Hee, Teukkie, Donghae,
Ryeowook, Zhoumi, todos se sentaban alrededor de la mesa de café en una de las Salas
de estar. Cada uno sostenía un té humeante.
—¿Sabemos si Dambi
ha sido capaz de hacer que los hermanos y hermanas de Legolas se unan a nuestra
causa? —preguntó Hee mientras daba un sorbo de su bebida caliente,
estremeciéndose cuando quemó su lengua.
Zhoumi y Hongki,
quien también habían estado tomando sorbos de su bebida, de inmediato
comenzaron a ahogarse mientras reían al oír las palabras de Hee. Ryeowook
estaba sonriendo, empezando a comprender parte del sentido del humor de Hee,
incluso si no entendía la referencia.
—Hee, sólo porque
son Fae no quiere Decir que son algo parecido a los personajes de El Señor de
los Anillos —señaló Donghae—. Por no hablar de que Legolas era un elfo.
Hee se encogió de
hombros.
—Sí, pero es
mucho más divertido referirse a ellos como primos de Legolas o el papá del
bebé, que sólo llamarlos Fae.
Teukkie asintió.
—El tiene razón.
—Para responder a
tu pregunta —dijo Donghae—, Dambi me dijo durante una de nuestras pequeñas…
—¿Clases de
Pociones? —espetó Hee.
—¡Harry Potter!
—gritó Teukkie.
—Punto para ti. —Hee
hizo una seña a Teukkie.
—¿En serio? ¿Van
a jugar “de qué es” ahora? —preguntó Donghae. Cruzó los brazos sobre el pecho,
tratando de parecer intimidante.
—¿Qué es “de qué
es”? —preguntó Ryeowook.
Teukkie se animó.
—Es un juego en
el que sólo tenemos conversaciones normales, como de costumbre. Pero entonces,
a lo largo del día arrojamos citas de películas que son apropiadas para el tema.
Para obtener un punto, tienes que ser el primera en Decir a qué película o
programa de televisión pertenece. Es un juego muy maduro para jóvenes muy
maduros.
—Me temo que este
juego no va a tener un montón de sentido para ti teniendo en cuenta que has
estado viviendo entre los árboles de higo durante décadas y tu única forma de
entretenimiento era lastimar a tu marido hombre lobo para así poder utilizar
tus habilidades de curación.
Todo el mundo,
excepto Ryeowook, jadeó ante la franqueza de Hee.
Ryeowook estaba
riendo. Le había dicho a Hee sobre cómo Yesung se había lesionado a propósito
sólo para que él tuviera algo que hacer.
—Sólo digo —soltó
Hee ante los rostros indignados.
—De todos modos, Ryeowook
—continuó Teukkie—, ese es el juego.
—Tal vez sólo voy
a escuchar entonces. Estoy seguro que Hee va a Decir algo que, aunque puede que
no entienda, voy a encontrar divertido de todos modos.
Hongki se echó a reír.
—Esa es una cosa
fácil de hacer. Hee sólo tiene que abrir la boca y ya está casi garantizado que
vas a reír, y a pesar de su descaro, él probablemente no tiene intención de
hacer daño.
—¡Es realmente
muy corto de encanto! —aulló Teukkie justo cuando Donghae y Hee gritaban—: ¡La
Princesa Prometida!
—Bien hecho, doc.
—Hee sonrió a Hongki.
—Está bien, en
serio —dijo Donghae, recomponiéndose—. Dambi dijo que el consejo no va a mover
un dedo para ayudarnos.
Ryeowook soltó un
bufido.
—Eso no es una
sorpresa.
—¿Qué quieres Decir?
—preguntó Zhoumi.
Ryeowook se
inclinó hacia adelante y dejó la taza sobre la mesa.
—Las Fae son los
más poderosos de todos los seres sobrenaturales y, a la vez, son los más
disciplinarios de nuestro reino.
—¿Como la policía
de los supernaturales? —preguntó Teukkie.
Ryeowook se quedó
mirando fijamente a Teukkie.
—Ryeowook, sólo
continúa —le animó Hee.
