Luna Negra (DH10)-9




Kevin se sentó apartado a un lado del campamento en forma humana mientras escuchaba las conversaciones ociosas alrededor de él. La mitad del grupo estaba en forma humana mientras que los demás eran lobos.

Muchos de los hombres estaban inquietos. Había un inquietante olor en el aire. Uno que denotaba problemas, pero nadie podía manejar eso. Ni siquiera él estaba seguro de lo que lo causaba.

Pero estaba tan nervioso como el resto de ellos. Una palabra equivocada o una acción y él estaba justamente tan propenso de tomar una vida como un Daimon. Tanto más, de hecho.

Y tal vez esa era la fuente de su ansiedad. Desde que él y el Hyungsik habían ayudado a Shindong y Kyuhyun, había tenido una sensación de presagio que no podía sacudirse.

Hyungsik se acercó a él y le ofreció una cerveza fría.

—¿Quieres ir a patrullar y ver si podemos averiguar lo qué va a pasar?

Kevin levantó los párpados de repente e inclinó la cabeza para poder ver alrededor del cuerpo de Hyungsik donde Heejun y los demás se reunían. Negó con la cabeza.

Si saliera con Heejun en el estado de ánimo en el que estaba, uno de ellos terminaría muerto.

—Sea lo que sea, viene por aquí. Creo que deberíamos estar pegados a las parejas.

Hyungsik se rió de eso.

—Amo la forma en la que piensas, adelphos. Estar pegado a las parejas es lo que mejor se me da.

Mio -Capítulo 11




Donghae cerró a sus espaldas la pesada puerta de madera del despacho del gerente de un restaurante. Se apoyó en ella y suspiró al borde de la desesperación. Era la undécima entrevista que hacía en diez días y todas, incluida esta, habían sido una auténtica pérdida de tiempo. Nadie quería contratar a un universitario que tardaría pocos meses en acabar la carrera. Ningún restaurante estaba interesado en un camarero que posiblemente dejara el trabajo en seis meses para buscar un puesto relacionado con su vocación. Donghae no podía culparlos por ello, pero necesitaba un trabajo con el que comer.

Volvió a salir avergonzado del despacho de otro gerente que no estaba dispuesto a contratarlo ni siquiera a media jornada y, al pasar por la parte trasera del restaurante, escuchó sonidos que le resultaron extremadamente familiares: el ruido de platos al chocar, los bufidos de los cocineros y los comentarios mordaces de los camareros.

Vale, tampoco se iba a morir de hambre. Aún tenía diez mil dólares en su cuenta, el préstamo que se había quedado de Hyukjae. Se mordió el labio inferior al sentir de nuevo el terrible dolor que le invadía cada vez que pensaba en él. Abrió la puerta principal del restaurante y se apoyó en el frío ladrillo para poner sus pensamientos en orden tras la catastrófica entrevista.

En realidad tenía más de diez mil dólares en su cuenta: nueve días antes, en su cumpleaños, Hyukjae había contratado a varios hombres y un mensajero para que llevaran a la casa de Leeteuk todos los objetos que Donghae había dejado en su piso. Los porteadores apenas podían cargar con todas sus posesiones —todas regalo de Hyukjae—, y el mensajero le entregó un ramo enorme con docenas de rosas rojas y un sobre con una nota.

Sapphire Wolf (T4)-14




—Creo que deberíamos ir —declaró Teukkie por milésima vez.

—Teukkie, hemos tomado nota de lo que piensas, no es necesario que lo sigas diciendo. —Las palabras de Junjin eran ligeramente sarcásticas, pero suaves

—Tomar nota no es lo suficientemente bueno, Alfa. ¿Por qué estamos aquí sentados cuando
podríamos caminar a través del bosque para estar con los demás? La unión hace la fuerza,
¿recuerdas? —Teukkie paseaba por la sala de reuniones mientras los demás continuaban
mirando los libros que había traído con ellos de los archivos.

—Me voy a poner en contacto con Dam y a consultar con ella sobre esto. ¿Qué te parece?

Teukkie miró a Junjin fijamente.

—Mejor.

Después de que Junjin hablara por teléfono con Dam, se reunió con los demás en la sala de
reuniones. Todos tomaron los lugares que extraoficialmente habían asumido como propios en
torno al fuego abrasador.

—Dam dijo que Hee aún está muy débil para viajar, y Siwon también. Ella está de acuerdo contigo
Teukkie, en que todos debemos estar juntos.

—¡Guau! Te lo dije, ¿no lo hice? —Teukkie sonrió con malicia.

Luna Negra (DH10)-8




Hyungsik sintió nauseas en cuanto la realidad se le vino encima, aplastándolo. La estúpida pelea le había costado a su hermana la vida de su pareja y se la llevaría de su lado tan pronto como nacieran las crías.

¿Cómo pudo ser tan idiota?

—Hyungsik, no puedes culparte.

Escuchó las palabras de Minwoo, pero sabía la verdad.

—Ellos ni siquiera habrían sabido que estábamos aquí si yo no los hubiera atacado. — Por ti. No dijo eso último en voz alta, pero quemaba en su mente como un carbón abrasador.

