Tu Mi Destino- Capítulo 15



—Cuando me miras así, no me importa aunque no estés escuchando.

—¿Escuchando qué? —preguntó, oyendo el zumbido aturdido en su voz.

—Dije que tengo una sorpresa para ti. ¿Quieres verla?

Contra su voluntad, sus ojos se deslizaron abajo por su cuerpo hasta su entrepierna.

Kyuhyun dejó escapar un ladrido de risa, y alzó su barbilla con la mano.

—Me matas, cariño. Vamos.

 Kyuhyun entrelazó sus dedos con los suyos y le condujo por un camino sinuoso entre los árboles. Salieron a un claro, y desde ahí, pudo ver la pared de atrás del edificio principal y una febril actividad en el área de ejercicio.

El se tensó y Kyuhyun apretó su mano.

—Nadie aquí va a lastimarte. Es sólo que todos están ansiosos por conocer al chico nueva, eso es todo.

Aspiró profundamente y exhaló con fuerza. No estaba acostumbrado a estar alrededor de tantas personas, especialmente no unos tan voluminosos y poderosos como los hombres sin camisa haciendo pesas a sólo algunos metros de distancia.

Esclavo de Amor- Capítulo 16



Al llegar con el desayuno al porche, Hyukjae estaba sentado en una silla de mimbre, tenía la cabeza apoyada en el respaldo y los ojos cerrados; su expresión era serena.

Como no quería molestarlo, retrocedió.

— ¿Sabes que todo mi cuerpo percibe tu presencia? Todos mis sentidos son conscientes de tu proximidad —le confesó mientras abría los ojos y le miraba con un deseo abrasador.

— No lo sabía —dijo Donghae nervioso, ofreciéndole el cuenco. Él lo cogió, pero no volvió a hablar del tema. Comenzó a comer en silencio.

Absorbiendo el calor del sol, Hyukjae escuchaba la suave brisa y se recreaba con la presencia cercana y relajante de Donghae.

Se había despertado al amanecer para contemplar, a través de las ventanas, la salida del sol. Y había pasado una hora disfrutando del contacto del cuerpo de Donghae.

Él lo tentaba de un modo que jamás había experimentado. Por un solo minuto se permitió barajar la posibilidad de permanecer en esta época.

Esclavo de Amor- Capítulo 15



— ¿Qué le ocurrió a Yoochun? —siguió Donghae. Quería que siguiera hablando mientras estuviese de humor—. ¿Murió en combate?

Él soltó una amarga carcajada.

— No. Cuando fuimos lo suficientemente mayores para unirnos al ejército, lo mantuve a salvo en el campo de batalla. Había prometido a Junsu y a su familia que no permitiría que le ocurriese nada.

Donghae sintió el corazón de Hyukjae latiendo con rapidez bajo sus brazos.

— Según pasaban los años, pronunciaban mi nombre con temor y respeto. Mis victorias se convertían en leyenda, y se contaban una y otra vez. Cuando regresaba a Thimaria, acababa durmiendo en la calle, o en la cama de cualquier joven que me abriese la puerta para pasar la noche. De ese modo pasaba el tiempo hasta que regresaba a la batalla.

A Donghae le escocían los ojos por las lágrimas; la voz de Hyukjae estaba cargada de dolor. ¿Cómo podían haberlo tratado así?

— ¿Qué pasó para que cambiaran las cosas? —le preguntó. Él suspiró.

— Una noche, mientras buscaba un lugar para dormir, me tropecé con ellos dos en la calle. Estaban abrazándose como dos enamorados. Me disculpé rápidamente pero, al alejarme, escuché a Yoochun hablando con Junsu.

Tu Mi Destino- Capítulo 14



Sungmin necesitaba poner un poco de espacio entre ellos y pensar. Yaciendo aquí, mirando su cuerpo, no estaba ayudando nada para aclarar su cabeza. Su presencia no le dejaba lugar al pensamiento racional. Era demasiado grande. Ocupaba toda su atención cuando estaba cerca de él.