—Está bien,
entonces, sí; como la policía —concordó Ryeowook—. Después de la purga de las
brujas, se retiraron más allá de su Velo y han tenido muy poco que ver con este
mundo. Sobretodo por la ausencia de sanadores. Así que no me sorprende que no
quieran involucrarse. Viven en paz, en la seguridad de su mundo.
—Sí, bueno, ¿qué
sucederá cuando este mundo se ponga de rodillas y la muerte y la destrucción
provocada por Mona llegue llamando a su puerta? —preguntó Donghae—. ¿Qué va a
hacer Dambi?
—Ella realmente
no ha salido y dicho eso con esas palabras, pero creo que Changmin y Henry van
a ayudar una vez más. —Donghae notó que los hombros de Zhoumi se tensaron
cuando mencionó a las Fae. Tal vez a él no le gustaban, pensó Donghae.
«Donghae mío, nos
estamos preparando para la reunión». Donghae saltó ante el sonido de la voz de Hyukjae
y dejó escapar un grito.
Hee saltó ante
eso.
—Maldita sea, Donghae.
¿Estás bien?
Donghae se
sonrojó.
—Olvidé
mencionarles algo —murmuró.
La cabeza de Hee giró
bruscamente hacia Teukkie.
—Te dije que nos
estaba ocultando algo. ¿No te dije que nos estaba ocultando algo?
—Sí, sí. Me lo
dijiste. Ahora siéntate y cállate de modo que podamos sonsacarle la
información.
—Sólo digo… sabía
que él estaba actuando raro. Pero, ¿alguien escuchó a Hee? Nooooo, claro que
no. No es como que soy brillante ni nada así.
—Hee.
—¡Qué! —espetó Hee.
—¡Siéntate y
cállate! —Teukkie señaló el asiento de Hee—. Ahora —gruñó, sujetando a Donghae
con sus ojos—. Sanador, escúpelo.
—Bueno, iba a Decirles
anoche, pero luego de la reunión y Dambi y luego… —balbuceó Donghae.
—Bla, bla, bla. Donghae,
ve al punto. —Hee hizo un movimiento de impaciencia con la mano.
—Hyukjae y yo
podemos escuchar los pensamientos del otro —masculló Donghae.
—¡Cállate! —Teukkie
sonrió.
—Eso es de lo que
estoy hablando. Todo comienza con la charla mental y lo siguiente que sabes es que
estás rodando alrededor siendo envuelto en las sábanas como un burrito. —Hee estaba
de pie, haciendo un pequeño baile mientras hablaba. Se detuvo cuando se dio
cuenta que todo el mundo estaba mirándolo—. ¿Qué? —Su frente se arrugó.
Zhoumi, Hongki y Ryeowook
estaban sacudiendo sus cabezas con pequeñas sonrisas en sus rostros. Donghae
estaba cubriendo su cara de vergüenza y Teukkie estaba poniendo sus ojos en
blanco.
—Hee—comenzó Teukkie.
Hee levantó las
manos.
—Lo sé, lo sé.
Siempre con el “no hables de sexo, Hee”, “mantén la ropa puesta, Hee”, “se un
cuadro aburrido, Hee”.
«¿Me oíste, nene?»
Donghae saltó de
nuevo.
—Oh, mierda, se
me olvidó que me habló. —Se puso de pie y se alejó, dándoles la espalda a sus
amigos.
«Sí, te escuché.
Lo siento, estaba distraído por los chicos».
«Hmm, no debo de
estar haciendo algo bien si tus amigos te distraen mejor que yo. Supongo que
tendré que poner remedio a eso». Oyó la risa de Hyukjae en su mente y sintió un
cálido aliento sobre su cuello.
Él se estremeció.
«¿Ese fuiste tú?»
«Sí, Donghae mío,
ese era yo. Ahora, ¿vas a venir a la Sala de reunión o tengo que ir y cargarte
hasta aquí? Lo que, estaría totalmente bien para mí».
Donghae rió.
«Estamos en
camino».
«Está bien, como
quieras. No te preocupes, amor. Voy a encontrar otra manera de tenerte en mis
brazos».
Donghae estaba
ruborizándose cuando caminó de vuelta a los otros.
—Um, Donghae, ¿te
das cuenta que no podemos oírte hablar con él? No tienes que alejarte por
privacidad como si estuvieras en un teléfono celular.
