Sapphire Wolf (T4)-20




Hee se asomó alrededor Siwon, sonriendo, y con voz nerviosa dijo:

—Sorpresa.

—Estabas muerto. —La voz de Teukkie estaba temblando de ira, y esperanza también—. Los vi
hacerte RCP y luego vi a Siwon… él no dejaba que nadie se acercara a ti. Estabas jodidamente
muerto, HEECHUL KIM, ¿y todo lo que puedes decir es   “sorpresa”?

Hee trató de empujar a Siwon fuera del camino, pero este no se movió.

—Siwon, no van a hacerme daño. Muévete.

Siwon se hizo a un lado para dejar a Hee estar junto a él. Cuando se puso delante de él para acercarse
a Teukkie, envolvió un fuerte brazo alrededor de su cintura y lo atrajo hacia su pecho.

Hee puso los ojos en blanco, pero se centró en Teukkie.

—Voy a explicarlo todo, Teuk, te lo prometo. Por favor, no te enojes.

—Estábamos sentados allí, doloridos por la pena. Trataba de encontrar la manera de decirle a tus
padres que su niño está muerto y luego escuchamos a Siwon riendo. Infierno sí estoy enojado.
¿Cuándo ibas a dejarnos unir a tu pequeña fiesta de “oigan, estoy vivo”?

Donghae caminó alrededor de Teukkie y miró a Hee. No dijo nada, se limitó a mirar. Hee no se movió. Teukkie estaba enojado, no quería a Donghae enojado con él también.

—¿Estás bien? —preguntó Donghae en voz baja.

—Sí, Donghae Lee, estoy bien.

—No pude salvarte. —Los ojos de Donghae bajaron al suelo, su vergüenza evidente en la caída de
sus hombros.

Hee trató de salir de las garras de Siwon, pero todavía no le dejaría moverse. Lo miró y, en su vínculo, gruñó:

«Déjame ir a él, Siwi. Necesita saber que está bien, que estoy  bien».

«Si alguno de los hombres te toca, perderán sus vidas».

Hee dejó escapar un suspiro exasperado y finalmente lo dejó ir.

Mientras se acercaba a Donghae, miró a su alrededor, haciendo contacto visual con cada hombre
mientras hablaba.

—Atención compradores, sólo un breve anuncio, hombre lobo demente en el pasillo tres. Aquellos
con una abundancia de testosterona, no toquen la mercancía y podrán salir de aquí intactos.

Teukkie trató de no reírse porque estaba enojado, pero era imposible no hacerlo porque la expresión
del rostro de Siwon no tenía precio.

—Debidamente señalado. —Junjin habló por el grupo.

Hee envolvió sus brazos alrededor de Donghae y sintió a su dulce y tierno amigo comenzar a llorar.

—Lo intenté, Heechul. Lo intenté, pero no respirabas.

—No es tu culpa Donghae. No eres Dios. Sanador o no, no puedes arreglar todo. Y tienes que estar
de acuerdo con eso o te vas a volver loco.

Teukkie se acercó y abrazó a los dos chicos.

—Sabes que el mundo se ha ido al infierno en una cesta de mano cuando Heechul Kim es la voz
de la razón.

Todo el mundo se echó a reír vacilantemente, sin querer perturbar la frágil paz que había descendido.
Hee se apartó y miró a sus dos amigos.

—Así que, ¿has dejado de estar enojado conmigo, Teukkie? ¿Y has terminado de culparte por mi
prematura muerte, Donghae?

—Claro, ¿por qué no? —bromeó Teukkie.

—Estoy bien —añadió Donghae.

—Está bien, curiosos, tenemos mucho que discutir. Convocaré una junta de manada. —Hee miró a
Junjin con un guiño—. Sin ánimo de ofender, A, pero tengo que encargarme de esta. Sé algo, y todos
ustedes necesitan saberlo.

Junjin miró a Siwon.

—¿Estás bien?

Él asintió.

—Me disculpo por lo de antes.

—No es necesario, Beta. Tu compañero te había sido arrebatado, y en un cruel giro del destino no
se te permitió seguirlo porque los Ritos de Sangre no se completaron. Yo habría hecho lo que fuera
necesario.

—Y por eso siempre estaré en deuda contigo. —Siwon desnudó su cuello para Junjin en sumisión y
respeto.

Hee se giró hacia su compañero, le tomó la mano, y empezó a tirar de él en dirección a la puerta.

—¿Está bien, todo el mundo? Convoquemos esta reunión a orden.

