Hee se dobló
sosteniendo su estómago mientras se reía. Se limpió las inducidas lágrimas de
la risa de sus ojos mientras se preparaba para el infierno a punto de desatarse
de una manera completamente diferente a la que estaba acostumbrado. Ponlo ante
una bruja psicópata, un posesivo hombre lobo mandón, o un hechicero loco y él
sonreía. Pero ponlo delante de sus padres,
que no sabían que estaba casado, y mucho menos embarazado, y él quería meterse
en el agujero más profundo que pudiera encontrar.
Sora quitó el
cerrojo de la puerta y abrió. La mamá de Donghae entró y gritó cuando vio a Donghae . La mamá
de Hee estaba detrás y luego su padre. Los ojos de su madre se iluminaron
cuando aterrizaron en él y luego bajaron a su estómago.
—Sorpresa —dijo Hee
sin convicción y dejó escapar un profundo suspiro cuando Hyesung se acercó a su
lado y pasó un brazo a su alrededor y entonces sonrió a sus padres. Los
encantos de Hyesung eran legendarios, pero estaban a punto de ser puestos a
prueba.
—Heechul. —Su
mamá sonrió y se dirigió hacia él envolviéndolo en sus brazos, apartándolo de
forma efectiva de Hyesung.
—Hola mamá —dijo Hee
y salió ahogado mientras su madre metía su cabeza en su hombro.
—¡Oh, te he
echado de menos!
—Hola papá —dijo
mientras rápidamente le devolvía el abrazo y luego se apartaba.
La habitación
quedó completamente en silencio después de las breves reuniones y todos los
ojos fueron puestos en Hee y sus padres.
—Hee está
embarazado —soltó Donghae de repente.
Todas las cabezas giraron y los ojos se posaron en él a medida que se daba una
bofetada con su mano en la boca como si ésta hubiera actuado sin su
consentimiento.
—Gracias por eso
—murmuró Hee mientras miraba a Donghae y
luego volvía a mirar a sus padres. Era evidente por la expresión de sus rostros
que habían realmente estado esperando que Hee hubiera desarrollado de repente
un amor por la Corteza de Cerdo y había comido lo suficiente de ellos para
elevar las ventas en Norteamérica por sí mismo.
—¡Sorpresa de
nuevo! —dijo Hee con una voz sonsonete y un encogimiento de hombros.
La boca de la
madre de Hee se abrió y luego se cerró, solo para volver a hacerlo, haciendo a Hee
pensar en un pez que había sido sacado del agua y jadeaba desesperadamente.
—¿Cómo? —farfulló
ella finalmente.
—Bueno, mamá. —La
voz de Hee tomó el tono condescendiente que parecía siempre molestar a sus
padres—. Cuando dos personas se aman, quieren mostrarlo. Y a veces muestran ese
amor quitándose la ropa y haciéndolo como conejos.
Hee miró más allá
de su madre ahora conmocionada a las siluetas de Teukkie y Donghae , quienes
estaban haciendo movimientos de corte a través de sus cuellos y señalándole que
se callara. Él se limitó a sacudir la cabeza. Tenía dieciocho. Sus padres
podían mirarlo como si hubiera perdido la cabeza, pero no podían castigarlo, ya
no.
—¿Realmente estás
embarazado? —preguntó su padre finalmente.
—Sí papá, estoy
realmente embarazado. Estoy bastante seguro de que no hay tal cosa como un más
o menos embarazo, pero puedo estar equivocado. Es sabido que sucede una o dos
veces al año: que yo me equivoque, no estar más o menos embarazado.
—¿Es de este
chico, Siwon? —preguntó su mamá.
—Sí, es el bebé
de Siwon. —Hee no pudo evitar la enorme sonrisa que se extendió por su rostro
ante la mención de su compañero. Independientemente de toda su mierda, estaba
cargando a su hijo, hecho de amor y eso era sin duda algo para sonreír. Además
había conmocionado hasta la mierda a sus padres y eso era un bono, como cuando
te encuentras un par de papas fritas tiradas con tu orden de tostadas. Las
papas fritas extra eran lo mejor.
