Donghae sintió la ira de él, pero antes de poder
sentir algo más, Hyukjae cerró el vínculo entre ellos. Tropezó y se apoyó en la
pared ante la repentina ausencia de su presencia. Miró alrededor de la librería
para ver si alguien había sentido algo similar. Notó a Zhoumi apoyado contra el
mostrador con la cabeza gacha. Teukkie se había detenido a medio paso y tenía
los ojos bien cerrados. Así que no era el único.
—Donghae . —La
voz de Hee llegó detrás de él—. ¿Estás bien?
Donghae negó con
la cabeza.
—Hyukjae cerró el
vínculo. —Hizo un gesto hacia los demás. Hee dejó escapar un gruñido.
—Habría sabido lo
que está pasando si mi maldito compañero hubiera mantenido abierto nuestro
vínculo tan siquiera un poquito más. ¿Sientes como si estuvieran en peligro?
¿Pudiste ver algo antes que lo cerrara?
Donghae negó con la cabeza.
—No, fue rápido y
es por eso que duele tanto.
—Vayamos todos a
casa. Desde donde lo veo, ninguno de ustedes va a estar en forma para estar
haciendo inventario o ayudando a clientes molestos. ¿Sora? —gritó Hee.
—¿Sí? —Miró a Hee
con las cejas elevadas, expectante. Hee señaló a Donghae y luego a Teukkie. —Algo está pasando con los hombres.
Tenemos que llevar a los pollitos de regreso a tu casa.
Los ojos de Sora
se llenaron de preocupación mientras estudiaba al grupo y se dio cuenta que todos,
excepto Hongki, parecían estar con dolor. Asintió a Hee.
—De acuerdo, me
las puedo arreglar para tomar el relevo.
Veinte minutos
más tarde, todo el mundo estaba una vez más reunido en la sala de Sora. Hyesung
se paseaba como un tigre enjaulado. A pesar que seguía tratando de llegar a Junjin,
no fue capaz de alcanzarlo.
—Él nunca me ha
mantenido fuera tanto tiempo —gruñó, mientras pasaba sus dedos por el cabello
por lo que parecía ser la centésima vez.
—Es solo que no
entiendo cómo ninguno de nosotros puede llegar a ellos. Eso simplemente no
parece creíble —señaló Donghae .
—Tiene razón
—concordó Hee—. No hay forma de que todos nuestros hombres nos dejarían
colgando en la oscuridad. Uno de ellos debería haberse reportado para éste
momento, y eso sin mencionar a nuestra pequeña molesta Fae del barrio. ¿Dónde
está?
—Dambi ha estado
yendo y reportándose con Junjin —explicó Hyesung—. No solo para la paz mental
de los machos, sino por la nuestra también.
—Bien, entonces
se ha ido a ver a los hombres, quienes de repente han abandonado el planeta y Dambi
no ha regresado. Voy a ir por “Houston
tenemos un problema por $200, Alex”
—dijo Hee, con sequedad.
—Changmin —dijo Hyesung
de repente. Se dio la vuelta y miró al Fae, sus ojos se ampliaron con
esperanza—. ¿Puedes ir a verlos?
—Mierda, es
cierto. —Teukkie se golpeó la frente—. Changmin, tú también te puedes
proyectar.
Changmin asintió
pero su rostro estaba fijo en un ceño sombrío. Hee puso los ojos en blanco con
un gemido.
—De acuerdo, solo
por la mirada en tu cara, estoy apostando a que Dambi ha hecho algo para
asegurarse de que tu feliz y pequeño trasero Fae no vaya tras ella. ¿Estoy en
lo cierto?
Changmin volvió a
asentir.
—Dambi es mucho
más poderosa que yo. Me informó que no los dejara, y como en la magia de las
manadas, hay un encantamiento que puede unir mi magia a sus palabras. Estoy tan
atrapado aquí como lo están ustedes.