Siwon puso los ojos en blanco.

—Me alegra ver que el casi morir no te quitó tu inteligencia.

—¿Crees honestamente que una pequeña cosa como morir podría ajustar mi actitud? —Hee le sonrió,
mientras todos tomaban asiento en la gran sala junto al fuego.

—Espero que no, porque entonces no serías mi Heechul. No quiero a alguien que siempre hace lo
que le dicen, o simplemente sigue la corriente. ¿Dónde está la diversión en eso?

Hee puso los ojos en blanco y esta vez habló en voz alta.

—¿Dónde de hecho estaría la diversión en dar órdenes a una persona quien simplemente estaría de
acuerdo con todos tus caprichos? —Cuando trató de sentarse junto a Siwon en el sofá, él pasó un
brazo por su cintura y lo atrajo hacia su regazo. Lo fulminó con la mirada—. ¿Es esto realmente
necesario?

—Acabas de morir, princesa. Si parezco un poco pegajoso contigo puedes jodidamente superarlo.

Para sorpresa de Siwon, en lugar de dar alguna replica inteligente su compañero se echó a reír.

—Oh, hombre, esta vida va a ser divertida. —Hee se limpió las lágrimas mientras todo el mundo lo
miraba, todavía en estado de shock porque estuviera allí ante ellos… vivo, riendo.

Hee se acomodó en el regazo de Siwon para estar frente a todos, y luego miró a Dam, quien estaba de
pie cerca del fuego, con un tranquilo Changmin, sentado en la chimenea.

—Les puedo contar todo, ¿verdad?

—Como si pudiera detenerte —resopló Dam. Hee asintió.

—Buen punto. Muy bien. Así que, como todos ustedes saben, morí.

—Gracias por la aclaración, Hee, no estábamos muy seguros ya que no tenías pulso y no respirabas — espetó Teukkie, todavía irritado porque su amigo hubiera estado en la habitación toqueteando a su
compañero mientras él y los otros se habían sentado en la sala principal sufriendo.

—¿Terminaste? —preguntó Hee, alzando las cejas a su amigo. Cuando Teukkie le hizo un gesto, Hee
continuó—. Así que, me desperté en esta habitación blanca. Esa es la única manera que conozco para
describirla. Era blanca y llena de luz. Miraba alrededor, pensando que ya no estaba en Kansas, cuando de repente aparece nuestra amigable vecina Fae.

Todos en la sala se volvieron para mirar a Dam, que miraba hacia ellos con aburrimiento.

—Así que le pregunto a Dam si estoy muerto y ella, tan amablemente y con fines de aclaración, dijo
que sí… oh, y no. Le pregunté si me podía traer de vuelta. Dijo que sí, pero eso significaría que
interferiríamos con el destino. Yo cortésmente… —Justo en ese momento Dam resopló al oír las
palabras de Hee, una vez más. Hee miró a la Fae—. Fui educado en comparación con mis estándares
habituales. De todos modos, le dije básicamente que acababa de ser acoplado a un hombre lobo
caliente y realmente no había hecho planes para morir virgen. Así que aquí estamos.

Siwon había empezado a ahogarse ante las palabras de Hee y, para sorpresa de todos, se volvía color
rojo brillante.

Donghae sacudía la cabeza a su amigo mientras Teukkie cubría la risa que iba a explotar en cualquier
momento.

—Le informé que podría haber consecuencias por desafiar el destino — agregó Dam.

—¿Podría? —preguntó Junjin. Dam puso los ojos en blanco.

—Podría ser, habrá, lo que sea —dijo con un gesto desdeñoso de la mano.

Siwon se levantó, casi tirando a Hee de su regazo, después de haber pasado la vergüenza de los
comentarios embarazosos de su compañero.

—¿Qué quieres decir con: “podría haber consecuencias”? —Miró a Hee—. No mencionaste esto.

Sus palabras fueron un gruñido.

—Bueno, estabas un poco ocupado jadeando sobre mi cuello, si mal no recuerdo —gruñó Hee.

—Heechul —dijo a modo de advertencia.

—Hee, ahora tal vez no sea el mejor momento para poner a prueba su carencia de sentido del humor
—señaló Junjin.

Hee asintió en señal de dar marcha atrás, una cosa rara para Hee.

—¿Qué tipo de consecuencias? —preguntó Siwon a Dam.

Dam se apartó de la pared contra la que había estado apoyada y se acercó al grupo.