—Voy a dar un paseo —dijo Sungmin.

Se sentó en el borde de la cama, dejando que su mareada cabeza se asentase.

Él se trasladó a sentarse a su lado y aunque tenía la mandíbula apretada, su tono era suave.

—Me gustaría que te quedaras.

—¿Así nos podremos frustrar más? —¿Así podría ver que había estado planeando matarle?— No, gracias.

—Actuamos demasiado rápido, eso es todo. Sólo necesitas algo de tiempo para ver que puedes confiar en mí.

Tragó saliva, tratando de aliviar la estrechez en su garganta.

—Kyuhyun, tengo que ser completamente honesto. No hay forma de que nunca vaya a confiar en nadie lo suficiente como para dejar que rebusque dentro de mi cabeza.

Una Pasión En El Olvido- Capítulo Final




—No me lo puedo creer —susurró—. De todos los hombres que hay en el mundo, tenía que quedarme embarazado del que más odio. El único hombre al que juré destruir.

—Sungmin, por favor…

—¡No! —exclamó, apartándose de él—. ¡No me toques!

Con eso, se dirigió hacia la puerta. Se sentía desesperado por poder salir del dormitorio, lejos de las suaves sábanas que aún seguían calientes por la pasión que ambos habían compartido, lejos del aroma de Kyuhyun. Lejos de la inocente y explosiva alegría que había experimentado unos instantes antes.

—No te culpo —susurró él a sus espaldas. Estas palabras lo obligaron a detenerse—. Cuando descubrí que eras el hijo de Sanghyun, ya sabía que me había enamorado de ti. Por eso te traje aquí a la isla. Pensaba que si te mantenía a salvo, alejado del mundo, no recordarías. Recé para que no lo hicieras nunca.

Sungmin se dio la vuelta para mirarlo.

—¿Para castigarme? —le preguntó. Sentía ganas de gritar—. ¿Para reclamar tu victoria?

—Para ser tu esposo —admitió él—. Para amarte durante el resto de mi vida.

Esclavo de Amor- Capítulo 14



— ¿Que no puedes qué?

— Tener un orgasmo.

Donghae abrió la boca, atónito. ¿Estaría diciendo la verdad? De todos modos, sus ojos tenían una expresión mortalmente seria.

— Es parte de la maldición —le explicó él—. Puedo darte placer, pero si me tocas justo ahora, sólo conseguirás hacerme más daño.

Sufriendo por él, le acarició la mejilla

— Entonces, ¿por qué…?

— Porque quería hacerlo.

No lo creía. No. Apartó la mano de su rostro y miró hacia otro lado.

— Querrás decir porque tenías que hacerlo. Por la maldición también, ¿no es cierto?

Tu Mi Destino- Capítulo 13



—Confíe o no en ti, no quiero ser el que te mate, Kyuhyun.

—No lo harás. Incluso si decides irte, mi muerte no será culpa tuya. Me dirijo a ella rápidamente de todos modos. Cualquier tiempo adicional que me des es un don, que extiende mi vida natural.

Simplemente no estaba listo para que se acabara todavía. No, si Sungmin podía ser parte de ella.

Con mucha suerte y paciencia, vería la verdad y nunca se quitaría la luceria. Encontraría una manera de hacer que eso sucediera.



Kyuhyun se levantó de la cama y se arrodilló junto a él. Se quitó la camisa sobre su cabeza, desenvainó la espada e hizo un pequeño corte sobre su corazón.

—Mi vida por la tuya, Sungmin. Por siempre.

Negó con la cabeza, frunciendo el ceño.

—No me gusta eso. Hazme un juramento diferente.

Un lado de su boca se ladeó en una sonrisa.

—Lo siento, cariño. Ese es el que recibes. Es tu turno.

Esclavo de Amor- Capítulo 13



Estaban sentados en el suelo, comiendo delante del sofá, mientras veían Matrix.

Donghae observó a Hyukjae mientras permanecía unos minutos atento a la película. Aun distraído, comía de forma impecable. Donghae estaba todo cubierto de manchas de salsa, y él ni siquiera había dejado caer una sola gota.

