Donghae despertó
atontado. Le tomó un momento orientarse, pero entonces recordó que estaba en el
hospital debido a que Hee y Teukkie se estaban recuperando del accidente. Se
llevó las manos a la cabeza y gimió, su cabeza se sentía como si estuviera
abierta.
Cuando se puso de
pie lentamente, notó el canto que venía del cuarto de baño. Miró a su alrededor
y se dio cuenta que Hee no estaba en su cama, y luego recordó que Teukkie
estaba muy enfermo y en la UCI.
Miró el reloj de
la pared y vio que indicaba las 5:00 a.m. Caminando hacia la puerta del baño,
trató en vano de recordar lo que había sucedido la noche anterior. Se rindió y
llamó a la puerta. Como el canto continuó y nadie le respondió, abrió de forma
experimental para ver si estaba cerrada con llave. Lo estaba. Presionó la oreja
en la puerta y reconoció entonces que era Hee el que cantaba. Presionando más
de cerca, se esforzó para escucharlo.
—Eres tan
hipno-algo, podrías ser el diablo, podrías ser un ángel, tu tacto es algo
bueno, se siente como ir flotando, deja mi cuerpo resplandeciente.
—¿Katy Perry? Está
cantando Katy Perry en el cuarto de baño del hospital. Justo cuando crees que
lo has visto todo —murmuró Donghae. Llamó a la puerta de nuevo. Todavía sin
respuesta, por lo que comenzó a golpear. Luego, estaba golpeando y gritando—: ¡HEE!
¡ABRE LA MALDITA PUERTA!
No lo sabrías,
pero empezó a cantar más fuerte. Por qué no me sorprende, pensó.
—Dicen que tengo
miedo, no eres como los demás, hombres lobos futuristas con ADN diferente, les
gusta comandarte —continuó Hee.
—¡No puedes al
menos usar las palabras correctas si vas a hacerlo tan apestosamente fuerte!
Se volvió hacia el
posible intruso.
—¿Por qué ustedes
jodidos lobos nunca tocan? ¿Alguna vez se les ha ocurrido que podríamos estar
desnudos aquí?
Siwon al menos
tuvo la decencia de parecer avergonzado.
—Pido disculpas.
Oí golpes y gritos. ¿Está todo bien? —preguntó, mirando alrededor de la
habitación. Antes de que Donghae
pudiera responder volvió a hablar—: ¿Dónde está Hee?
Antes de que
pudiera responder, ambos oyeron a Hee.
—Bésame,
bb-bbésame, inféctame con tu amor, y lléname con tu veneno, tómame, tt-ttómame,
quiero ser tu
víctima, listo para ser secuestrado chico, eres un hombre lobo, tu toque es tan
peludo,
sobrenatural,
extra-hombre lobo —cantó Hee tan fuerte como pudo.
Donghae estaba
sacudiendo la cabeza con incredulidad.
—Esto va a ser
bueno. Quiero decir, en realidad podría estar avergonzado cuando se entere de
que has oído todo eso.
Siwon ladeó la
cabeza como si estuviera escuchando algo, entonces él olfateó el aire y tomó
una respiración profunda.
—Huelo alcohol.
¿Han estado bebiendo? —preguntó Siwon con incredulidad.
—¡Por supuesto que
no! —dijo Donghae evidentemente ofendido.
Siwon no reconoció
su respuesta, pero continuó haciendo preguntas:
—¿Por qué estabas
golpeando la puerta?
—Está cerrada y Hee
no me contesta. Es como si no me oyera.
—Así que, ¿podría
estar borracho y estar tratando de tomar una ducha? — preguntó Siwon con escepticismo.
—Eso. Podría ser.
Algo muy malo, ¿no? —soltó Donghae las palabras a mala gana.
Siwon ya estaba en
acción. Estaba golpeando la puerta con tanta fuerza que las bisagras temblaban.
Fuerza de hombre
lobo, debe ser agradable.
—¡HEECHUL, ABRE LA
PUERTA! —gritó.
Hubo una pausa en
el canto y todo lo que oyeron fue el agua de la ducha. Ambos contuvieron la
respiración
esperando su respuesta. Un golpe, dos golpes.
—¿Toc, toc? —lo
escucharon preguntar.
—Hee, abre la
puerta. Esto no es gracioso —intentó Donghae.
—Hee, abre la
puerta, esto no es gracioso, ¿quién? —repitió Hee y se rió.