—Honestamente, no lo sé. Tampoco sé cuándo podrían volver por él. Podría ser mañana o dentro de un siglo.

—Bieeeeeen. Bueno, eso apesta —murmuró Teukkie.


—Oye, estaba muerto, Teukkie. No estaba listo para estar muerto. Trataré con las Parcas cuando se metan conmigo.

Teukkie levantó las manos.

—No estoy diciendo que no habría hecho lo mismo en tu lugar, Hee, sólo digo que es una mierda no saber cuándo podrían dejar caer una bomba en tu cabeza.

Siwon gruñó al oír las palabras de Teukkie, que a su vez tuvo a Kangin gruñendo.

—¡BASTA! —Junjin se levantó y la habitación pulsó con su poder—. Siwon, Kangin, cálmense. Ahora. —Junjin volvió sus ojos a los chicos—. Ustedes, van a, por una vez, tener en cuenta que su sarcasmo y comentarios sabelotodo podrían posiblemente provocar una pelea entre sus compañeros. Todo el mundo se siente posesivo y protector en estos momentos. Siwon está fuera de la escala en esos departamentos. Así que cuiden sus lenguas.

Hee, Donghae, y Teukkie miraron a Junjin y realmente vieron a su Alfa. Era la primera vez que realmente los reprendía y no era un sentimiento con el cual alguno de ellos estuviera familiarizado.

—Pido disculpas, Beta. —Teukkie miró a Siwon, pero se aseguró de no hacer contacto visual—. No quise faltarle al respeto a tu compañero.


Las palabras de Teukkie tuvieron el efecto deseado. Siwon se relajó visiblemente.

—¿Y ahora qué hacemos? —Hongki habló desde su posición en el extremo del brazo del sofá.

—Ahora tenemos que traer a Ryeowook y Yesung aquí. —Cuando habló, Dam observó a Junjin y
Hyesung por su reacción—. Donghae tiene que aprender lo que puede hacer. Lo necesitaremos y a
Ryeowook para desterrar a la bruja.

—No —dijo Hyukjae. Él había estado de pie en silencio contra la pared detrás de la silla que Donghae ocupaba.

—¿Qué? —espetó Dam al joven lobo.

—Donghae y Ryeowook no pueden hacer esto solos —gruñó Hyukjae.


—¿Y por qué exactamente dices eso, lobo? ¿Porque has vivido por siglos y conoces el pasado, conoces la historia de las brujas y sanadores? —Las palabras de Dam fueron una bofetada en la cara de Hyukjae. Él no dio marcha atrás.

—No, hada, no soy viejo, no estoy bien informado sobre el pasado. Pero voy a donde vaya Donghae. No hay negociación en eso.

Era muy evidente para todos que Dam estaba perdiendo la paciencia con Hyukjae. Si Hyukjae lo notó, o bien no lo demostró o no le importaba.

Donghae se puso de pie y fue hacia Hyukjae. Lo empujó y él a regañadientes cedió. Después de que Dam rompió el contacto visual, él volvió su atención a Donghae.

—¿Qué estás haciendo? —le preguntó.

—Te estoy protegiendo. Te lo dije… te protegeré pase lo que pase.

—¿Por qué, Hyukjae? No lo entiendo. No soy nadie excepto el sanador de tu manada. ¿Por qué todo este repentino interés en mí? —Donghae se estaba poniendo nervioso bajo su intensa mirada—. No puedo dejarme atrapar por sentimientos que no van a ningún lugar. Por favor… —Antes de que pudiera continuar, Hyukjae lo atrajo hacia sí y se inclinó hacia abajo para que su boca estuviera junto a su oído.


—Yo tampoco lo entiendo, y lo siento si mi comportamiento es angustiante para ti. Pero no voy a
ninguna parte. A donde sea que vayas, ojos marrones, yo voy. Necesito que confíes en mí, Donghae
mío, no voy a hacerte daño.

Donghae se apartó bruscamente, como si lo hubiera abofeteado.

—Pero de eso se trata, Hyukjae. Lo harás. Me harás daño. No querrás, pero un día encontrarás a tu
verdadero compañero y seré pateado a la acera. No soy tan fuerte como Hee y Teukkie. Una vez que
entrego mi corazón, no puedo recuperarlo. Una vez que se ha roto, está más allá de la reparación.
¿Cómo puedes esperar a que me arriesgue a un enamoramiento?

Hyukjae le gruñó.