Hyesung se sentó
resoplando con una sarta de palabrerías en coreano volando de sus labios. Se
miraron sin poder hacer nada, con la esperanza de que una idea o una solución
simplemente brincara de sus mentes.
Una hora más
tarde todavía estaban sentados mirando sin rumbo dentro de la habitación. La
tensión crecía a cada minuto y para cuando hubo un golpe en la puerta, todos
estuvieron cerca de saltar de sus asientos cuando el sonido retumbó en el
silencio.
Sora se dirigió
hacia la puerta, pero Hyesung la interceptó y le dio una pequeña negación con
la cabeza, dejando claro que era él quien quería abrirla.
Hyesung se acercó
a la puerta y echó la cabeza hacia atrás para tomar una profunda bocanada de
aire. Frunció el ceño y olfateó otra vez. No había nada. No había ningún olor
de ningún tipo. Escuchó y oyó un latido de corazón pero aparte de eso solo
estaba el ruido de la brisa entre los árboles.
Justo cuando
llegó a la puerta ésta se abrió de golpe y Hyesung se tambaleó hacia atrás. Un
par de brazos lo estabilizaron mientras se enderezaba. Changmin lo soltó y dio
un paso al lado de la Alfa y sus ojos se abrieron de par en par.
—¿Qué estás
haciendo aquí? —preguntó Changmin.
—¿Ese es el tipo
de recepción que le das a los de tu propia especie? — preguntó Lorelle mientras
entraba en la casa. Esquivó a Hyesung y a Changmin, y sus ojos se ensancharon
ante la sala llena de parejas. Una maliciosa sonrisa se expandió por sus labios
y sus ojos brillaron con humor—. Esto es simplemente demasiado bueno para ser
verdad.
Lorelle se volvió
y miró a Hyesung.
—¿Cómo se te
ocurre traer a todas estas parejas a un lugar sin la protección de ningún
macho?
—Uh, discúlpame
pero nosotros no necesitamos protección. —Hee se puso de pie y caminó hacia la
Fae. Sus ojos estaban entrecerrados con sospecha—. ¿Quién diablos eres tú y por
qué trajiste tu trasero Fae a la casa de mi amigo?
—Por favor, dime
que solo estás gordo, porque no puedo imaginar por qué los lobos te dejarían a
ti procrear. —Lorelle miraba a Hee como si fuera barro en su zapato y trataba
de averiguar cómo quitárselo.
Hee dejó escapar
una risa amenazante a medida que se ponía de pie desde su lugar en el sofá.
—Ah, cariño,
estoy a más de un paso adelante con respecto a tu grupo genético. Considerando
tus asuntos de hermana, y probablemente asuntos con mami y papi, cualquier hijo
tuyo sería el niño del cartel para el nuevo centro psiquiátrico Fae. Así que
déjame tranquilo y mantén tus comentarios sobre la procreación para ti misma. A
menos, por supuesto, que desees un estiramiento de cara, con el cual yo estaría
más que feliz de ayudarte. —Hee le dio una amplia sonrisa mientras daba un paso
hacia ella.
Lorelle levantó
la mano como si fuera a atacar a Hee, pero Changmin y Hyesung se pusieron
delante de él, bloqueando su vista al lobo embarazado.
—Podría ser
prudente no meterse con el lobo embarazado —espetó Hongki hacia la Fae.
—Lorelle, ¿qué
estás haciendo aquí? —preguntó de nuevo Changmin, queriendo la respuesta con
tantas ganas como trataba de apartar la atención. Sabía de lo que era capaz Lorelle,
y si ella estaba aquí y Dambi no, entonces las cosas podrían ponerse peligrosas
muy rápidamente.
—Estoy aquí a
petición de mi empleador, a falta de un término mejor, para obtener la
mercancía que requiere.
—Dame un maldito
respiro —gruñó Teukkie—. ¿Me estás diciendo que estamos siendo secuestrados?