¿Qué he hecho?

—Hyungsik…

Él lo empujó fuera de su alcance.

—Por favor vete. Cada vez que te acercas a mí, algo malo sucede.

Minwoo retrocedió como si lo hubiera abofeteado. Y esas palabras le escocieron como un golpe. Trató de decirse que era su propio dolor lo que lo hacía estallar de ira. Pero no importaba. De todos modos, le hacía daño.

—Me iré, pero si necesitas un…

La mirada que le dedicó era cruel, penetrante y condenatoria.

Mio -Capítulo 10




La casa de Kangin era impresionante. La llamativa decoración en blanco aportaba gran luminosidad y hacía que el espacio, grande de por sí, pareciera aún más amplio y elegante. La ropa que llevaban los invitados y la comodidad con la que charlaban en aquel entorno tan suntuoso dejaban patente su estatus y su riqueza.

Donghae intentó que no se notara mucho que prácticamente era un indigente, pero le costaba no mirar boquiabierto todo lo que había alrededor. Mujeres y jóvenes ataviados con diamantes y piedras preciosas, tenían pinta de estirados. Los hombres, que olían a dinero y poder, se agrupaban en círculos en los que, con toda probabilidad, se hablaba de negocios o de fútbol.

Hyukjae se acercó a un gran bufé que reponían constantemente unos camareros en silencio y llenó dos platos con canapés elaborados. Donghae fue a coger servilletas, pero estaban dobladas con tal precisión que prácticamente se sintió culpable por descolocarlas. 

Frunció el ceño al darse cuenta de que los platos eran de porcelana fina. A él le daría mucha rabia tener que lavar toda esa vajilla y se preguntó cuántos lavaplatos serían necesarios para limpiar todo aquello cuando concluyera la fiesta. ¿Es que los ricos no habían oído hablar de las servilletas y los platos de papel?

Una vez que se hubieron situado en un lugar tranquilo Donghae se dispuso a comer y, aunque no tenía ni la menor idea de lo que se estaba llevando a la boca, no hizo ascos. Ni mucho menos. Cada bocado que daba se le derretía en la boca y, cuando acabó con el último manjar, se lamió los labios temiendo que le quedaran migas por la cara.

Sapphire Wolf (T4)-13




—Sin moros en la costa. —Hyukjae sacó la cabeza por la puerta. Él buscó la mano de Donghae y no esperó a que aceptara la suya, simplemente lo agarró y tiró de él hacia la casa.

Tan pronto como entraron, estaban en una sala de estar gigante. Una enorme chimenea de piedra
estaba en la pared más alejada de la izquierda y un cálido fuego crepitaba y saltaba. El techo
inclinado era un espacio abierto todo el camino hasta el segundo piso y había una barandilla que le permitía a uno mirar hacia abajo a la sala de estar.

Había una cocina en la parte trasera de la habitación con todos los electrodomésticos necesarios, y
parecía tan extraño para Donghae estar de pie en una casa en un reino diferente, mirando a una
cocina aparentemente normal.

Había un gran sofá y varias sillas mullidas cerca del fuego en un círculo, y en la pared alejada de la
izquierda habían altas estanterías llenas de libros de diversos tamaños. En la pared del fondo, al otro
lado de la cocina, había una puerta que daba a otra habitación.

—Hongki, lleva a Hee a ese cuarto de ahí —le instruyó Dam mientras ella señalaba la puerta.

Hongki llevó su preciosa carga, con Siwon todavía sosteniendo la pierna de Hee, y le puso sobre la
cama en la habitación. Era una habitación sorprendentemente grande con una cama con ruedas.

Cuando Hongki bajó a Hee, se dio cuenta de lo suave que era el edredón, y afelpado, mientras
parecía envolverse alrededor de Hee tan tiernamente como un amante. Había varias sillas en la
habitación, un gran armario y otra chimenea. La habitación era cálida y, a pesar de su tamaño,
muy acogedora.

Luna Negra (DH10)-7




Hyungsik permanecía en su forma de lobo, durmiendo sobre una cama de césped. Pero incluso mientras dormía estaba alerta sobre todo lo que ocurría a su alrededor. Se comportaba de esta manera desde que era un cachorro. Más bien, había tenido que comportarse así desde que era un cachorro. A pesar de que Kevin y él eran hijos del Regis de su patria, ellos estaban expuestos a lo peor, no sólo por parte de su padre sino por aquellos que lo seguían como Heejun.

Su padre los culpó por el hecho de que su madre Arcadiann había rehusado completar el ritual emparejamiento con él. Su rechazo convirtió a Juhak en un ser impotente y hostil.

Y su negativa de mantener a sus hijos katagaria los convirtió en un blanco.

Por ello cuando Yewoon se acercó lo suficiente, se despertó listo para atacar.
Yewoon se agachó hasta quedar contra el suelo.

—Soy solo yo Hyungsik.

El cambió a su forma humana y dejó su mano sobre la nariz de ella.

—Lo siento bebé, no lo sabía. —Ella lamió sus dedos antes de colocarse a su lado y poner la cabeza sobre su muslo.

Él acaricio la piel alrededor de sus orejas.

—¿Sucede algo?

