Seductores II- 7



A Wonwoo le costó muchísimo salir de la casa y conducir rodeado de preguntas a gritos y cámaras apuntando hacia él y disparando sus flashes. Cuando llegó, allí no le esperaba ningún periodista, pero una muchedumbre empezó a formarse a su alrededor antes de que pudiese subir las escaleras para dirigirse a su oficina.
Cuando salió de su despacho a mediodía, tuvo que abrirse camino hasta el coche, que estaba rodeado de fotógrafos pidiéndole la oportunidad de hacerle una foto en condiciones. Para cuando logró alejarse de allí, las manos le temblaban sobre el volante y tenía la frente sudorosa.
El alma se le cayó a los pies cuando, al girar hacia la granja, vio que había más paparazis esperando allí que aquella mañana. Se sintió agradecido al ver que el equipo de seguridad de Kim había despejado el sendero que llevaba hasta la casa.
Seungkwan seguía sentado en la penumbra, con las cortinas echadas. Meanie estaba dentro de la casa pero en un estado lamentable, temblando y negándose a salir de debajo de la mesa. Hyuk yacía hecho un ovillo con el perro. Wonwoo lo tomó en sus brazos y lo abrazó.
—Estoy un poco extrañado —señaló Seungkwan—, por que les preparé un café a los guardaespaldas y, ¿qué crees que averigüé?

Seductore II- 6



Mingyu contempló la vieja granja desde su helicóptero mientras sobrevolaba el tejado para aterrizar en el prado anexo. Hacía un día desapacible, húmedo y ventoso, y él se encontraba de mal humor. Había pasado un mes desde su discusión con Wonwoo en Pledis Park.
Desde entonces, Mingyu había visitado a Hyuk dos veces por semana, pero aquello le había supuesto muchas complicaciones a la hora de planificarse y sólo había conseguido pasar un par de horas con él en cada visita. Las idas y venidas a la aislada granja de Wonwoo entrañaban muchos inconvenientes e incomodidades. Sin embargo, no se había quejado en ningún momento, mostrando una cortesía y consideración propias de la paciencia de un santo.
Aun así, Wonwoo lo evitaba durante las visitas, lo que había hecho imposible un mayor entendimiento entre ambos. Al mismo tiempo, los delicados esfuerzos de sus abogados por negociar un acceso más práctico y flexible siempre se habían topado con negativas por su parte.
Pasado un mes, no había cambiado nada: sólo podía ver a su hijo en la granja y no le estaba permitido llevárselo fuera. Estaba convencido de que Wonwoo esperaba que acabara hartándose y se marchara.

Esposo Inesperado - Final



Por fin llegó aquel día que le había dado la vuelta a su vida, el día de su vigésimo quinto cumpleaños. Y prometía darle aún más quebraderos de cabeza.
Para empezar, a primeras horas de la mañana, Siwon, con una toalla atada a la cintura, había entrado en su dormitorio y se había metido en la cama con él de improviso, sin avisar. A los pocos segundos, el ama de llaves había llamado a la puerta para llevarle a Heechul el té.
La bandeja que ella dejó encima de su mesilla de noche con una resplandeciente sonrisa tenía una preciosa tetera de china muy fina con una lechera, taza y plato haciendo juego.
«Un regalo de cumpleaños del servicio», dijo tímidamente. Y salió sonriendo sin disimulos.
—¡Qué detalle tan bonito! —exclamó Heechul cuando Siwon y él se quedaron solos—. Lo que hace que me sienta aún peor, que me sienta un fraude. Deberías habérselo impedido.
—Dudo haber podido hacerlo —Siwon se encogió de hombros— Querían mostrarte su consideración, Heechul.
Siwon lo miró irónicamente.
—Y cuando diga que nos ha encontrado juntos en la cama, sí que vas a acabar sorprendiéndote.