— Enséñame cómo haces eso —le dijo. Hyukjae lo miró con curiosidad.

— ¿El qué?

— Lo que haces con la cuchara. Me estás poniendo de los nervios. No consigo que mis tallarines acaben enrollados en el tenedor; se quedan todos sueltos y me pongo perdido.

—Claro, y no queremos que nos rodeen un montón de tallarines gigantes que lo dejen todo hecho un asco, ¿verdad?

Donghae se rió porque sabía que no hablaba precisamente de los tallarines.

— A ver, ¿cómo lo haces?

Tu Mi Destino- Capítulo 12



Sungmin testeó la teoría de Leeteuk de que tendría la libertad de deambular alrededor, haciéndolo. Después de un tenso almuerzo que apenas se las había arreglado para tragar, Sungmin dejó la suite de Leeteuk y paseó por los corredores hasta que se encontró de nuevo en la habitación del gran cielo raso de vidrio.

Para ahora, la multitud había disminuido y el área de la TV estaba vacía de niños. Unas pocas personas estaban sentadas a las mesas, bebiendo café o terminando sus almuerzos. La señorita Sora estaba sentada en un extremo del área comedor, leyendo un gigante y antiguo libro. Cada pocos segundos, alzaba la mirada a los niños cercanos, como si necesitara mantener un ojo sobre ellos. Después de enseñar en una escuela pública por tanto tiempo, Sungmin suponía que era más un hábito que cualquier otra cosa.

Apartó una silla y se sentó en diagonal a la mujer. La señorita Sora alzó la mirada y le sonrió ampliamente.

—¡Sungmini! Cómo que vivo y respiro. ¿Qué estás haciendo aquí?

Se la veía más joven, como si algunas de las arrugas hubieran sido borradas de su rostro. Aún usaba el mismo chillón lápiz labial y el rodete blanco sobre su cabeza estaba aún sostenido en su lugar por un amarillo lápiz número dos, pero todo lo demás acerca de ella parecía… diferente.

—¿Recuerda a esos groseros hombres del restaurante? —preguntó Sungmin.

Esclavo de Amor- Capítulo 12



Hyukjae y Donghae ayudaron a Judith a desmontar el puestecillo ambulante y a guardarlo todo en el jeep, antes de regresar a casa sorteando el tráfico típico de un viernes por la noche.

— Has estado muy callado —le dijo Donghae mientras se detenía en un semáforo en rojo.

Observó cómo la mirada de Hyukjae seguía el movimiento de los automóviles que pasaban junto a ellos. Parecía perdido, como alguien que se debatiera en el límite entre la fantasía y la realidad.

— No sé qué decir —respondió tras una breve pausa.

— Dime cómo te sientes.

— ¿Sobre qué?

Donghae se rió.

Una Pasión En El Olvido- Capítulo 9



¿Cómo era posible que todo se hubiera estropeado de aquella manera? Un mes después. Sungmin aún no podía comprenderlo. Vivía en una maravillosa casa en Corea. Estaba casado con el hombre más guapo sobre la faz de la tierra y estaba esperando un hijo suyo. Era feliz, se encontraba sano y vivía en medio de un lujo maravilloso bajo la luz del sol y con un ejército de criados que atendían todos sus deseos.

Sin embargo, no era feliz. Kyuhyun llevaba un mes sin tocarlo. Estaba solo en su matrimonio. Solo en la vida.

Nunca antes se había sentido tan triste. Aunque vivían en la misma casa, llevaban vidas separadas. Kyuhyun trabajaba por las noches en su despacho e iba a la cama sólo cuando él ya estaba dormido o, peor aún, dormía en el sofá de su despacho. 
Sungmin se pasaba los días decorando la habitación del bebé, organizando la casa y acudiendo a las citas medicas.

Había hecho todo lo que se le había ocurrido para recuperar el interés de Kyuhyun. Se vestía con ropa bonita, había aprendido a cocinar sus platos favoritos, leía periódicos para aprender cosas sobre los temas que a él le interesaban…

Todo en vano.