Porque en serio, he sido secuestrado demasiadas veces en mi vida y ya estoy muy
cansado de eso. ¿No podemos hacer otra
cosa? ¿Qué tal un concurso de algún tipo? Eso, al menos, podría ser más
interesante.
—Bien dicho, Teuk.
—Hee tomó la palabra—. El secuestro es tan de vieja escuela.
—Tengo que estar
de acuerdo —dijo Donghae —. Si tu jefe quiere ser original como un villano en
el mercado actual, realmente necesita ser más inventivo que lo del mediocre
secuestro.
Los ojos de Lorelle
se agrandaron.
—¿Hablan en
serio? —le preguntó a Changmin.
—Acaban de
empezar. —Changmin sonrió—. Solo espera, se pone peor.
—¿Estás
trabajando para Gura? —Hyesung empujó suavemente a Changmin fuera del camino y
encontró los ojos de la Fae. La tensión de su mandíbula dejó claro que esperaba
una respuesta.
—Tenemos un
acuerdo. Y tanto como me duele saber que piensan que mis métodos carecen de
originalidad, hay algo que decir acerca de la tasa de éxito. Así que me temo
que tengo que decir, que sí, ésta soy yo secuestrándolos.
—¿Cómo
exactamente estás planeando sacarnos a todos? —preguntó Hongki.
—Buena pregunta,
Doc. —Hee asintió y le dio un pulgar arriba—. Sin embargo, una mejor pregunta
sería: ¿Cómo te las vas a arreglar para llevarte a todas estas parejas lobos y
una Fae?
Lorelle sonrió y
era una sonrisa que decía que sabía algo que ellos no, y que era un algo
importante.
—Hablé demasiado
pronto, ¿no? —preguntó Hee—. Odio cuando hago eso.
—Realmente le
quita la bravuconería —le dijo Teukkie.
—Estoy embarazado,
Teukkie. Estoy mucho más allá de ser bravucon en este momento.
Lorelle metió la
mano en un bolsillo de la capa que llevaba y sacó una piedra oscura. La sostuvo
en la palma de su mano y ésta comenzó a ponerse roja.
—¿Por qué
presiento que esa roca es algo más que su piedra mascota, Earl? —murmuró Teukkie,
mientras todos los ojos se fijaban sobre la piedra en la mano de la Fae.
Los ojos de Changmin
se abrieron de par en par ante la visión de esta. Se dio la vuelta, extendió
sus manos hacia la habitación y gritó algo pero Lorelle fue más rápida. Empujó
a Changmin, lo que lo hizo tropezar, y cualquier protección que estaba tratando
de arrojar sobre las parejas se derrumbó. Hyesung se lanzó por Lorelle pero se
estrelló contra una barrera invisible, una muy parecida al tipo del que había
visto a Dambi conjurar.
La sala alrededor
de ellos comenzó a brillar y cambiar, y de repente se había ido y no había más
que oscuridad.
***
Hee intentó
llegar a Siwon mientras la oscuridad se lo tragaba igual que a los demás.
«¡SIWON!», le
gritó tirando del vínculo que era tan frágil y apenas existente. Lo necesitaba,
necesitaba su fuerza y la garantía de que lo encontraría. Esperó, con la
esperanza de que él lo sintiera a pesar de que había cerrado su vínculo. Tal
vez si lo presionaba lo suficiente, él le sentiría. Tal vez si buscaba con todo
en su interior, entonces ni siquiera él sería capaz de mantenerlo fuera.
«¡Por favor, B,
escúchame!»
«¿Heechul?» El sonido de su voz en su
mente, después de tanto tiempo sin él, le hizo jadear y causó que el dolor en
su pecho se intensificara. «¿Qué está
mal, Heechul? ¿Qué está
pasando?»
Estaba enojado y
su ira estimuló la suya, apartando el dolor y la tristeza por encima de la
ruptura de su vínculo.