Mio -Capítulo 9




Hyukjae empezó a despotricar mientras se enrollaba una toalla blanca alrededor de la cintura. Después de haber estado haciendo ejercicio se había metido del tirón a la ducha que tenía en el gimnasio y se había olvidado por completo de traer ropa limpia del dormitorio. Estaba cabreado porque la maldita toalla apenas le tapaba las partes nobles.

Miró con asco el chándal sudado y maloliente. Ahora que estaba limpito, no se lo pensaba volver a poner.

Donghae aún no había llegado a casa, así que, en principio, le daría tiempo a llegar hasta su cuarto. Se peinó con los dedos el pelo mojado y abrió la puerta del baño, listo para bajar corriendo las escaleras.

Sintió un golpe de aire frío al salir del baño lleno de vapor. ¡En el gimnasio hacía un frío que pelaba! Había bajado la temperatura para hacer deporte y ahora estaba congelado.

—Hyukjae, ¿estás…?

La voz lo cogió por sorpresa y se quedó inmóvil en medio del gimnasio. El corazón empezó a latirle a gran velocidad cuando Donghae entró en la sala de máquinas con total normalidad.

Mientras Donghae le recorría con los ojos, él se estremeció esperando una mirada de repugnancia… o algo peor. Las cicatrices que tenía en el pecho y el abdomen estaban a la vista, algo que trataba de evitar por todos los medios posibles. Siempre las ocultaba.

Sapphire Wolf (T4)-12




Donghae casi chocó con la espalda de Dam cuando la Fae llegó a un abrupto alto. Levantó sus brazos y Donghae, Hyukjae, Hongki y Siwon observaron con ojos bien abiertos como el aire delante de ellos se propagaba y centellaba.

—Este es el velo de las Fae. Nuestro mundo está en otra dimensión. Nadie más que un Fae puede abrir el velo y sólo un Fae puede conceder permiso para que otros puedan cruzar.

Justo cuando Dam estaba a punto de pasar a través del velo, una profunda voz retumbó de entre los árboles.

—¡Dambi!

Hyukjae y Siwon cambiaron a una postura protectora entre la mujer y el macho no identificado que
estaba saliendo de los árboles directamente hacia ellos.

—Yesung. —Dam en realidad pareció sorprendida, algo que parecía fuera de lugar en ella—. ¿Supongo que vienes debido al latente?

Siwon gruñó y dio un paso hacia el lobo al que ella llamó Yesung.

—¿Dónde está? —gruñó Siwon.

Yesung lo miró y luego la comprensión lo iluminó.

—¿Tú eres su compañero?

Luna Negra (DH10)-6



Minwoo pateó a Seojoon, pero por cortesía de Donghyun, su pie no lo encontró de nuevo.

—¡Eres repugnante! Si tú eres el ideal de la humanidad, prefiero ser un animal —miró a Taeyang haciendo una mueca con los labios—. Tienes razón, odio a los lobos. Son la clase más repulsiva que he conocido. No entiendo por que Lycan los escogió como hijos. Pienso que deberían ser devueltos y ejecutados. ¡Perros asquerosos! ¡Todos vosotros!

Impresionado, Hyungsik sintió sus palabras como un golpe a su estomago. “Perro”, era el peor insulto que podrían decirle a un lobo. Era la comparación de un animal azotado cuya función es obedecer a su amo. Un estúpido sin poder, sin dignidad y ningún sentido.

Pero no eran las palabras que había dicho, sino el sincero odio que apoyaba a aquellas palabras, que cortaban en lo más profundo del alma.

Minwoo era igual a los demás que odiaban a su especie y eso era por lo que los lobos hacían todo lo posible por evitar otras ramas de su clase. Ahora entendía por que de todas las clases diferentes de Weres que vivían bajo el techo de los Ha, ninguno de ellos eran lobos.

Asegurándose de mantener tranquila su voz, Hyungsik dio un paso adelante.

—Para que conste, hay una diferencia muy grande entre un perro y un lobo. La principal es que nosotros no somos menos que otros. Nunca.

Minwoo se quedó helado al recordar la presencia de Hyungsik. Se congeló en los brazos de Donghyun sintiendo el pesar rasgar a través de él. ¿Cómo había podido olvidar que estaba ahí?

Mio -Capítulo 8




Todo bien?

Donghae sonrió al leer el mensaje de Hyukjae. Se dirigía a Boah Place en coche con Kyuhyun, que conducía muy serio. Llevaba varios días sin hablar con Boah y habían quedado para tomar un café. Como su amiga no soportaba alejarse del restaurante, Donghae solía pasarse un rato después de clase, cuando había menos gente.

Contestó con otro mensaje:  Sí, papi. Todo va bien.

Era viernes, casi había pasado una semana desde el incidente de la clínica. Hyukjae le escribía a diario —varias veces, de hecho— para asegurarse de que todo iba bien. Aunque le vacilara diciéndole que parecía un padre sobreprotector, en el fondo le conmovía que se preocupara por su seguridad.