—¿Dónde está?
—preguntó su padre con el ceño fruncido.
—Él no vino —dijo
Hee.
—¿Te dejó viajar
por tu cuenta en ese estado? —gruñó su padre y señaló a su estómago.
Hyesung dio un
paso adelante, y aunque tenía una sonrisa en su rostro, sus ojos decían una
historia diferente.
—Hee está
perfectamente a salvo conmigo, con nosotros —enmendó mientras hacía un gesto a
todas las parejas de la habitación—. Siwon y los otros machos tenían asuntos
que les obligó a permanecer en Corea, y los chicos querían tomar un pequeño
descanso. Tenemos un médico con nosotros. —Indicó a Hongki quien saludó y
sonrió—. El docotor Lee mantiene una estrecha vigilancia sobre él.
Los padres de Hee
continuaron observándolo. Sus ojos moviéndose de vez en cuando a Sora, dándole
miradas que decían claramente que la culpaban por su hijo embarazado.
La tensión en la
sala era palpable.
—Creo que la
anterior sugerencia de Dambi de arrojar mierda y chillar suena muy atractiva en
este momento —comentó Hee—. Entonces, ¿quién va primero… mamá? No, está bien Teukkie,
vamos, todos sabemos que tus hábitos intestinales son irregulares. Debes tener
algo listo para empezar.
Un resoplido
surgió de Donghae al mismo tiempo que se
daba la vuelta mientras Changmin le daba unas palmaditas en la espalda cuando él
y las demás se rieron de Hee.
Dambi tosió
mientras trataba de cubrir su risa.
—Hee no era una
sugerencia, imbécil, estaba siendo sarcástica.
Hee le sonrió a Dambi
mientras una sola ceja se levantaba.
—Oh, vamos,
hadita Dambi, sabes que amas un buen tiro de mierda tanto como los otros.
—Entonces —soltó Sora
de repente—, ¿quién quiere te caliente?
Al menos tres
manos se dispararon al aire.
***
—Maldita sea, eso
fue tortura —se quejó Hee mientras subía a la cama de Teukkie.
—Estoy de acuerdo
—dijo Donghae mientras tomaba la bolsa
de dormir en el suelo.
—Pero hilarante
como el infierno. —Teukkie se rió.
—Por favor, dime joven
príncipe lobo, ¿qué parte fue hilarante? —gruñó Hee—. ¿La parte donde mi papá
preguntó si Siwon tenía otros hijos o un esposo, o fue cuando mi mamá preguntó
si habíamos usado protección?
—No, fue cuando
le dijiste a tu mamá que sí habías usado protección y que no invirtiera
acciones en los condones de sabor, ya que simplemente no eran tan fuertes como
la caja decía.
Los tres se
sacudieron de risa.
—¡Y cuando salió
chocolate caliente de la nariz de tu papá! —añadió Donghae sin aliento.
—Ese fue un
momento MasterCard. —Hee suspiró—. Vuelo a casa $300, una taza de te caliente $1.50, papá resoplando te caliente debido a la discusión sobre
la vida sexual de su joven hijo…
—¡No tiene
precio! —dijeron todos al unísono y estallaron en risas de nuevo.
A medida que se
calmaron, otro sentimiento comenzó a acumularse en sus estómagos.
—¿Alguien más se
ha sentido enfermo de esto? —preguntó Hee.
—Por supuesto.
—Totalmente.
Dijeron Donghae y Teukkie al mismo tiempo.
—Entonces, ¿por
qué estamos todavía aquí?
—Porque
obviamente aquí es donde nos quieren —dijo Teukkie.
—¿Qué quieres
decir? —preguntó Donghae mientras se
apoyaba sobre los codos.
—Si nuestros
hombres realmente no quisieran que estemos aquí, ya saben que no hay nada, ni
gritos, gemidos o amenazas que podamos hacer para que no los permitan. Puede
que hayan armado sus pequeñas rabietas, pero una parte de ellos nos querían
lejos, y es por eso que estamos aquí.