—¡No es ningún enamoramiento, Donghae Lee! —Había dado un paso más, sin siquiera darse
cuenta. Él y Donghae estaban tan cerca que sus cuerpos estaban casi tocándose. Ambos tomaban
respiraciones pesadas, tratando de contener su ira.

Hyukjae bajó la voz cuando habló de nuevo.

—No es ningún enamoramiento. No sé lo que es. No entiendo por qué está sucediendo ahora. Lo
que sí sé es que nunca he sentido esto por nadie, y mi lobo no te dejará ir, incluso si quisiera, lo que
no hago.

Donghae bajó los ojos y negó. Era obvio que nada de lo que pudiera decir disuadiría a Hyukjae. Una
parte de él estaba radiante debido a eso, la otra parte se revolcaba en la oscuridad, sabiendo que
pronto todo su ser se consumiría por la oscuridad de un corazón quebrantado y sueños rotos.

Sin decir nada más, Donghae se apartó de Hyukjae y tomó asiento en la silla. Miró a Teukkie, luego a
Hee. El rostro de Teukkie era de confusión y dolor por su amigo; la cara de Hee, sin embargo… la cara de Hee estaba llena de picardía y algo más. Donghae lo miró un poco más, tratando de saber por qué las pequeñas ruedas de Hee estaban girando. Entonces Donghae lo notó. Era conocimiento. Tenía la sonrisa de alguien que sabía algo que los demás no. Para la confusión de Donghae, realmente no sabía si quería saber lo que era.

Dam se giró para llamar a Changmin hacia ella, sólo para darse cuenta que el joven Fae había
desaparecido.

—Discúlpenme por un momento —dijo Dam al grupo. Ella salió por la puerta del frente y cerró los
ojos, llegando al consejo de su pueblo. Sus ojos se abrieron de golpe cuando recibió la información
que necesitaba. Tenía los labios apretados mientras empujaba la puerta trasera y entraba en la cabaña.


—Parece que mi pueblo ha tenido que llamar a Changmin. Iba a enviarlo por Ryeowook y Yesung,
pero eso, obviamente, no va a pasar. Tengo que enviar a algunos de ustedes.

Junjin se levantó.

—Yo iré.

—No. —Dam habló antes de que las palabras de Junjin salieran completamente de su boca—. Tú no
debes ser comprometido, Junjin.

—¿Puedes ocultarnos de alguna manera? —preguntó Teukkie.

Teukkie se dio cuenta que los labios de Dam hicieron esa cosa apretada de nuevo y sus ojos brillaban
levemente.

—Parece que nuestra bruja amistosa ha estado trabajando mientras hemos estado tras el velo. Ha
puesto un hechizo de rastreo en los Alfas.

—¿Lo que significa? —la alentó Hee.

—Significa que cualquier persona o cualquier cosa que posea magia producirá un rastro para que ella
lo siga.

—¿Pero no son todos los hombres lobo mágicos? —Donghae frunció el ceño.

—Sí, pero los latentes y los mestizos no cargan ni de cerca tanta magia en ellos como un lobo de pura
sangre.

Esta vez Siwon lanzó a Hee fuera de su regazo mientras él se disparaba del sofá antes de que incluso
registrara el movimiento.

—Ni siquiera digas lo que estás pensando.

Hee fulminó a Siwon con la mirada mientras se levantaba él mismo del suelo.

—Está bien, voy a olvidar que me lanzaste sobre mi trasero ya que puedo ver claramente que estás
magníficamente cabreado. —Hee estaba de pie de puntillas, tratando de llegar a la cara de su
compañero. Siwon simplemente envolvió un gran brazo a su alrededor y lo empujó fuera del camino,
detrás de él.



—Teukkie y Hee tienen la mejor oportunidad de ir sin ser detectados. Una vez que estén con
Ryeowook y Yesung, Ryeowook será capaz de proporcionar algún pequeño encubrimiento.

Todos los hombres en la sala se molestaron con lo que estaba sugiriendo Dam.

—¿Quieres que envíe a dos de mis parejas al bosque, solos? —habló Junjin lentamente y sus ojos
comenzaron a brillar. Hyesung le puso una mano en el brazo, tratando de calmar al Alfa.

Kangin se levantó y empujó a Teukkie detrás de él justo como Siwon le había hecho a Hee. Hee miró
a Teukkie desde atrás de Siwon y puso los ojos en blanco. Teukkie asintió su acuerdo con la opinión.

—Tal vez la decisión debería corresponder a las personas en cuestión — anunció Hee desde detrás de
la pared que era su compañero.