No habían tenido contacto físico desde la noche del incidente de la clínica. Bromeaban y charlaban, pero no follaban. Era como si a los dos les diera miedo que lo que había ocurrido no se pudiera repetir. O quizá temían lo que pudiera pasar. Él sin duda lo sentía así, pues jamás había vivido una experiencia tan intensa.

Volvió a sonarle el teléfono.

Ten cuidado. Avísame cuando te marches. Ya estás allí?

Llegando. A sus órdenes, señor.

Sapphire Wolf (T4)-11




Hyukjae lo agarró por la cintura, tirando de su espalda contra su pecho.

—Tranquilo —le susurró al oído.

—Mientras que te has estado tomándote tu maldito dulce tiempo revelándote ante nosotros,
nuestros amigos están en problemas. ¡A Siwon está a punto de darle un patatús y quién sabe lo que le esté pasando a Hee! Así que por favor, dinos. ¿Qué ha sido tan jodidamente importante que te ha tomado una semana,  ¡UNA  MALDITA  SEMANA,  CONTACTAR  CON  NOSOTROS! 

Donghae estaba jadeando y continuaba tirando contra el agarre de Hyukjae.

Dambi caminó más de cerca, sus ojos recorriendo a cada uno de ellos, y luego de vuelta a Donghae.

—¿Estás seguro de que eres un sanador? Eres terriblemente temperamental.

—¡AHHH! —gritó Donghae contra el agarre de Hyukjae—. No has visto una persona temperamental
hasta que hayas visto a Hee. Soy un melocotón comparado con él. ¿¡Dónde diablos estabas!? ¿Por
qué te tomó tanto tiempo? ¿No lo entiendes? Siwon está… —tartamudeó Donghae y señaló al Beta
debilitado—, y Hee está, está,  bueno…

—Hee está muriendo —dijo el Hada con naturalidad.
  
Donghae jadeó y se habría desplomado si Hyukjae no lo hubiera estado sosteniendo.

Luna Negra (DH10)-5




—¿Qué estás haciendo aquí?

Inclinó atrás la cabeza para ver a Kevin parado a unos pasos de él, pareciendo desconcertado por la pose de Hyungsik.

—Nada.

—¿Por qué no estás con Heejin?

—¿Por qué no lo estás tú?

Kevin se sentó a su lado.

—No lo soporto. Araña como un gato. Como sea, eso nunca te detuvo antes a ti.

Hyungsik se encogió de hombros mientras escondía sus manos debajo de su cabeza.

—Hay más en la vida que el sexo.

Kevin le frunció el ceño.

—¿Quién eres y que has hecho con mi hermano?

Hyungsik le dio una mirada curiosa.

—No seas imbécil.

—Está bien. Te dejaré solo. Pero ahora en serio, ¿estás bien?

—¿Cuándo he estado bien?

Mio -Capítulo 7




—¿Cómo puedes tener ese cuerpazo con todo lo que comes?

Al momento quiso que se lo tragara la tierra. ¿Cómo se había atrevido a decirle eso? Era el alcohol el que hablaba, no él.

«Autonota: A partir de ahora no beberé más de una copa de vino y la rebajaré siempre con agua».

Hyukjae lo miró con picardía:

—¿Cuerpazo?

Donghae se encogió de hombros. ¿Qué sentido tenía negar la verdad? Tenía un cuerpazo.

—Pues sí.

«Un cuerpazo duro como una roca. Para caerse de culo. El cuerpo más sexy del planeta».

—Hago ejercicio en el gimnasio que tengo en casa todos los días. Si te gusta mi aspecto,
supongo que el esfuerzo merece la pena —comentó con incredulidad. «¡Ya te digo! Merece mucho la pena».

—Se nota —respondió Donghae intentando que no se notara demasiado que estaba deseando hacerle de todo—. Es uno de los motivos por los que mujeres como Jesica caen rendidas a tus pies. No es el único, pero es una razón de peso.

«¡Mierda! ¿Lo había dicho en voz alta? ¡Maldito alcohol! Tenía que aprender a morderse la lengua».

Sapphire Wolf (T4)-10




Donghae sintió energía flotando dentro de Siwon mientras buscaba el vínculo del que él había hablado.

Se sintió como un intruso sabiendo que el vínculo entre compañeros, de lo que Teukkie había explicado, era muy íntimo.

Su mente buscó a través de él, encontrando la conexión que el Beta tenía con su Alfa y con la manada, una intricada red. Finalmente se encontró con lo que parecía un cordón de oro, fuerte y brillante. Siguiendo su camino, casi se retiró cuando vio en extremo cortado. Parecía roído, como una cuerda desgastada en las puntas. Donghae notó que la punta y varios centímetros del cordón ya no eran doradas, sino oscuras, muertas.

Se aproximó a las partes oscuras. Tan pronto como su conciencia lo tocó, se sintió siendo expulsado de la mente de Siwon y volver al presente.

Donghae estaba sin aliento. Abrió sus ojos para ver a la cara de Siwon cubierta en sudor, su boca
apretada en dolor, y la agonía que era tan evidente en el interior, sangraba por sus brillantes ojos.

—Donghae —habló Hyukjae con un bajo gruñido—, aléjate de él.

Donghae lo ignoró y en lugar de alejarse, se movió alrededor hasta que estuvo arrodillado justo
enfrente de Siwon.

