Dark Pleasures (DH2)- Capítulo 27




Kangin se despertó poco tiempo después. Al levantarse se dio cuenta de que la mayor parte de las heridas habían desaparecido. Se quitó las vendas manchadas de sangre y las tiró a la papelera, situada junto a la puerta.

–¿Leeteuk? –lo llamó, asomándose al pasillo.

Nadie contestó. En la casa no se escuchaba ningún sonido, todo estaba en silencio. Aún estaría fuera.

Cogió su ropa y entró al baño. No tardó mucho en ducharse, afeitarse y vestirse. Una vez aseado, volvió a la habitación. Se detuvo en la puerta al ver a Leeteuk. Llevaba unos vaqueros muy ajustados y una sudadera negra que ocultaba esas curvas que él se moría por acariciar. El pelo suelto le daba una apariencia muy sugerente.

Se acercó en silencio a él, que estaba de espaldas, y vio que estaba mirando la papelera. Sin hablar, inclinó la cabeza y le mordisqueó el cuello.

En cuanto sus labios la rozaron captó su aroma. No era Leeteuk.

Era Heechul.

Kangin retrocedió, alejándose, mientras Heechul se giraba para mirarlo frente a frente. Aún tenía la cara magullada por la paliza que le habían dado los secuaces de Changsu y llevaba un apósito sobre los puntos de sutura. Se agachó, medio cojeando, y adoptó una postura de ataque.

Centinelas- Capítulo 4



Hyukjae regresó a la carretera, sujetando al bebé en el lugar con una mano mientras conducía. 
Después de algunos minutos, los gritos del niño se acallaron, entonces se detuvieron 
completamente. Podía sentir el roce caliente de aire contra la piel mientras el bebé respiraba, 
diciéndole que estaba bien.

No era que Hyukjae se preocupara. La muerte probablemente era lo mejor que le podría ocurrir al 
niño. Su madre se había ido. Su padre probablemente estaría muerto. Los Sasaeng no habrían 
tenido ninguna a razón para mantener vivo a un hombre. Habrían drenado su sangre y se lo
 habrían comido.

La vida de ese niño sin duda estaría llena de dolor y sufrimiento. Sería una bondad simplemente 
dejarlo morir. Si no fuera por el voto de Hyukjae por proteger a los humanos, probablemente lo
habría hecho.

Volver a Amarte- Capítulo 30




Siwon se metió en el Land Rover de Hyukjae. Un grupo de periodistas se abalanzó sobre él en un intento por conseguir una declaración.

Pegaron las cámaras a las ventanillas, y también los micrófonos, en busca de un comentario.

Siwon bajó la cabeza y se frotó las sienes mientras Hyukjae se alejaba de la comisaría. Se sacó el móvil del bolsillo y llamó a Tiffany.

—Siwon, me alegro de que hayas llamado. La prensa me está acosando.

—Sin comentarios, Tiffany. Redacta una circular para todos los empleados. Nadie va a hablar con la prensa. Y me refiero a nadie. Mándamela por fax a casa antes de enviarla.

—La prensa está acampada en tu jardín delantero, Siwon —le dijo Hyukjae.

—Joder. Mándamela a casa de Hyukjae, Tiffany. Estaré allí un tiempo.

Dark Pleasures (DH2)- Capítulo 26




Minho se dio la vuelta para marcharse pero, en un abrir y cerrar de ojos, Kangin se levantó y se plantó delante de él. Su Escudero lo miró, furioso.

–Quítate de en medio.

La expresión de Kangin era la misma que adoptaría un padre infinitamente paciente frente a un adolescente rebelde.

–Minho, no voy a morir.

–Sí, claro. ¿Cuántas veces crees que el último Dark Hunter que mató Changsu le dijo lo mismo a su escudero antes de que lo convirtieran en un Dark Hunter extra crujiente? –Se libró de las manos de Kangin encogiéndose de hombros y salió de la casa como alma que lleva el diablo.
  
En la mandíbula de Kangin comenzó a palpitar un músculo mientras cogía el móvil y marcaba.