El rubor de Donghae
se profundizó.
—Pero si trato de
hablar con él mientras estoy frente a ustedes me dirás que me veo estreñido.
La Sala estalló
en risas.
—Oh Donghae,
chico, yo no diría que te ves estreñido —lo aplacó Hee.
—Oh, está bien. —Donghae
sonrió.
—Por lo que sé,
podrías verte como si tienes gases, o tal vez parezcas que estás en pleno
proceso de…
—¡Hee! —lo interrumpió Teukkie, tratando de no reírse. Cuando los otros perdieron su
compostura, Teukkie cedió.
Donghae trató de
darles una mirada severa, pero estaba demasiado vertiginoso para estar molesto.
Una amplia sonrisa se extendió por su cara mientras pensaba en Hyukjae.
«Heechul, Hyukjae
dijo que todos ustedes estaban en camino». Hee escuchó la voz de su compañero.
«Nos dirigimos
hacia allí. Teníamos cosas de chicos que discutir antes. Dile a Hyukjae que
deje de retorcer su cola, su pequeño sanador estará allí en un segundo».
«Hyukjae no es el
que está preguntando, princesa. Yo estoy preguntando. Y, ¿qué cosas de chicos?»
«Oh, bueno, en
ese caso no voy a Decirte que dejes de retorcer tu cola, porque creo que tu
cola está en un estado retorcido perpetuo. Y no es asunto tuyo».
Oyó a Siwon
gruñirle. Hee rió. «Te quiero, mi bolita esponjosa de pelos».
«Prométeme que
nunca me vas a llamar así en voz alta, delante de nadie».
«Bueno, cariño,
sabes que no puedo hacer una promesa de ese tipo. Estás destinado a molestarme
en algún momento y necesito toda la munición que pueda reunir».
«Sólo traigan sus
traseros aquí». Él estaba gruñendo de nuevo lo que sólo le hizo sonreír aún
más.
«Bueno, bueno, no
voy a tolerar que hables sobre los traseros de los otros pichoncitos».
«Heechul», le
advirtió.
«Bien, cielos»,
cedió.
—Vamos, chicos. Siwon
está ladrándome en mi oído que llevemos todos nuestros traseros a la Sala de
reunión.
—No sé cómo
toleras su autoritarismo —comentó Zhoumi en su camino hacia la puerta.
Hee se rió.
—Si Siwon fuera
fácil, complaciente, y tolerante con él, lo convertiría en una alfombra lobo y
caminaría sobre él —explicó Teukkie.
—En serio —agregó
Hee—. No puedo darle un beso francés a una alfombra. Bueno, podría, pero
entonces la gente podría pensar que he pasado de estar ligeramente demente a un
chiflado en toda regla.
Donghae lanzó una
mirada de reojo a Teukkie y alzó una ceja. Teukkie dio una leve inclinación de
cabeza, de acuerdo con el escepticismo tácito de Donghae.
—Donghae, Teukkie,
no dudaré en poner pegamento en sus inodoros, así que quiten esas sonrisas de
sus caras bonitas.
Zhoumi, Hongki, y
Ryeowook escucharon las bromas, sacudiendo la cabeza y riendo mientras Hee hacía
una declaración típica de Hee.
Mientras
caminaban, Teukkie se extendió hacia Kangin.
«Oye, hombre
lobo, me siento un poco dejado de lado aquí. El resto de los hombres están saltando
sobre sus compañeros para que lleven sus traseros a la Sala de reuniones».
Teukkie le oyó
reír y entonces él le envió una imagen mental de ellos dos.
«Seré feliz de saltar
sobre ti. Sin embargo, te aseguro que será por una razón muy diferente».
Teukkie se rió en
voz alta y recibió miradas de complicidad.
«¿Te he dicho
últimamente que te amo?», preguntó Teukkie.
«Sí, pero nunca
me canso de escucharlo. Ahora date prisa y trae tu trasero a esta Sala de
reuniones», bromeó Kangin.
Teukkie sonrió y
de alguna manera, incluso después de la unión y el matrimonio, todavía sentía
mariposas ante la idea de entrar en una habitación sabiendo que iba a ver el
rostro-demasiado-atractivo de Kangin.
