Ponla en su
cuello ―indicó Hee, y luego tomó una toalla de Donghae y la dobló colocándola
en el suelo y empujándola
debajo de Teukkie para que así sus rodillas no estuvierna en el piso duro y frío.
―Siwon se puso en
contacto con el doctor Lee, está en camino hacia aquí ―les informó Donghae.
Teukkie finalmente
se dejó caer contra Kangin, agotada de estar con arcadas. Su rostro enrojeció
por la fiebre, y su
respiración era superficial. Kangin lo recogió y lo llevó a su cama. Mientras
él suavemente lo depositaba
habló con Siwon.
―Llama mi padre.
―Hecho, mi
príncipe, ya le he llamado. Él, tu appa y Sora estaban abajo en la cafetería.
Están de camino ahora.
Kangin asintió.
―Gracias.
Sin previo aviso Teukkie
gritó:
―¡KANGIN! ―Hee y Donghae
saltaron. Siwon se estremeció a causa de su sensible audición de lobo.
Kangin frotó la
frente de Leeteuk.
―Estoy aquí, amor.
¿Qué puedo hacer? ―Kangin estaba apretando los dientes, la frustración y el
miedo corriendo por su
cuerpo.
―Haz que se
detenga ―le susurró Leeteuk―. Por favor, haz que se detenga.
Hongki marcó el
número de Jihoon mientras continuaba examinando la muestra de sangre que tenía
en el microscopio. Sus manos temblaban mientras giraba el dial para que la
diapositiva
entrara en foco.
No podía creer lo
que estaba viendo, pero ahí estaba a color vivo. La sangre de Heechul coincidía
con
la sangre de Teukkie.
La única diferencia siendo la cantidad de células que llevaba el gen. Dado que
Teukkie era medio
lobo, su sangre estaba llena de ellos. La de Heechul, sin embargo, tenía lo
suficiente como para ser
reconocible por una persona que sabía qué buscar. Jihoon finalmente respondió.
—Dime que tienes
buenas noticias, doctor Lee.
—Bueno, si te
refieres que puedo encargarme de Teukkie por sí mismo, entonces sí tengo buenas
noticias. Acabo de
recibir una llamada del Beta de Junjin. Teukkie está enfermo. Ahora me voy a
verlo y haré que lo
trasladen a la UCI, donde no se permite a los visitantes de cualquier clase
después de las 9:00 p.m. Tengo un
par de batas para ti aquí en mi oficina. La voy a dejar desbloqueada para que
puedas entrar. Espera en
mi oficina mi llamada.
Hongki estaba
cambiando los portaobjetos en el microscopio, poniendo los de Heechul a un lado
y
deslizando la
muestra de Teukkie bajo el alcance. Al mirar por el ocular dejó de escuchar
cualquier cosa que Jihoon dijera.
Había pensado que esto podría suceder, pero pensarlo y verlo es muy diferente
―Está bien, Jihoon,
te llamaré cuando esté listo. Adiós. —Y sin escuchar su respuesta colgó.
Siguió examinando
la sangre a medida que veía las células humanas atacar a las células de hombre
lobo. Teukkie
había recibido una transfusión de sangre antes de que él hubiera sido capaz de
detenerlo.
Eso era lo que
estaba viendo en la diapositiva. Las células humanas de la sangre que no
pertenecía a
Teukkie estaban
atacando a sus células.
Había oído que
esto podría ocurrir cuando un lobo recibía sangre humana, porque la sangre humana
reconoce las
células lobuna como un virus y atacaban en consecuencia. Sabía de sólo una
cura, una
forma de evitar
que las células humanas mataran a las células del lobo y así matar inevitablemente
al
hombre lobo.
Cuando se puso de
pie y se colocó su bata de laboratorio, echó un último vistazo a la diapositiva
y luego se volvió para ir
a la habitación de Teukkie. Se decía a sí mismo que todo iba a estar bien, que Jihoon podría sanarlo, que
no estaba poniendo a Teukkie en ningún daño real.
Antes de que su
conciencia pudiera convencerlo de ello ya estaba de pie frente a la puerta de Teukkie.
Había sido capaz
de oír sus gritos desde el pasillo y sólo podía imaginar lo doloroso que era
para su cuerpo volverse sobre sí
mismo. Ahí está, ¿ves? Voy a ayudarlo al darle la morfina para mantenerla bajo
control, y entonces no va a
sentir el dolor hasta que Jihoon pueda curarlo.
Apaciguando su
culpa, volvió el pomo de la puerta y entró en una habitación llena de gente
preocupada, un Alfa
emocionalmente fuera de control, y los gritos de un chico muy enfermo.
Gracias a Dios,
ante la vista de una persona enferma el médico en él le dio una patada y se
concentró en ese papel, en
hacer algo para ayudar.
Para el momento en
que el doctor Lee entró en la habitación todo el mundo estaba allí, revistiendo
la
pared de la
habitación.