—No. —Kangin, Siwon, Hyukjae, Yunho, y Junjin dijeron a la vez, todos en varios estados de asombro al comentario de Hee.

Hee y Teukkie ahora estaban completamente enojados.

Teukkie se abrió paso alrededor de Kangin mientras Hee hizo lo mismo con Siwon. Cada chico rodeó a su compañero y la habitación quedó en   silencio mientras las dos parejas se dedicaban a lo que
parecía ser una competencia de miradas. En realidad, estaban hablando entre sí a través de sus vínculos.

«No va a suceder, Heechul. Puedes fulminarme con la mirada, despotricar, llorar, o pisotear todo lo que quieras. No vas a dejar esta casa».

Hee gruñó. Un verdadero gruñido. Eso sólo causó que Siwon sonriera. Idiota, pensó para sí mismo.

«Juegos previos, princesa, juegos previos».

Esta vez Hee sí pisoteó su pie. Dejó escapar un gruñido y se volvió hacia Dam y Junjin.

—Teukkie y yo podemos hacer esto. No somos algunas damiselas indefensas en peligro. Si no
producimos suficiente magia para que la malvada bruja nos rastree, entonces deberíamos estar bien.

Siwon resopló detrás de él.

—¿Bien? Compañero, hace mucho frío ahí fuera. Y los hombres lobo no son los únicos en el bosque,
¿o has olvidado que hay otras cosas que aparecen en la noche?

—Estás muy cerca de dormir en el sofá. Sólo quiero que lo sepas. —Hee sonrió cuando sintió su
sorpresa y luego su frustración ante su comentario. Un punto para el chico acoplado/casado que
no debería estarlo, pero podría usar el sexo como un arma. Hee sabía que no era agradable, pero
a tiempos desesperados…

—Eso no va a funcionar conmigo, Heechul. No soy un chico de dieciocho años virgen que se muere
por estar en las piernas de su pareja.

—¿De verdad acabas de decir eso? —Sus manos se habían ido a sus caderas y sus hombros estaban
jalados hacia atrás.

—Oh, hombre —susurró Donghae a Zhoumi, que había estado sentado en silencio a su lado—. He
visto esa mirada. No quieres estar en el otro extremo de esa mirada.

—Es necesario que entiendas con quién estás acoplado. No voy a ser manipulado para que puedas
salirte con la tuya. S…

—Tienes razón —interrumpió Hee—. Me alegro que me lo hayas aclarado. Ya que eres tan
experimentado con el género opuesto, entonces no hay manera de que yo conteniéndome a ti te
moleste, porque tienes recuerdos de esos otros libertinos para mantenerte caliente durante la noche.
Gracias por eso, mi dulce compañero. Desde ahora sé que a diferencia de otros hombres que desean
estar con sus parejas —dijo Hee su voz burlona—, no eres persuadido fácilmente, voy a tener que
encontrar otras fromas que podrían hacer llegar esto través de tu grueso cráneo, infestado de pulgas:
no voy a ser dictado, no voy a ser controlado, no voy a ser tratado como si fuera del siglo XVIII
caminando dos pasos detrás de su hombre y sólo habla cuando se le habla.

—Heechul. —Siwon dio un paso hacia él.

—No, Siwon. No utilices ese tono de voz conmigo. Soy tu compañero, tu esposo, tu igual. —Finalizó
sus palabras a través de su vínculo. «Y no me olvidaré de tus palabras, mi amor. No voy a olvidar tu
falta de entusiasmo por tu pareja».

—Heechul, princesa, no quise decir que no te quiero. —Las palabras de Siwon cayeron en saco roto
porque su compañero le había dado la espalda y bloqueado sus pensamientos.

El grupo pasó el día descansando y evitando el elefante en la habitación. Los hombres no querían
que las parejas fueran, éstas querían pegar atizadores calientes en los ojos de los hombres.

Sí, no estaba tenso en absoluto.




2 comentarios:

  1. Ahhh
    Pobre Tukkie y Hae~
    Todos preocupados!!!!
    Ahhhhhhhhh
    Nooooooooo
    Jajajajajahahahahaha
    Definitivamente Siwonshis dormirá en el sofá!!!
    Uyyyya
    Hee!!! Se enojó!!!
    Excelente capítulo!!!

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  2. Estas parejas van a terminar sacándose los ojos, se ve que los muchachos coreanos no terminan de entender lo independiente que son sus parejas.
    El EunHae me desconcierta, acaso Hyuk no sabe que Hae es su compañero??????

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...