–Shindong –dijo tras una breve pausa–, tengo un Escudero renegado que creo que se dirige al Barrio Francés en un Jaguar nuevo, modelo XKR descapotable de color antracita. ¿Puedes detenerlo antes de que cometa una estupidez?

Con el ceño fruncido por la preocupación, miró a Leeteuk a los ojos y siguió escuchando a Shindong.

–Sí, gracias.

Centinelas- Capítulo 3



Lee Donghae se negaba a seguir escondiéndose en su habitación. Había pasado los dos 
últimos años de su vida como prisionero en una cueva. Eso era todo lo que estaba dispuesto a 
permitir que los Sasaeng le robaran de su vida. Era hora de seguir adelante.

En qué, no estaba seguro, pero lo que fuera, no sería en esta habitación que los Centinelas le habían 
proporcionado.

Aún estaba débil por su experiencia, pero conseguía ponerse más fuerte cada día. La comida se le 
asentaba mejor en el estomago, y ahora que se había cortado el enmarañado pelo y usaba ropa real,
 en lugar de harapos, se sentía casi humano.

Gracioso cuan irónico era, considerando todas las cosas.

Donghae abrió la puerta para encontrarse a Leeteuk de pie ahí, con el puño a punto de golpear.

Dark Pleasures (DH2)- Capítulo 25




Una vez Kangin acabó de comer y llamó a Minho, Leeteuk lo acompañó al aseo del segundo piso, para ayudarlo a darse un baño.

Kangin permaneció totalmente inmóvil mientras él le desabrochaba la camisa, se la quitaba y hacía lo propio con los pantalones. Su miembro se endureció con el roce de sus dedos.

–En realidad, hace siglos que no tomo un baño de verdad. Siempre me ducho.

–Bueno, bañarse es mucho más divertido… te lo prometo. –Poniéndose de puntillas le dio un ligero beso en los labios.

Kangin se dejó llevar y se metió en la bañera, siguiendo sus órdenes. La sensación del agua caliente deslizándose sobre su piel, era maravillosa.

Leeteuk se quitó la ropa y se metió con él en la bañera. Lo rodeó con los brazos pero, en cuanto Leeteuk comenzó a moverse sobre su cuerpo, los viejos recuerdos se apoderaron de él. Al instante, volvió a estar en su antiguo hogar y era Junho el que lo bañaba; era su mirada distante la que veía.

Leeteuk notó que se quedaba rígido.

–¿Te he hecho daño?

–Apártate, déjame salir –le dijo, haciéndolo a un lado. Algo iba mal. Algo malo le estaba sucediendo.

Centinelas- Capítulo 2



La única razón por la cual Henry aún no se había cortado las muñecas, era la promesa de
venganza. Quemaba en el interior, agitándose e irritándole el vientre hasta que no podía pensar en
otra cosa.

Sooman, el Señor de los Sasaeng iba a morir. Aún no sabía cómo, pero cada una de las cientos de 
posibilidades era atractiva a su manera.

Lo había capturado cuando era pequeño. Enjaulado. Alimentado con su sangre. Lo había violado. 
Obligado a dar a luz a sus engendros, todos ellos muertos. Al igual que su alma.

No importaba cuántas veces le torturara o matara, no sería suficiente. El hambre por su agonía nunca se saciaría. La sed por su sufrimiento jamás se agotaría.

Volver a Amarte- Capítulo 29



Heechul pasó una página, señaló un párrafo con el bolígrafo y apoyó la barbilla en una mano. Estaba sentado en el suelo con las piernas estiradas. Tras doblar las rodillas, colocó un codo sobre una pierna y siguió leyendo.

Sulli, que estaba acostada en el sofá detrás de él, se removió.

—¿Qué estás leyendo? —le preguntó.

—Un artículo para el trabajo — contestó Heechul al tiempo que se subía las gafas por la nariz.

—¿Cómo se llama?

La curiosidad de su hija hizo que levantara la cabeza. Los moratones que tenía en la cara ya lucían un tono amarillento, pero aún estaba dolorida por el accidente. En ese momento, se encontraba en el sofá, leyendo un libro. El hecho de que quisiera estar en la misma habitación que él le arrancó una sonrisa. Le mostró el artículo

Dark Pleasures (DH2)- Capítulo 24




Inyoung acabó de atender a Kangin justo cuando Minho salía por la puerta.

