Sapphire Wolf (T3)-19



—Estaba comprobando para asegurarme de que los jóvenes señores están bien. — Sonrió. Si Hee no estuviera embelesado por cierto lobo fuera de control podría haberse sentido atraído por Hyukjae.
—Hyukjae, las parcas te han enviado —dijo Hee dramáticamente, estirando el brazo para indicarle que entre.
Teuk puso sus ojos en blanco.
—¿Qué está haciendo? —murmuró Donghae.
—Salvando nuestros traseros al último minuto —respondió Teuk.
—Bueno saberlo.
Hyukjae entró con cautela.
—Las parcas me han escogido, ¿eh? ¿Debería preguntar?
—Bueno, probablemente serás considerado culpable por asociación de todas formas. Podrías meterte de lleno desde el principio. —Hee sonrió dulcemente hacia él—. Además, siempre digo que si vas a hacerlo, hazlo en grande.
Él miró a los otros jóvenes en la habitación.
—Sí, habla en serio —ofreció Teuk secamente.
—¿Qué necesitas? —Luego resopló—. Sólo para que conste, juraré que me chantajeaste para entrar en esto.
Hee sonrió.
—Sabía que eras más que sólo una cara bonita.
Hyukjae resopló, levantando una sola ceja hacia él.
—Necesitamos que ayudes a Donghae y Teuk a robar ropa, sábanas, toallas. Casi cualquier cosa que pudiera tratar de cubrir su gloriosa desnudez. —Hee estaba caminando por la habitación mientras hablaba todavía pensando en la logística de su plan. Cuando Hyukjae le dio una mirada confundida, agregó—: Oh, de los lobos que planearon esa pequeña aventura de película.
—Bien… primero. Sólo quiero decir que no creo que sea una mala idea, sino que pienso que es una idea seriamente mala.
—Seriamente mala —repitió Hee—. Bien, anotado.
—Muy bien, digamos que sigo con esto y ayudo. ¿Cómo exactamente se supone que vamos a sacar todos esos artículos de las habitaciones?
Hee detuvo su caminar y soltó un fuerte resoplido.
—Esto es lo que tengo. Todas las habitaciones tienen ventanas en ellas, ¿cierto?
Hyukjae asintió.
—Bien, entonces, ¿qué tal si Teuk y Donghae te tiran los artículos por la ventana? De ese modo podrías tomarlos y hacer una pila en el patio principal.
—Está bien, ¿luego qué?
—Entonces encendemos un fósforo y los vemos arder, nene. —Los ojos de Hee se entrecerraron y la sonrisa que se deslizó por su rostro hizo que escalofríos recorrieran la espalda de Hyukjae.
La habitación estuvo en silencio por varios minutos.
—Así que, ¿cuándo se supone que vamos a hacer esto y dónde van a estar los lobos? —preguntó Hyukjae finalmente.
—Oh, sí. Te perdiste esa parte —balbuceó Hee, luego se animó—. Bueno, empieza con strip póker.
—Aquí va —murmuró Teuk. Los ojos de Hyukjae se ensancharon.
—Oh no, Hee. Huh uh, de ninguna jodida manera. Siwon me arrancaría la cabeza si piensa que te dejé jugar strip póker con un grupo de machos. De ninguna manera va a pasar. Puedes olvidarte de tu plan y esperar por Si…
Hyukjae fue abruptamente interrumpido cuando Hee se acercó tanto a él que sus pechos se tocaron.
Él intentó retroceder, pero Hee agarró el frente de su camisa y lo mantuvo en el lugar.
—Escucha y escucha bien, peludito —gruñó Hee—. Así es como ha ido mi día. Pasé la mañana esquivando patas mugrientas, literalmente, solo para tener una pata mugrienta aterrizando en mi pecho y apretando con mucha fuerza. Vi al lobo que probablemente es mi compañero luchar con tal cachorro de patas mugrientas y terminar en toda una lucha sangrienta. Luego casi me desnudo en una habitación llena de lobos para mostrar mi glorioso cuerpo. ¿Hasta aquí estás conmigo?
Hyukjae era inteligente y no hizo nada más que respirar.
—Para colmo, estas pulgas caminantes me grabaron a mí y a mis chicos sin nuestro conocimiento cuando estábamos siendo poco decentes… nuestra culpa. Luego, después de que Siwon les dijera que lo tiraran y los dejó ir, ellos lo pusieron en una gran pantalla y tuvieron una fiesta… no nuestra culpa…
… Tuve que exhibirme a la maldita manada entera para evitar que Siwon matara a los idiotas, lo que significa que él vio los moretones y todo eso, y seguramente me encerrará en una habitación hasta que decida que puede manejar a otros machos estando cerca de mí nuevamente.
…Encerraron a Siwi porque fue hecho un basilisco sobre ellos, lo que significa que no voy a estar con él. Soy un joven. No puedo desafiar a esos idiotas, limpiarían el piso con mi trasero. Pero puedo emparejar las cosas. Demonios, no hay furia como el de una pareja despechada, Hyukjae. Harías bien en recordarlo. —soltó su camisa y retrocedió, pero le sostuvo la mirada—. Estoy cansado, estoy furioso, quiero ver a mi lobo, y me duele el pecho. No me digas que no tome represalias contra aquellos que me ofendieron. ¿Estamos en la misma página?
Hyukjae se frotó la cara y dejó escapar un suspiro. Volvió a mirar a Hee y una gran sonrisa se extendió en su rostro.
—Me alegra tanto que seas el compañero del Beta.
Hee ladeó la cabeza hacia un lado.
—¿Por qué dices eso?
—Porque alguien necesita evitar que su cabeza se agrande más de lo que ya está y tengo la sensación de que eres el lobo para hacerlo. Eso, y que tú lo mantendrás ocupado —Hyukjae meneó las cejas sugestivamente—, y lejos de nuestros cabellos.
—Huh, él tiene egomanía —concordó Hee—. De regreso al problema en cuestión, ¿estás dentro o fuera?
Los ojos de Hyukjae se suavizaron.
—Estoy dentro. Alguien tiene que asegurarse de que salen vivos de esta. Aahh, es una mala idea —gimió.
Hee sonrió.
—Estoy  muy  contento  de  que  veas  las  cosas  de  nuestra     manera. Odiaríamos tener que atarte y meterte en un armario en alguna parte.
La cabeza de Hyukjae giró bruscamente hacia los otros jóvenes.
—Una vez más —dijo Donghae secamente—, sí, lo dice en serio.