«Sabrías lo que está mal si no hubieras roto
nuestro vínculo. Habrías sabido que Lorelle se presentó en la casa de Sora y
tranquilamente nos informó que nos estaba secuestrando. Habrías sabido que
hemos estado muy preocupado por todos ustedes porque no hemos escuchado ni una
maldita cosa de cómo están. Eso es lo que está pasando, Siwon. Bienvenido a la
fiesta».
«¿Han sido secuestrados?», gruñó y Heechul
sintió un escalofrío recorrer a través de su cuerpo. Aquí estaba él, siendo
retenido por una psicópata, y se estaba excitando por el temperamento de su
compañero. Bueno, él nunca dijo ser normal, ¿por qué empezar ahora?
«Ciertamente no nos invitó a una pijamada.
Así que sí, B, hemos sido secuestrados».
«¿Puedes decirme a dónde se los llevó?»
«No lo creo. Está haciendo esa cosa Fae
donde se proyectan a sí mismos».
«Tan pronto como puedas ver tus alrededores,
necesito que me digas tanto como puedas acerca de dónde se encuentran».
Hizo una pausa y apenas pudo sentir la preocupación saliendo emanada de él en
oleadas. «¿Estás bien?»
Hee se mordió el
labio. No lloraría. No mostraría ninguna debilidad, no a él, ya no.
«Estoy tan bien como lo puede estar una pareja
lobo embarazada con un vínculo con su compañero casi inexistente y que está
siendo secuestrado. Tan pronto como tenga algo de información
útil para ti, te lo haré saber».
Bajó rápidamente
la barrera entre sus mentes, esperando que él no percibiera la cantidad de
control que le tomaba no romperse y llorar. Odiaba llorar, y sin embargo
últimamente eso parecía ser su respuesta para todo. Se preguntó brevemente si
había una cosa tal como una conductotomía de lágrimas. Probablemente no, pero
era un pensamiento, uno de mierda… sí, pero un pensamiento, no obstante.
«¿Donghae ?» Donghae escuchó la preocupada voz de Hyukjae y se
aferró a ella desesperadamente. El rico tono profundo lo envolvió como una
manta caliente y deseó más que nada que fueran sus brazos los que lo
envolvieran.
«En cierto modo, tenemos un problemita»,
le dijo con cuidado.
«¿También están luchando contra hechiceros?»
«¿QUÉ?» Donghae casi aulló en voz alta, pero se contuvo antes
de que saliera de su garganta. «¿Por qué
estás peleando contra hechiceros? ¿Es por eso que me bloqueaste?»
«El por qué no es realmente importante
en este momento
y yo no
te bloqueé, creí que tú me habías
bloqueado».
Su voz sonaba sin
aliento y para que él sonara de esa
manera a través del vínculo le decía que estaba peleando duro. El preocuparse
por él amenazó con abrumarlo. Tomó una lenta respiración y mantuvo los ojos
cerrados. La oscuridad a su alrededor era opresiva y comenzaba a desorientarlo
de saber en qué dirección era arriba y hacia dónde abajo. Se concentró en
sentirlo a través de su vínculo, sintiendo su calor y su amor.
«Donghae , ¿podrías por favor decirme cuál
es el problema que mencionaste?»
«En cierto modo estamos yendo de viaje».
Se encogió cuando sintió la oleada de alarma en él.
«¿Qué tipo de viaje?»
«Del tipo que no fue planeado y al que no
estábamos exactamente dispuestos a ir».
«¿Están siendo secuestrados?»
«Me temo que sí».
Donghae se sentía desmoralizado pero no asustado, al
menos no todavía.
«Por favor no te preocupes por nosotros, ¿de
acuerdo? Enfócate en pelear contra los hechiceros o en lo que sea que estés
haciendo para que no salgas lastimado. Nosotros solos podemos sacarnos de este
lío».
«¿Que no me preocupe? Donghae mío, debes
haber estado bebiendo, porque la única manera en la que podrías pensar que un
macho no se preocuparía por su secuestrada pareja, sería si estuvieras tan ebrio
que no podrías caminar derecho».