–Debe dolerte mucho. ¿Qué te ha sucedido exactamente?

–He sido un imbécil.

–Muy bien, Imbécil –continuó Inyoung, con brusquedad–, vamos a tener que entablillar esas piernas y aquí no tengo lo necesario.

–¿Puedo usar el teléfono? –le preguntó Kangin. Inyoung se lo acercó, mirándolo con el ceño fruncido.

Mientras marcaba, Leeteuk continuó limpiándole la sangre del rostro.

–¿Cómo puedes actuar con tanta normalidad? –le preguntó–. Debes estar sufriendo una agonía.

–Los romanos me torturaron durante un mes, Leeteuk. Créeme, esto no es nada.

Aún así, sufría por él. ¿Cómo era capaz de soportar todo ese dolor?

No pudo evitar escuchar la conversación de Kangin con la persona a la que había llamado.

Centinelas- Capítulo 1

Yesung entró en la oficina de Shindong sin avisar. Su negro pelo era un desastre, como si acabara de salir de la cama.

—Hay un hombre desnudo en la puerta principal. Es un Tvxq.

La conmoción recorrió a través de Shindong, silenciándolo por un momento. ¿Porqué su enemigo 
estaba en la puerta? ¿Era alguna clase de truco? La costumbre exigía que una parte de la 
oferta para negociar, fuera mostrarse desnudos para probar que no iban armados, pero después de 
tantos años del estancamiento de la guerra entre ellos,

¿por qué los Tvxq querrían negociar algo?

—¿Qué quiere?

—Pidió hablar contigo. ¿Le digo que entre o lo mato? —Las facciones de Yesung continuaron inexpresivas, como si realmente no le importara la opción que Shindong eligiera.

—¿Está solo?

—No. Hay algunos hombres sentados en sus vehículos en la carretera principal. La única persona 
a su lado es una mujer muy cabreada.

¿Una mujer? Si alguno de los Tvxq había encontrado a una pareja Suju, ¿se habían apegado a las  leyes antiguas y le habían traído? No era probable, más si posible, y con todas las parejas apareciendo recientemente, Shindong se negaba a tomar cualquier riesgo.

—Deja que él y la mujer entren. Pero sólo ellos. Hazlos caminar. Que ningún vehículo pase las 
puertas. Alerta a los hombres para que estén listos para problemas. Encuéntrame en las puertas delanteras.

Yesung asintió y se fue.

Shindong se peinó con los dedos y se arregló la ropa. No haría ningún bien a su pueblo aparecer con el aspecto insomne que tenía.

Volver a Amarte- Capítulo 28




El coche tomó la siguiente curva más rápido de lo que Heechul pretendía. Pisó el freno.

No pasó nada.

Confundido, volvió a pisar el pedal de freno. Al ver que el coche no aminoraba la velocidad, pisó el pedal repetidas veces. En vez de aminorar la velocidad, tuvo la impresión de que descendían mucho más rápido.

El miedo le provocó una descarga de adrenalina. Intentó mantener la voz serena.

—Sulli, pásate al asiento trasero. Ponte el cinturón y...

—¿Por qué?

—¡Hazme caso! Los frenos no funcionan. ¡Pásate ahora mismo al asiento trasero! Ponte el cinturón y agárrate fuerte. ¡Hazlo!

Dark Pleasures (DH2) Capítulo 23




Kangin agarró las cuerdas y tiró de ellas con todas sus fuerzas, asaltado por una nueva oleada de pánico. Tenía que calmarse. Lo sabía. Pero los recuerdos de las torturas a las que fue sometido en Roma lo angustiaban.

–¿Qué te pasa? –le preguntó el Daimon, acercándose–. Estás un poco pálido, comandante. ¿Acaso estás recordando la humillación de tu derrota? ¿O las manos de los soldados romanos mientras te clavaban en la cruz?

–¡Vete al mierda! –Kangin liberó con el dedo del pie la hoja retráctil oculta en la bota, y atacó a Changsu.

El Daimon se alejó de un salto, quedando fuera de su alcance.

