Pasión Nocturna (DH8)- Final



Siwon estaba soñando con Heechul. Él reía en su oído mientras se recostaba debajo de su cuerpo.
Parecía tan real, que casi podía jurar que sentía su mano en la espalda… No, ahora estaba enterrada en su cabello.
Y entonces Heechul la apartó y la pasó por su cadera, bajándola por su muslo hasta que lo acunó en su palma.
Gruñendo de placer, Siwon abrió los ojos para comprender que no era un sueño.
Heechul estaba recostado a su lado.
—Hola, bebé —le susurró.
—¿Qué estás haciendo aquí? —le preguntó, incapaz de creer que fuera real. Heechul levantó la mano para mostrarle su anillo.
—¿Cómo podría estar en otro sitio, dada la brusquedad de tu nota?
—Mi nota no era brusca.
Heechul resopló.
—Casi pensé que me estabas diciendo que me largara.
—¿Por qué pensarías eso? Te dejé mi anillo.
—¿Regalo consuelo?
Él puso los ojos en blanco ante su mal concebido razonamiento.
—No, ese anillo significa que el portador vale su peso en oro. ¿Ves? —lo levantó para que pudiese ver la cresta real.
Una lenta sonrisa apareció en el rostro de Heechul.
—¿Valgo mi peso en oro?
Siwon corrió la mano de él hacia sus labios, para poder besarlo.
—Vales mucho más que eso para mí.
Los ojos de Heechul se empañaron mientras lo miraba.
—Te amo, Siwon.
Él jamás había escuchado algo más precioso.
—También te amo, Heechul —dijo, con la voz poco clara.
La sonrisa de Heechul se ensanchó mientras lo atraía a sus brazos y lo besaba hasta dejarlo sin sentido.
Literalmente se arrancó la camisa antes de menearse debajo de él. Siwon rió ante su impaciencia, antes de besarlo suavemente en los labios.
No estaba de humor para eso. Hicieron el amor furiosamente, como si no fueran a tener otra oportunidad.
Más tarde, se quedaron recostados uno en brazos del otro. Siwon jugaba con su cabello mientras contemplaba su futuro.
—¿Y qué hacemos ahora, Heechul?
—¿Qué quieres decir?
—¿Cómo hacemos que esta relación funcione? Kangin aún me odia, y todavía soy un Dark Hunter.
—Bueno  —dijo él entrecortadamente—.  Roma no se  construyó  en  un día. Daremos un paso por vez.
Poco imaginaba que esos pasos serían horrorosos.

El primero llegó la noche del funeral de su hermana. Siwon había llevado a Heechul a casa de sus padres, sólo para pararse en seco al darse cuenta de que Kangin, Leeteuk, y Hyukjae y su esposo Donghae, estaban allí.
La hostilidad era tangible.
Heechul había tenido la intención de quedarse con Siwon todo el tiempo, pero su tía Zelda lo había apartado.
—Regresaré enseguida.
Siwon asintió mientras iba a buscar algo para tomar. Hyukjae y Kangin lo arrinconaron en la cocina.
Suspiró cansadamente mientras esperaba que empezaran. Dejó su vaso. Kangin lo tomó del brazo.
Siwon estaba a punto de dejarlo allí cuando se dio cuenta de que Kangin no estaba lastimándolo. Él retiró la manga de Siwon para que las cicatrices de su ejecución quedaran visibles.
—Leeteuk me contó cómo moriste —dijo Kangin con calma—. No le creí — Siwon apartó su brazo de un tirón.
Sin una palabra, comenzó a alejarse de los dos griegos. Pero la voz de Kangin lo detuvo.
—Mira, Siwon, tengo que decirte que literalmente me mata cada vez que te veo. ¿Puedes imaginar cómo sería si yo tuviese el rostro del hombre que te clavó a la madera?
Siwon rió amargamente ante la ironía.
—En realidad, sé exactamente cómo te sientes, General. Cada vez que uso un espejo, también veo el rostro de mi ejecutor.
Podía no haber sido gemelo de sus hermanos, pero se parecían lo suficiente como para que le resultara difícil mirarse en un espejo sin verlos a ellos reflejados. Por eso es que estaba tan condenadamente agradecido que los Dark Hunters no tuvieran reflejo a menos que quisieran.
Kangin asintió.
—Sí, supongo que sí. Creo que no puedo sobornarte o intimidarte para que te alejes de Heechul, ¿verdad?
—No.
—Entonces tendremos que ser adultos, porque amo demasiado a mi esposo como para lastimarlo. Ya ha perdido a una hermana, y lo mataría perder a otro. Necesita a Heechul —Kangin hizo una mueca como si le doliera, y estiró su mano hacia Siwon—. ¿Tregua?
Siwon estrechó su mano.
—Tregua.
Kangin lo soltó, y entonces Hyukjae ofreció su mano.
—Que conste —dijo Kangin antes de irse—, que esto sólo nos convierte en amigables enemigos.
Heechul entró a la cocina mientras ellos salían.
—¿Estás bien?
Él asintió.
—Kangin decidió madurar.
Él parecía impresionado.
—Supongo que la inmortalidad le sienta bien.
—Aparentemente.