Donghae resopló y
trató de no estampar el pie como un pequeño niño.
«No tiene sentido preocuparse por el
momento. Por favor, solo inténtalo y mantente calmado, ¿de acuerdo? Estoy
seguro que una vez que Siwon se entere de lo que está pasando, va a flipar lo
suficiente por todos ustedes».
«¿Estás herido? No me mientas», gruñó.
«No, bueno, no por el secuestro. Estar
separado de ti ha sido doloroso, pero aparte de eso, estoy bien».
«Los encontraremos, Donghae ».
«Sé que lo harán». Sus palabras salieron
como un susurro y aunque quería sonar fuerte y seguro para él, estaba cansado,
y no se sentía tan fuerte.
«Eres muy fuerte, amor, tengo fe en ti».
«Te amo, Hyukjae. Por favor, ten cuidado».
«Te amo más».
Donghae sintió
sus labios brevemente sobre los suyos y luego cerró el vínculo para que él pudiera
concentrarse en la lucha contra los hechiceros. Su pecho se tensó ante el
pensamiento y se pateó a sí mismo por no presionarlo más duro acerca de lo que
estaba pasando, no es que él se lo hubiera dicho.
***
Teukkie sintió el
vínculo entre él y Kangin abrirse de golpe y el alivio lo inundó como un dique
siendo abierto.
«¡Kangin!», dijo su nombre con
desesperación, como si el mero sonido de él lo salvaría.
«Estoy aquí, Angel». Su voz llegó
profunda y fuerte a su mente, y quiso subir a su regazo y presionar la nariz en
su cuello para poder respirar su familiar aroma.
«Gura está trabajando con Lorelle y ella
vino a la casa de mi madre».
«¿Estás bien?» Pudo sentir su miedo y su
desesperada necesidad de mantenerlo a salvo.
«Estoy bien. Nos está proyectando a alguna
parte. ¿Tú estás bien?» Sintió su renuencia a responder. «Escúpelo, hombre lobo».
«Jungsoo ha atacado, o ha intentado atacar,
a los Trolls. Así que estamos en una especie de pelea contra los hechiceros».
«¿Una especie de pelea? ¿Qué mierda
significa eso de una especie de pelea? ¿Cómo es una especie de pelea, Kangin?
¿Acaso se están abofeteando los unos a los otros como niños?» Teukkie
sintió como si no pudiera respirar mientras las implicaciones de las palabras
de Kangin lo golpeaban.
Jungsoo estaba
atacando a los Trolls. ¿Por qué haría eso? ¿Estaba él bien? Mierda, ¿qué le iba
a decir a su mamá?
«Es más o menos una larga historia».
«Bueno caramba, estoy siendo secuestrado de
modo que, en
cierto modo, tengo todo el maldito tiempo del mundo»,
le espetó, no queriendo realmente ser duro, pero la preocupación por él lo
estaba poniendo impaciente, por saber lo mal que verdaderamente estaban las
cosas.
«Te lo explicaré, Leeteuk, pero no en éste
preciso momento. Estoy literalmente en batalla mientras hablamos», le dijo
mientras Leeteuk se daba cuenta que podía sentir lo cansado que estaba.
«Maldición hombre, entonces deja de hablarme
y enfócate», casi le gritó.
«Te amo».
«Tan pronto como sepas algo acerca de tu
paradero, Leeteuk, será mejor que yo lo sepa también», le advirtió.
«Bueno, caray, estaba planeando en mantener
todo para mí mismo porque me encanta ser secuestrado por una loca y psicópata
Fae, y hechiceros».
«Leeteuk», advirtió Kangin.
Leeteuk empezó a
contestarle, pero de repente se había ido.
«Kangin». Lo buscó como lo había hecho
cientos de veces, pero no hubo respuesta.
