Volver a Amarte- Capítulo 18



Siwon lo miró tanto rato con esa expresión culpable que Heechul sintió deseos de zarandearlo para conseguir que hablara.

—Siwon, ¿qué pasa?

—El Tabofren prometía reducir ciertos tumores inoperables. Pero la FDA acabó con los ensayos clínicos en cuanto comenzaron a aparecer los primeros efectos secundarios, ya que cuestionaban la seguridad del uso del fármaco.

—Ya me lo habías dicho en el coche —le record.

—Lo sé. Pero no recordaba cuáles eran los efectos secundarios.

—¿Por qué me da que esos efectos secundarios no me van a gustar en absoluto?

Siwon tragó saliva y su mirada descendió hasta el abdomen de Heechul.

—El medicamento bloqueaba una vía de señalización celular que estimulaba el crecimiento de los tumores en aquellos pacientes que sufrían de un cáncer en estado avanzado. Estábamos muy animados después de los resultados obtenidos con los ensayos en animales, y también lo estaba la FDA. Así que enseguida nos dieron el visto bueno para empezar con los ensayos clínicos.

—¿Y?


—Los efectos secundarios menores incluían irritaciones cutáneas, erupciones y sequedad en las mucosas. Nada fuera de lo normal. Pero los restantes hicieron que la FDA se tomara la cosa muy en serio. Normalmente, los sufrían pacientes con tumores cerebrales o en la médula espinal. Fuertes dolores de cabeza, cambios de humor y de personalidad y... pérdidas de memoria.

«¡Dios mío!», pensó Heechul.

Los dedos de Siwon lo aferraron con más fuerza por la cintura, impidiéndole que se alejara.

—Cuando los pacientes que participaban en los ensayos clínicos comenzaron a informar de dichos efectos secundarios, sobre todo en lo referente a los lapsus temporales de memoria, se les retiró de inmediato. La mayoría de ellos no sufrió consecuencias a largo plazo.

—Siwon, ¿por qué me administraron ese medicamento? No lo entiendo. Según me has dicho, yo no padecía ningún tipo de cáncer.

—Cierto. No lo sé. No sé qué está pasando aquí, pero...

—Pero ¿qué? —Heechul no consiguió disimular el miedo que sentía. Al ver que Siwon no lo miraba a los ojos, le colocó una mano en la barbilla y lo instó al levantar la cabeza—. ¿Qué pasa, Siwon?

Él se sentó y se pasó las manos por la cara.

—Mira el monitor y dime si reconoces a ese hombre.

Heechul movió el ratón y el salvapantallas desapareció. En su lugar apareció el rostro de Mithra.

—¡Dios mío!

—Supongo que eso es un sí — escuchó que Siwon decía en voz baja.

—¿Por qué tienes una foto de Mithra?

—Ese es el doctor Jin Mithra. Él desarrolló el Tabofren. Era el director de los ensayos clínicos.

«No», pensó él.

Se volvió hacia la pantalla y después se alejó. No. Era imposible. Las palabras se le atascaron en la garganta. Eso no podía estar sucediendo.

Siwon se levantó del sillón y le colocó las manos en los hombros.

—No lo hagas. No me alejes ahora. Quédate conmigo.

—No. Te equivocas. Seguro que hay otra explicación. Tiene que haberla.

—Cariño...

—¿Qué? ¿Estás diciendo que me hizo esto a propósito? —¿Cómo era posible que el hombre al que él amaba, con el que había convivido durante un año y al que le había confiado a su hijo, le hubiera hecho algo así a propósito?

—No lo sabemos. Yo tampoco entiendo qué está pasando, pero lo descubriremos. —Tiró de él para darle un tierno abrazo antes de que pudiera alejarse.

Heechul se dejó abrazar, si bien era incapaz de apartar la vista del monitor. De la cara de Mithra, que le devolvía la mirada. Por su mente pasaron los recuerdos de los momentos que habían compartido: Mithra con Siwan en brazos durante una barbacoa que hicieron en el patio trasero; Mithra y él bailando en una función benéfica; Mithra y él haciendo el amor en su cama. Se estremeció de repente e intentó apartarse de Siwon, pero él se lo impidió estrechándolo con más fuerza.

—No pasa nada —le dijo en voz baja—. Estás conmigo.

Heechul forcejó para apartarse, pero acabó claudicando ya que carecía de la energía necesaria para luchar contra él. Al final, se apoyó en su pecho, abrumado por las emociones. ¿Cómo había podido equivocarse de esa manera? ¿Cómo era posible que no hubiera visto cómo era Mithra en realidad? ¿Estaba ciego? ¿O simplemente había hecho la vista gorda porque no quería analizar las cosas a fondo?