Los dos se quedaron en el funeral hasta después de la medianoche, cuando decidieron ir a casa en el apaleado Mini Cooper de Heechul.
Cuando entraron al vestíbulo encontraron a Shin esperándolos.
—¿Qué haces aquí? —preguntó Siwon.
Shin se adelantó y le entregó una pequeña caja a Heechul.
—Sabes qué hacer. Sólo recuerda: no lo dejes caer.
Heechul estaba espantado mientras sostenía la caja que contenía el alma de Siwon en sus manos.
—Habíamos decidido que no haríamos esto. No quiero quitarle su inmortalidad a Siwon.
Shin respiró lenta y cansadamente.
—Hasta que le regreses su alma, Artemisa es su dueña. ¿Es eso lo que quieres?
—No.
—Bueno, ahí tienes —Shin se dirigió a la puerta, y luego se detuvo para mirarlos—. A propósito, Hee, ahora también eres inmortal.
—¿Qué?
Él se encogió de hombros.
—No sería justo para Leeteuk perderte cuando envejezcas.
—Pero, ¿cómo? ¿Cómo puedo ser inmortal?
Shin le sonrió irónicamente.
—Es la voluntad de los dioses. No la cuestiones.
Salió por la puerta y los dejó a solas.
—Wow —susurró Heechul mientras abría la caja, para encontrarse con un medallón azul oscuro dentro.
Vibraba con colores remolinantes que hacían parecer que tenía vida. Cerró la caja.
—Bueno, ¿qué piensas?
—Pienso que será mejor que no la dejes caer.
Heechul estuvo de acuerdo.

Más tarde esa noche, cuando llegó el momento de estacarlo para poder regresarle su alma, comprendió algo horrible.
No podía hacerlo.