—Tu vínculo con él ha sido cortado. Está muriendo.

Luna Negra (DH10)-4




Hyungsik comenzó a bajar por la escalera hacia la barra donde Taeyang o uno de los hermanos idénticos de Taeyang estaba atendiendo.

—¿Dónde está Minwoo?

El oso se tensó.

—¿Quién diablos eres?
   
Definitivamente no era Taeyang.

—Kim Hyungsik. Quería devolverle algo de su propiedad, de cualquier manera no es que te importe saberlo.

El oso le fulminó con una mirada hostil.

Otro oso con el pelo corto negro… uno que era Arcadiann si a Hyungsik no le fallaba el olfato, dio un delicado codazo al hermano de Minwoo.

—Relájate, Hyunseong, él es el que lo salvó antes de los chacales.

Hyunseong retrocedió, pero no demasiado.

—¿Quieres devolvérselo?

—Seguro.

El Arcadiann dirigió una sonrisa amistosa hacia Hyungsik.

Mio -Capítulo 6




Donghae exhaló un leve suspiro y tomó un trago del vaso de plástico con la esperanza de que el café le ayudara a concentrarse. Tuvo que tragar con fuerza porque el líquido con sabor a quemado se resistía a pasar. Desvió la mirada hacia Leeteuk y le dedicó una débil sonrisa.

—Creo que ya queda poco.

Ya había identificado a los dos sospechosos en las fotos de la ficha policial, a los dos hombres que habían irrumpido en la clínica por la mañana y le habían exigido medicamentos a punta de pistola.

En aquel momento Leeteuk estaba en la sala de reconocimiento con un niño y su madre, y no había visto a los hombres, pero Donghae los había observado bien de cerca. Puso mala cara pensando que ojalá no lo hubiera hecho.

Se había quedado solo en la sala de espera cuidando del otro hijo de la señora que estaba en la consulta con Leeteuk. Donghae jamás olvidaría la mirada sin vida de los hombres y sus rostros demacrados, reflejo de años de drogadicción. En ese momento aterrador en el que no supo si aquellos segundos serían los últimos, había bastado para acojonarle de verdad. Aun así, había cogido al niño y, tras darle a un botón de emergencia que tenían bajo la mesa, había echado a correr con él hasta una esquina de la sala, donde lo había protegido con su propio cuerpo.

La alarma no era precisamente silenciosa y el escándalo había bastado para que Leeteuk saliera corriendo de la consulta y los hombres se esfumaran. Pero antes de largarse a uno de ellos, que se había puesto muy nervioso, se le había disparado el arma y la bala había pasado tan cerca de la cabeza de Donghae que había sentido una ráfaga de aire en la mejilla.

Sapphire Wolf (T4)-9




2 Días Después del Incendio.


Era media tarde cuando finalmente llegaron de vuelta a la mansión. Teukkie se estiró mientras salía del Hummer. A pesar de que estaba rígido —y hambriento— por el viaje, estaba ansioso por empezar a indagar a través del pasado de los Canis lupis para descubrir una manera de romper la maldición sobre Siwon y detener a la bruja.

—Bueno, Yunho —dijo Teukkie, alzando una ceja hacia él—, guía el camino a los archivos.

Kangin tomó la mano de Teukkie, llevándolo con él mientras caminaban dentro de la mansión. Zhoumi los siguió silenciosamente, aún cansado por el viaje. Atravesaron el largo pasillo donde se encontraba la oficina de Junjin. Cuando llegaron al final del corredor, Kangin abrió la última puerta de la izquierda.

—Siempre me pregunté qué había aquí —murmuró Teukkie mientras miraba a Yunho poner un código en un teclado numérico localizado sobre la pared justo dentro de la habitación, el cual terminó siendo un armario… ¿o no lo era?

—Liiiiiindo. —Teukkie sonrió—. No me dijeron que este lugar tenía pasadizos secretos.

Yunho se encogió de hombros.

—No preguntaste —respondió secamente. Después de poner el código, Teukkie observó lo que
parecía ser una pared sólida en la parte de atrás del armario deslizarse a la derecha, dejando una
abertura que revelaba una escalera de piedra descendente.

Luna Negra (DH10)-3




Hyungsik se puso de pie en cuanto vio a la manada saliendo del bar. Kevin fue el primero en llegar a él.

—Aquí.

Kevin le arrojó su mochila y a continuación, le entregó una bolsa con algo dulce y rico.

—El joven oso quería asegurarse de que tienes todo para Yewoon. Dijo que había algo allí para ti.

Eso lo impresionó completamente. Nunca nadie le había hecho regalos.

—¿Para mí?

Kevin se encogió de hombros.

—No entiendo los procesos de pensamiento de los osos. La mayoría de los días apenas comprendo los nuestros.

Hyungsik tenía que darle la razón, él tampoco los entendía. Metió la bolsa en su mochila y el resto de los lobos montaron sus motos y se marcharon. Anduvieron en silencio todo el camino de regreso al pantano donde habían hecho su campamento para que las parejas dieran a luz a sus cachorros en condiciones de paz y protección.