Cuando finalmente
llegaron a la reunión, la pesadez que envolvía la Sala llevó sus risas y bromas
fáciles a su término.
Los chicos
entraron en la habitación silenciosa. Los hombres estaban sentados en un
círculo. Había asientos vacíos próximos a Siwon, Kangin, Hyukjae y Yesung. Cada
pareja apareada se dirigió a sus respectivos lugares, mientras que Hongki y Zhoumi
tomaron los asientos vacíos junto a Yunho y Sihyuk. Junjin y Hyesung se
sentaban cerca de la parte delantera de la Sala con Dambi, sentada a su
izquierda.
Teukkie vio a
Wadim junto a Yunho y sonrió.
—Hola, chico
historiador —bromeó. Kangin gruñó y él le dio un codazo mientras seguía
hablando a Wadim—. Así que, ¿estás siendo arrastrado a este lío también?
—¿Cómo podría
perderme el fin del mundo tal como lo conocemos?
Siwon y Junjin
gruñeron ante las palabras de Wadim.
—No es apropiado,
Wadim —advirtió Junjin.
—Mis disculpas,
Alfa. Sólo me estoy sintiendo un poco abrumado por la información que necesito
compartir con ustedes —le dijo Wadim.
—Vamos a empezar
—intervino Dambi.
Junjin se levantó
y empezó a caminar lentamente alrededor del círculo mientras hablaba.
—Siwon y yo,
junto con nuestro Betas, Yesung y Hyukjae, hemos estado discutiendo cómo
debemos proceder. Hemos decidido que no podemos esperar a que Desdémona dé el
primer golpe. Sería mejor estar en la ofensiva en lugar de la defensiva. Esto
significa que tenemos que estar dando pasos hacia adelante para descubrir el
plan de Mona y cómo podemos evitar que ese plan dé frutos.
Hizo una pausa,
esperando a ver si alguien tenía algo que Decir a este punto. Cuando nadie
habló, continuó
—Con base en la
información que Dambi ha estado reuniendo, pensamos que sería beneficioso
enviar dos grupos a dos lugares que son opuestos el uno al otro en el país.
Puede ser que seamos capaces de recoger algo inadvertidamente simplemente por
estar en el lugar correcto. Por ejemplo, Dambi y Siwon fueron capaces de
conseguirle a Hyukjae un trabajo en un bar en Ruse, que está justo en la
frontera de Taiwán, cerca del bosque a donde creemos que Mona se dirigía. Este
bar es frecuentado por los seres sobrenaturales.
»Donghae se unirá
a él, junto con Hee, Siwon, Yunho, Hongki y Sihyuk. Y gracias a Dambi, Changmin
se unirá a ustedes también. El otro grupo incluirá a Hyesung, Kangin, Teukkie, Zhoumi,
Ryeowook, Yesung, Henry y a mí, de nuevo gracias a la ayuda de Dambi. Donghwa
se quedará atrás y cuidará de la manada y Siwon nombrará a alguien en su lugar
mientras no estemos. Nuestro grupo se dirigirá profundamente en las montañas en
la zona cercana al puente por encima de El Limbo. —Junjin dejó de caminar—.
Ahora bien, en una ocasión hubo tribus de duendes…
—Espera, aguanta
ahí —interrumpió Hee. Siwon puso su mano en su muslo lo que él ignoró—.
¿Duendes? ¿En serio? Bueno, aquí mismo, ahora mismo, danos una lista de todos
los seres no humanos que habitan este gran planeta y que viven en secreto pero
nos incumben.
Donghae y Teukkie
asentían en acuerdo.
Siwon puso los
ojos en blanco y esperó a ver qué respondería Junjin a la explosión de su
compañero. Él probablemente debería haber puesto cinta adhesiva en su boca
antes de comenzar la reunión, pero Heechul tendía a hacer las cosas más
interesantes.
«Escuché lo de la
cinta adhesiva, Neanderthal», gruñó Hee a través de su vínculo.
Siwon se rió en
voz alta mientras Hee empujaba su mano fuera de su muslo. Él sólo puso la mano
de nuevo, no molesto por su actitud en lo más mínimo.
—¿Qué te parece
si hago que mi gente forme una lista mecanografiada y se la den a los tuyos?