Sapphire Wolf (T7)- 9



«Te extraño», susurró Kangin en la mente de su compañero.
Habían pasado dos semanas desde que se habían ido. Dos semanas desde que su padre había decidido ir y enfrentar al Hechicero Gura. Dos semanas desde que Hyukjae y él se habían desgarrado el uno al otro. Dos semanas lejos de su compañero y sentía como si él no lo había tocado en dos años.
«También te extraño», su voz fue una caricia contra su piel de lobo. Su dolor era un dolor físico, no solo por el vínculo entre ellos, sino porque realmente odiaba estar sin él. Era la parte más brillante de su vida, y sobre todo ahora, durante estos tiempos oscuros, necesitaba su luz más que nunca.
«Pareces mejor», le dijo Teukkie, «más en control».
«Lo estoy».
«¿La lucha ayudó?» Casi se rió del escepticismo en su voz. ¿Cómo puede un hombre explicar a una pareja que a veces necesitas golpear algo, o en su caso a alguien, para que las cosas estén bien?
«Me gustaría entenderlo yo mismo, Angel, pero sí, ayudó. Lamento haberte hecho daño. Te quiero más que a nada. Te quiero aquí conmigo, donde perteneces». Kangin imaginó que probablemente sonaba un poco como a un niño petulante, pero no le importó. Él quería a su pareja.

Marcado IV -Final

Conseguí el ascenso. Era increíble y estaba muy orgulloso de mí mismo, pero lo que lo hacía aún mejor era lo orgulloso que Kyuhyun estaba de mí. Mi trabajo no tenía por qué ser importante para él, sino porque era mucho quién era yo, el hecho de que sabía inherentemente lo importante que era para mí hizo que me enamorara aún más de él.

Nuestros horarios eran todavía locos y en todo lugar, más aún ahora que estaba tratando de aprender las diferentes partes de mi nuevo trabajo. No importaba, sin embargo, nunca pasábamos una noche separados. Mi apartamento, su apartamento, uno de nosotros siempre estaba en la cama del otro, y siempre y cuando me despertara al lado de él en la mañana, no me importaba donde ponía la cabeza en la noche.

También estaba expandiendo mis habilidades sociales. Salía con Sunny, trataba de juntarme con los jóvenes amigos de Kyuhyun en sus jueves de jovencitos por la noche siempre y cuando no tuviera problema con mi trabajo, y había terminado por tomar un café con Leeteuk cada mañana que dormía en la casa de Kyuhyun.

Disfrutaba mucho el tiempo que pasaba con todos ellos, pero había algo sobre Leeteuk, algo acerca de ver a otro joven con un trabajo desinteresado y emocionalmente agotador, que me atrajo hacia él. Ya no tenía que tratar de ser su amigo, ya era su amigo... y punto.

Sapphire Wolf (T7)- 8



—Te pedí que vinieras porque quiero hablar de cómo procederemos ahora —le dijo Junjin al rey hechicero—. No creo que sea sabio de nuestra parte solo esperar a que nuestro enemigo ataque. Creo que si queremos acabar con esto rápidamente, entonces tendremos que ser los que den el primer paso.
—¿Te das cuenta que si lo persigues, tomará represalias con rapidez? Él está muy versado en la magia negra y, básicamente, no tiene moral.
Hyukjae rió.
—Así que, básicamente es Mona con un p…
—Maldita sea, ¿qué pasa con ustedes? —gruñó Junjin—. ¿Sus compañeros no se han ido un día completo y de repente no pueden evitar decir algo sucio?
Los ojos de Jungsoo fueron de golpe hasta Junjin.
—¿Dónde están sus compañeros?
Junjin miró hacia abajo a su camisa y quitó una pelusa invisible, se aclaró la garganta, se removió en su silla y cruzó una pierna sobre la otra hasta que finalmente dobló las manos sobre su regazo y entonces encontró la mirada de Jungsoo, una vez más.
—Nuestros compañeros se han ido con la tuya, por supuesto.