–¡Vaya! Me olvidé de esas botas. Una vez acabe contigo, el siguiente Dark Hunter de mi lista va a ser ese viejo. Con él fuera de combate y sin sus armas, ¿qué será de todos ustedes? –Inclinó la cabeza hacia la chica–. Pórtate bien y quítale las botas al comandante.

Kangin apretó los dientes al ver cómo la mujer se acercaba. El Código le permitía protegerse de los humanos que quisieran hacerle daño, pero no era capaz de atacar a una mujer, y menos estando embarazada. No era más que una criatura, aunque ella quisiera dar otra imagen.

Deseo Prohibido- Capítulo Final




Yesung supo el momento en el que Wook se perdió. Su mente se fue astillada en demasiados pedazos para contarlos.

«Lucha», le ordenó mientras intentaba alimentarlo del poder que necesitaba para hacer eso. 

«No te atrevas a darte por vencido conmigo».

Pero ningun Wook había quedado, sólo el eco vacío donde una vez había estado su esencia.

La pena se hinchó en él tan densa, que no podía respirar. Wook se fue. Su dulce Wook estaba vivo, pero desgarrado en pedazos.

Sooman había huido a lo largo de un corredor oscuro, dos de sus guardias pisándole los talones. 
Yesung iba a encontrarlo y matarlo lentamente, desgarrar la carne de su cuerpo trozo a trozo antes de que él lo viera freírse a sol.

Pero primero tenía que salir de esta maldita jaula.

Golpeó los barrotes otra vez, sintiéndolos vibrar, pero sin ceder ni un centímetro. Eran sólidos. Le llevaría semanas escapar de aquí, asumiendo que viviera tanto tiempo.

Wook no lo haría. Todavía podía notar que estaba vivo, ¿pero cuánto tiempo duraría eso? ¿Cuánto tiempo pasaría antes de que se desangrara o uno de los demonios decidiera que la sangre no era suficiente y fuera a por su carne, también?

Volver a Amarte- Capítulo 27




Las primeras luces del alba se filtraron por la ventana abierta. Las cortinas, de un azul muy claro, se agitaban por la brisa. Heechul se frotó los ojos soñolientos y los entreabrió para mirar el reloj. Al ver los números, se sentó de golpe, parpadeó dos veces y pasó por encima de Siwon en busca de su pijama, que había dejado tirada en su lado de la cama la noche anterior.

Siwon rodó sobre el colchón y lo atrapó con un musculoso brazo.

—No te vayas —protestó.

Heechul se zafó de su brazo y se vistió.

—Dijiste que me despertarías antes de que amaneciera.

Una sonrisa traviesa apareció en su cara.

Dark Pleasures (DH2) Capítulo 22




Al llegar a casa Kangin se detuvo en la puerta de la cocina y observó a Leeteuk con curiosidad. Eran casi las cinco de la mañana y, según parecía, estaba haciendo sopa y unos sándwiches.

¿Y esto?

Se movió como una sombra hasta ponerse a su espalda y lo cogió de la mano.

Leeteuk alzó la vista con un jadeo, asustado hasta que lo reconoció. Sin dejar de sonreírle, Kangin se llevó su dedo a la boca y pasó la lengua a su alrededor, saboreando tanto la sopa como la piel de Leeteuk.

–Delicioso –le dijo.

–Pensé que te gustaría un poco de comida caliente, para variar, cuando llegaras a casa. Debes sentirte muy solo cuando llegas a una casa vacía y oscura, sin nadie que te dé la bienvenida.

No podía imaginarse cuánto. Lo miró, observando esos labios abiertos que lo llamaban a gritos. Habían pasado muchos siglos desde la última vez que alguien le diera la bienvenida al volver a casa. Siglos de inenarrable soledad y abandono.

Deseo Prohibido- Capítulo 20




Donghae contuvo el aliento mientras observaba la boca de la cueva por donde el hombre de ojos negros había ido a buscar a los niños.

Había varias personas aquí, dando vueltas, comprobando a los prisioneros que habían ayudado a liberar. Un hermoso hombre sujetó a uno de los niños en sus brazos, meciéndole. A su lado, otro hombre estaba vigilante, la hoja de su espada brillaba a su lado. También, había otros hombres armados, los suficientes de ellos como para que Donghae se sintiera como si pudiera respirar completamente por primera vez en mucho, mucho tiempo.