—Está bien —dijo Donghae
a Siwon—. Tienes razón, está borracho.
—Heechul, quiero
que te alejes de la puerta —le dijo Siwon.
—¿Qué vas a hacer,
Siwon? —le preguntó Donghae con aprensión.
Siwon no le
respondió, en cambio, apoyó las manos a cada lado de la puerta, impulsó la
pierna hacia atrás y pateó duro. La puerta no se resistió en absoluto, se
astilló cuando su pie la golpeó y luego se abrió.
Vapor salió del
baño como un ser vivo, deslizándose alrededor de Siwon, pareciendo empujarlo
hacia Hee. Él empezó a entrar, pero antes de que pudiera poner un pie sobre la
jamba de la puerta, Donghae le agarró del brazo.
—Oye, amigo, él
podría estar desnudo allí dentro, así que espera aquí. Si te necesito, te
llamaré.
—Tienes razón, voy
a esperar aquí. Pero date prisa —cedió Siwon.
Donghae entró al
vapor. Hee estaba de pie en la ducha, bailando con la música que Donghae no
podía oír hasta que Hee decidió compartirla, claro está.
— Chico, eres mi
hombre lobo de la suerte, quiero caminar en tu misma onda, y estar ahí cuando
vibres, por ti arriesgaría todo. Pero tú no eres una opción, quiero ser una
víctima, listo para la objeción, y no me acuerdo de las palabras, algo sobre
veneno. Eres un alien, espera me refiero a un hombre lobo, déjame ver tus patas
peludas, no sé lo que rima con patas. — Todo esto iba con la canción de Katy
Perry, E.T. Caramba, va a estar tan malditamente avergonzado cuando le diga que
cantó sobre Siwon y sus patas.
Donghae se echó a
reír a carcajadas sólo con pensarlo. Hee se volvió al oír la voz de Donghae. Vio
más de Hee de lo que
necesitaba en toda su vida.
—¡DONGHAE!. Hola
nene, que te pareció mi canto, bastante bien, ¿verdad? Tú serás mi respaldo, el
Eun de mi “Hae”, o
como el, um. —Hee sacudió la cabeza, tratando de llegar a una combinación
adecuada, cosa que
no hizo—. Como el ojo negro a mis guisantes. —Hee se rió y casi se cayó.
Donghae saltó
hacia adelante para atrapar a su amigo y evitar que se rompa el cráneo.
—¡Mierda! Hee,
quédate quieto.
—¿Está todo bien?
¿Tengo que entrar ahí dentro? —La voz elevada de Siwon llamó la atención de Hee.
Genial, justo lo
que necesitaba Donghae, un chico borracho, caliente y desnudo persiguiendo a un
hombre lobo.
—¡No!
—Oooh, ¿trajiste
un chico a casa, Donghae? —Donghae y Hee hablaron al mismo tiempo.
Por supuesto,
ahora Hee estaba ansioso por salir de la ducha, ahora que Donghae estaba
completamente empapado.
Hee se soltó de Donghae y se dirigió hacia la puerta del baño rota…
desnudo… como en
sin ropa. Donghae estaba deslizándose, tratando de alcanzarlo. No iba a
lograrlo.
—¡SIWON! ¡Entrando
chico loco, borracho, y desnudo! —gritó Donghae tan fuerte como pudo.
Al segundo después
oyó a Siwon decir algo que sonaba curiosamente como maldiciones Coreanas
y a Hee decir:
—Oooh, eres
jodidamente caliente, como en c-a-l… —Hee estaba tratando de deletrear
caliente, es
obvio que no iba a
suceder.
Donghae finalmente
logró salir del cuarto de baño, el agua goteaba de él. Imaginó que se parecía a
un
enojado gato
mojado. Siwon había envuelto una de las sábanas de la cama alrededor de Hee,
quien
estaba en ese
momento tratando de tantearlo.
—¿Nos conocemos?
—preguntó él—. Porque si no lo hacemos, entonces deberíamos, y por
conocernos me
refiero a besarnos. —Siwon estaba valientemente tratando de mantener las manos
de Hee en áreas
apropiadas.
Donghae supuso que
debería ayudar, pero esto era demasiado bueno para dejarlo pasar. Se acercó a
su mochila y sacó su
teléfono.
—¿Qué estás
haciendo? —La voz de Siwon sonaba incrédula.