Cada rostro estaba
envuelto en preocupación y miedo por Leeteuk. Kangin escuchó la puerta abrirse.
Se volvió a ver a el
doctor Lee de pie en la sala, y antes de que nadie pudiera hacerle una pregunta
él
levantó la mano y
se dirigió a la cama de Leeteuk. Sólo se oía los gemidos y los gritos de su
compañero.
—Por favor, haga
algo por él. —Kangin se encontró rogándole al doctor Lee, desesperado por algo,
cualquier cosa
para ayudar a Leeteuk.
El doctor Lee
escuchó el corazón de Leeteuk, y luego destelló una luz en cada ojo. Apartó las
manos de Leeteuk lejos de
su estómago y comenzó a empujar en diversos lugares, provocando que un grito
emergiera. Kangin
gruñó pero el doctor Lee no se dejó intimidar.
—Guárdatelo, lobo.
No le puedo ayudar si tú esperas que no haya ningún dolor. —Metió la mano en su bolsillo y sacó
algo que Kangin no reconoció. Lo vio recorrerlo al otro lado de la frente de Leeteuk
y luego observó
una pantalla equeña a un lado—. Es un
escáner térmico para tomarle la temperatura.
Está en grados
centígrados lo que significa que si no logramos que la temperatura disminuya o
bien
tendrá un ataque,
entrará en coma, o ambos. —El doctor Lee miró a Junjin—. Voy a tener que
llevarlo a la UCI. No se
permite a nadie allí, los pacientes están demasiado enfermos para ser expuestos
a los gérmenes que las
personas inocentemente podrían traer dentro. ¿Entiendes lo que esto significa?
Junjin asintió.
—Voy a cuidar de él.
Vieron como él
doctor pulsó un botón que hizo que una alarma sonara, entonces todos oyeron
pasos desplazándose rápidamente hacia la habitación. Lo siguiente que Kangin
supo era que estaba siendo
empujado fuera del
camino. Siwon y su padre lo agarraron antes de que pudiera arremeter contra el
personal del
hospital, a medida que estos transferían a Leeteuk en una camilla.
Él no podía
concentrarse en lo que el
doctor Lee estaba diciendo mientras observaba a su compañero siendo apartado de
él a donde sea que él
no pudiera ir… otra vez. Una vez que Leeteuk se perdió de vista finalmente miró
a el doctor.
—¿Qué pasa con él?
—gruñó.
—No lo sé todavía,
Kangin. Tendrás que ser paciente y dejar que haga mi trabajo. El hecho de que
estés gruñendo y
lanzando ataques masivos de Alfa no ayudará a que Teukkie mejore.
Kangin se
sorprendió por la audacia de el doctor, pero se encontró con que lo respetaba
por ello.
—Sólo haga que se
sienta bien otra vez. Por favor.
El doctor Lee puso
su mano sobre el hombro de Kangin.
—El va a estar
bien. —Dio un paso atrás entonces de modo que pudiera mirar a todo el grupo
hacinados en la pequeña
habitación—. Les haré saber tan pronto como sepa algo. —Y luego se dio la
vuelta y se marchó.
La habitación se
quedó tranquila, nadie atreviéndose a romper el silencio, porque entonces
tendrían
que reconocer el
miedo que amenazaba con consumir a uno por uno. El silencio fue roto por una
maldición de parte
de Hee.Todo el mundo se volvió hacia él y lo observó mientras luchaba con la
cinta que le sujetaba la vía
intravenosa en su lugar.
No estaba
prestando atención al hecho de que todo el mundo se centró en él.
—Oye, dijo la
enfermera idiota número uno, mira esta vía que acabo de poner en este chico,
¿crees que he usado
suficiente cinta? Por supuesto que no, dijo la enfermera idiota número dos,
tienes que
envolver un rollo
entero alrededor de su brazo para que nada menos que un milagro permita que se
despegue.
Murmuró Hee el
diálogo en voz baja cuando finalmente consiguió sacar la cinta fuera de la vía
intravenosa en su
brazo
— ¡Por fin!
—anunció triunfalmente mientras sacaba la vía de su brazo, la sangre corrió por
su mano.
Levantó la vista y
vio a todos mirándole—. ¿Qué? —preguntó. Sus ojos se agrandaron cuando Siwon
comenzó a caminar
hacia é. Estaba tan cerca que Hee tuvo que estirar el cuello hacia atrás para
mirarloa la cara.
—¿Por qué te
sacaste eso? —Su rostro era duro, ilegible.
—Porque si voy a
tener que tener un soporte atado a mí, preferiría que sea uno del que pudiera
conseguir un
cierto uso. Pero como era este soporte en particular mi compañero constante,
debo
decir que
simplemente no estaba funcionando para mí. —Hee batió sus pestañas hacia él—.
Además,
¿qué diablos
importa? ¿Mi mejor amigo acaba de ser llevado a toda prisa a la UCI y tú estás
preocupado por mi estúpida
vía intravenosa?