—Vamos, Heechul —dijo Siwon mientras se sentaba en la cama, con el torso desnudo—. Me apuñalaste la noche que nos conocimos, sin siquiera parpadear.
—Sí, pero entonces eras una bolsa de basura.
—Creo que estoy ofendido.
Las semanas pasaron, mientras Heechul intentaba apuñalar a Siwon, sólo para encontrarse fracasando.
Incluso intentó simular que era un Daimon.
No funcionó. Sin mencionar el pequeño hecho que aún tenían que descubrir qué drenaría sus poderes de Dark Hunter y hacerlo humano el tiempo suficiente como para que muriera.
Entonces entraron en una extraña especie de paz. Heechul se mudó de su apartamento sobre la tienda, y lo dejó para que Gunhee lo cuidara mientras vivía con Siwon.
Se quedaban juntos de día, y cazaban juntos por la noche.
Aún no podía estacarlo pero, al menos, una tarde, se había enterado de cuál era su debilidad: lastimarlo. Había sido un accidente. Siwon se había estirado para tomar su espada y le había dado un codazo accidentalmente. Durante dos horas, sus ojos habían sido azules.
Aún así, aún no era capaz de apuñalarlo. Era imposible.
Hasta ese verano. Mientras Heechul y Siwon estaban en medio del entrenamiento en el gimnasio del primer piso, lo inimaginable sucedió.
En un instante, estaba jugando con Siwon; al siguiente, Kangin había entrado violentamente por la puerta, haciendo que Siwon le golpeara por accidente. Sus ojos se habían vuelto instantáneamente azules. Antes de comprender lo que Kangin estaba haciendo, él tomó a Siwon, lo arrojó al suelo, y pasó una estaca a través de su corazón y la dejó allí.
—¿Qué estás haciendo? —chilló Heechul, corriendo hacia él. Leeteuk lo atrapó.
—Está bien, Hee —le dijo, poniéndole la caja que contenía el alma de Siwon en sus manos por la fuerza—. Como sigues diciéndome que no puedes hacer esto, Kangin se ofreció como voluntario.
—Sí, y con un poco de suerte, podrías dejarlo caer —dijo  Kangin maliciosamente.
Heechul lo miró con el ceño fruncido.
Tomando la caja de manos de su hermano, se arrodilló junto a Won.
Siwon estaba en el suelo, jadeando. Su rostro estaba cubierto de sudor mientras sangraba por su herida.
—No te preocupes, bebé. No lo dejaré caer.
Él le ofreció una sonrisa temblorosa.
—Confío en ti.
El corazón de Heechul se detuvo mientras él moría. Tomando el medallón, gritó mientras quemaba su palma. Heechul se mordió el labio y colocó el medallón sobre la marca de arco y flecha en la cadera de Siwon.
—Shh —dijo Leeteuk tranquilizadoramente—. Dejará de quemar en un segundo. Sólo piensa en Siwon.
Lo hizo, aunque cada parte cuerda de él quería soltar el ardiente trozo de lava que quemaba su mano.
Finalmente, comenzó a enfriarse. Siwon no se movía. Heechul comenzó a entrar en pánico.
—Está bien —dijo Leeteuk—. Sólo toma un minuto.
Y luego de algunos más, Siwon abrió sus ojos, que eran ahora de un permanente y vibrante tono de azul. Sus colmillos habían desaparecido por completo.
Heechul sonrió al verlo, excesivamente agradecido porque él estaba vivo.
—No te ves bien.
Siwon acunó su rostro.
—Yo creo que te ves hermoso.
—Yo creo que debería estacarlo otra vez sólo por añadidura —dijo Kangin.
—Yo creo que debemos irnos —dijo Leeteuk mientras se levantaba del suelo, tomó a su esposo e hizo una salida rápida.
—Oh, vamos —se quejó Kangin desde el pasillo—. Por favor, ¿no puedo estacarlo una vez más?
—Hola, humano —dijo Heechul antes de besarlo.
Entonces se apartó con un grito, mientras se percataba de algo.
El era inmortal. Ahora que Siwon ya no era Dark Hunter, no lo era.
—Oh, dios mío —susurró—. ¿Qué hemos hecho?
Pero la respuesta era simple. Lo habían condenado a vivir la eternidad sin él.


Cuatro meses más tarde Monte Olimpo

—Tu hermano se casa hoy, Yesung.
Yesung giró en la cama para encontrar a su esposo, Ryeowook, mirándolo fijamente con esa turbada y penetrante expresión, que parecía reservar exclusivamente para cada ocasión en que él lo irritaba.
—Y debería importarme porque…
—Es toda la familia que te queda, y me gustaría que mi bebé conociera a ambos lados de su familia.
Yesung regresó a su lado de la cama mientras pretendía ignorarlo. Pero eso era imposible. En primer lugar, lo amaba demasiado como para darle poca importancia y, en segundo lugar, Ryeowook no sería ignorado.
Sintió su mano en el cabello, mientras jugaba con él.
—¿Yesung?
No le respondió. Luego que Shin había regresado a la tierra con Heechul, él había pasado mucho tiempo en el Peradomatio, o Salón del Pasado.
Ryeowook estaba domesticándolo, después de todo. Estar casado con él le había enseñado mucho acerca de la justicia.
No, eso no era exactamente cierto. Estar con él estaba haciendo al pasado soportable de algún modo, y ahora que estaba embarazado…
No quería que su hijo naciera en un mundo en el que el perdón fuera un concepto ajeno.
—No es fácil dejar ir al pasado, Ryeowook —dijo finalmente. El le besó el hombro, provocándole temblores.
—Lo sé, Príncipe Azul.
Lo hizo girar hasta quedar de espaldas y se inclinó sobre él.
Yesung colocó su mano sobre su hinchado vientre, donde sintió a su bebé moviéndose alborotadamente contra su palma. Su hijo nacería en sólo dos semanas.
—Entonces, ¿necesito vestirme para una boda? —preguntó Ryeowook con calma.
—Te prefiero desnudo, en mi cama.
—¿Esa es tu respuesta final?