Esclavo de Amor- Capítulo 11



Hyukjae miró fijamente a Donghae; su mente no paraba de darle vueltas a lo que acababa de decir.

¿Sería cierto? ¿Podría atreverse a creerlo? ¿A tener esperanza después de tanto tiempo…?

— ¿Tu segundo apellido es Alexander? —repitió, incrédulo.

— Sí —le respondió él, con una sonrisa alentadora en el rostro. Cupido observó a su hermano con una mirada severa.

— ¿Ya habéis intimado vosotros dos?

— No —contestó Hyukjae—. Aún no —y pensar que había estado enfadado por eso…

Donghae había evitado que cometiera el tercer error más grande de su vida. En ese momento lo besaría. Una sonrisa iluminó el rostro de Cupido.

— Bueno, maldita sea mi suerte… En fin, mejor no nombrar la cuerda en casa del ahorcado… Nunca he conocido a un joven que pudiese estar cerca de ti más de diez minutos sin arrojarse a…

Esclavo de Amor- Capítulo 10



Donghae permaneció muy quieto mientras se esforzaba por digerir todo lo que había visto y oído.

— No puede haber sido real. Debe ser algún tipo de alucinación.

Hyukjae suspiró con cansancio.

— Me gustaría poder creerlo.

— ¡Dios Santo!, ¡ése era Cupido! —exclamó Judith extasiada—. Cupido. El real. Ese querubín tan mono que tiene poder sobre los corazones.

Hyukjae resopló.

— Cupido es cualquier cosa menos «mono». Y con respecto a los corazones, se encarga de destrozarlos.

— Pero hace que la gente se enamore.

Tu Mi Destino- Capítulo 11



Sungmin tomó nota mental de la ubicación de la fortaleza de los Centinelas, sólo por si acaso necesitara darles a los Defensores direcciones vía telefónica. Estaba establecida en la parte posterior de un área aislada y espesamente arbolada de Missouri, bien apartada de las carreteras principales. Unas pocas casas y granjas salpicaban los alrededores, pero la fortaleza en sí misma estaba escudada de la vista por espesas franjas de follaje.

La residencia tenía una alta pared de piedra todo a su alrededor. O por lo menos pensaba que probablemente la tenía. No podía ver la pared completa por todos los árboles que la ocultaban, así como también al monumental edificio y a las pequeñas estructuras. El edificio principal estaba hecho de una piedra rosada grisácea que brillaba bajo la luz del sol del verano tardío. Enormes alas, como brazos dando la bienvenida, se extendían por cada lado de la estructura.

Incluso aunque era un refugio para demonios y asesinos, era aún así un lugar hermoso.

Pasaron por una puerta de hierro que se abrió para Kyuhyun sólo después de que se identificara y hablara con alguien por el otro lado de la cámara.

Kyuhyun aparcó en uno, y por un segundo, Sungmin creyó que su fiel Honda estaba junto a ellos. Por supuesto, su fiel Honda estaba aún en la tienda en Texas, pero dirigió una mirada nostálgica de añoranza por su amado conjunto de ruedas. Su hogar.

—Parece que ellos nos ganaron aquí —dijo Kyuhyun.

Una Pasión En El Olvido- Capítulo 8



Kyuhyun observó a Sungmin una vez más y vio que estaba en un puesto, examinando una selección de patucos de bebé.

Seguramente, Sanghyun le habría contado a su hijo que él era inocente.

Habría insistido en que él era a quien se había hecho daño. Le habría dicho que Kyuhyun se había enfrentado a él para sacar beneficio. 
Sanghyun había sido un hombre encantador y manipulador. Así, había conseguido estafarles a sus propios accionistas diez millones de dólares antes de que una fuente interna hubiera alertado a Kyuhyun del robo.

¿Le creería Sungmin si el le contaba la verdad?

