Sapphire Wolf (T3)-17



Siwon despertó cuando sintió a Heechul moverse. En algún momento él había tomado una almohada y apoyó su cabeza en su regazo. Siwon había acariciado su cabello hasta que él mismo finalmente se había quedado dormido. No podía recordar un momento en que hubiera dormido tan bien, incluso sentado en posición vertical sobre un asiento de dos plazas.
Heechul tenía a su lobo prácticamente ronroneando. Estaba tan contento de tenerlo tan cerca, tan relajado en su presencia. Bajó la mirada y notó que estaba empezando a despertar. Pasó el dorso de sus dedos por su mejilla y sus ojos se abrieron. Lo miró y sonrió. En ese momento podría haberle pedido cualquier cosa y él habría derribado imperios para que ocurriera.
—Hola —murmuró él.
—Hola a ti.
Heechul estiró los brazos hacia arriba y arqueó la espalda como un gato despertando de una larga siesta en el sol.
Siwon se aseguró de mantener los ojos pegados a su cara y fuera de su hermosa silueta. Cuando lo miró de nuevo, apartó el cabello de su cara y se inclinó para capturar sus labios con los suyos.
Cuando él retrocedió, Heechul estaba sonriendo como un gato.
—Más —ordenó él.
Siwon rió entre dientes cuando Heechul envolvió su mano alrededor de su cuello y lo atrajo. Él colocó sus manos en sus caderas   y estaba arreglándoselas para arrastrarlo a su regazo cuando la puerta detrás de ellos se abrió de golpe.
—¡Yo gano! —gritó Teuk.
—No, no lo haces —contrarrestó Zhoumi—. Mira sus manos. Definitivamente no sólo estaban besándose. Había un poco de manos en acción evidentemente.
—Oh, yo no diría evidentemente —añadió Sooyeon—. Más bien como la posibilidad de manos en acción.
Donghae se volvió.
—Mi respeto por ti está creciendo a pasos agigantados.
Sooyeon sonrió y le guiñó un ojo.
La cabeza de Hee se levantó de golpe para mirar por encima del hombro de Siwon.
—¿Qué diablos están ladrando? —gruñó, claramente no contenta con la interrupción.
—Tenían una apuesta —ofreció Donghae.
—¿Una apuesta? ¿Una apuesta sobre qué?
—Tu virtud —contestó él secamente. La boca de Hee se abrió.
—Ya he sido toqueteado una vez hoy y mira lo que conseguí. ¿De verdad crees que estoy listo para más?
Siwon gruñó. Él lo atrajo hacia sí para así poder susurrarle al oído.
—No es un buen tema para traer a colación, princesa.
Hee le dio un beso en la mejilla.
—Lo siento, B.
Teuk miró a Donghae, quien estaba tan estupefacto como él.
—¿Él tiene un lado suave? —murmuró Teuk.
—¿Él acaba de utilizar las palabras “lo siento” y “B” en la misma frase? —contrarrestó Donghae.
—Supongo que cada criatura tiene su debilidad. La suya es similar a la mía. —Teuk sonrió—. Calientes y sensuales hombres peludos.
Zhoumi y Sooyeon rieron.
—Me gusta el mío con crema batida —dijo Hee con complicidad a los dos lobos. Luego miró a Teuk—. ¿Con qué te gusta el tuyo, Pato?
Kangin habló rápidamente.
—No respondas eso, Angel.
Siwon rompió con una carcajada por la firmeza en la voz de Kangin, y los chicos todos continuaron detrás de él. Kangin ni siquiera esbozó una sonrisa.
—Entonces, ¿qué trajo al grupo variopinto a vernos? —preguntó Hee una vez que la risa estuvo bajo control.
—Fuimos a tu habitación para ver cómo estabas, pero no estabas allí —le dijo Donghae.
—¿Todos ustedes?
—Eres de la manada —respondió Sooyeon como si eso fuera todo lo que había que Decir.
El teléfono de Siwon sonó y Hee se elevó para que pudiera llegar a su bolsillo. Ya que eran todos super entrometidos, se aseguraron de ser lo más silenciosos posible mientras él respondía a la llamada.