Siwon le pasó una mano por el pelo mientras lo tranquilizaba, susurrándole al oído. Sin embargo, su mente insistía en repetir lo que le había dicho poco antes.

—Has dicho... has dicho que se apellidaba Jin.

Él no aflojó su abrazo.

—Sí. Jin Mithra. Su familia es la dueña de Epikhigh Publishing desde hace años.

Heechul dejó caer los hombros al tiempo que sentía el amargor de la bilis en la garganta.

—Me dijo... me dijo que no quería que trabajara, pero me permitió realizar colaboraciones independientes. Sabía que a la larga acabaría trabajando para Epikhigh Publishing.

—Lo he pensado, sí. No quiero que vayas a trabajar mañana.

—Siwon...

—No, escúchame. —Lo apartó un poco para mirarlo y lo aferró por los hombros con firmeza, pero sin hacerle daño—. Esto es más grande de lo que suponíamos. Se invirtieron millones de dólares en el Tabofren. La gente se cabreó muchísimo cuando lo rechazaron.

…Según tu informe médico, a ti te lo administraron mucho después de que la FDA pusiera fin a los ensayos clínicos. Alguien siguió con el proyecto, bien porque tenía un comprador o bien porque intentaban continuar a espaldas de la FDA. En cualquier caso, que aparezcas tú husmeando por aquí no va a sentarle bien a quienquiera que esté detrás de esto.

A Heechul no le gustó lo que insinuaba.

—Pensaba que era Mithra quien estaba detrás de esto.

—No creo que lo hiciera solo. No creo que pudiera hacerlo. El personal de la clínica privada estaba al tanto. Alguien de la editorial, también.

Sus palabras flotaron un rato en el aire mientras se escuchaba el tictac de un reloj situado en el otro extremo de la estancia.

—¿Lo conocías? —preguntó Heechul en voz baja.

Su mirada lo atrapó, pero fue incapaz de interpretarla.

—Hablé con él varias veces, pero no llegué a conocerlo bien.

Heechul cerró los ojos. Se conocían. Habían hablado. Su relación con Mithra no era una coincidencia.

Siwon le dio un apretón en los hombros.

—Llegaremos al fondo de todo este asunto, pero necesito que tengas cuidado. Tu cara saldrá en todos los periódicos. La gente descubrirá que no estás muerto.

Una cosa más de la que preocuparse.

—No... no había pensado en eso.

—Quiero que te vea un médico. Mañana.

Heechul se secó las lágrimas que le humedecían las mejillas.

—Estoy bien.

—No discutas conmigo sobre esto. —Su tono de voz le indicó que no lo intentara siquiera—. Nunca se hicieron ensayos a largo plazo con el Tabofren. No sabemos si te ha podido provocar algún efecto de larga duración.

—Me hicieron un TAC justo antes de que Mithra muriera. Los resultados fueron normales.

—Te lo hizo el médico de Gangwon que ha desaparecido, ¿verdad?

—Sí. —El estómago se le revolvió otra vez—. No creerás que también está involucrado, ¿verdad?

—No lo sé. Pero debemos ser precavidos. No vamos a correr riesgo alguno.

—¡Ay, Dios! —murmuró, apoyándose de nuevo en él. Las cosas empeoraban cada vez más. Cada nueva pista, cada pequeña información que descubrían, le hacía preguntarse en qué se había metido. En qué había metido a Siwan. En qué había metido a Siwon y a Sulli.

Siwon lo abrazó y apoyó una mejilla en su cabeza. Su fuerza y su calor lo rodearon, haciendo que se sintiera protegido.

—No voy a permitir que te pase nada.

Seguro entre sus brazos, lo único que quería era olvidar todo lo que habían descubierto, aferrarse al salvavidas en el que se había convertido su cuerpo, creer en sus palabras. El olor de Siwon flotaba en el aire, provocándole el ya familiar déjà-vu. Cerró los ojos, apoyó una mejilla en su torso y le devolvió el abrazo.

El rítmico latido de su corazón le recordó que estaba vivo. En el silencio reinante, casi podía imaginar lo que había sido la vida con él en el pasado. Cómo habría sido Siwon antes... antes de perder a Jungwoo. Feliz. Completo. Un hombre capaz de mover cielo y tierra por la persona que amaba.

Pero eso era el pasado. Ya no eran las personas que fueron entonces. Y aunque quisiera apoyarse en él y dejar que fuera su ancla, todavía había muchas cosas que desconocía. Sobre lo que le había pasado. Sobre él. Sobre cómo estaba todo relacionado, todo lo que habían descubierto, con él y con Siwon.

La verdad lo liberaría. No podía dejar que todo eso lo derrumbara. No iba a hacerlo. Había llegado muy lejos. Lo único que podía hacer era seguir buscando las respuestas que sabía que se encontraban en algún lugar.