—Ponla de nuevo.
—Sus ojos fulguraban dorados mientras él lo aferraba del brazo.
—Oh, sí, seguro.
Ahora mismo me pongo en eso —dijo sarcásticamente mientras quitaba la mano de
él alrededor de su
brazo. Prestándole mucho menos atención que si se tratara de un mosquito, lo
rodeó para así poder ver
a los demás
— Entonces, ¿cuál
es el plan, Junjin? —Oyó el rasgar de un material y cuando se volvió hacia el ruido vio como Siwon
arrancaba un pedazo de la sábana de la cama y lo llevaba hacia él. La tomó del
brazo, suavemente esta
vez, y envolvió el material alrededor del punto que todavía estaba sangrando
por donde había arrancado su
vía intravenosa. Sin decir una palabra, regresó al lugar en el que previamente
había estado de pie,
mientras Hee le veía retroceder.Junjin respondió como si la escena en
particular no hubiera tenido lugar.
—Por ahora tú y Donghae
se quedarán aquí, y yo voy a poner un guardia en la puerta. Kangin y Siwon
permanecerán en la sala de espera de la UCI. Kangin — Junjin miró a su hijo—,
no intentarás desafiar lo que el doctor Lee
ha dicho. ¿Está claro?
—Como tú digas,
así será —respondió formalmente Kangin, el cuello al desnudo en sumisión.
—Bien —continuó—, Hyesung
y Sora se irán a casa y descansarán. —Sora empezó a interrumpir, pero Hyesung la detuvo
con una mano en el brazo y dio un brusco movimiento de cabeza. Sora se tragó
las palabras que iba a
decir.
—Sora, entiendo
que quieres estar aquí por tu hijo, pero necesitas descansar y no lo
conseguirás aquí.
Confía en mí, ¿de
acuerdo? —Junjin esperó su respuesta antes de continuar.
—Está bien
—respondió ella con voz firme. Junjin miró su reloj, marcaba las 9:30 p.m.
—Creo que es hora
de declarar la noche. Tan pronto el doctor Lee tenga información se pondrá en
contacto conmigo y todos estarán informados en cuestión de minutos. —Junjin se
volvió para salir y Hyesung le siguió. Sora se acercó a Hee y la abrazó y luego
hizo lo mismo con Donghae.
—No se preocupe,
señora P —le dijo Hee—. Teukkie es la persona más testarudo que conozco. Él va
a estar bien.
Sora asintió y con
los ojos llenos de lágrimas contenidas, se fue también.
Kangin les dio a
cada una un abrazo también y les dijo que lo llamaran si necesitaban algo, a lo
que Hee le arrojó:
—Creo que Teukkie
patearía mi trasero si te llamo para lo que necesito. — Siwon gruñó, pero al
menos logró una pequeña sonrisa de Kangin. Eso era lo que Hee había estado
pretendiendo lograr. Se volvió hacia Siwon y le enseñó la lengua como un niño
caprichoso.
Mientras él y Kangin
se iban, Siwon se volvió una vez más.
—Ustedes dos. No
hagan nada que consideren brillante. El resto de nosotros lo considerará estúpido.
—Cerró la puerta
justo cuando Hee arrojó la cosa más cercana que pudiera tener en sus manos.
—Arrrrrgh, lo voy
a despellejar la primera vez que lo vea como un lobo y lo convertiré en una
bonita
alfombra para
poner en frente de la chimenea —gruñó Hee.
—Um, Hee, no
tienes chimenea —señaló Donghae.
—Mi chimenea
hipotética, Donghae. Vamos, ponte al día, ¿quieres?
—Oh, mi error.
Olvidé que se supone que debo estar tomando notas de tu vida hipotética de
manera
que cuando hagas
referencia a ella voy a saber exactamente de qué mierda estás hablando.
—Bueno, al menos
eres capaz de admitir cuando te equivocas. Ese es un paso en la dirección
correcta. —Hee le dio unas
palmaditas a su amigo, y luego saltó hacia atrás justo antes de que el puño de Donghae pudiera conectar
con su hombro—. Hombre, es bueno no tener ese estúpido soporte pegado a mí.
Donghae se sentó
en la cama y miró a Hee, su cara ya no juguetona.
—¿Cuál es el plan,
Hee? Sé que estás cocinando uno porque eso es lo que mejor sabes hacer, así
que,
¿qué vamos a
hacer?
—Colarnos en la
UCI, por supuesto —dijo Hee, con toda naturalidad.
—Genial. —Donghae
sonrió con complicidad y luego escuchó con atención mientras Hee le explicaba su plan.
Y la pregunta del millón es...
ResponderEliminarSi Hee y Siwon son compañeros, porque Hee no tiene marcas como Tukkie~ ...
Es porque no tienen la misma cantidad de gen lobo o qué!???
Ay ño....pobre Tukkie~