—¿No lo hicieron? —preguntó  Siwon.
La sala se quedó en silencio mientras él escuchaba.
—Está bien. Sí, lo tengo. Gracias, Junjin. —Cerró el teléfono y levantó la vista para encontrar seis pares de ojos clavados en él.
—Entonces, ¿hay un plan para esta noche? —preguntó casualmente.
Hee puso los ojos en blanco.
—Escúpelo, lobo.
Siwon agarró su muñeca y lo tiró hacia adelante. Heechul cayó contra su pecho. Envolvió sus brazos a su alrededor, disfrutando de la libertad de tocarlo.
—Ese era Junjin —dijo finalmente.
—Sí, como que averiguamos eso cuando le diste las gracias y utilizaste su nombre. —Los ojos de Hee se estrecharon—. Inténtalo de nuevo.
—Estás irritable esta noche, ¿no? —bromeó Siwon.
—Creo que me gustabas más cuando eras taciturno —murmuró Hee, lo que sólo le hizo reír y acercarle más.
—Junjin me informó que los Alfas han decidido no someterme a ningún castigo por mis acciones contra el mestizo que te tocó. —Las palabras de Siwon se volvieron más ásperas mientras hablaba.
—No habría tenido ningún sentido para ellos el castigarte —le dijo Kangin.
—¿Por qué dices eso? —le preguntó Teuk a su compañero.
Kangin tomó su mano y tiró hacia él, metiéndolo bajo su brazo.
—Cualquier pareja vinculada que hubiera sido tocada de esa manera habría visto como su compañero destrozaba al infractor miembro a miembro.
Teuk se estremeció ante la amenaza en su voz. Hee ladeó la cabeza hacia Siwon.
—Aw, ¿el pequeño lobo peludo haría un juguete del pervertido por mí? — bromeó, apretando las mejillas de Siwon como lo haría a un bebé.
Siwon quitó suavemente sus manos y tomó su rostro entre las suyas.
—Voy a matar al próximo hombre que te toque. Ya he terminado de jugar agradable —dijo, chasqueando los dientes mientras sus colmillos descendían.
—Donghae, consigue una manguera. —Hee sonrió con malicia—. Porque eso fue tan malditamente caliente y estoy ardiendo.
Siwon entornó los ojos, pero lo suavizó con una sonrisa.
—Ohhh nooo —gimió Donghae—. Pensé que era malo antes que el ninfómano tuviera una válvula de escape. Ahora él tiene su propio niño juguete.
Siwon gruñó.
—No soy un niño juguete —dijo, claramente ofendido.
—No te preocupes por él, B. Sólo está frustrado sexualmente —aplacó Hee.
Siwon conmocionó a la habitación en silencio cuando miró a Donghae y bromeó secamente:
—Bienvenido al club.
La cara de Hee se volvió ocho tonos de rojo.
Teuk se recuperó primero.
—Maldito infierno, no sabía que Hee tenía ese color en su repertorio de piel
Zhoumi y Sooyeon se rieron mientras Hee trató de recuperarse. Él ocultó su flamante rostro rojo en el cuello de Siwon, quien le frotó su espalda con dulzura y le murmuró palabras en coreano.
Nota mental, pensó Hee. Averiguar lo que está diciendo… Corrección, estrangular al lobo por bromear sobre sus necesidades en frente de mis amigos, luego, averiguar lo que está diciendo.
—Entonces, ¿qué vamos a hacer esta noche? —preguntó Kangin. Hee se sentó, habiéndose finalmente recobrado.
—¿No hay algún tipo de algo que hacer esta noche?
—Sí, pero mi padre piensa que es mejor que pasemos desapercibidos. Sólo hasta que las cosas se tranquilicen.
—Bueno, mi voto es que ataquemos el comedor, antes de todo —anunció Hee.
Donghae puso los ojos en blanco.
—Aquí vamos con la jerga militar.
—¿De dónde saca eso? —preguntó Teuk, sacudiendo la cabeza.
—No puedo decidir si él estuvo en las fuerzas especiales en una vida pasada o se cayó de cabeza cuando era niño. —Donghae se encogió de hombros.