Bufidos de risa
ondularon a través de la habitación. Hee entrecerró los ojos hacia Junjin.
—¿Acabas de hacer
una broma? —resopló, y luego añadió con un gruñido—: Más le vale a tu gente
ponerse en contacto con mi gente.
—Hecho. —Asintió Junjin
y sonrió con picardía—. En ambas partes. —Volvió a mirar al resto del grupo y
continuó—: Como estaba diciendo, solía haber una tribu de duendes cerca del
puente. Tienden a ser muy entrometidos y les gusta llevar un control sobre lo
que entra y sale del Velo en el Limbo.
—¿Son buenos o
malos? —preguntó Donghae.
—Los duendes son
independientes y tienden a aliarse con el equipo ganador. No son
intrínsecamente malos, pero tienden a hacer lo que es mejor para ellos, y no
para el bien de todos. Esperamos que puedan ver que Mona no se preocupa por
ellos o las consecuencias para su especie en lo que respecta a los demonios que
ella quiere desatar.
—Genial. —Teukkie
levantó las manos en señal de frustración—. Así que, ¿me estás diciendo que
vamos a entrar en un bosque cerca de la apertura de lo que es esencialmente el
infierno para aquellos de nosotros que no quieren torturar, mutilar, y gobernar
el mundo? Y además, por encima de eso, ¿no sabemos si las criaturas que estamos
buscando aún viven allí, y, para colmo de males, no está garantizado conseguir
su lealtad?
Kangin deslizó su
mano por debajo de su cabello para envolverla alrededor de su cuello. Le dio un
apretón cariñosamente.
—Estás siendo
todo un rayo de sol, ¿verdad, cariño?
Teukkie se
encogió de hombros.
—Sólo estoy
siendo realista, hombre lobo.
—Parece que va a
ser difícil y muy posiblemente imposible, pero, ¿qué otra cosa se puede hacer?
—preguntó Junjin con amabilidad.
Teukkie se apoyó
en Kangin con un gemido.
—Está bien, está
bien. Lo entiendo. Tenemos que salvar al mundo porque no podemos esperar a que
otro de un paso adelante y lo haga. Caray, sólo tenías que ir allí, ¿verdad?
«¿Te sientes un
poco frustrado hoy?», le preguntó Kangin.
«Es sólo una cosa
tras otra. Si uno de nosotros no está siendo secuestrado, es algún engañoso
Alfa de ego inflado que quiere el poder, y si no es eso, entonces es una bruja
que quiere hacerse cargo del mundo a través de algunos demonios del abismo del
infierno. ¿Qué sigue?»
«Tal vez lo
próximo es que los duendecillos se levantarán y decidirán que están cansados de
ser utilizados y empiezan a causar estragos por todo el lugar».
Teukkie se
inclinó hacia delante y se volvió para mirar a Kangin.
—En serio, Kangin,
¿eso es todo lo que tienes? Demonios, ¿por qué detenerse ahí? Vamos con que
todos los seres sobrenaturales unirán sus fuerzas y decidirán que quieren
gobernar el mundo.
—Oh, yo tengo
una. —Hee levantó la mano, saltando en su silla como un niño ansioso—. ¿Qué tal
si los seres sobrenaturales se unen y deciden que una vez que se apoderen del
mundo no quieren matarnos de una vez, sino que hacen que los seres humanos
vayan al bosque en grupos y luchen por suministros y alimentos para mantenerse
con vida?
Donghae y Teukkie
se miraron el uno al otro, poniendo los ojos en blanco a la vez.
—Hee, idiota, eso
es de los Juegos del Hambre. Al igual que en los libros y la película.
—Oh, maldición.
Sabía que era una buena idea. —Hee miró a Siwon—. Fue una buena idea, ¿verdad,
cariño?
Siwon le palmeó
la pierna y asintió.
—Fue una idea
genial.
Hee le frunció el
ceño.
—No estás más que
siguiéndome la corriente, ¿verdad?
—Definitivamente.
Hee se encogió de
hombros.
—Por lo menos
eres honesto.
Junjin se aclaró
la garganta mientras le fruncía el ceño a todo el mundo.
—¿Podemos seguir,
o todos necesitan un poco más de tiempo para pensar en el siguiente escenario
más desolador?