—Estoy filmando
esto. Es demasiado bueno para dejarlo pasar. Hee va a tener un ataque al maldito
corazón cuando
esté sobrio y voy a tenerlo todo en vídeo. Será como un regalo de Navidad que
sólo
seguirá
entregándose. Cada vez que necesite que me recoja, sólo voy a encender el vídeo
de Hee
borracho y chiflado,
¡tanteando a un hombre lobo que no tiene ni idea de cómo manejar un
adolescente
cachondo y borracho! Esto es como el mejor regalo de mi vida, alguien en la
galaxia
me ama. —Donghae
se estaba riendo en el momento en que había terminado de hablar.
Siwon, sin
embargo, no lo estaba.
Hee se volvió para
mirar a Donghae como si acabara de darse cuenta por primera vez que estaba
en la habitación.
—¡Donghae! Mira. —Hee
intentó susurrar como si Siwon no pudiera escucharlo, pero salió más como un grito ronco—.
¿Cómo se llama? ¡Es tan delicioso!
—Hee, ése es Siwon,
¿recuerdas? ¿Miembro de la manada de hombres lobo de Kangin? —Donghae miró a Hee por
cualquier reconocimiento.
Hee estaba
estudiando a Siwon de cerca, tenía sus manos sobre su cara. Luego le pasó los
dedos por el cabello, muy de
cerca, sin dejar de mirarle a la cara.
—Hmm, como que
parece familiar, ahora que lo dices… —Siguió estudiándolo, girando la cabeza de
lado a lado.
Siwon miró a Donghae
como buscando instrucciones. La inspiración lo golpeó.
—Dile algo mandón.
—Donghae sonrió ingenioso. Siwon le gruñó, él se encogió de hombros. —Está
bien, sé el primer
hombre lobo violado por un joven adolescente borracho. Lo que quieras, colega,
es
tu reputación.
Siwon agarró las
manos de Hee y lo miró directamente a los ojos.
—Heechul, ve y
vístete. Ahora. —Su voz era tan fría y firme como siempre. Hee se congeló, y
luego se rió cuando dijo:
—Siwon. Oh sí, te
conozco. Eres tan caliente cuando eres mandón. — Genial, pensó Donghae mientras ponía los ojos en
blanco, el Hee ebrio piensa que Siwon es sexy cuando es mandón, qué agradable. Para sorpresa de Donghae
y Siwon, Hee finalmente cedió.
—Está bien, voy a
ponerme algo de ropa. Pero sólo porque lo solicitaste tan amablemente. —Hee
comenzó a
desenvolverse de la sábana y estaba casi desnudo de nuevo cuando Siwon se dio
cuenta que tenía la intención
de vestirse allí mismo, delante de él. Se movió más rápido de lo que nunca lo
había hecho antes y fue
directamente hacia el baño.
—Dime cuando esté
vestido —le dijo a Donghae.
—Entendido,
amiguito —dijo Donghae sarcásticamente.
—¿Crees que le
gusto? Creo que me gusta, pero no debería… —La voz de Hee sonó como un niño
herido. Oh no, Hee
estaba yendo de borracho tonto a borracho triste. Los borrachos tristes son los
del
peor tipo.
—Hee, mírame —dijo
Donghae en la voz más severa que pudo reunir—. ¿Por qué crees que te gusta
Siwon?
La cara de Hee
quedó en blanco, luego sonrió.
—¿Por qué crees
que me gustaría Siwon, tontito? Es mandón, frío, insoportable, gruñón,
prepotente,
delicioso, sexy,
fuerte y alto.
—Um, Hee. —El
chasqueó los dedos en la cara de Hee, el cual se había desconectado
completamente
mientras
continuaba con su descripción de Siwon.
Esto era malo, demasiado, malditamente malo.
Hee tenía un enamoramiento
por un hombre lobo que nunca podría tener. Maldición, pensó Donghae,
¿por qué no puede
ser como las otras chicas y gustarle el capitán del equipo de fútbol, o incluso
un
mugriento rebelde
de la secundaria? Pero no, tenía que enamorarse de un hombre lobo.
La voz de Hee fue
suave.
—No es importante,
él no es una opción. —volvió al otro extremo del espectro de los borrachos y
estaba girando en
círculos con los brazos extendidos, cantando—: Él no es una opción. —Una y otra
vez en la misma canción que
había estado cantando antes.