—Definitivamente no caí de cabeza, Donghae querido. Mi cabeza está perfectamente redondeada, libre de cualquier contusión —dijo Hee con altivez.
Sooyeon, quien por lo general se quedaba en silencio y observaba, se rió entre dientes.
—Sólo un estadounidense describiría la forma de su cabeza como si se tratara de alguna clase de forma de arte especial para ser apreciado.
Hee se levantó del sofá, enderezando su ropa y arreglando su caballo.
Le sonrió ampliamente a Sooyeon.
—En serio, chico lobo. ¿Estás viendo la misma cabeza que yo veo en el espejo? —le preguntó mientras él hacía un movimiento circular alrededor de su cabeza—. Esta es la manera en que Dios les muestra que él es de hecho capaz de crear la perfección.
Teuk y Donghae resoplaron mientras Kangin y Siwon rieron. Hee miró hacia Siwon cuando le oyó murmurar:
Él nunca dejará de sorprenderme.
—¿Tienes algo que Decirme, B? —preguntó Hee dulcemente.
—Sólo que nunca he contemplado a una cabeza que poseyera tal absoluta perfección, princesa —le dijo, inclinándose dramáticamente en la cintura.
Hee entrecerró los ojos.
—Definitivamente me gustabas más como sombrío y taciturno, bola de pelos.
Su respuesta fue una sonrisa maliciosa y un guiño.


—Uf, si como otro bocado voy a vomitar —gruñó Teuk mientras miraba al festín en el que todos habían zanjado con gusto.
—Estoy de acuerdo. —Hee se reclinó en su silla, frotando su vientre—. Estoy tan lleno como una garrapata pegada a la carne de un mastín toro en un día caluroso de verano.
Teuk negó con la cabeza.
—Lo juro, Hee, realmente sabes cómo arruinar una buena actividad inducida por carbohidratos.
—Estoy para complacer, príncipe lobo.
Zhoumi se levantó y se estiró mientras miraba alrededor de la habitación.
—¿Qué dicen de ir a nadar? Hay muchas posibilidades de encontrar una piscina en este criadero.
—Buena esa, “criadero”, me gusta. —Hee sonrió. Teuk se sentó y miró a Kangin.
—¿Qué dices, hombre lobo? ¿Te animas a nadar? Kangin asintió, pero no contestó en voz alta.
«Tú en un traje de baño… como si pudiera negarme a eso.»
Hee observó el intercambio entre Teuk y Kangin y sabía que estaban usando su vínculo.
Algo en su corazón se tensó. Él quería esa intimidad, anhelaba tenerla con Siwon. Se volvió a mirarlo y lo encontró observando a Kangin y Teuk también. Debió de sentir sus ojos sobre él, porque se volvió y encontró su mirada.
Algo tácito fluyó entre ellos. Casi como si pudiera oírle decir que no se preocupara, ya llegaría su hora. Su respuesta fue: ¿Estás tan seguro? A lo que él gruñó, esta vez en voz alta. Hee sacudió la cabeza, asombrado de cuán en sintonía estaban el uno con el otro, y sin embargo, parecía haber un gran abismo entre ellos.
—Yo podría ir a nadar —habló Sooyeon.
—Sí, cuenten conmigo. —Hee se puso de pie, estirando su rígido cuerpo.
A medida que se abrían camino hacia el vestíbulo, Kangin y Siwon reaccionaron.
—¿Qué oyes? —preguntó Teuk justo cuando Hyukjae cruzaba la esquina, casi derribando a Sooyeon.
—Oh. Lo siento, Sooyeon —le dijo mientras se enderezaba. Parecía nervioso y no se encontró con las miradas de Kangin o de Siwon.
Siwon dio un paso adelante.
—¿Qué es todo ese ruido?
Hyukjae negó con la cabeza mientras miraba al suelo.
—¿Por qué siempre tengo que ser el que descubre las cosas? —murmuró.
—Hyukjae —le advirtió Siwon.
Finalmente Hyukjae levantó la mirada. No se dirigió a su Beta, en lugar de eso se dirigió a Kangin.
—Creo que deberíamos buscar a tu padre y a algunos de los otros hombres.