Seductores II -5



A Wonwoo se le secó la boca al ver a Mingyu. Estaba a punto de decirle que Hyuk era de hecho muy alto para su edad, pero olvidó lo que estaba pensando. Mingyu, con unos vaqueros y una camiseta color café a juego con una chaqueta de lino, distrajo por completo su atención. Con el pelo negro hacia atrás, y los ojos oscuros y profundos clavados en Hyuk, Mingyu resultaba increíblemente espectacular. Dolorosamente guapo, moderno y elegante. Wonwoo se sintió de pronto acalorado, mal vestido… y terriblemente feo.
—¡Hyuk! —Wonwoo llamó al pequeño, que intentaba trepar por el gran cuadrado que formaba la mesa de café. Estaba en edad de escalar cualquier obstáculo que encontrase en su camino.
—Deja que se divierta —le dijo Mingyu con impaciencia.
«La forma de entender la paternidad de los Kim», pensó Wonwoo, y luego se regañó a sí mismo por sus prejuicios. Mingyu se agachó al otro lado de la mesa. Hyuk le dedicó una enorme sonrisa y cayó a medio camino del arreglo floral que había captado su atención. A cierta distancia, Wonwoo observó cómo se miraban. Hyuk no tenía miedo a nada y estaba lleno de vida. Mingyu sólo tuvo que abrir los brazos para que Hyuk se riese y corriera hacia él, notando que se le ofrecía alguna diversión.
—Hombre —pronunció Hyuk con aprobación, ya que en su mundo no había ninguno.

Esposo Inesperado - 9



Dentro de la casa hacía mucho más fresco que fuera. A Heechul le encantaron el color de las paredes y los suelos de mármol, las lámparas de cerámica, los libros y las plantas. Era una casa sumamente acogedora.
—Todo parece nuevo —comentó Heechul con sorpresa.
—Decidí cambiar el dormitorio —Siwon le sonrió—, ahora que ya no soy soltero. ¿Quieres ir a verlo?
—Si... si tú quieres...
El encargado los condujo al dormitorio y anunció con orgullo:
—Miré, Señor.
Las contraventanas estaban abiertas y la habitación inundada de luz. Desde el umbral de la puerta, Heechul recibió una confusa impresión de paredes claras, vaporosas cortinas, un enorme ventanal con vistas al mar y una cama enorme.
Pero al adentrarse en la habitación, se quedó casi sin respiración al ver lo que había encima de un montón de cojines en la cama.
Era el retrato, sin marco, de un joven tumbado de costado con la cabeza sobre los brazos y una pierna algo alzada. Era un joven hermoso. Un joven de ojos rasgados y oscuros, piel color oliva. Estaba desnudo.

Marcado IV - 18



—Kyuhyun, Dios mío… —mordió su labio y sostuvo mi rostro—. Lo siento.
Levante una ceja y extendí la mano para rodear mis dedos alrededor de sus delicadas muñecas.
—Lo sé, recibí tu mensaje. Solo que no sé por qué lo sientes.
Me parpadeó y pude verla luchando por poner sus pensamientos en orden. Ella era bonita cuando era torpe.
—Principalmente lamento no tener fe en ti y en mi. Realmente me amo, Kyuhyun. Creo que tomo mirar a la vida vivida solo y con miedo para darme cuenta. Pienso que tal vez tú pateaste la puerta y no pude esconderlo más. Tengo mucho por ofrecer y merezco totalmente la mejor clase de amor. Merezco tu amor.
Todas las piezas de mi Corazón que pensé que él se llevó, él se acercó y las puso de nuevo, en un modo más resistente.
—Mereces cualquier cosa y todo lo que siempre quisiste, Sungmin.
Me sonrió pero era de un modo tímido y casi nervioso.
—La cosa que he querido por más tiempo aparte de convertirme en enfermero has sido… tú. Estoy tan jodidamente enamorado de ti, Cho Kyuhyun.