El hombre que estaba con él en la cueva se acercó. Le ofreció una sonrisa tranquilizadora. Los ojos eran brillante cuando lo miró.

—Soy Zhoumi —dijo.

—Lee Donghae —Años de reuniones de negocios le empujaron la mano para estrechar la de él. Tenía la piel sucia, las uñas demasiado largas, quebradas, estaban cubiertas de mugre. Retiró la mano, pero no lo suficientemente rápido. Zhoumi la tomó en su mano suave.

Volver a Amarte- Capítulo 26




—¿Y por qué me sugeriste que me buscara un abogado?

Yunho suspiró.

—Quería ayudar. Me di cuenta de lo frustrado que estabas. Creía que si podías encontrar respuestas solo, si no me involucraba directamente, no causaría problemas darte un empujoncito. No sabía que el abogado que escogiste te iba a reconocer.

De modo que Heechul era el eslabón. Si no hubiera ido a Seúl, si no hubiera llamado a Donghae para concertar una cita, si Donghae no la hubiera reconocido, era muy posible que nada de eso hubiera sucedido. Que las mentiras hubieran seguido siendo la verdad.

Siwon miró a Heechul.

—¿Sabes si visitó alguien a Heechul en la clínica privada?

Dark Pleasures (DH2) Capítulo 21




–Kyuhyun, ¿estás seguro de que no puedes ayudarlo?

–Créeme, odio la regla de «nada de ayuda» tanto como tú. Pero si intento echarle una mano, sólo conseguiré debilitar sus poderes.

Minho le ofreció el móvil.

–Llama a Heechul y avísale.

Al marcar el primer número, le asaltó otra duda.

–¿Quiénes son los Cazadores Arcadios?, ¿de dónde vienen?

–Son mitad humanos, mitad apolitas. Hay Cazadores Arcadios y Cazadores Katagaria. Algunos de ellos utilizan sus poderes para fines no muy altruistas.

–Pensaba que eran de los buenos.

–Algunos sí lo son, pero otros son asesinos.

–… con los poderes de un hechicero que puede viajar en el tiempo y en el espacio –siguió Leeteuk, sintiendo que se le hacía un nudo en el estómago.

Doble Riesgo- Capítulo Final




—Él dice aquí...

—Wook, repito mi pregunta, ¿a quién vas a creerle?

—Tengo que creer a Sunjoon —Wook hablaba procurando ocultar todo rastro de dolor en su voz
—. ¿Cómo se enteró Sunjoon de mi embarazo? 
Mi madre no se lo dijo. ¿Cómo supo que aquella noche nos acostamos juntos? ¿Le hablaste de lo divertido que había sido acostarte con un virgen?

Yesung arrugó furioso la carta.

—No —dijo, con una voz que parecía un gruñido—. ¡No lo hice! Y no creo que nadie, ni siquiera Sunjoon, se arriesgara a tanto a cambio de la esperanza de que te quedaras embarazado.

—¿Qué tenía él que perder? Si como dices, no le interesaba hacer el amor a menos que estuviese en sus días fértiles, el hecho de que yo pasase la noche contigo no debió preocuparte mucho —Wook necesitaba herir a Yesung, quería que padeciese una mínima parte de la rabia y el dolor que se albergaban en su interior.

Yesung hizo una mueca.

Volver a Amarte- Capítulo 25




—¿Qué haces?

Heechul, que estaba sentado en el suelo del salón, dio un respingo antes de volverse hacia la escalera. Siwon lo miraba desde el último peldaño, vestido tan solo con unos vaqueros desgastados de cintura baja. Iba descalzo, tenía los ojos hinchados por el sueño y el pelo,
alborotado como si acabara de salir de la cama.

Heechul se llevó una mano al pecho.

—Me has asustado.

Siwon entró en la estancia.

—¿Esperabas a otra persona?

El sol de la mañana se reflejó en su pecho desnudo. La imagen le provocó un hormigueo, ya que recordó que había trazado esos músculos con los dedos y con los labios.

