Sapphire Wolf (T2)- 12




—Hee, recuerdas lo que a los monos les gusta tirarles de vuelta a los turistas, ¿no? Escúpelo ahora
—gruñó Donghae.

—Él me desafió a darle una razón para matar a alguien si llegara la hora de que él me llamara Virgin
y ya no tuviera nada que ver conmigo.

Cuando Donghae y Teukkie no dijeron nada, Hee levantó la mirada hacia ellos y vio que ambos
estaban con los ojos como platos, con la boca abierta

—¿Van a decir algo?

Donghae se levantó y empezó a pasearse por la habitación, mordiéndose el labio inferior y murmurando
en voz baja. Teukkie siguió luciendo perplejo.

―¿Hola? Esta es la torre de control llamando a todos los insistentes amigos que saben cómo intimidarme para decirles algo que no comprendo por mí mismo y ahora están actuando como los monos a los que se referían anteriormente.

Eso efectivamente logró cerrarle la boca a Teukkie y finalmente reconoció a  Hee.

―Lo siento, estuve como descolocado por un momento. Simplemente no puedo creer que haya dicho
eso.

―¿Qué quiere decir? ―preguntó Hee, su voz extrañamente suave.


Donghae miró hacia Hee y luego a Teukkie.

―¿Quiere decir lo que creo que significa?


―No lo sé, Hae. Quiero decir, ¿por qué otra cosa iba a importarle cuál era su estado de virginidad? ―respondió Teukkie.

―Tal vez sea una cosa de hermano pequeño, como si él sintiera que tiene que ser su hermano mayor ―dijo Donghae, asintiendo como si eso de alguna manera lo haría cierto.

―Lo he visto mirarlo, y si lo ve como un hermano menor entonces Kangin tiene que rematarlo a golpes porque parece que está considerando el incesto.

Hee observaba el intercambio entre sus dos amigos mientras se comunicaban como si él no estuviera sentada justo en frente.

―Oye, estoy sentado aquí. ¿Podrían dejar de hablar como si no estuviera en la habitación?

―Cierto, lo siento Hee. ―Donghae se puso de rodillas frente a Hee y colocó las manos en sus rodillas para mantener el equilibrio―. Teukkie y yo creemos que Siwon está siendo posesivo contigo.


―¿Esa es tu investigadora en acción? ¿En serio? Bueno, maldita sea, ¿por qué no se van a resolver
el misterio de la muerte de Kenedy viendo como ustedes son tan buenos en entender las cosas y
todo eso?

―Hay mucho más de eso que sólo posesividad, Hee. ―Teukkie se puso de pie y reanudó el paseo de
un lado al otro que Donghae había abandonado―. Él te trata como… ―Teukkie hizo gestos con las
manos como si tratara de animar a alguien a escupir lo que no podía conseguir que su boca dijera.

―Es como si él piensa, tal vez… ―comenzó Donghae, pero luego abortó su pensamiento.

―Sólo escúpelo ya. ¿Él piensa y me está tratando como qué?

―Compañero ―soltó Teukkie tan rápido que parecía que alguien le había dado una palmada en la
espalda para que salieran las palabras―. Él te está tratando como lo haría un compañero.

Hee se sintió como si hubiera recibido un puñetazo en el estómago. Trató de tomar aire, pero sus
pulmones no funcionaban.

Pensó que escuchó voces, pero sonaban ahogadas, como si vinieran del otro lado de una puerta cerrada. Sus pensamientos estaban saltando de una imagen a otra, como uno de esos libros de imágenes donde mueven las ilustraciones haciéndolos ver con vida cuando van más rápido, pero esto no era un libro, esta era su vida.

Vio a Siwon venir hacia su cama cuando le preguntó si estaba bien, un giro, él estaba arrodillado a su
lado observando la piel en sus piernas, un giro, él estaba de pie en el pasillo del hospital prácticamente gruñéndole, un giro, él estaba poniendo una manta sobre él mientras yacía en la cama del hospital temblando.

Una y otra vez las imágenes llegaron. Había un denominador común en cada imagen: Siwon estaba
prácticamente gruñéndole en todas ellas. De repente, sintió una fría humedad en su rostro. Jadeó,
tratando de orientarse, llenando sus pulmones con precioso y vivificante oxígeno.

―Mierda, Donghae ―farfulló Hee―. Mejor que haya una apestosa razón de cambio mundial para que tires agua en mi rostro.

―No estabas respirando y no respondías a nuestro llamado. Iba a darte una bofetada, pero Teukkie
decidió que la marca de una mano estropeando tu piel puede no ser lo más prudente en estos
momentos ―explicó Donghae con nerviosismo.