Sapphire Wolf (T7)- 7



—Madre de la perla y padre del vino, es bueno estar en casa —gimió Teukkie mientras caía hacia atrás en el sofá en casa de su madre.
No podía dejar de tomar consuelo en los cojines familiares, la forma en que se hundían por los años de uso, y los olores que desbloqueaban recuerdos de una infancia llena de amor. Por unos pocos minutos mientras absorbía la familiaridad y la normalidad del momento, apartó sus preocupaciones. Apartó sus preocupaciones sobre Kangin, su miedo por el niño no nacido de Hee, la ansiedad causada por la disputa entre Hee y Siwon, y el dolor que su madre estaba sintiendo.
Estaba tomando la elección de vivir en el ahora, porque muy pronto, el pasado y el futuro se vendría abajo en ella.
—Maldito infierno —gritó Hee—. Me acabo de dar cuenta de algo: voy  a tener que ver a mis padres. Y a pesar que pueden no siempre ser las herramientas más afiladas del cobertizo, no hay manera que puedan pasar por alto esto —dijo mientras se frotaba su estómago cada vez más grande.      
Y solo con eso, Teukkie fue sacado de su breve respiro de vuelta al caos en que se había convertido su vida.
—Eso significa que voy a tener que ver a mis padres también —casi susurró Donghae  mientras sus ojos se abrían de par en par—. Ellos no saben que estoy casado, o acoplado o…

Seductores II -4



Sometido a la ráfaga sensual de su mirada descarada, Wonwoo se puso rígido. Le aterrorizaba la calidez que le invadía y el cosquilleo en su entrepierna. Sus tiernos pezones se endurecieron y cruzó los brazos nervioso.
—Entonces, si has estado pensando…
—Todavía necesito algunas respuestas. Al menos, sé realista —el brillo de sus ojos se ocultaba ahora bajo las pestañas y su forma de hablar era terriblemente suave—. ¿Qué hombre no lo haría en mi lugar?
Wonwoo no quería ser realista, sólo quería que se volviese a marchar y dejase de amenazar la tranquilidad mental que tanto le había costado conseguir.
—¿Qué es lo que tengo que hacer para que entres en razón?
—Debes tener en cuenta las dos partes de la ecuación. Sé la persona razonable que yo sé que eres. Es absurdo que me pidas que me vaya sin saber siquiera si el niño es mío o no —su voz tranquila y pausada ejercía sobre Minwoo un efecto casi hipnótico.
—Sí, pero… —Wonwoo apretó los labios por miedo a precipitarse en sus palabras—. No es tan sencillo.

Esposo Inesperado - 8



Heechul se acomodó en el asiento posterior en gélido silencio, esperando a que Siwon se sentara a su lado.
Cuando el coche se puso en marcha, le dijo con voz ronca:
—¿Por qué no me habías dicho nada? ¿Cómo has podido hacerme una cosa así? ¿Tanto miedo le tienes a tu padre?
—¿A mi padre? —le espetó él—. Se trata de tu abuelo y de este engaño que se te ocurrió a ti solo. Me pediste que te ayudara y eso es lo que he hecho. ¿Y qué se te ocurre decir?: «Mi piso, mi cepillo de dientes, mi pijama». Así no vas a engañar a nadie, querido Heechul. Tanto tu abuelo como mi padre deben de estar preguntándose qué clase de matrimonio es éste.
Siwon sacudió la cabeza.
—A mi padre, por supuesto, no le importa nada. Pero tu abuelo es harina de otro costal. Así que, por ahora, recuerda que lo de ser mi esposo fue idea tuya. A menos que esa casa haya dejado de importarte —Siwon hizo una pausa—. Si es así, confiésale todo a tu abuelo y acabemos con esta farsa.
Heechul se encogió en el rincón del asiento del coche. Y contuvo el impulso de taparse los oídos.