Kangin asintió. Hyukjae echó a correr mientras Kangin se volvía a Hee.
—Distráelo.
Hee pareció confundido por un segundo, pero se recobró rápidamente tan pronto como Siwon se movió en dirección a Hyukjae, la dirección del ruido.
Hee no sabía qué hacer para distraer a un hombre lobo con más de un metro noventa que era diez veces más fuerte que él. Se retorció el cerebro en busca de ideas a medida que Siwon seguía adelante, lo hizo con lentitud, como si tuviera miedo de lo que iba a encontrar. Kangin estaba de pie frente a él, tratando de convencerlo para quedarse.
Entonces la inspiración le golpeó. Él es hombre, pensó Hee. Y sonrió.
—¡Oye, bola de pelos! —gritó Hee. Había un brillo malicioso en sus ojos mientras agarraba el dobladillo de su camisa y la tiraba por su cabeza, dejándo su pecho descubierto.
—Esto no está para nada bien —le murmuró Donghae a Teuk.
Teuk negó con la cabeza mientras se pellizcaba el puente de su nariz.
—Te juro que vamos a tener que envolver su boca con cinta adhesiva y ponerle una camisa de fuerza.
Hee suspiró en broma.
—Los sacrificios que hacemos por nuestros hombres.
Siwon se volvió ante el sonido de su voz y Hee le dio un guiño.
—¿No quieres pasar el rato por aquí?
Y entonces Hee meneó sus dedos sonriendo.


Hyukjae estaba golpeando a la puerta de Donghwa cuando Junjin salió de su habitación.
—¿Qué está pasando? —preguntó Junjin. Hyukjae miró a los ojos de su Alfa brevemente.
—Necesitamos todos nuestros hombres. Ahora.
Hyesung oyó la voz preocupada del lobo y siguió a Junjin hasta fuera.
—¿Qué pasó?
—Siwon va a armar una matanza si ve lo que acabo de ver y no lo detenemos.
—¿Qué has visto? —Junjin dio un paso adelante.
Hyukjae explicó rápidamente sobre el baile de Hee, Zhoumi y Sooyeon mientras que los machos de las otras manadas los grababan en vídeo.
—Alfa, no fue un pequeño baile inocente. Pero nuestros jóvenes no sabían que estaban siendo grabados, por lo que definitivamente no moderaron sus estados de ánimo, si sabe lo que quiero Decir.
Hyesung estaba sacudiendo la cabeza en señal de frustración.
—Así que, aunque Siwon les ordenó eliminar el vídeo, ¿alguien no  lo hizo?
—Exacto. Ellos lo están mostrando en una de las salas de cine en este momento. Está lleno de machos. Creo que piensan que “en la unión está la fuerza”. Suponen que Siwon no puede tomar represalias con tantos de ellos presentes.
—Ellos no saben que él es un Alfa en su propio derecho. —La voz de Hyesung fue baja.
—No, Amor. Siwon deliberadamente permite que otros lo subestimen. — Los ojos de Junjin se alzaron de golpe cuando Donghwa, Kyuhyun, Minho, Anton, y un par de otros hombres corrieron por las escaleras.
—¿Están al tanto de la situación? —preguntó Donghwa.
—Hyukjae acaba de informarme. Dado que no se ha producido un pánico generalizado, ¿hago correctamente en conjeturar que Siwon aún no ha entrado allí?
Donghwa y los machos con él no pudieron evitar las risas.
—Está por el momento… distraído.
—¿Siquiera quiero saber con qué? —preguntó Junjin secamente.
—No, Alfa. Usted definitivamente no quiere saber —respondió Donghwa.
—Bien —espetó—. Vamos. Hyesung, por favor, ven y reúne a las parejas. Y llama a Hongki. Probablemente vamos a tener que usar un tranquilizante en él.
Había pasado mucho tiempo desde que Junjin había sometido a uno de sus machos de tal manera, pero Siwon era poderoso, y había encontrado a su compañero y no podía vincularlo a él. Esa era una combinación mortal, incluso sin la adición de los machos sin pareja a la mezcla. Junjin había subestimado los sentimientos de Siwon hacia Hee. Eso no iba a suceder de nuevo, si todos ellos sobrevivían a esto.