—¿Qué sucede, Heechul?
Heechul giró para ver a Siwon detrás de él. Se veía completamente elegante en su atavío negro pero, en realidad, siempre se veía de ese modo. A diferencia de él, Siwon jamás había tenido un solo cabello fuera de lugar.
Su cuerpo se entibió instantáneamente ante su cercanía de él.
—No pasa nada —le mintió, sin querer que él supiera cuánto lamentaba todo el conflicto que le había causado.
Y cómo realmente, un día, sería su muerte. Su corazón sufrió.
—¿Ya estás listo para cambiarme por otro? —preguntó juguetonamente, aunque su garganta estaba realmente anudada.
—Jamás, pero hay una gran cantidad de gente en el patio preguntándose dónde está el joven novio.
El frunció la nariz.
—Está bien, allí voy —dijo, tomándolo del brazo.
Él lo condujo hacia afuera, hacia la multitud de locura que era su familia.
En la iglesia, había optado por no dividir a los invitados en los bancos, por temor a que fuera dolorosamente evidente que no había nadie del lado del novio.
Incluso cuatro de los siete padrinos habían tenido que ser prestados de su lado.
Sólo Shin, Gilbert, y Kennie habían estado allí para Siwon.
Aún Heechul estaba enojado por que ningún otro Dark Hunter hubiese asistido o enviado buenos deseos.
Kangin, Hyukjae y Kyuhyun se habían ofrecido amablemente a completar el número de padrinos del novio, para que sus hermanas no quedaran sin escoltas. Por eso, los querría siempre.
Su tía lo agarró y apartó de Siwon.
Heechul prometió su regreso antes de que los jovenes y mujeres lo rodearan.
Siwon sonrió ante la imagen, y luego fue a buscar una copa de champagne para cada uno. Las risas resonaban en el patio, en medio de las cuerdas de la orquesta que habían contratado. Heechul había querido que tocara una banda gótica, pero su madre se había puesto firme, y había insistido para que Heechul no hiciese sangrar los oídos de los invitados.
Él se dio vuelta para mirar a la multitud, que reía y hablaba entre sí. Shin, Kennie, e incluso Gilbert estaban parados a un costado junto a los demás padrinos. Él añoraba ir y unírseles, pero sabía por experiencia que aunque Kangin y Hyukjae toleraban su presencia, no les agradaba.
Qué extraño que se sintiera ajeno incluso en su propia boda.
Tomando un sorbo de champagne, escudriñó la multitud hasta que encontró  a su esposo junto a sus hermanos.
Sonrió ante la imagen de Heechul, que estaba absolutamente adorable con su cabello castaño. Alguien había colocado una corona de flores en su cabello, y lo había rociado con brillo. Parecía una etérea hada que había venido a seducirlo.
El director de la boda se acercó a él para informarle que la cena estaba lista para ser servida.
Inclinando su cabeza, Siwon fue a decirle a Heechul que necesitaban que todos se sentaran.
Reclamó a su novio y lo condujo a la mesa nupcial.
Heechul rió en voz baja mientras se sentaba en la silla y lo acomodaban sin ningún incidente. Finalmente estaba aprendiendo cómo hacer esto correctamente. La primera vez que Siwon había apartado la silla para ella, había sido  un completo fiasco.
Él tomó el asiento a su derecha mientras que Gilbert se sentaba a su izquierda. Los mozos comenzaron a traer platos, y llenar las copas de vino.
Siwon tomó su mano y le besó los nudillos. La sensación de esos labios en su mano envió fuego a través de Heechul. Jamás había sabido que un ser humano podía estar tan feliz y aterrado al mismo tiempo.
Una vez que todos habían sido servidos, Gilbert se puso de pie para hacer un brindis.
La banda cesó de tocar.
Gilbert abrió la boca, pero antes que pudiera hablar una voz profunda y acentuada lo interrumpió.
—Sé que es típico que el padrino brinde por la pareja, pero creo que Gilbert podría perdonarme por usurpar su lugar por un minuto.
Heechul tuvo que forzarse a cerrar la boca mientras Yesung se aproximaba a su mesa de entre medio de la multitud.
Siwon apretó su mano con más fuerza.
Yesung se detuvo directamente frente a ellos, y miró significativamente a su hermano.