Marcado IV -17



No vi a Sungmin por el resto de la semana. La tienda cerró con los principios del negocio de primavera, Jjong pescó un resfriado y estuvo fuera por un par de días, y la condición de Shindong se estuvo deteriorando rápidamente.
Se puso tan mal al final de la semana que quería moverlo de nuevo al hospital, pero se negó a ir. No podía retener nada y su enfermera hablaba acerca de una sonda de alimentación. Fue estresante, me sentía como si estuviera caminando sobre un lago que estaba congelado y yo estaba esperando a caer debido a mi peso.
En algún momento durante la semana, mientras veía como se ponía más y más enfermo delante de mis ojos, mi cerebro comenzó automáticamente a cambiar de Shindong a papá en mi cabeza. Era mi papá que estaba muriendo, mi papá que estaba tratando de hacerse el valiente frente a mí, mi papá que me miraba con tristes y bígaros ojos, porque sabía que nuestro tiempo juntos se hacía más y más corto.
No quería que nadie lo viera así. Todo el grupo trató de venir, pero Shindong no estaba a la altura. Tuve que posponer los planes que tenía con Sungmin en la noche del sábado, lo que me fastidió, pero estaba donde tenía que estar. Cuando alguien llamó a la puerta un par de horas más tarde, casi me desmayo cuando la abrí y vi que era él. No me preguntó si podía entrar, me entregó una especie de bebida de proteína y me dijo que viera si Shindong podía tomarla. Me dijo que le había pedido al personal de oncología una solución que pudiera contener a la sonda de alimentación por un tiempo más largo.

Sapphire Wolf (T7)-6



—No tienes que hacer esto —dijo Sora a su hijo mientras caminaban hacia el avión fletado de la propiedad de la manada Coreana.
—La vida no se trata de cosas que hay o no que hacer; se trata de hacer lo que debemos, tratar de hacer lo correcto. No hay ninguna razón para que vayas a casa por tu cuenta, sobre todo después de todo lo que todos hemos pasado. — Teukkie no abandonó su ritmo mientras caminaba junto a Sora. Sabía que su madre trataba de convencerlo de no ir, pero esa no era una opción y quería que ella lo supiera.
—Gracias. —Sora se acercó y apretó la mano de Teukkie y contuvo las lágrimas que habían intentado caer desde que había llegado a la mansión Coreana. No se sentía bien derrumbarse delante de su hijo. Ella era la madre, el adulto maduro, por lo que apartó el dolor y la decepción, y plasmó en su cara que las  cosas  estaban bien.
Los compañeros de cada una de las parejas fueron los únicos autorizados a acompañarles al aeropuerto, de modo que Junjin, Siwon, Kangin, Hyukjae, Yunho y Henry estaban de pie con sus compañeros mientras Dambi y Hongki estaban un poco a un lado, dando a las parejas un poco de espacio.
Teukkie no tenía ninguna intención de llevar a cabo la despedida con su compañero. Ellos se habían dicho todo lo que necesitaban y si se quedaba demasiado tiempo él acabaría iniciando su asalto de razones de por qué no debería ir sin él.

Sewductores II -3



—¿Existe alguna otra persona que piense que es el padre de Hyuk? — preguntó Mingyu, calculando que aquélla sería la única razón que explicaría su deseo de hacerlo desaparecer.
La tensión en el ceño de Wonwoo empezaba a causarle dolor. Enfrentarse a Kim Mingyu en ese estado era como sentirse azotado por una tormenta.
—Por supuesto que no —dijo, mostrando con un gesto su desagrado—. Esa sugerencia resulta demasiado sórdida.
—Los jóvenes y mujeres hacen cosas así continuamente —le dijo Mingyu con cinismo, sin convencerse del todo de su negativa. Había visto cómo Jenny manipulaba a Wonwoo y sabía que aunque era tremendamente listo, podía resultar muy crédulo cuando había sentimientos de por medio
—Si no es ése el problema, ahórrame esos discursos teatrales sobre olvidar que he venido. ¿Podrás?
—Sólo por esta vez te pido que dejes de pensar en ti mismo. Si eso te resulta teatral, lo siento, pero es lo que hay —con mano nerviosa, Wonwoo se apartó el pelo de la cara.
Mingyu le dedicó una mirada dura como el granito.