En cuanto volvieron, su padre los encontró en su forma de lobo. Juhak cambió a humano solamente para burlarse de ellos.

Mío -Capítulo 5



Hyukjae lo cogió en brazos y lo colocó en el centro de la cama tras quitar con brusquedad la colcha y dejarla hecha un gurruño a los pies. Donghae se deslizó hacia la parte superior y sintió la suavidad de la sábana de seda negra acariciándole el trasero. Hyukjae se sentó en el borde, abrió el cajón de la mesilla y sacó cuatro esposas forradas ensambladas con una cadena y un largo lazo de seda negra.

—Sumisión absoluta —susurró Donghae mientras apoyaba la cabeza en los almohadones de seda.

—Sí —asintió Hyukjae en voz baja mientras le recorría el cuerpo con una mirada hambrienta y lo
cogía del brazo para ponerle las esposas.

No tenía la menor duda de que Hyukjae había repetido esta operación muchas veces: en menos de un minuto lo tenía atada a la cama y abierto de piernas. Contempló con curiosidad cada uno de los movimientos de Hyukjae, que recorría su cuerpo con ojos voraces.

Le sorprendió su propia forma de reaccionar: cuanto más indefenso se encontraba, cuantas más partes de su cuerpo quedaban esposadas a la cama, más excitado estaba. Estar atado de pies y manos para que él lo tomara a su antojo le ofrecía una libertad que nunca había experimentado. No tenía que tomar decisiones ni preocuparse por si él sentía placer o no. El amo era él y lo único que tenía que hacer era esperar a ser complacido. Estar atado a su cama le resultaba tan erótico que trató de balancear las caderas, pero las esposas se lo impidieron. No se hizo daño, pero se dio cuenta de que apenas podía moverse y exhaló un gemido sensual.

Sapphire Wolf (T4)-8




Mi amor. —Kangin acarició el rostro de Leeteuk mientras trataba de despertarlo—. Tenemos que
prepararnos.

Todos los demás ya se habían levantado y comenzado a prepararse para el viaje que cada uno tenía por delante. Kangin había dejado dormir a Leeteuk diez minutos extra, sabiendo que las emociones iban a ser intensas hoy. Iba a ser agotador.

Para su sorpresa, su compañero odia-mañanas se sentó repentinamente. Lo miró, su cabello un desastre de dormir. En lugar de una sonrisa vio el duro destello de la determinación en sus ojos.

—Sé que quieres saltar y salir corriendo por la puerta, Angel, pero no podemos ayudar a Hee o Siwon
si no cuidamos de nosotros mismos. Así que una ducha rápida, después comida. ¿De acuerdo?

—Dime que vamos a arreglar esto, Kangin. Sé que me lo dijiste anoche, pero he dormido desde
entonces. Así que por favor dime que lo encontraremos y que recuperaremos los recuerdos de él.

Kangin se puso de pie y caminó al otro lado de la cama. Tomando su mano, tiró de él para colocarlo
delante. Inclinó su barbilla de modo que estuviera mirando a los ojos que podría mirar por el resto
de la eternidad.

—Te doy mi palabra. Haré lo imposible por traer a Hee de vuelta con nosotros y restablecer a Siwon.
Ellos son tanto mi familia como la tuya y son de la manada. Protejo lo que es mío. Y aunque no soy Alfa, soy el príncipe de los Suju de Corea. Siwon y Hee son míos. ¿Está claro?

Luna Negra (DH10)-2




Cuando Minwoo se dirigía a la cocina con los pedidos en la mano, un grupo bullicioso que bajaba las escaleras se detuvo. Se maldijo por dentro al verlos.

Chacales.

Dos mujeres y cuatro hombres. Debían de haberse tele transportado al piso superior que estaba reservado para ese tipo de actividad, se trataba de una zona a salvo de los seres humanos para que nunca sospecharan lo que realmente era el Empire. Para ellos era sólo un club.

Para los Were-Hunter, era terreno neutral donde no podían ser atacados.

Y si había algo que odiaba más que a los lobos, era a sus primos caninos, los chacales. Si ser un chacal no era bastante malo ya, estos eran también Centinelas Arcadianns y por la mirada que tenían estaban a la caza de alguien.

Suspirando pesadamente, miró hacia los lobos Katagaria, preguntándose cómo iban a reaccionar ante la presencia de los Chacales Arcadianns.

Lo último que necesitaba era que estallara una lucha feroz entre un clan de centinelas y una manada de Strati. Especialmente Strati con jóvenes que proteger. Lo que les hacía incluso más fueros y violentos de lo normal.

Volvió de nuevo a la barra, pero su camino fue interrumpido cuando uno de los chacales se tele transportó delante de él. El hombre lo miró de arriba abajo con una mueca de asco.

Minwoo estrechó su mirada en él.

Mío -Capítulo 4




—¿Aquí te sientes solo? —preguntó perplejo mientras sus ojos oscuros lo miraban fijamente. Prosiguió con tono de preocupación—: ¿No te gusta vivir aquí?