—Ugh —gimió Hee—,
al menos lo intentamos.
—Hee, nene,
¿estás bien? —preguntó Donghae en voz
baja—. Te ves peor que Teukkie o que yo, y no me digas que es debido a tu
embarazo.
—Sabes, desde que
comenzó este asunto del título gitano, te has puesto muy mandón —le dijo Hee, y
Donghae pudo oír la sonrisa en el rostro
de su amigo.
—Deja de evitar
la pregunta.
—Él me está
bloqueando por completo, incluso en sus sueños —admitió Hee finalmente y cuando
las palabras por fin salieron sintió como si unas compuertas se hubieran
abierto en su interior. Se puso de lado mientras las lágrimas comenzaban a
deslizarse por sus mejillas y se mordió el labio inferior para evitar que
temblara—. Siento como si estuviera escapando de mí. Todos los días, cada hora,
la unión entre nosotros se hace cada vez más y más débil.
El aliento de Donghae
quedó atascado del dolor que oyó en la
voz de Hee. Se arrastró hacia la cama, a un lado de Hee mientras Teukkie tomaba
el lado opuesto. Ambos envolvieron sus brazos alrededor de él y simplemente lo
sostuvieron mientras lloraba.
No había palabras
que decir, no hubo falsas promesas de que todo iba a estar bien. La realidad
era que probablemente no iba a estar bien. Así que simplemente se aferraron a
la satisfacción de saber que al menos siempre se habían tenido el uno al otro a
lo largo de todo lo que habían pasado.
Su amistad había
resistido a las pruebas de la vida, la muerte, el derramamiento de sangre, la
guerra y el amor, y continuaría haciéndolo.
Donghae presionó su mano sobre la cabeza de Hee,
cepillando con sus dedos sus mechones rubios. Se deslizó silenciosamente en la
mente de Hee, tratando de evitar que su amigo lo notara.
Mientras cerraba
sus ojos y abría su espíritu a Hee, tuvo que morderse la lengua para no jadear.
El vínculo de Hee, esa diminuta cuerda que lo unía a Siwon, estaba rasgada, se
había ido destruyendo como una cuerda que había sido cortada hasta que quedaran
solo unas pocas hebras que la mantuviera unida, eso era lo que quedaba del
vínculo entre Hee y su compañero Siwon.
Podía ver el
vacío en el alma de Hee donde el alma de Siwon debía estar, la otra mitad de su
alma casi había desaparecido. Donghae estaba sorprendido de que Hee no estuviera
gimiendo de dolor. Era un milagro que su lobo no se hubiera hecho cargo, en un
intento desesperado por volver a su compañero. Donghae alejó su mano de Hee y rodó sobre su espalda,
y escuchó el lento respirar de sus dos amigos.
¿Qué significaba?
¿Qué podría estar haciendo esto a su vínculo y era por esto que Siwon había
estado actuando tan fuera de sí? No lo sabía, pero tenía una idea de quién
podría. Se deslizó fuera de la cama, con cuidado de no despertar a Teukkie o a Hee,
y luego salió silenciosamente de la habitación.
Llamó a la puerta
del dormitorio y se sorprendió cuando oyó un amortiguado: pase.
No esperaba que
nadie estuviera despierto. Abrió la puerta para encontrar a Hongki sentado en
la cama con un libro en su regazo. Levantó la mirada hacia a Donghae antes de regresar a su libro y guardar un
pedazo de papel entre las páginas.
—Donghae , ¿Hee
está bien? —preguntó en voz baja. Por supuesto que asumiría que algo debía
estar mal con Hee debido a su estado, pero no respondió de inmediato.
Donghae se acercó al borde de la cama y se sentó sin
decir nada. Trató de ordenar sus pensamientos, pero luego decidió que realmente
no había ninguna manera fácil de decirlo.
—El vínculo de Hee
y Siwon está muriendo. —Vio el rostro del doctor buscando cualquier señal de
indignación, sorpresa o shock, pero no hubo nada— . ¿Lo sabías? —preguntó Donghae
con el ceño fruncido—. ¿Y lo dejaste
venir?