―He encontrado un fallo en tu razonamiento ―dijo Hee, mirándolos como si más les valiera estar de
acuerdo con él. Cuando Teukkie le entregó una toalla para secar su cara, explicó su teoría―. Cada vez que Siwon está en la habitación conmigo, me mira como si me quisiera estrangular. Ni una sola vez ha aparentado siquiera estar interesado en mí de esa forma.

―Tú mejor que nadie debes saber que una expresión de deseo intenso se puede confundir con una de estrangulación ―dijo Teukkie, con toda naturalidad.

Hee ladeó la cabeza, levantando las cejas.

―Oh, lo dices en serio, Teuk. ¿En qué momento de tu vida, llena de oportunidades increíbles y
desconcertantes, has experimentado a un hombre mirándote donde pensaste, es esto deseo por mí, o
por el estrangulamiento que él podría estar pensando en darme? Realmente, por favor dime para así
poder avivar la pequeña llama de esperanza que mi sentido común está tratando desesperadamente
de sofocar con la fría realidad de que Siwon, ¡NO ES Y NUNCA  SERÁ  UNA  OPCIÓN,  EN  MI  “NO  SOY  UN  PUTO  HOMBRE LOBO” VIDA!

Hee maldijo las lágrimas condenatorias que revelaban la profundidad de sus emociones con respecto
al lobo melancólico que era una sombra constante en su mente.

―Hee, lo siento ―susurró Teukkie mientras se sentaba en la cama y le pasaba un brazo por los hombros ― No sabía que tenías sentimientos por él.

―Por supuesto que tengo sentimientos hacia él. Siento que es un pomposo, peludo, infestado con pulgas cabeza dura.

Hee pensó que si lo decía en voz alta, entonces, tal vez lo podía creer. No hubo suerte.
La habitación se quedó en silencio sin la ruidosa voz de Hee para llenar los espacios vacíos.

―Entonces, ¿qué tal este clima que hemos estado teniendo? ―dijo Donghae, siempre la que trataba de suavizar las cosas.

De repente, Teukkie se levantó, haciendo que Hee casi cayera al suelo.

―¿Qué mierda, Teukkie? ―escupió Hee. Luego miró a la cara de Teukkie y pudo ver que algo andaba muy mal.

―Voy a vomitar. ―La voz de Teukkie era desesperada y afligida.

Hee puso sus manos sobre los hombros de Teukkie y comenzó a guiarla hacia el baño, todo el rato
gritando órdenes a Donghae.

―Ve a buscar a Kangin, consigue algunas toallas y paños fríos, luego consigue a el doctor Lee.

Donghae se dirigió hacia la puerta, pero esta se abrió de golpe, gracias a Dios, antes de que estuviera lo suficientemente cerca para ser golpeado por ella.

Kangin entró como una tormenta de energía. Pasó junto a Donghae, siguiendo los sonidos dolorosos y enfermizos procedentes de su compañero. Siwon entró detrás de Kangin y se detuvo al lado de Donghae.

―¿Qué está pasando? ―preguntó, con una voz tan autoritaria como siempre.

―Estábamos sentados, hablando sobre… ―Donghae hizo una pausa, recordando lo que habían estado hablando antes de que Teukkie hubiera enfermado―. Nada importante, y luego Teukkie se levantó y dijo que iba a vomitar. Hee lo llevó al baño y yo iba a buscar a Kangin pero él ya estaba entrando en la habitación.

Siwon sólo asintió en respuesta. Donghae se dio cuenta entonces que tenía que conseguir toallas y un
paño frío. Se dirigió a la puerta de la habitación  y  luego  hizo  una  pausa para volver  la mirada  hacia Siwon

―¿Puedes contactar con el doctor Lee de alguna manera?

―Sí.

―Un “hombre de pocas palabras” sería un eufemismo para describir a ese lobo ―murmuró Donghae
mientras continuaba en su búsqueda por las toallas.

―¿Qué pasó? ―le gruñó Kangin a Hee mientras se acomodaba a sí mismo en el lugar que él acababa
de ocupar. Se hizo cargo de sostener a Leeteuk mientras vomitaba cualquier cosa y todo de su cuerpo.

―No sé lo que pasó. Estábamos hablando y todo el mundo estaba bien y luego bam, Teukkie
estaba enfermo. ―Hee dio una palmada juntando las manos en énfasis.

«Angel, ¿puedes decirme qué está mal?» le preguntó Kangin, su voz llena de la angustia que sentía al
verlo tan enfermo.

«Se siente como si mis entrañas están tratando de salirse a arrastras por mi boca. ¿Cuán descriptivo
es eso?»