—Sí, sí… La casa es preciosa, Hyukjae. ¿Cómo no iba a estar feliz? —Tomó aire y trató de explicarse mejor—. Es que estaba acostumbrado a no tener tiempo para pensar, a no tener tiempo para mí. Lleva tiempo acostumbrarse a dejar de vivir a un ritmo frenético.

—Más bien suicida —repuso con cierta crispación—. Ese estilo de vida te estaba matando por dentro, Donghae.

—Lo sé. Y de verdad que te agradezco todo lo que estás haciendo por mí. En serio. Lo único que pasa es que mi vida ha cambiado mucho —insistió para que no la tomara por un desagradecido. Joder, si no fuera por su generosidad, ahora mismo estaría en la calle, pero aun así…—. Me resultaría más agradable si pudiera pasar tiempo aquí contigo.

—¿Quieres pasar tiempo conmigo? —preguntó asombrado examinando el rostro de Donghae.

—Claro que sí. Pero sé que estás muy liado y pensé que quizá me estabas evitando después…,bueno, después de…

—¿Después de que te dijera que quería follarte? —preguntó sin andarse con rodeos, apresando los ojos de Donghae con la mirada.

—Sí —susurró.

Sapphire Wolf (T4)-7




Donghae, Teukkie, Kangin, Hyukjae, Hongki, y Zhoumi todos miraron en shock mientras Siwon, el grande, el fuerte e inamovible Siwon, perdía el control.

Siwon levantándose desde el suelo y con su velocidad de lobo cruzó al otro lado de la habitación, agarrando sillas y arrojándolas. Se hicieron añicos, golpeando las paredes con tal fuerza que sacudió la taberna. Siwon gruñó, sin dejar de causar estragos a todo a su paso. Su aullido de dolor se extendió por el edificio, haciendo que todo el mundo se arrodillara mientras el poder salía de él.

De repente, la puerta de la habitación se abrió y Junjin irrumpió. Su propio poder llenó la habitación,
envolviéndose alrededor de Siwon y tirando de él hacia abajo.

—Cálmate, Beta. —Las palabras de Junjin fueron firmes, mezcladas con la promesa de castigo a su Beta si no conseguía ponerse bajo control.

Siwon inclinó su cabeza.

—Le he fallado. No me acuerdo de él, pero incluso mientras estoy aquí puedo sentir a mi lobo
gruñéndome. Mi propio lobo me reprende por no cuidar de él.

—¿Me estás diciendo que tu lobo lo recuerda? —preguntó Junjin.

—No sé si lo recuerda como nuestro compañero, pero siente una conexión con él, quiere protegerlo.
—Siwon miró a su alrededor, el remordimiento llenándolo ante la evidencia de su pérdida de control
—. Voy a arreglar esto, Alfa —le dijo a Junjin.

Luna Negra (DH10)-1




Enero, 2004

El Empire, Nueva Orleáns


—Así que este es el infame Empire…

—¿Qué os está llevando tanto tiempo? —Dongjoon se detuvo al lado de Hyungsik, irritado por el retraso.

No tan alto como Hyungsik, Dongjoon era delgado y arisco. Deslizándose la mochila sobre un hombro, Hyungsik le lanzó una burla con la que le decía lo que pensaba sobre el lobo… no del todo.

—Estoy guardando mi moto, pendejo. ¿Quieres que te la guarde de modo que sepas que estará aquí cuando vuelva?

Las pupilas de Dongjoon se entrecerraron.

—Me gustaría verte intentarlo.

Antes de que Hyungsik pudiera lanzarse a él, Kevin se metió entre ellos.

—Abajo.

Dongjoon se apartó pasando de él mientras los otros cruzaban la calle.

Él y Kevin cerraron la retaguardia.

Luna Negra



Introducción



Título: Luna Negra
Autora original: Sherrilyn Kenyon
Título original: La Noche de la Luna Negra
Género: AU, FLAFF
Clasificación: Rating {NC17}
Advertencia: Ninguna
Comentario de adaptadora:

Les traigo la última entrega de la Saga, Gracias a todas las lectoras que han leído todos los libros anteriores. La historia se desarrolla en tiempos diferentes, si leyeron las historias de los katagarias anteriores lo verán. Disfruten de mis niños!!!!!!!!! 

Comadre Mew me pagará lo que me ha hecho sufrir hasta ahora en sus historias :P


Descripción:

En el mundo de los Were Hunters rige una regla muy clara: las especies no pueden mezclarse y mucho menos enamorarse. Pero desde el momento en que Ha Minwoo tocó a ese lobo herido, su corazón dejó de escuchar a su cabeza.
Kim Hyungsik no es un lobo cualquiera, es el hermano de Kevin y Dongjoon, dos de los miembros más poderosos del Omegrion: el consejo que gobierna y hace las leyes de los licántropos y el resto de weres. Sus hermanos son los representantes de los lobos y la madre de Minwoo la que representa al clan de los osos. No hay forma alguna de que puedan terminar juntos y ambos lo saben. Pero cuando la guerra llega al Empire, el local que regenta la familia de Minwoo, todos tienen que elegir el bando para el que van a luchar y los enemigos se verán obligados a forjar extrañas alianzas. Y cuando Minwoo es acusada de traicionar a su gente, su única esperanza será el único hombre que cree en él. Y Hyungsik, para salvarlo, tendrá que romper las leyes de los suyos y la fe que en él han depositado sus hermanos.