Sí, seguramente le perdonaría. Comenzó a caminar hacia él y, entonces, se detuvo en seco. Tendría que contarle la verdad sobre unos padres a los que idolatraba, dos personas que ya estaban muertas. Eso le rompería el corazón.

¿Importaría eso? Si recuperaba la memoria, lo odiaría de todos modos. No importaba si le contaba la verdad o no. Después de pasarse una vida amando a su padre, ninguna explicación que pudiera darle podría competir con eso. Justa o injustamente, Sungmin le odiaría por haber destruido sus recuerdos más queridos.

Esclavo de Amor- Capítulo 9



¿Cómo podía explicárselo? Shang le hizo mucho daño aquella noche. No había tenido compasión alguna por sus sentimientos. Él le pidió que se detuviera pero no lo hizo.

«Mira, se supone que la primera vez duele —le dijo Shang— ¡Joder!, deja de llorar; acabaré en un minuto y podrás marcharte.»

Para cuando Shang acabó, se sentía tan humillado y herido que se pasó días enteros llorando.

— ¿Donghae? —la voz de Hyukjae se introdujo entre el torbellino de sus pensamientos— ¿Qué te sucede?

Le costó mucho trabajo contener las lágrimas. Pero no lloraría; no en público. No así. No permitiría que nadie sintiera lástima por ella.

— No es nada —le contestó.

En busca de una bocanada de aire fresco, aunque fuese más ardiente y espeso que el vapor, se dirigió a la puerta lateral del centro comercial que llevaba al Moonwalk. Hyukjae y Judith lo siguieron.

— Donghae, ¿qué es lo que te hace llorar? —le preguntó Hyukjae.

— Shang —susurró Judith.

Tu Mi Destino- Capítulo 10



Wook luchó contra el tirón de los monstruos, forjando su mente en contra de la fuerza de su llamada. No quería estar con ellos esta noche. Quería estar con Yesung, en su verdadero cuerpo, y deleitarse con la intrepidez que le rodeaba.

Cuando estaba cerca de él, no tenía miedo. Se sentía casi normal. Yesung le confortaba con su presencia.

Pero Yesung no quería estar con él. Lo había dejado claro cuando lo dejó mientras dormía. Se había ido y no había regresado.

La idea de dormir solo lo asustó. Necesitaba que le librase de los monstruos que tiraban de él para separarlo mientras dormía. ¿Por qué no entendía eso?

Heechul entró en la habitación de Wook mientras terminaba de pasarse un gran suéter por su cabeza. El suéter que le había pedido prestado a Heechul colgaba bajo sus huesudas caderas y se agrupaba alrededor de sus tobillos, pero le ayudaba a mantenerse caliente contra el aire acondicionado moderadamente frío del interior de la SM.

Se sentía más fuerte, hambriento por primera vez de lo que sintió en años. Ya había tomado tres comidas desde que se había despertado, pero estaba listo para otra.

—Es la hora —dijo Heechul—. Los hombres te están esperando.

Esclavo de Amor- Capítulo 8



— Sí lo harás —dijo Hyukjae dejando zanjado el tema, mientras Judith pagaba el negligé rojo.

Usó un tono tan arrogante y confiado, que Donghae imaginó que no estaba acostumbrado a que le desafiaran.

— ¿Te has equivocado alguna vez? —le preguntó.

La diversión desapareció de su rostro, y de nuevo ocultó sus sentimientos tras una especie de velo. Esa mirada escondía algo, estaba seguro. Algo muy doloroso, teniendo en cuenta la repentina tensión de su cuerpo.

No volvió a pronunciar una sola palabra hasta que Judith regresó y le dio la bolsa.

— Vaya —comentó—, se me ocurre que podíais poner unas velas, una música tranquila y…

— Judith —la  interrumpió Donghae—, te agradezco mucho lo que intentas hacer, pero en lugar de hablar de mí, ¿podemos ocuparnos de Hyukjae?

Judith lo miró de reojo.

— Claro, ¿le pasa algo?

— ¿Sabes cómo sacarlo del libro? De forma permanente, quiero decir.

yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...