Hongki se rió con
amargura.
—Como si alguien
puede impedir que Hee haga algo que quiere. Y no, no lo sabía, pero tenía mis
sospechas.
—¿Qué está
pasando, Doc? ¿Qué hay de malo con Siwon?
Hongki subió sus
piernas y envolvió sus brazos alrededor de ellas, mientras sus ojos se
encontraban con los de Donghae .
—Realmente no sé
más que tú.
—¿Cómo está
haciendo Siwon para mantener a Hee fuera de su mente mientras duerme?
—Esa es una
pregunta que deberías hacerme a mí. —Donghae se volvió al oír la voz de Changmin y vio que Dambi
estaba detrás de él.
—Lamento
interrumpir esta pequeña fiesta de pijamas, pero si quieres respuestas, Sanador,
entonces tienes que recurrir a las personas que saben. — Dambi se apoyó contra
la pared, pareciendo más despierta de lo que nadie a esta hora debería estar y,
definitivamente pareciendo que sabía algo.
—Entonces, ¿qué
pasa con Siwon? —preguntó de nuevo, esta vez dirigiéndose a Changmin.
—Me pidió que lo
ayudara para que cuando durmiera, Hee no pudiera pasar sus barreras.
—¿Por qué?
—¿De verdad
tenemos que pasar por esto otra vez? —gimió Dambi—. Porque él tiene…
Donghae levantó la mano deteniendo a la Fae de
continuar.
—Lo sé, lo sé,
tiene partes masculinas. Lo entiendo, pero eso no responde plenamente a mi
pregunta.
—Él tiene un
secreto y no quiere que Hee sea capaz de husmear y encontrarlo —le dijo Dambi y
pareció muy molesta por haber sido interrumpida.
—Siwon no es del
tipo que esconde cosas a Hee —argumentó Donghae .
—Las personas a
menudo cambian cuando se enfrentan a asuntos de vida y muerte —dijo Hongki.
—Pensé que las
personas demuestran cómo son realmente cuando están en situaciones de vida o
muerte. —Los ojos de Donghae se
estrecharon hacia el doctor.
Dambi agitó su
mano como si estuviera espantando una mosca.
—Donghae , realmente,
¿crees que nosotros podemos desentrañar el funcionamiento de un macho Alfa
Canis Lupus, sobre todo a Siwon?
Donghae no contestó; simplemente se quedó mirando a Dambi
como si todo lo que quería saber fuera a salir estallando de su cabeza en
cualquier momento. Entonces las palabras lo golpearon de nuevo.
—Dijiste de vida
y muerte. —Donghae apuntó a Hongki—. Esto tiene que ver con su bebé, espera. —Donghae
jadeó y se cubrió la boca—. Él no lo
haría… — murmuró alrededor de su mano, sin hablar con nadie en específico, sino
simplemente mirando al suelo mientras su mente intentaba comprender lo que
estaba pasando—. Oh… —susurró lentamente—, pero claro que lo haría. Todos ellos
lo harían.
—Él va a
sacrificarse. Pero no puede hacerlo si su vínculo está intacto — dijo Donghae finalmente lo suficientemente alto para que
todos lo oyeran.
Dambi sonrió como
un padre orgulloso.
—Sabía que él era
el inteligente del pelotón. ¿No te lo dije Changmin? —Le dio un codazo al otro
Fae—. ¿No te dije que los tranquilos e inocentes son siempre los inteligentes?
Changmin asintió.
—Sí Dambi, lo
dijiste —dijo tajantemente.
—Hee va a
matarlo. —Los ojos de Donghae se
clavaron en Dambi.
—No puedes
decirle, Sanador. —El rostro de Dambi de pronto se tornó muy serio—. No es
lugar de cualquiera de nosotros inmiscuirse en los asuntos del Alfa.
—Es mi mejor
amigo, Dambi. Eso lo hace mi asunto —argumentó Donghae .
—No —clamó Hongki—.