Deseo Prohibido- Capítulo 19





Algo poderoso y malo le estaba pasando a Changmin. Podía sentir el lento e insidioso arrastre de la maldad que Jessica había implantado en él. Nunca antes había sentido nada como esto. El dolor aumentaba en el cuerpo, enviando fuego a la columna, y aún así se rehusaba a dejar ir a su hija.

Nunca había estado más asustado en su vida. El y Yunho habían estado en peleas. Fueron heridos y estuvieron casi cerca de la muerte muchas veces a través de los siglos, pero nunca había sentido una desesperación como esta. Si no encontraba la manera de detener este mal, podría morir, llevándose a Yunho con él.

—Déjala ir, amor —le dijo a Changmin—. Tenemos que encontrar a Kevin.

—Es demasiado tarde para eso —dijo Jessica—. No puede curar lo que le he hecho.

—Jessica, deshaz esto —ordenó a su hija.

Los ojos negros de Jessica se encontraron con los de su padre.

—No hay nada que deshacer. Está muerto. Será afortunado si sucede rápido.

Dark Pleasures (DH2) Capítulo 20




Leeteuk y Minho salieron de la ciudad y tardaron unos cuarenta minutos en llegar a los pantanos.

Tras descender por un largo y sinuoso camino sin asfaltar, llegaron a una enorme y vieja construcción que se asemejaba a un cobertizo. Si no hubiera sido por las cerraduras que aseguraban las puertas, Leeteuk habría creído que hacía por lo menos un siglo que no se utilizaba. Bueno, por eso y por el extraño buzón que había en frente; negro y atravesado horizontal y verticalmente por lo que parecían ser unos gigantescos clavos plateados.

–Kyuhyun es raro –le dijo Minho al ver cómo miraba fijamente el buzón–. Cree que tener un buzón atravesado con clavos es divertido.

Abrió la puerta del cobertizo con el mando a distancia y, cuando entraron para aparcar el Jaguar, Leeteuk se quedó boquiabierto. El interior, hecho de ladrillos y vigas de acero, albergaba un Viper, una colección de cinco Harley Davidsons y un pequeño catamarán, amarrado en el muelle que había en la parte trasera del edificio.

–¡Guau! –balbució al fijarse en una Harley que estaba apartada del resto, negra y reluciente bajo la tenue luz. Obviamente, era una preciada posesión y recordó que era la moto que Kyuhyun montaba la noche anterior.

Deseo Prohibido- Capítulo 18




La sangre rodó por la frente de Hyukjae cuando clavó de un empujón la espada en el corazón del demonio más cercano.

Él y los otros Suju habían tomado una posición estratégica dentro de uno de los túneles, donde no podían ser fácilmente flanqueados. Miraba hacia atrás tan a menudo como podía, esperando que el túnel no ofreciera ningún punto de acceso más a los Sasaeng que se acercaban sigilosamente a sus espaldas.

Si bien había recibido un golpe, no sentía los efectos de ningún veneno recorriéndole el sistema, por lo que estaba agradecido. La herida ya comenzaba a cerrarse, aunque la sangre que le escocía los ojos se estaba convirtiendo en un problema peligroso.

La multitud de demonios disminuyó, y los pocos restantes se dieron la vuelta y corrieron.
Miró a Simon y los otros.

—Quédense todos aquí y contengan salida. Voy a sacarlos.

Simon asintió con la cabeza.

—Voy contigo —dijo Zhoumi.

Volver a Amarte- Capítulo 24




Heechul movió los dedos y estiró los pies. No recordaba la última vez que se había sentido tan relajado, tan saciado y tan tranquilo. Sentía todos los músculos del cuerpo extenuados y fortalecidos al mismo tiempo.

Miró a Siwon y esbozó una sonrisa. Tenía la cabeza apoyada en su pecho, con el brazo por encima de su cintura, y sus piernas estaban entrelazadas. Ni dormido quería soltarlo. Le enterró los dedos en el pelo y sintió los sedosos mechones contra la piel. Jamás se había sentido tan deseado, ni querido, como en las últimas horas.