Hongki estaba sentado en su escritorio, continuaba en la búsqueda de los archivos por cualquier documentación sobre el emparejamiento de los latentes y los pura sangre Canis lupis. La puerta se abrió de repente.
—Doc, necesitamos de su ayuda —anunció Hee mientras él y Donghae entraban.
Hongki se recostó en su silla y sonrió.
—¿Cómo puedo servirles, chicos?
—Primero necesito que prometa que mantendrá una mente abierta y me dejará terminar antes de enloquecer. —Hee sostuvo la mirada de Hongki, esperando a que el doctor aceptara antes de continuar.
—Está bien, lo haré. Prometo mantener una mente abierta y no enloquecer hasta el momento apropiado.
—Genial. —Hee tomó asiento en una de las dos sillas en frente del escritorio y Donghae tomó la otra—. Estoy declarando la guerra a los hombres que fueron lo suficientemente estúpidos para provocar a mi compañero.
—¿Tu compañero? —interrumpió Hongki.
—No no, Doc. Prometió mantenerse al margen hasta que terminara. —Hee le arqueó una ceja.
Hongki levantó las manos en señal de rendición.
—Como estaba diciendo, estoy declarando la guerra. No quiero herir a nadie pero sí quiero mandar un mensaje claro de que las parejas en esta manada no van a aceptar mierda de nadie, ni vamos a tolerar que ellos enojen a nuestros hombres.
Hee hizo una pausa esperando a ver si Hongki iba a Decir algo. No lo hizo
—Así que he estado cocinando un plan, que aunque es inofensivo, será bastante humillante.
Empezó a explicar los detalles de su plan. Al mismo tiempo, los ojos se Hongki se fueron abriendo más y más.
—Ahora bien, un problema que estaba tratando de solucionar era cómo asegurarme de que todos vayan a ver los Chippendales. Creo que he encontrado la solución. Zhoumi y yo seremos los que los invitaremos a jugar cartas con nosotros. Les diremos que tenemos que jugar en el gimnasio después de que todos se hayan ido porque no podemos tener sus esencias en nuestras habitaciones o nuestros machos enloquecerán. Entonces, después de que Teuk, Donghae y Hyukjae hagan su parte, ellos podrán tomar los volantes, hechos por mí, e ir puerta por puerta a repartirlos. —Hee sonrió, obviamente satisfecho consigo mismo.
Donghae lo miró, con la frente arrugada.
—¿Qué va a decir el volante exactamente?
—Que deben venir a una fiesta multi-manada después de horas en el gimnasio. Inteligente, ¿no? —Hee levantó la mano a Donghae para chocarlas.
Donghae le dio un golpe reacio a la mano.
—Pero cuando lleguen al gimnasio en lugar de una fiesta van a obtener una vista de…
Hee interrumpió.
—Lobos con el trasero desnudo.
Luego se echó a reír.
—De verdad estás empezando a asustarme —dijo Donghae cansadamente.
Cuando Hee miró a Hongki expectante, él se inclinó hacia adelante y puso sus codos sobre el escritorio. Tomando una respiración profunda, preguntó:
—¿Y qué es exactamente lo que necesitas que yo haga en este loco, aunque ingenioso, plan?
—Estábamos esperando que tal vez tú supieras de una forma de impedir a los lobos transformarse —explicó Hee—. Sería un poco inútil si ellos pudieran transformarse en sus formas de lobo.
—Vaya. Sin presión, ¿eh? —La sonrisa de Hongki fue leve, pero no los había echado de su oficina… aún—. No conozco ninguna droga que se haya desarrollado para este propósito. Un Alfa puede impedir a sus lobos cambiar, pero, ¿lo tomo como que no quieres que ninguno de los Alfas esté al corriente de este plan tuyo?