La historia original no es mía, YO SOLO LA ADAPTO, modifico nombres y una que otra situación. Créditos a su autora original y de traducción a quien corresponda.


Mio -Capítulo 3




—Solo quiero una cosa a cambio, Donghae—le susurró con voz sugerente mientras parecía olfatear su aroma.

Lo tenía rodeado, apresado como a un esclavo. Donghae se derritió por dentro, deseando someterse a su dominación y dejarse caer en sus brazos. «Pero ¿qué…?». ¿Qué querría de él?

Hyukjae se acercó aún más y Donghae se estremeció al sentir el calor que irradiaba su cuerpo. Descalzo medía metro setenta, pero él le superaba en altura, fuerza y potencia. Hyukjae agachó la cabeza y le rozó la oreja con los labios.

—Tú. En mi cama. Una noche. Es todo lo que quiero, todo lo que necesito.

Una llamarada de fuego recorrió el cuerpo entero de Donghae al oír aquel susurro seductor.

—¿Yo? —Se le escapó un chillido mientras los labios hambrientos de Hyukjae le recorrían el cuello y el anhelo le hacía estremecerse por dentro.

—Tú. Una noche —repitió bajando las manos hasta sus caderas, acariciando la bata de seda, explorando con avidez sus formas.

Donghae dejó caer la cabeza a un lado dándole vía libre para explorar la sensible piel de su cuello. Santo Dios, cuánto placer. Y qué bien olía. Cuando la boca de Hyukjae descendió hacia la suya, perdió por completo la capacidad de pensar.

Sapphire Wolf (T4)-6




—Podemos escuchar los pensamientos del otro. —La sonrisa de Hee iluminó la habitación mientras recordaba cuando escuchó la voz de Siwon en su mente por primera vez—. No creo que jamás haya deseado tanto algo como escuchar su voz en mi cabeza. —Una sola lágrima escapó de su ojo e hizo camino por su limpia y suave mejilla. Quería escucharla de nuevo. Necesitaba escucharla. Pero él no
lo dejaba entrar. Se limpió la lágrima y miró a los ojos de Ryeowook que estaban brillando
suavemente—. Entonces, ¿qué pasó después de que te reclamó?

—Fue un poco inestable al principio. Los machos Alfa son extremadamente posesivos y pueden ser
bastante intensos sobre sus parejas. Él no quería apresurar las cosas, pero todo en él le decía que
completara el vínculo y los Ritos de Sangre. Después de pasar algo más de tiempo con Yesung, estuvo claro para mí que lo amaba. Que fui hecho para amarlo. Hemos estado vinculados desde hace más de tres siglos.

—Así que, ¿es bastante seguro decir que, uhm, estas bolas de pelos no tienen problemas con el
compromiso? —bromeó Hee.

Ryeowook se rió, y el musical sonido fue un agradable descanso de la agitación rodando en el
interior de Hee. Cuanto más tiempo era incapaz de conectar con Siwon, más desesperado estaba
empezando a sentirse.

Tomó un par de respiraciones profundas, haciendo una mueca de dolor con cada una mientras
sus pulmones maltratados se expandían. Puedo hacer esto, pensó para sí,  incluso mientras
sentía la oscuridad empujando dentro de su mente donde Siwon debería estar. No sólo podía hacer
esto, sino que tenía que hacerlo. Porque no ver a Siwon de nuevo después de finalmente tener su
vínculo era inaceptable para él.

Mio -Capítulo 2




«¿Ha llamado a Boah para que busque a una sustituta?». No podía permitirse perder una semana de trabajo. Faltar dos días ya había hecho mella en su cuenta vacía. Para llegar a fin de mes necesitaba ganar propinas y nadie le daría ninguna si se quedaba en casa rascándose la barriga.

Había faltado dos días porque le había resultado totalmente imposible ir: aquel virus se lo había tragado, después lo había escupido y finalmente lo había dejado postrada en la cama. Llevaba sin ponerse tan enfermo desde que era un niño.

Exhaló un suspiro y se reclinó sobre los almohadones. Estaba exhausto y se sentía sumamente débil. En el fondo, lo que le apetecía de verdad era taparse con el edredón hasta la nariz y dormir en esa cama tan cómoda y tan calentita hasta sentirse totalmente descansado.

¿Cómo sería esa sensación? No recordaba la última vez que no se había sentido agotado. Estaba más que acostumbrado a ese estado: llevaba cuatro años durmiendo muy poco y comiendo de manera esporádica lo que podía pagar en cada momento.

Donghae levantó la mirada al oír un tintineo y vio que Hyukjae entraba en el dormitorio haciendo malabares con unos platos. Reprimió una sonrisa: ¡menos mal que se había dedicado a la informática porque como camarero no tenía mucho futuro! Llevaba un vaso en una mano y un plato en la otra, y sujetaba con gran dificultad un cuenco entre el codo y el pecho. Le entraron ganas de explicarle que le resultaría más fácil si pusiera el cuenco sobre el plato, pero se contuvo.

yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...