Donghae sujetó a Hee
y lo ayudó a vestirse y luego gritó para que Siwon se uniera a ellos
nuevamente. Cuando él volvió a
entrar a la habitación, Hee inmediatamente se acercó e inclinó sobre él,
mirándolo pensativo. Él se
acercó a la cama mientras Hee continuaba pegado a él. Cuando ambos se sentaron,
él miró a Donghae.
—Entonces, ¿qué
sucedió exactamente anoche?
Donghae cerró los
ojos y se frotó la cara con fuerza con ambas manos, intentando en vano de
recordar lo que pasó pero
había un espacio en blanco en su mente.
—No lo recuerdo, Siwon
—respondió honestamente.
—Bien, ¿qué es lo
último que recuerdas?
—Hee y yo habíamos
decidido colarnos en la UCI para ver a Teukkie. Vagamos por todo el hospital
hasta que casi fuimos
atrapados por un sujeto en bata. Hee hizo que me fuera sin él y dijo que se
quedaría y distraería al
sujeto.
Siwon gruñó.
—¿A qué te refieres
con que él estaba con un sujeto? —Bajó la mirada hacia Hee para preguntarle
sobre ello, pero estaba
dormido, su cabeza apoyada contra el brazo de él. Siwon lo acostó suavemente y
subió sus piernas sobre
la cama, luego lo cubrió con las mantas. Volvió a darse la vuelta hacia Donghae
y lo inmovilizó con su
mirada—. ¿Qué demonios estaban pensando? ¿No dije específicamente que no
hicieran nada estúpido?
A Donghae le quedó
claro que nada que pudiera decir calmaría al hombre lobo enfadado frente a él,
por lo que ni siquiera
lo intentó.
—Mira, Teukkie es
nuestro mejor amigo, está solo en una habitación con tubos y mierdas pegadas a él, está sufriendo, y
tiene miedo. No íbamos a dejarlo allí solo.
—Entiendo eso,
pero pudieron haber pedido ayuda en vez de intentarlo ustedes solos —le dijo Siwon.
La mandíbula de Donghae
se abrió, desconcertado por lo que acababa de escuchar.
—¿Estás diciendo
que nos habrías ayudado?
—No voy a decir
que no les habría intentado convencer de lo contrario, pero conociendo a éste
—señaló con su cabeza en
dirección de Hee—, no habría cedido. Por lo tanto sí, los habría ayudado.
—Vaya. Bueno, la
próxima vez que queramos romper algunas reglas definitivamente reclutaremos tu
pericia.
—Bien, ¿ahora
recuerdas algo más? ¿Lograste entrar a la UCI? ¿Recuerdas regresar a tu
habitación?
—Siwon lanzó
pregunta tras pregunta a Donghae.
—Espera, Siwi.
Déjame pensar —le dijo Donghae, levantando ambas manos en un esfuerzo por
detenerlo—-.
Recuerdo estar parado frente a las puertas de la UCI y estaba intentando
descubrir cómo abrirlas y luego…
—Donghae frunció el ceño, esforzándose por recordar lo que había sucedido.
—Espera, ustedes
se escaparon de Donghwa, ¿cierto?
Donghae asintió y
observó como Siwon se levantaba y caminaba a la puerta. Asomó la cabeza y le
escuchó pedirle a Donghwa
que entrara. Donghwa entró, sus hombros caídos, y Donghae pudo decir que estaba
preparándose para ser masticado por el Beta de su manada.
—Donghwa. —La voz
de Siwon fue baja y exigía la verdad—. ¿Podrías explicarme cómo dos
adolescentes fueron capaces de
escaparse de ti?
Donghwa miró a Donghae
y luego a Siwon.
—Debe haber sido
cuando fui al baño. No me fui mucho tiempo, y la habitación estaba tan
silenciosa que pensé que se
habían quedado dormidos. — Donghwa se tropezó con sus palabras mientras el
miedo emanaba de él.
—¿Por qué no me
llamaste y pediste que viniera y te relevara?
—No lo sé, Siwon.
No pensé que intentarían hacer algo.
Siwon resopló.
—¿No has
estado cerca de estos chicos
durante el mes pasado? Seguramente has notado que son un imán para los
problemas.
—Oye, no hay
necesidad de estar odiándonos. —Donghae frunció el ceño.
—Decir la verdad
no es odiar, como lo llamas, es sólo declarar un hecho —le informó Siwon.