—Estarías en lo correcto.
Hongki se tocó la barbilla mientras pensaba en todas los cosas que sabía respecto a la medicina y los lobos. Donghae de repente saltó.
—Santa mierda.
—Uh, Donghae querido, ¿te gustaría compartir tu obvia epifanía? —preguntó Hee
—Nepeta —susurró Donghae.
—¿Nep-qué?
—Nepeta —repitió—. No me preguntes cómo sé esto porque no tengo ni una jodida idea. Sólo estaba sentado aquí pensando en lo loco que eres…
—Sí, gracias por el voto de confianza —murmuró Hee.
—… y luego, ¡BAM! Sólo está allí en mi cerebro. Nepeta. Impide a los lobos transformarse.
Hongki estaba sentado con su boca abierta, mirando a Donghae. Donghae miró al doctor, y lanzó sus manos al aire.
—Les estoy diciendo que no sé de qué diablos se trata todo esto, pero ahí está.
Hee se levantó, y se fue alrededor de la computadora del doctor, empujando contra el doctor para tener acceso al mouse y el teclado.
—Mueve tu aturdido trasero hacia un lado y déjame hacer un poco de investigación, doc.
Hongki distraídamente rodó su silla fuera del camino de Hee mientras él empezaba a teclear.
—¿Qué estás haciendo?
—Buscando Neptun —respondió Hee.
—Nepeta —le corrigió Donghae—. N-E-P-E-T-A.
Hee lo miró.
—¿Incluso sabes cómo deletrearlo?
Donghae asintió y trago duro. De repente Hee rió.
—Oh, esto es demasiado. El nombre más común para nuestra pequeña congeladora de cambio es hierba gatuna. —Donghae en realidad dejó escapar algunas risas mientras Hee golpeaba el escritorio—. No sé qué puede ser aún mejor que eso.
Hongki finalmente fue sacado de su shock momentáneo cuando Hee lo sorprendió con el golpe al escritorio. Miró a Donghae y sonrió.
—Uh, doc. Me está asustando —admitió Donghae de mala gana.
—Creo que eres un sanador —le dijo Hongki con admiración—. Un sanador gitano.
Hee miró de Hongki a Donghae y de vuelta.
—¿Cómo dijo?
—Cada siglo más o menos, un sanador Gitano aparece en una manada de Canis lupis. No hay ninguna razón para ello. Pero es un gran honor y empuja las balanzas de poder mayormente hacia esa manada —explicó.
—¿Qué quiere decir con “aparece”? —preguntó Donghae.
—Sólo que quién sea, y siempre es mujer o un joven, dondequiera que esté, el destino lo trae a la manada a la que va a servir. Tú fuiste destinado a ser amigo de Teuk, porque Teuk era la clave para guiarte a esta manada. Así como Hee estaba destinado a ser amigo de Teuk, porque él también iba a ser una parte de la manada Coreana.
—¿Cómo es eso siquiera posible? —preguntó Donghae dudosamente.
—No hay cómo explicar los Destinos, Donghae —le dijo Hongki honestamente—. Todos tienen un destino y sin importar cuántas veces se extravíen, siempre van a encontrar la forma de volver al camino que va a cumplir su propósito.
—Entonces, ¿cómo sabes que soy un sanador gitano? —Donghae se sentó de nuevo en la silla de la que se había desbocado.
—Bueno tenemos que asegurarnos de que lo eres, pero los sanadores son bendecdos súper naturalmente con el conocimiento de las hierbas, medicina, las artes de la curación, cosas que sería imposible saber sin años de estudio.
—¿Cómo sabes todo esto? —preguntó Hee.
—No sólo estudié medicina humana cuando fui a la escuela de medicina. Aprendí lo más que pude sobre cómo atender a los Canis lupis también. Aunque, nunca seré capaz de aprender todo lo que los sanadores saben. Estudié la historia de los sanadores dentro de las manadas un par de décadas atrás. No ha habido uno, al menos documentado, en casi dos siglos. — Hongki sacudió su cabeza en incredulidad y sonrió—. Vaya. Si confirmamos esto, Junjin va a estar emocionado.