Los lobos siguieron a su Alfa mientras se abría camino por las escaleras con un único pensamiento determinado: tenía que evitar que su Beta destruyera a una manada entera… o    dos.
La camisa de Hee cayó justo cuando Donghwa y un montón de machos de la manada Coreana giraban la esquina ahora infame. Kangin maldijo y se alejó.
Donghwa y los ojos de los otros machos golpearon el suelo más rápido de lo humanamente posible mientras seguían corriendo, pero Hee escuchó a Donghwa alto y claro al pasar.
—Sigue con el buen trabajo, latente.
Siwon estaba tan aturdido que no se había movido. Sus ojos brillaban y se veía mucho más enojado de lo que Hee lo había visto nunca. Bien, pensó. Al menos está funcionando.
—Um… está haciendo un poco de calor aquí, Siwi. —Hee se estremeció, mientras comenzaba a bajar sus pantalones
Siwon se movió más rápido de lo que sus ojos podían rastrear. Él lo agarró por la cintura y lo arrastró a una habitación vacía. Lo bajó con cuidado, pero rápidamente. Luego dio media vuelta y salió.
Antes de que él cerrara la puerta, gruñó:
—Cúbrete, y reza para que haya recuperado el control cuando regrese por ti. —Luego cerró la puerta con tanta fuerza que casi se cayó de las bisagras.
—Eso fue bien —gruñó Hee mientras se cubría con una toalla. Él se quedó inmóvil al abrirse la puerta, pensando que tal vez Siwon había decidido castigarlo ahora, pero Teuk, Donghae, Zhoumi y Sooyeon entraron. Teuk le arrojó a Hee la camisa que había descartado.
Sooyeon se acercó a Hee y puso una mano en su hombro.
—Sólo quería tocar al que deliberadamente provocó la ira de un Alfa — le dijo, y luego dio un paso atrás con una sacudida de cabeza.
—Él es Beta —la corrigió Hee mientras se ponía su camisa.
—No —discrepó Zhoumi—. Él es un Alfa, sólo decide no tomar ese título. Definitivamente tiene todo el poder de uno. Algunos se preguntan si sería tan poderoso como Junjin si decidiera que ese fuera su camino.
Hee dejó escapar un profundo suspiro.
—Bueno, Kangin dijo que lo distrajera. ¿Qué más sugerirías para detener un Alfa con represalias mortales en la cabeza?
—No estamos diciendo que el método no fuera eficaz. Sólo estamos diciendo que eres un lobo valiente. —La voz de Zhoumi en realidad sostenía un temor reverencial.
—Así que, ¿sabemos exactamente qué situación demencial hizo necesario que sacara las armas grandes? Valga el doble sentido, naturalmente. —Hee rió.
Teuk resopló.
—Sólo tú, Hee. Sólo tú.


3 comentarios:

  1. Casi dio resultado el método de persuasión de Hee, salvo por el pequeño detalle que Siwi no es solo una bola de pelos y seguro sospecha que algo gordo estaba pasando.
    Ya quiero que se acoplen esos muchachos son la frustración andando, también quiero descubrir quien es el traídor debtro de la manada coreana y que reciba su merecido castigo

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  2. Me encanta esta adaptación!!!!
    La amo!!!
    Arriba el SiChul!!!!
    Jajajahahhahahah ya todos calentones y llegan los chismosos!
    Jajajajahahahaha
    Ay~ Hee solo provoca a Siwonshis ~
    Ay yiyai~

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  3. Tan bonito momento...Hee y Siwon tranquilos por primera vez...y llegan estos a interrumpir mi tranquilidad y la de ellos... ㄱㄱ
    Joooooó se va a armar la grande...Siwon siendo alfa y estos idiotas mostrando el video que Siwon dijo que borraran....no me sorprende que alguno no lo haya hecho cuando les dijo.
    Más que Hyuk y Kangin uyendo...creo que fue la disponibilidad de Hee de mostrarse ante Siwon lo que le dio a este más sospechas de que algo pasaba.

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...