Si fuera solo tu mejor amigo, entonces sí, sería tu asunto. Pero no es solo tu
mejor amigo. Es el compañero de Siwon, Donghae , su esposo. Hay algunas cosas
que son entre esposos sobre la cual la etiqueta de amigo ya no tiene ningún
poder.
Donghae miró
furioso a Hongki al escuchar sus palabras, al oír la verdad, y odiarlas. Sabía
que había algunas cosas que no eran su asunto porque Siwon no era solo el novio
de Hee, él era su marido y eso hacia una gran diferencia.
—Pero él está
tomando la decisión equivocada —se quejó. Qué forma de ser maduro Donghae,
pensó para sí mismo.
—Esa no es tú
decisión —le dijo Dambi, las palabras de la Gran Luna resonaron en su mente—.
Las Parcas en última instancia decidirán qué vida van a aceptar. Hay tan poco
que controlamos en esta vida, y tanto como nos gustaría pensar que la vida y la
muerte es una de esas cosas, no lo son.
Donghae dejó escapar un profundo suspiro resignado. No
podía decirle a Hee. De hecho, no podía decírselo a nadie.
—Esta mierda
apesta —se quejó.
—Como la historia
de nuestras vidas paranormales —concordó Dambi.
***
—He estado
esperando por ti —dijo la Gran Luna en voz baja hacia el lobo en forma humana
ante ella. El aire de la noche cálida sopló a través de su cabello brillante y
la luz de la luna hizo que su piel brillara.
—¿Sabías que
vendría?
—Sí, y han
acordado escucharte. —Hizo un gesto para que el lobo la siguiera. Entró en el
bosque. A medida que los árboles la cubrían, el lobo se detuvo por un segundo
antes de seguir a la Diosa.
Pasaron a través
de los árboles hasta un dosel de ramas que colgaba sobre la abertura de una
cueva. Una luz brillaba en la entrada como si un fuego ardiera en su interior y
las llamas bailaran, tentando a cualquiera a entrar y buscar su calor. La Gran
Luna se hizo a un lado y le hizo señas al lobo para que entrara en la cueva.
—Esto es lo más
lejos que llegaré —le dijo e instó al lobo que siguiera adelante, siguiendo la
atrayente luz.
El lobo caminó
dentro de la cueva hasta que una voz le dijo que se detuviera.
—Hemos acordado
escuchar tu petición. —Las tres figuras de las Parcas aparecieron de repente
ante el lobo—. ¿Qué es lo que pides?
—Vengo a ofrecer
mi vida en lugar de una que han reclamado. Pido que permitan que el joven niño
viva y yo cumpla con la deuda. Dejen que mi sangre haga borrón y cuenta nueva.
—La voz del lobo estaba llena de sinceridad.
—¿Por qué te
ofrecerías como sacrificio por este niño? Una cosa es que el padre lo haga,
pero, ¿quién es este niño para ti, para que des tu vida?
—El joven niño es
de la manada. Él es mi familia y es amado. ¿Qué mejor manera de mostrar que es
amado que dar mi vida por la de él?
El silencio llenó
la cueva mientras las Parcas miraban al lobo, y luego, por fin hablaron de
nuevo.
—Consideraremos
tu sacrificio, pero no sabrás de nuestra decisión hasta el momento en que sea
necesario pagar la deuda. No debes informar a nadie de tu elección. Un
verdadero sacrificio no busca aprobación o anhela atención. Para hacer esto,
nadie deberá saberlo hasta que hayas dejado esta vida y pasado a la siguiente.
El lobo salió de
la cueva y caminó hacia los brazos de la Gran Luna.
—¿Puedes
restaurar lo que se ha comenzado a romper?
Los ojos de la
Gran Luna se llenaron de humedad mientras negaba con la cabeza.
—No puedo.
Todavía podrían elegirlo. Si restauro su vínculo, entonces él moriría también.
Estoy orgullosa de ti, pero sufro por ti también.
—Es lo que
debería ser —le dijo el lobo. La Gran Luna asintió.
—Solo porque es
lo correcto, no significa que sea fácil.
—No, pero podría
expiar mis errores.