—Está bien, así que empecemos con las felicitaciones —anunció Hee—. Donghae, felicitaciones. Ahora tenemos que dejarlo pasar y volver a esta revelación en un tiempo y hora posteriores.
—Sin falta, Hee, acabo de descubrir que soy alguna clase de rara mercancía, pero por favor vamos a planificar la caída de algunos pervertidos Canis lupis. — Donghae le puso los ojos en blanco a su sarcástico amigo.
—Extraordinario. —Hee asintió—. Así que, hierba gatuna. Como estaba diciendo, es extremadamente asombroso pero, ¿dónde podemos conseguir algo de ello? Aquí dice que es comúnmente encontrada en Asia. Y por casualidad estamos en Asia. ¿Coincidencia?
—Sí —interrumpió Donghae.
—Yo creo que no —continúo Hee, sin inmutarse—. Hongki, tengo una misión para ti si decides aceptarla.
—Oh, hermano —murmuró Hongki—. Déjame adivinar. ¿Quieres que encuentre un poco de hierba gatuna y averigüe cómo hacer la mezcla?
—Preferiblemente algo líquido para que así podamos echarlo en sus bebidas —dijo Hee distraídamente.
Hongki se sentó en silencio, contemplando las consecuencias de ser parte de la pequeña maquinación de Hee. No iba a mentir y decir que estaba más allá de tal mezquindad, porque honestamente, quería atrapar a esos mocosos por pensar que podían meterse con sus parejas.
Junjin con toda seguridad se iba a enojar, pero de nuevo él ya estaba en la casa del perro proverbial así que, qué diablos.
—Está bien, estoy dentro. —El aplaudió con entusiasmo, sintiéndose más joven de lo que se había sentido en mucho tiempo.
Hee guiñó.
—Adoro cuando un plan empieza a formarse, especialmente uno que involucra strip póker, hogueras, y hombres lobos desnudos. En serio, ¿qué más querría un joven?
Donghae gimió mientras se desplomaba de vuelta en la silla.
—Esto va a ser un desastre, puedo sentirlo.
La cabeza de Hee salió disparada en torno a Hongki.
—¿Puede chico gitano aquí predecir el futuro?
—No, no son clarividentes.
—En ese caso, no, Donghae. Lo que estás sintiendo es la exuberante alegría que viene de participar en una de las experiencias cambia vidas de Hee.
—¿Oh, es eso lo que es? Pensé que era gas —dijo Donghae irónicamente. Ignorando la observación de Donghae, Hee se dirigió a Hongki de nuevo.
—Así que tú tienes la operación congelación de cambio. Son —Hee miró a su reloj—, las nueve ahora. Vamos a necesitar probarlo antes de que la operación comience, así que necesitamos estar listos para mañana en la noche.
—¿Cuándo están planeando tener esta pequeña fiesta? —preguntó Hongki.
—Pasado mañana. Kangin le mencionó a Teuk que los Alfas y sus compañeras van a tener una cena privada ese día. Con ellos distraídos, creo que sería el momento más oportuno para obtener nuestra venganza.
—Está bien —dijo Hongki levantándose—. Voy a salir y ver si puedo olfatear un poco de hierba gatuna fuera de los terrenos de la propiedad. Ustedes chicos traten de mantenerse bajo el radar.
—Lo haremos, doctorísimo. —Hee le dio un pulgar en alto y salió de la oficina.
Donghae miró de vuelta a Hongki, quien sonreía.
—No te preocupes, Donghae. Haré un poco de investigación sobre sanadores gitanos, y tú y yo resolveremos esto.
Donghae le devolvió la sonrisa.
—Gracias, doc. Se lo agradezco.