Habían hecho el amor dos veces más antes de que Siwon lo pegara por fin a su cuerpo para dejarse vencer por el sueño. La lluvia golpeaba los cristales y las olas rompían con fuerza contra la orilla, pero, en el refugio de su casita, se sentía cálido y protegido. Y, de momento, feliz.

Los niños seguían con sus padres, el teléfono estaba desconectado y la pesadilla que era su vida había quedado relegada al fondo de su mente. Ya pensaría sobre eso más tarde. En ese preciso instante, solo quería disfrutar del momento, por si no duraba.

Dark Pleasures (DH2) Capítulo 19




–Pobrecito, ¿qué vas a hacer sin tu casa?

–No lo sé. Supongo que tendré que llamar a la compañía aseguradora; encontrar un lugar donde vivir… –su voz se desvaneció al pensar en todas las cosas que tenía que hacer.

Tendría que reemplazar toda su vida. Abrumado, perdió el apetito. ¿Qué iba a hacer?


Minho regresó y cogió el folleto informativo para mostrárselo a Kangin, que esperaba en la puerta.

–Necesito que me hagas un favor. Tengo que matricularme a la una; si no estamos de regreso para esa hora, ¿podrías rellenar el formulario en la página web? Sé que necesitas dormir, pero tengo muchas ganas de coger Historia Griega el próximo semestre.

–¿Por qué?

–Las clases las dará el profesor Lee y, según dicen, es muy bueno.

–¿Lee Hyukjae? –le preguntó Leeteuk.

Deseo Prohibido- Capítulo 17




Changmin había levantado la mano para llamar cuando la puerta de su hija se abrió. Sunny lo contempló, con los mismos ojos de su padre.

Yunho. Changmin ya lo extrañaba.

Los bucles rubios de Sunny estaban enmarañados, el vestido arrugado, lo cual no era en absoluto típico en ella. Medias lunas oscuras pendían debajo de sus ojos, opacando su brillo normal.

—Imagino que es la hora —dijo Sunny.

Changmin quedó impactado de que le hablara, después de sufrir el silencio de su hija durante tanto tiempo.

—¿Qué hora?

—Para que mueras.

—¿Has visto eso?—Changmin odiaba que su hija estuviera invadida por visiones del futuro, pero nunca había considerado que tendría que soportar ver la muerte de su propio appa.

Doble Riesgo- Capítulo 9




—¿Por qué era appa tu mejor amigo si era mayor que tú?

—Teníamos muchas cosas en común —«para empezar, ambos estábamos enamorados de ti», pensó con ironía.

Más tarde, mientras Heecheol arreglaba las violetas en un fino florero de cristal cortado, Hakyeon apareció en el umbral.

—¿Dónde han estado? —preguntó con voz temblorosa.

—Hemos ido a cortar flores —le cortó Wook—. Si tu rabieta ya ha terminado, puedes venir a ayudarnos a arreglar las que hemos traído. Heecheol, ¿conoces aquellas flores que se llaman nubes? 
—el niño asintió—, ¿por qué no traes algunas para terminar el ramo?

Cuando Heecheol salió de la habitación, Hakyeon todavía permaneció en el umbral, pero a los pocos segundos entró. En su rostro todavía había cierta expresión de rebeldía, pero sin la presencia de su hermano, Wook podía actuar mejor.

—¿Puedo quedarme aquí? —preguntó.

Volver a Amarte- Capítulo 23




Siwon apretó los labios.

—¿De qué hablas?

No lo entendía. Heechul no estaba seguro de que algún día llegara a entenderlo. Sacar el tema en ese momento, antes de que alguno de los dos resultara más herido por esa alocada situación, era lo mejor.

—Hablo de esto. —Agitó las manos—. De esto... de esta cosa que tenemos entre nosotros y que no funciona. Cada vez que me miras, ves a alguien que ha dejado de existir. Sientes la necesidad de protegerme, pero no te preocupas por mí, te preocupas por quien era antes. Por una persona que ya no soy.

—Repítemelo, porque me he perdido.

Heechul soltó el aire muy despacio.

—Siwon, en todas las veces que hemos estado juntos, ni una sola vez me has llamado Heechul.

yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...