—Oh criatura,
todo lo que necesitas hacer es pedir perdón y los males cometidos serán
limpiados.
—Quiero creer eso
—el lobo la miró a los ojos—, pero hay una parte de mí que siente que nunca
podrá ser perdonada, que nunca voy a ser una digna persona.
La diosa tomó la
cara del lobo en sus manos y la sostuvo con suavidad.
—Tú eres digno.
No por tu cuenta, pero yo te he hecho digno. Mi amor por ti te ha hecho una
digna persona.
—¿No vas a dar la
bienvenida a una de las Fae del Consejo en tu reino, Thead? —preguntó Lorelle
al Rey Troll.
Los ojos de Thead
se estrecharon ante la Fae y los indicios de desconfianza empezaron a surgir en
sus entrañas.
—¿Desde cuándo el
Consejo Fae ha mostrado alguna vez interés en los Trolls, Lorelle? —preguntó
Thead. Su voz profunda retumbó y él sonrió mientras veía a la mujer removerse
nerviosa.
—Desde que hemos
oído rumores de una guerra en tu camino.
Thead no le dio
el placer de actuar temeroso, o sorprendido, a pesar de que podría estar ambas
cosas. Se dio cuenta que había algo mal con esta Lorelle de las Fae.
—Entonces
cuéntame tus rumores y vete de inmediato.
Ella se irguió y
echó los hombros hacia atrás. Lo miró a los ojos, y aunque era más alta que él
y probablemente más poderosa, no se inmutó bajo su mirada. No se inmutó hasta
que ella habló.
—Jungsoo, Rey de
los Hechiceros, ha declarado la guerra a los Trolls por el asesinato de la
compañera de Gura, hermano del Rey. Él no aceptará ningún prisionero; se
extenderá sin misericordia, sangre por sangre, vida por vida.
Thead siguió
sosteniendo la máscara que había puesto tan pronto como había aparecido Lorelle,
pero tomó todo en él para no derrumbarse. Jungsoo le había prometido hace mucho
tiempo que ninguna venganza vendría después de la muerte de Thea. Le había
dicho que no iba a condenar a toda una raza por las fechorías de unos pocos y
él le había creído. Ahora, siglos más tarde, ¿qué lo habría llevado a faltar a
su palabra? ¿Qué haría cambiar su punto de vista sobre algo tan importante?
—Sabes que Jungsoo
ha clamado una compañera, ¿no? —dijo Lorelle, como si acabara de leer las
preguntas en su mente.
—No, no había
oído hablar de eso —admitió.
—Sugiero que te
prepares, Rey. Jungsoo no se dejará persuadir y la guerra estará a tu puerta
antes de que lo sepas.
Thead se quedó
allí mirando fijamente el lugar que Lorelle acababa de ocupar. Siempre había
odiado el acto de desaparición que los Fae podían realizar; el repentino
silencio lo dejaba intranquilo. La guerra se acerca, le había dicho, y en las
manos de los hechiceros.
Él y los suyos no
tendrían ninguna oportunidad contra ellos. No eran muy poderosos para empezar,
pero con la magia en el reino humano menguando, su capacidad para protegerse a
sí mismos se había reducido considerablemente.
Honestamente no
tenía idea de cómo podía posiblemente prepararse él y su clan, pero sabía que
no iba simplemente a tumbarse y dejar que Jungsoo los destruya. Si iba a morir,
moriría luchando.
I
ResponderEliminarAy mi vida!!!
Hee~ sufre!!!
Oh si~ coincido con Tukiee~ la visita de loa padres de Hee fue ilarante(?) jajajajajajaja
Ahhhh
Quien se esta ofreciendo como sacrificio??? Ahhhh quien!???
Quién descubrió el secreto de Siwon y quiere ofrecerse en su lugar.
ResponderEliminarResultó todo un ser intuitivo mi pecesito, el problema será que no se vaya de boca con Hee
Dios!! Quien se ofrecio? Jujin??
ResponderEliminarPor Dios, esto esta cada vez más bueno!!! Gracias por el cap ^_^