Esposo Innesperado - 7



Heechul con perplejidad miró el teléfono que tenía en la mano.
—Abuelo... ¿Qué vas a venir a la galería String para la inauguración de la exposición?
—Naturalmente —respondió Kim Sooman con un deje de impaciencia—. ¿Es que Siwon no te ha dicho que me ha invitado?
«No, no me ha dicho nada», quiso gritar Heechul. «No me ha dicho nada porque no hemos estado en contacto desde... desde...».
—Además, quiero ver con mis propios ojos cómo les sienta la vida de casados. Como puedes imaginar, me importa y mucho.
En otras palabras, no había salido del todo del apuro, pensó Heechul. Su abuelo le estaba advirtiendo, disimuladamente, que, además de las pinturas, quería verlos enamorados.
—Sí, claro. Y me alegro de que vengas —Heechul hizo una pausa—. Me encantará ir a cenar a tu club. ¿Te parece bien a las seis y media?
—Perfecto, querido —dijo su abuelo, y colgó. Heechul se dejó caer en el sofá. ¿Qué iba a hacer ahora? Después de un día horroroso en el trabajo, aquello.

The Other




Trampa de Amor




My Cowboy- Capítulo 1


Estaba desesperado. El corazón le latía en la garganta y tenia las palmas de las manos sudorosas. Ojala tuviera otra opción, pero el tiempo se estaba agotando y no había mas que una solución.

Kim Donghae suspiró apoyado contra la pared del granero. Se sentía como si tuviera una furiosa estampida en el estomago, y cerro los ojos para contar lentamente hasta diez, intentando tranquilizarse. El olor a heno y a caballos le recordó la razón por la que estaba allí y le ayudo a no dar media vuelta y salir corriendo. En una de las casillas que quedaban a sus espaldas, una yegua relincho sacando la cabeza por encima de la puerta en busca de una caricia y con una sonrisa Donghae le rasco la nariz.
Fuera del granero, solo a unos metros de distancia, estaba la posible solución de todos los problemas Lee Hyukjae.
Volvió a cerrar los ojos para intentar encontrar otro posible arreglo, alguna posibilidad que hubiera pasado por alto, lo que fuera… pero no había nada en lo que no hubiera pensado ya, nada que ya no hubiese intentado hacer. Aquel paso, por drástico y arriesgado que fuese era su última esperanza.

Marcado (T4) -16



Me eché hacia atrás y hurgué en su mesita de noche en busca de la caja de condones que sabía estaba allí. Mientras estaba todo estirado él usó sus pulgares para trazar la línea de mis costillas a cada lado de mi cuerpo. Él siempre era tan reverente, tan sensorial, cuando ponía sus manos sobre  mí.
Antes de cubrirlo, me tomé unos minutos para jugar con su nuevo equipamiento. El penacho que dejaba, la forma en que se ponía caliente contra su piel, prometía un buen momento de seguro. Quería ponerlo en mi boca,  pero él me detuvo con las manos en mi   cabello.
—No esta vez.
Levanté una ceja mientras él tomaba el condón de mi mano y se cubría a sí mismo. Me instó más arriba en mis rodillas y me colocó sobre la punta de su tensa erección. Tuve la impresión de que él estaba tratando de hacer un punto.
Estaba tratando de mostrarme algo que simplemente no aceptaría ni escucharía, pero había dos que estábamos involucrados en esto y quería asegurarme de que él también supiera lo mucho que sentía por él. Simplemente estaba confundido acerca de esto y tratando de ser realista, manteniendo todo en un cajón con el que estaba cómodo.

Esposo Inesperado 6


Siwon lo abrazó y en él, temblando, se mezclaron el miedo y la ira mientras le ponía las manos en el pecho en un intento por apartarlo.
—Suéltame. Déjame, maldito seas. ¡Jamás te perdonaré esto! ¡Jamás!
Tal y como había temido, Siwon controló sus esfuerzos por liberarse con facilidad: le sujetó las muñecas con una mano a su espalda y, con la otra mano le alzó la barKangina para poseerle la boca.
Y no sólo la boca, pensó Heechul sintiéndose humillado, ya que unos botones de la blusa del pijama se le habían desabrochado con el forcejeo, exponiendo su pecho a la mirada de él.

—Eres precioso —susurró Siwon con voz ronca mientras lo atraía hacia sí.
Y entonces lo besó.
Fue un beso peligroso. Peligroso porque los labios de Siwon eran cálidos e increíblemente tiernos al acariciarlo, decididos a excitarlo. Cosa que era lo último que había esperado... y querido.
Heechul quería que fuera duro con él, incluso cruel, para poder odiarlo y mostrarle su desdén.