***
—He hecho lo que
me pediste —dijo Lorelle mientras entraba en la cueva donde Gura había
construido su casa. A pesar de que vivía en una cueva, parecía cualquier cosa
menos eso. Se había proporcionado a sí mismo todas las comodidades creadas;
incluso tenía una chimenea. Estaba protegida por magia poderosa, magia oscura
que provocó escalofríos que recorrieron su espina dorsal y un susurro en su
oído que le dijo que corriera tan rápido y tan lejos como pudiera—. Están en el
bosque oscuro de mi reino, tal como lo pediste. La magia ahí es demasiado
fuerte como para que los vínculos funcionen entre compañeros, así que no serán
capaces de contactarlos.
—¿Qué hay del
joven Fae? —preguntó Gura.
—Changmin no se
puede proyectar; me aseguré de ello. Aunque creo que mi hermana ya podría haber
atado sus poderes.
Gura se levantó
de la silla que había ocupado. Caminó lentamente por la habitación mientras
sostenía las manos juntas. Su mente vagó a los compañeros de las parejas que Lorelle
había capturado por él.
Casi se echó a
reír ante el pensamiento de sus reacciones una vez que se dieran cuenta que sus
parejas habían sido secuestradas mientras ellos luchaban contra los hechiceros.
Pero disfrutó aún más con el pensamiento del dolor de su hermano cuando se
diera cuenta que su compañera había sido secuestrada porque él la había enviado
lejos, sin protección. Tendría que vivir con el conocimiento de que su mujer
había sido secuestrada debido a su estupidez.
—Eso será todo
—le dijo a Lorelle distraídamente.
—Nuestro trato
cambió cuando accedí a esto, Hechicero. Espero que sostengas tu parte.
Él la miró y su
labio se curvó.
—Conseguirás lo
que pediste. Pero serás paciente porque las cosas que se hacen apresuradas se
arruinan.
—Siempre y cuando
sigas adelante.
Gura observó
mientras la Fae desaparecía dejando un espacio vacío donde había estado parada.
Se quedó mirando el vacío durante varios minutos mientras consideraba cuál
debería ser su siguiente movimiento.
Gran parte de su
plan había sido cambiado y ahora se encontraba en posesión no solo de una pareja
sino de siete, además de una no acoplada. Una de las parejas acopladas
resultaba ser el compañero de uno de los Alfa más poderoso en la historia. Por
un momento pensó que era, o bien la cosa más estúpida que jamás había hecho, o
la más valiente. Se imaginó la respuesta a lo que vendría si se encontrara en
el otro extremo de las mandíbulas del Alfa.
***Les chismeo que a partir de los siguientes capítulos como del 15 en adelantes, busquen pañulitos, hay uno en especial que hasta cuando lo adapté mis ojos sudaron... solo les chismeo.
Ya estoy enojada por el hecho que hayan dejado solas a las parejas, no puedo creer que Dambi no haya previsto esto....
ResponderEliminarNo quiero llorar pero ni modo todo sea porque tengamos un Felices por siempre .....
Ay no inventes!!!
ResponderEliminarMas lagrimas!!!
Amas hacerne sufrir~
Mi corasoncito Sichulosos no puede con mas tragedias(?)
Ahhh
A Gura le fue...
Qué decirle...si antes la fae me caía un poco mal...ahora me cae un poco peor,no me pasa y dudo que me pase de aquí en adelante.
ResponderEliminarY bueno,aquí hay culpas para dar y repartir...nadie está exento de obtener alguna,al menos para mi.
Nada estaba fríamente calculado,pero les ha salido bien,Gura solo quería a Sora,y ahora tiene a todas la parejas y a los lobos ocupados en un pelea.
Luego algo pasa con los vínculos estables.
Al menos saben que esto no es cosa del Jungsoo y saben quien está detrás de todo...e inconscientemente le están ayudando...¬¬
Hayy por Dios. Quien morira?? Se que si dices que alistemos pañuelos es porque alguien morira... Será Jujin???
ResponderEliminarGracias pos los cap.