—Las bodas siempre han sido una cosa fascinante para mí —dijo, con la voz resonante—. Un momento en que dos personas se miran a los ojos y prometen que jamás permitirán que nada ni nadie los separe. Provenientes de dos familias, se unen  para  formar  una  rama  separada  que  los  vincula  con  sus  raíces.  Es  un momento en que dos familias se unen, debido a los corazones de dos personas. Un momento en que la enemistad y los malos sentimientos deberían ser olvidados, junto con el pasado —la mirada de Yesung pasó por la mesa, deteniéndose en cada uno de los actuales y antiguos Dark Hunters—. Las bodas significan un nuevo comienzo. Después de todo, ningún humano jamás ha sido capaz de elegir a su familia… Dios sabe que yo nunca hubiese elegido a la mía —le ofreció una peculiar sonrisa a Siwon—. Pero como dice la obra romana que una vez escribió Terence, “De muchos malos comienzos se han formado grandes amistades” —Yesung levantó su copa hacia ellos—. Por mi hermano, Siwon, y su esposo Heechul. Que ambos lleguen a disfrutar de la felicidad que he conocido con mi propio esposo. Y que se entreguen uno al otro el amor que ambos merecen.
Heechul no estaba seguro de cuál de ellos estaba más aturdido por las palabras de Yesung. Su familia, inconsciente de lo inesperado que era este momento, ovacionó el brindis de Yesung.
Conmocionados más allá del entendimiento, ninguno de ellos dio un sorbo. Yesung caminó hacia ellos y les brindó una sonrisa irónica, y casi burlona.
—Se supone que beban ahora.
Lo hicieron, pero Siwon se ahogó con su  trago. Olisqueó la copa sospechosamente.
—¿Me envenenaste? —le preguntó a Yesung en un tono bajo. Yesung se frotó la ceja con el dedo del medio.
—No, Siwon. Ni siquiera yo soy tan cruel.
—Es néctar —dijo la voz de un joven.
Heechul giró para ver a un hermoso joven embarazado detrás de él. El joven colocó una suave mano en su hombro y lo besó en la mejilla.
—Soy el esposo de Yesung, Ryeowook —dijo en un tono bajo que sólo ellos dos pudieron escuchar. Giró hacia Siwon y también le dio un beso—. No podíamos decidir qué darles como regalo de bodas, así que Yesung pensó que el mejor regalo sería la eternidad juntos.
—Sí —dijo Yesung malhumoradamente—. Esa es la versión educada de lo que dije.
Ryeowook le dirigió una mirada alegremente perversa antes de volver a observarlos.
—Felicitaciones a ambos —le alcanzó a Siwon un pequeño recipiente de algo que le recordaba a Heechul a Jell-O—. Es ambrosía —le dijo a Siwon—. Cómela y serás capaz de devolverle los relámpagos a Yesung cada vez que juegue contigo.
—¡Hey! —dijo Yesung bruscamente—. Nunca acordé eso.
Ryeowook lo miró con inocencia.
—De este modo, asumo que jugarás más bondadosamente con tu hermano en el futuro.
Heechul rió.
—Saben, creo que me agrada mi nuevo cuñado.
Ryeowook los dejó para unirse a Yesung, quien se veía muy poco complacido.
—No te preocupes, cariño, me aseguraré que tengas muchas otras cosas en que ocupar tu tiempo antes que acosar a Siwon.
La mirada de Yesung se suavizó en el instante en que él lo tocó.
Siwon se puso de pie y dio la vuelta a la mesa hasta pararse ante Ryeowook y Yesung.
—Gracias —dijo.
Estiró la mano hacia Yesung, quien la observó desconfiadamente. Heechul esperaba a medias que se alejara.
No lo hizo.
Tomando la mano de Siwon, lo palmeó en la espalda y luego lo soltó.
—Tu  esposo  te  ama  más  de  lo  que  crees.  Es un terrible gato salvaje. Probablemente debería haberte regalado algo blindado.
Siwon se rió.
—Espero que se queden a la recepción.
—Nos encantaría —dijo Ryeowook antes de que Yesung pudiera responder.
Los dos se sentaron a la mesa con Judith y Jinhyuk mientras que Siwon regresaba junto a él.
—Bon appetit —dijo Heechul mientras le alcanzaba la ambrosía. Él la comió y luego lo besó—. Mmm —susurró Heechul, inhalando el aroma de su esposo—. Pedicabo ego vos et irrumabo.
“Tengo la intención de manejarte de arriba abajo”. Siwon sonrió.
—Y yo tengo la intención de permitírtelo —su rostro se puso serio mientras la miraba fijamente, y su amor por él lo consumía—. Amo, Heechul