—Bien, así que
sabemos cómo se fueron, ahora tenemos que saber cómo regresaron. —Siwon fulminó
con la mirada a Donghwa—.
¿Por casualidad estabas en tu puesto cuando los chicos regresaron?
—Sí, estuve aquí
ambas veces —respondió él, no menos nervioso que antes.
—¿A qué te
refierescon ambas veces?
—Me refiero a
ambas veces. No llegaron juntos a la vez —explicó Donghwa—, llegaron por
separado. Donghae fue el
primero en volver.
—No recuerdo
volver —le dijo Donghae.
—Bueno, no
esperaría que lo recordaras. Estabas desmayado en el ascensor.
Donghae jadeó y se
cubrió la boca. Siwon no dijo nada, sólo esperó a que el lobo siguiera.
—Las puertas del
ascensor se abrieron y nadie salió, por lo que me acerqué corriendo antes de
que
pudieran cerrarse
para ver si alguien estaba dentro, y ahí estaba en el suelo del elevador. Así
que te
recogí y puse de
nuevo en la cama. Ahí es cuando me di cuenta que Hee también se había ido. —Donghwa se estremeció ante
el bajo retumbo proveniente de Siwon.
—Dime, ¿por qué no
me llamaste en este punto, Donghwa? ¿No crees que fue algo relevante que
encontraras
inconsciente a Donghae en el ascensor y Heechul perdido? —Para cuando Siwon
terminó de hablar, estaba
paseándose por la habitación, pareciendo estar a punto de estrangular al pobre
lobo.
—Debería haberte
llamado ahí mismo, pero decidí esperar y ver si Hee volvía por si solo. Si no
regresaba pronto iba a
llamarte. Ahora veo en retrospectiva que no fue la mejor idea.
—¿Eso crees?
—preguntó Siwon—. ¿Cuándo regresó Heechul? —gruñó.
—Regresó hace una
hora en compañía de un sujeto en bata que dijo se llamaba Matty. Estaba
bastante borracho cuando le
pregunté por el hombre. Él se asustó y apresuró a irse. Entonces ayudé a Hee a
regresar a su habitación y
he estado sentando allí afuera desde entonces —terminó Donghwa.
Donghae estaba
convencido de que si él estuviera en su forma de lobo estaría escondiendo el
rabo entre las patas. Por
otra parte, cuando miró a Siwon y la obvia ira contra la que luchaba, Donghae
tuvo que admitir que se
sentía con ganas de esconderse también.
Siwon miró
finalmente a Donghwa.
—Puedes irte.
Donghwa soltó un
suspiro que Donghae no pensó ni por un instante que él se hubiera dado cuenta
que estaba
conteniendo. Se dio la vuelta para irse pero antes de lograr salir por la
puerta Siwon le dijo:
—Donghwa, no
olvidaré esto, y lo resolveremos una vez que todo lo demás se haya solucionado.
¿Entendiste?
—Sí, Beta. —Y
luego cerró apresuradamente la puerta.
Donghae podía
sentir el enojo saliendo de Siwon, era casi tangible.
—¿Estás bien? —le
preguntó.
—No estoy
realmente seguro en este momento —contestó honestamente.
—Bueno, tal vez
deberías tomarte un descanso. Hee no está despierto para que le gruñas y no
tiene
sentido gruñirme
ahora cuando vas a volver a hacerlo cuando despierte.
—Esa probablemente
es una buena idea. Sin embargo, te lo aviso Donghae, un descanso no enfriará mi
temperamento. Bien podría ser peor mientras tengo tiempo de pensar en todas las
posibilidades de la pequeña aventura
de Heechul.
—Bueno, bien, no
te preocupes por eso ahora. Quiero decir, él obviamente apareció completamente
vestido. Donghwa
no mencionó que apareciera despeinado o algo así, así que puedes asumir que no
dejó que este sujeto
Matt le hiciera algo.
—Donghae, no estás
ayudando. —Siwon se giró lejos de ambos chicos, respirando hondo y exhalando
lentamente—. Mira, voy a comprobar a Kangin y ver si ha escuchado algo desde
que me fui. Por favor, no dejes esta
habitación hasta que regrese. ¿Crees que puedes manejar eso?
—Seguro, Siwon,
dado que lo has pedido tan amablemente —respondió Donghae, su voz llena de
sarcasmo.
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