Y lidiar con las consecuencias cuando se presentaran.



—Este lio empeora por momentos. —Hyukjae estaba junto a la licorera del despacho de Siwon. Se pasó una mano por el pelo.

—Ya te digo. —Siwon se sirvió un vaso de soda mientras miraba hacia el otro extremo de la estancia, donde se encontraban Jungwoo y Donghae, sentados en el suelo cerca de los ventanales y hablando en voz baja. Jungwoo había puesto buena cara cuando aparecieron Hyukjae y Donghae, pero él se había percatado de que le temblaba la mano cada vez que cogía la copa de vino o picoteaba de la comida china que habían llevado—. Se niega a pasar la noche en mi casa, es muy cabezota, pero no quiero que se quede solo en la casa de la playa.

—¿De verdad crees que alguien puede intentar hacerle daño?

—Su cara está en todos sitios por culpa de la conferencia de prensa de hoy. Lleva semanas husmeando en la clínica privada. Alguien lo vio y no le permitió el paso. Saben que está buscando respuestas. —Lo miró de nuevo—. Ya ha sufrido bastante y no quiero preocuparlo, pero no se lo he contado todo.

—¿Por qué será que eso me ha puesto los pelos de punta?

Siwon se volvió para que Jungwoo y Donghae no lo escucharan.

—Jin Mithra se cabreó cuando retiraron el Tabofren. Había invertido mucho dinero en los ensayos clínicos. Apareció por aquí y estuvo a punto de arrancarme la cabeza cuando descubrió que habíamos decidido apoyar la decisión de la FDA. Me dijo que encontraría el modo de que lo aprobaran con mi ayuda o sin ella. Me lo quité de encima. Hyukjae —dijo, inclinándose hacia delante—, Jungwoo desapareció dos semanas después.

—Mierda.

—Todavía hay más. Hace unos años me llegó el rumor de que en China se estaban realizando ensayos con un fármaco muy similar al Tabofren. Allí no hay una agencia vigilando cada paso del procedimiento como aquí. En China es más fácil obtener el visto bueno del gobierno; y cuando una empresa obtiene los datos, es muy sencillo filtrarlos bajo cuerda a Estados Unidos, siempre y cuando se conozca a la gente adecuada. Si una empresa puede demostrar que un fármaco es seguro y fiable, la FDA lo someterá a consideración.

—¿Crees que lo estaba probando por su cuenta?

Siwon se sentía tan culpable que se le revolvió el estómago.

—No lo sé. Pero eso es lo que creo. Estaba utilizando la clínica privada como laboratorio para sus ensayos, y después enviaba los datos a una empresa china. Necesitamos encontrar a la enfermera que  aparece en el historial médico de Jungwoo...

—En el historial médico de Heechul —lo corrigió Hyukjae.

—Sí, claro —convino Siwon—. A lo mejor ella sabe quién más colaboraba con Jin en todo esto.

—¿Ya han acabado de cuchichear? —Donghae dejó su copa en la barra y le quitó el corcho a una botella de Merlot medio vacía.

Siwon miró de reojo y comprobó que Jungwoo había salido.

—Solo estábamos alardeando de nuestras conquistas sexuales. — Hyukjae le guiñó un ojo a Donghae—. He superado a Siwon.

Donghae se llenó la copa y lo miró de soslayo.

—Dos maduritos hablando de sus conquistas. Qué sorpresa. Siwon, ¿tu empresa no venderá por casualidad algún medicamento para tratar la disfunción eréctil?

—No, lo siento. Pero si quieres, puedo ponerte en contacto con alguien que sí lo vende.

Donghae miró a Hyukjae con una sonrisa malévola.

—Es que hay un tipo que lleva un tiempo intentando que salga con él. Pero no sé si será capaz de aguantar cuando llegue el momento.

—Me parto con ustedes dos — replicó Hyukjae—. Cariño, cuando quieras hacer una prueba, solo tienes que decírmelo.

Donghae se echó a reír y el sonido deshizo el nudo que Siwon sentía en el pecho, aunque fuera por un momento.

—Estoy seguro de que eso no sucederá jamás. Pero me alegro de ver que vuelven a hablarse.

—Siwon es incapaz de mantenerse enfadado conmigo — aseguró Hyukjae—. Soy el único amigo que tiene.

—Sí, lo que tú digas. —Siwon se dirigió a Donghae—: ¿Podrías quedarte esta noche con Jungwoo en su casa?

—¿Quieres decir con Heechul? — Donghae miró a Hyukjae.

—Sí. No quiero que esté solo en esa casa tan aislada.

—Tengo que pensar en Haru. La he dejado con una niñera. Supongo que Heechul y Siwan pueden venirse a mi casa.