Un año más tarde

—Miren al pobre bastardo —dijo Kangin, sentado dentro del Café con Leeteuk, Donghae, Hyukjae, Jinhyuk, y Judith, cenando—. Debería haber sido bueno y matarlo cuando tuve la oportunidad.
A través de la puerta a su derecha, podían ver a Heechul y Siwon caminando hacia la Catedral.
Los jovenes y mujeres fruncieron el ceño mientras los observaban.
—¿Qué? —preguntó Leeteuk.
—Está tan arruinado —dijo Jinhyuk antes de tomar un trago de su cerveza—. Me pregunto qué hizo mal esta vez.
—¿De qué están hablando? —preguntó Judith.
—Conozco ese modo de caminar a lo Park —dijo Kangin, sacudiendo la cabeza—. Es el andar de “no obtendrás nada esta noche, compañero, así que ni siquiera preguntes”.
—Oh, sí, demonios —concordó Jinhyuk—. Alégrate de haberte casado con el único Park que no te torturará en un arranque de furia, Kangin. Realmente tuviste suerte.
—¿Discúlpame? —Judith miró enojada a su esposo. Kangin rió.
—Si fuera tú, no me reiría —dijo Leeteuk, con la voz tensa mientras veía a Heechul decirle a Siwon con el gesto “no te estoy escuchando”.
Entonces continuó caminando delante de él, mientras Siwon lo seguía y hacía gestos para apaciguarlo.
—Realmente odio ese andar —murmuró Jinhyuk.
—Creo que ambos verán ese andar de cerca esta noche —dijo Hyukjae antes de extraer su teléfono Nextel. Buscó entre los nombres antes de presionar el botón para hablar—. Hey, ¿Kennie? ¿Dónde estás?
—En el Café de 102. ¿Por qué?
—¿Puedes ver a Siwon y Heechul? Parece que se dirigen hacia ti.
Kennie hizo un sonido de asco.
—Sí, necesitan conseguir una habitación.
—¿Perdón? —preguntó Hyukjae.
—Están besándose como dos adolescentes calientes.
Leeteuk y Judith miraron indignados y furiosos a sus maridos.
—De ningún modo.
Kangin se levantó y salió corriendo por la puerta, con Jinhyuk sólo un paso detrás de él.
Caminó toda la calle para ver a Heechul y Siwon detenidos frente a la tienda de Judith.
Efectivamente, estaban besuqueándose.
—¿Discúlpenme? —dijo Jinhyuk—. Saben, hay leyes de decencia pública aquí.
Heechul se burló de Jinhyuk.
—¿Recuerdas lo que te sucedió la última vez que intentaste decirle a un Park cuáles eran las leyes de la ciudad?
Jinhyuk se puso pálido.
Heechul rió y luego regresó a lo que había estado haciendo antes que Jinhyuk lo interrumpiera tan rudamente.


FIN


3 comentarios:

  1. Jodido y Perfecto Final!!!!
    Hfdghhjfddhjjfd
    El SiChul es amor!
    Puede con todo!!! Es lo máximo!!!!
    Gracias por esta adaptación!!!!
    La ame! Me encanto!
    Siwonshis tuvo al fin todo lo bueno que merecía!!!
    Me mato el discurso de Yeye!!!
    Y Wukkie~ asdfghkkkhffdssdh
    Hermoso!
    No se, que historia!!!
    Hermosa, Intensa, Pasional, de todo!!! De todo!!!
    Ya dije Gracias!??
    GRACIAS!!!! Lo Ame!!! <3

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  2. Ameeeee esta saga era la que estaba esperando JDJDJDJD Yeye y Wookie todos la chula tan hermoso *^* estuvo genial espero más <3

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  3. Último capítulo......perfecto capítulo....*0*
    Hee fue por él....❤.❤
    Que bonito que Siwon haya encontrado la felicidad.
    Kangin y Hyuk haciendo las pases con Siwon...o al menos la tregua,no por ellos,sino por Hee,Teuk y la familia.
    Todo muy bonito con el SiChul.....pero yo ame con la vida el discurso de Yesung en el brindis para los novios....y el regalo que le dieron....T^T
    Mi Yesung no es malo....❤
    El clan Park....Kangin y Jin de chismosos....jajajajaja
    El mejor de todos los caps.....*0*

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...