Nadie respondió,
lo que era el camino prudente a tomar.
Donghae levantó
la mano.
«No tienes que
levantar la mano, Donghae», bromeó Hyukjae.
«Después de la
mirada que él nos acaba de dar, creo que voy a jugar a lo seguro».
Junjin le sonrió
a Donghae.
Hee puso los ojos
en blanco.
—Donghae,
¿realmente estás levantando tu mano? Ya no estamos en la escuela. —Hee le
sonrió con malicia a su amigo—. Pero si insistes en actuar la parte del
estudiante, ¿qué parte juega tu compañero de ensueño, que está como un buen
licor?
Siwon gruñó.
«¿Quieres
explicarme por qué te estás refiriendo a Hyukjae como un buen licor?»
«Cariño, creo que
la edad te está pisando los talones y está afectando tu capacidad auditiva.
Dije que es como un buen licor. Es un juego de palabras, porque él es, como un
bartender. ¿Entiendes?»
Siwon dejó
escapar un suspiro de exasperación.
—¿Podrías por
favor abstenerte de describir a cualquier macho de una forma que indique
atracción?
—¿Celoso? —bromeó
Hee.
Esta vez, cuando Siwon
gruñó y lo miró, sostuvo sus ojos con los suyos brillando intensamente.
—Eres mío. Yo no
comparto, ni siquiera tu atracción. Mantén tus ojos para ti, Heechul, o vas a
conseguir que un pobre lobo muera.
Hee, por una vez,
se calló. Este no era el momento ni el lugar.
Teukkie miró a Kangin
y le susurró:
—¿Parece que las
emociones de todos están un poco exacerbadas?
Kangin asintió.
—El estrés, amor.
Los machos de nuestra especie no llevan muy bien la idea de sus compañeros
estando en peligro. Parece que no podemos mantenerlos fuera de ello y es muy
frustrante.
—Estamos todos
vivos. Eso tiene que contar para algo —le dijo mientras tomaba su mano.
—Sólo sobrevivir
no es la vida que queremos para todos ustedes. Queremos darles el mundo.
Donghae miró a Hyukjae
y sonrió, luego miró a Kangin.
—Sólo piénsalo, Kangin,
si ustedes sacan de circulación a Mona y su maldad, nos estarán dando el mundo…
literalmente.
Todos le
sonrieron a Donghae.
—¿Ves? Es por eso
que te mantenemos alrededor. —Sonrió Hee—. Cuando el resto de nosotros estamos
todos: “la vida es una mierda, todos vamos a morir”, lo de Donghae es: “todo el
mundo dense las manos y canten Lean On Me”.
Toda la Sala se
quedó mirando a Hee.
—¿Qué? Sólo digo.
—El se dejó caer en su silla con el ceño fruncido.
Junjin se aclaró
la garganta y volvió la atención hacia él. Por su parte, Donghae pensó que ese
hombre tenía la paciencia de un Dios. Con la incorporación de estos chicos
americanos, las cosas no funcionaban sin problemas, o, bien, profesionalmente.
—Escúchenme —dijo
Junjin en voz baja—. Dejando todas las bromas a un lado, lo que estamos a punto
de enfrentar es mortal. Por favor tómense el tiempo para considerar esto y
prepárense. Salimos pasado mañana. ¿Alguna pregunta?
Cuando nadie
habló, Junjin los despidió, un estado de ánimo sombrío comenzó a descender
sobre ellos. Hee no estaba para eso. Mientras todos comenzaban a ponerse de pie
y salir en fila, dijo en voz alta:
—¡Viva la
Comunidad del Anillo!
Teukkie negó con
la cabeza.
—Estábamos tan
cerca.
Heepuso los ojos
en blanco.
—Oh, dame un
respiro, estabas pensándolo.
HEE TE AMO.
ResponderEliminarEs lejos mi personaje favorito, él siempre hace comentarios que algunos catalogan fuera de lugar pero que en el fondo implican una gran verdad.
Será que a Mimi le esta llegando su Mochi.
jajajajaja Hee~ oh~ él es un soplo de vida!!!
ResponderEliminarJajajajaja su humor jocoso aligera la vida de todos!!!
Ahhhhh por que no dejaron hablar al historiador!!!!!