Jungwoo volvió del cuarto de baño y todos guardaron silencio.

—Rápido —dijo al llegar junto a ellos, esbozando una sonrisa que no le llegó a los ojos—. Cambien de tema. Ha vuelto al despacho.

Hyukjae le pasó un brazo por los hombros de forma tan relajada y cómoda que Siwon deseó poder hacer lo mismo.

—De momento, hemos agotado el tema del sexo y las drogas. Lo siguiente es el rock. Elige un grupo.

Jungwoo esbozó una sonrisa que le provocó una opresión en el pecho. La había echado de menos durante cinco años. Esa sonrisa y muchas otras cosas.

—¿No? —Hyukjae enarcó una ceja —. Vale, pues entonces vamos a hablar de con quién vas a dormir. Puedes elegir. Con Donghae, con Siwon o conmigo.

—Estás hablando en serio, ¿verdad?

—Me temo que sí. —Hyukjae suspiró—. El consenso es que no puedes quedarte solo.

—Soy adulto. Puedo cuidar de mí mismo.

—Heechul —dijo Donghae—, has tenido un día extenuante. Danos ese gusto, por favor.

—Tengo que pensar en Siwan.

—Sulli y él están con papá y mamá —le recordó Hyukjae—. Seguro que están nadando en la piscina del hotel o asaltando el minibar. Hazme caso, están perfectamente.

Jungwoo se mordió el labio inferior. La tensión de su cuerpo era evidente y cuando levantó una mano para frotarse la cabeza, Siwon sintió un enorme deseo de enterrar los dedos en esos mechones castaños y masajearle el cuero cabelludo para aliviar el estrés que él le había ocasionado en los últimos días. Si se lo permitiera, estaría dispuesto a hacer casi cualquier cosa por aliviar la ansiedad y la preocupación que le abrumaban.

—Bien —dijo por fin—. Ustedes ganan. Estoy demasiado cansado como para discutir. —Miró a Donghae —. Pero sé que tú tienes a Haru. —Después miró a Hyukjae—. Y si las cosas están tan mal como creemos, tampoco es conveniente que Donghae se quede solo. En la conferencia de prensa ha quedado claro que es mi abogado. Que fue él quien me reconoció.

—Heechul... —protestó Donghae.

—Donghae, por favor, hazme caso. Me sentiré mejor si tú tampoco estás solo. No quiero ser el culpable de que alguien acabe herido. Y no vamos a colarnos todos en tu casa.

—No voy a...

—No discutas con este joven — se apresuró a decir Hyukjae—. Siempre ha sido muy listo.

Donghae frunció el ceño y cruzó los brazos. Sin embargo, Siwon supo por su mirada que no pensaba discutir. Estaba tan asustado por lo que sucedía como todos los demás.

—Esto no significa que haya cambiado de opinión sobre lo que tú ya sabes, Lee.

—Todavía —añadió Hyukjae con una sonrisa.

Siwon sentía deseos de echarse a reír, pero la situación no tenía ni pizca de gracia. En ese momento, comprendió lo que significaba la conversación. Cuando miró a Jungwoo de nuevo, él ya lo estaba mirando. El estómago le dio un vuelco.

—Supongo que eso nos deja a nosotros dos —dijo su esposo—. ¿Tu casa o la mía?



2 comentarios:

  1. Waaaaaaaa,las cosas se están complicando,y cada vez están saliendo más cosas que no tenían idea de que fueran así.
    Mithra estaba terminando sus investigaciones por su cuenta,no dejaba trabajar a Hee para así tenerlo vigilado.
    Se lo llevo por venganza,obvio que no lo dejo subir al avión,deja las cosas de Hee pero se las arreglo para llevárselo sin que se dieran cuenta,o con ayuda de algún cómplice, lo hizo estar en estado de coma para así poder suministrarle el medicamento el suficiente tiempo para que hiciera el efecto que quería....olvidar su vida,olvidar a Siwon,olvidar a su familia y así conseguir su venganza contra Siwon por haber declinado en seguir con lo del medicamento....
    Jajajaja el EunHae estan arañando las paredes el uno por el otro *0*
    Siwon y Hee estaran solos......puede que eso les ayude,pueden hablar y decirse muchas cosas,puede funcionar,Siwon tiene que verlo como Heechul y no como Jung Woo

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  2. .____. ya me hice bolas!!!
    mucha informacion!!!
    Dios, si es emedicucho no estubiera muerto, creo que siwon lo picaria en pedacitos chisquititos, lo fritaria y se lo daria de comer al perro!!!!
    es un maldito, de verdad que se vengo del pobre siwi de una manera astronomica!!! T___T
    ya!!! me dara urticaria esperando el proximo capitulo!!!!

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...