—Así que el Beta ha sido sacado de la escena —le dijo Yifan a sus cuatro compañeros de manada—. Eso significa que el rubio no estará tan protegido.
—¿De verdad crees que él podría ser tu compañero? —preguntó su compañero. Él entrecerró los ojos.
—No lo sé. Sé que si él lo es, voy a desgarrar tus manos por tocarlo de la manera en que lo hiciste durante el entrenamiento.
—Como si tú no hubieras aprovechado la oportunidad. No es como si ellos fueran fáciles de evitar.
—Sólo mantén las manos quietas de ahora en adelante —gruñó Yifan.
—Sí, Beta —concedió él a regañadientes.
—¿Hanheng no dijo que nos iba a castigar por el vídeo? —preguntó Sava. Yifan negó.

—Dijo que no le pareció otra cosa más que nosotros mostrando nuestro interés por las parejas Coreanas. Ninguno de eso jóvenes del vídeo está emparejado. Eso los hace elegibles.

3 comentarios:

  1. Hee dios te conserve tu mente maquiavelica, solo espero que tu plan funcione y que el nuevo estatus de Hae permita salvar al alfa de esa cena maldita

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  2. Ahhhh!!!
    Hee es todo un ser maquiavélico!!!
    Me encanta! Lo amo!!!
    Jajajajaja pobres lobos!

    Ahhhh!!!! Toma tu plan Hannie~ te vas a ir por un tubo!!!!
    Ahhhh que genial! Yo si decia que el pescado tenia que servir para algo!!!!

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  3. Espero que su plan salga como lo previsto o que al menos de los resultados esperados....han mucha gente involucrada...queremos resultados positivos.
    Por un momento me dio un lapsus de creen que se estaba cocinando algo con Hae.

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...