Sapphire Wolf (T7) - 5



—Entre —anunció Jungsoo por encima del hombro al oír el golpe. Estaba tratando de sonar civilizado, pero no había nada en él por el momento que se sintiera civilizado. Sora se había ido. Él la había enviado lejos. Y ahora estaba aquí, al borde de una especie de guerra con su hermano y sin su compañera para decirle que todo iría bien.
—Se ha ido —dijo Jongkook, el general de su ejército, hablando en voz baja detrás de él.
Jungsoo se tragó el comentario sarcástico que estaba en la punta de su lengua. No era culpa de Jongkook que Sora se hubiera ido. No era culpa de nadie, sino la suya propia.
—Lo sé, pero gracias por decírmelo.
Él sabía que Jongkook quería decir algo más, pero éste no estaba seguro de si era un momento adecuado para hacerlo.
—¿Qué pasa Jongkook? —preguntó Jungsoo finalmente mientras un fuerte suspiro escapaba de sus pulmones.
—¿Era realmente necesario enviarla lejos? —Jongkook estaba tratando de mantener la acusación lejos de su voz, pero él quería que su Rey fuera plenamente consciente de la desaprobación—. No es solo usted quien siente su ausencia.

Marcado IV- 15



Me bajé del auto y llamé al lugar de la pizza en que me conocían por mi nombre. Ordené la cena y estaba colocando mi teléfono en mi bolsillo trasero cuando una voz suave jurando y agitándose con fuerza captó mi atención.
Mi vecino estaba de pie afuera de la puerta cerrada de su apartamento pateando firmemente con la punta de su estileto que era más rosado que el rosa. Estaba usando un lenguaje que me hizo sonreír, y fruncir el ceño cuando le pregunté si podía ayudarlo con cualquier cosa. Apartó su cabello de la cara y colocó sus manos sobre sus caderas. Hoy se veía como si hubiera venido de algún tipo de show de moda, menos la expresión contrariada en su cara.
—Siempre cierro la puerta detrás de mí. Cualquier puerta, todas las puertas, lo cual normalmente es una buena cosa, pero no cuando mis llaves están al otro lado. Dejé mi celular en el auto, y estaba a solo dos pasos en el pasillo cuando me di cuenta de que no agarré mis malditas llaves. —Gimió dramáticamente y levantó sus manos—. Así que mi teléfono está atascado en mi auto y mis llaves están atascadas en mi apartamento y soy un idiota.
Levanté una ceja hacia él porque gruñó y empujó su mano a través de su cabello.
—Puedes usar mi teléfono para llamar al dueño, aunque podría ser más rápido que llamaras a un cerrajero. Pedí una pizza, puedes venir y pasar el rato por un minuto.

Seductores II- 2



Wonwoo miró por la ventana y se quedó paralizado al ver que una reluciente limusina le tapaba la vista del jardín. ¿Quién podía ser sino Kim Mingyu?
Reaccionó y corrió al salón a recoger los juguetes que había tirados por la alfombra. El timbre sonó justo antes de que se incorporase. Se echó un vistazo en el espejo y al ver el miedo en sus ojos  y su extrema palidez se frotó las mejillas para devolverles el color mientras el pánico le hacía pensar a toda velocidad.
¿Qué demonios hacía allí Mingyu? ¿Cómo había averiguado dónde vivía?
¿Y por qué razón querría saberlo? El timbre volvió a sonar, estridente y amenazante. Recordaba muy bien la impaciencia de los Kim.
Empujado por un mal presentimiento, Wonwoo abrió la puerta.
—Sorpresa… sorpresa… —Mingyu arrastró suavemente las palabras.
Desconcertado por la suavidad de aquel saludo, Wonwoo se quedó inmóvil, reacción que él aprovechó para atravesar el umbral. Se volvió a mirarlo mientras su mano caía del pomo de la puerta. Sintió como un pulso diminuto comenzaba a latir a toda velocidad en su garganta impidiéndole hablar.

yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...