Teukkie envió sus pensamientos y gimió en voz alta al mismo tiempo que otro espasmo se apoderaba
de su estómago, y comenzó a tener arcadas porque no quedaba nada en su interior.

Kangin le puso la mano en la frente, cuando él comenzó a temblar.

«Estás ardiendo, Leeteuk.»

Kangin no sabía nada acerca de la fiebre, pero estaba seguro de que su temperatura iba más allá del
punto de ser sólo una fiebre leve.

―Toma, tengo toallas húmedas. ―Donghae entró en el cuarto de baño y abrió el agua fría, empujando las toallas bajo la corriente, luego exprimió el exceso y le dio una a Kangin.

―Ponla en su cuello ―indicó Hee, y luego tomó una toalla de Donghae y la dobló colocándola en el suelo y empujándola debajo de Teukkie para que así sus rodillas no estuvierna en el piso duro y frío.

―Siwon se puso en contacto con el doctor Lee, está en camino hacia aquí ―les informó Donghae.

Teukkie finalmente se dejó caer contra Kangin, agotada de estar con arcadas. Su rostro enrojeció por la fiebre, y su respiración era superficial. Kangin lo recogió y lo llevó a su cama. Mientras él suavemente lo depositaba habló con Siwon.

―Llama mi padre.

―Hecho, mi príncipe, ya le he llamado. Él, tu appa y Sora estaban abajo en la cafetería. Están de camino ahora.

Kangin asintió.

―Gracias.

Sin previo aviso Teukkie gritó:

―¡KANGIN! ―Hee y Donghae saltaron. Siwon se estremeció a causa de su sensible audición de lobo.

Kangin frotó la frente de Leeteuk.

―Estoy aquí, amor. ¿Qué puedo hacer? ―Kangin estaba apretando los dientes, la frustración y el miedo corriendo por su cuerpo.

―Haz que se detenga ―le susurró Leeteuk―. Por favor, haz que se detenga.



Hongki marcó el número de Jihoon mientras continuaba examinando la muestra de sangre que tenía en el microscopio. Sus manos temblaban mientras giraba el dial para que la diapositiva
entrara en foco.

No podía creer lo que estaba viendo, pero ahí estaba a color vivo. La sangre de Heechul coincidía con
la sangre de Teukkie. La única diferencia siendo la cantidad de células que llevaba el gen. Dado que
Teukkie era medio lobo, su sangre estaba llena de ellos. La de Heechul, sin embargo, tenía lo suficiente como para ser reconocible por una persona que sabía qué buscar. Jihoon finalmente respondió.

—Dime que tienes buenas noticias, doctor Lee.

—Bueno, si te refieres que puedo encargarme de Teukkie por sí mismo, entonces sí tengo buenas
noticias. Acabo de recibir una llamada del Beta de Junjin. Teukkie está enfermo. Ahora me voy a verlo y haré que lo trasladen a la UCI, donde no se permite a los visitantes de cualquier clase después de las 9:00 p.m. Tengo un par de batas para ti aquí en mi oficina. La voy a dejar desbloqueada para que puedas entrar. Espera en mi oficina mi llamada.

Hongki estaba cambiando los portaobjetos en el microscopio, poniendo los de Heechul a un lado y
deslizando la muestra de Teukkie bajo el alcance. Al mirar por el ocular dejó de escuchar cualquier cosa que Jihoon dijera. Había pensado que esto podría suceder, pero pensarlo y verlo es muy diferente

―Está bien, Jihoon, te llamaré cuando esté listo. Adiós. —Y sin escuchar su respuesta colgó.

Siguió examinando la sangre a medida que veía las células humanas atacar a las células de hombre
lobo. Teukkie había recibido una transfusión de sangre antes de que él hubiera sido capaz de detenerlo.

Eso era lo que estaba viendo en la diapositiva. Las células humanas de la sangre que no pertenecía a
Teukkie estaban atacando a sus células.

Había oído que esto podría ocurrir cuando un lobo recibía sangre  humana, porque la sangre humana
reconoce las células lobuna como un virus y atacaban en consecuencia. Sabía de sólo una cura, una
forma de evitar que las células humanas mataran a las células del lobo y así matar inevitablemente al
hombre lobo.

Cuando se puso de pie y se colocó su bata de laboratorio, echó un último vistazo a la diapositiva y luego se volvió para ir a la habitación de Teukkie. Se decía a sí mismo que todo iba a estar bien, que Jihoon podría sanarlo, que no estaba poniendo a Teukkie en ningún daño real.

Antes de que su conciencia pudiera convencerlo de ello ya estaba de pie frente a la puerta de Teukkie.
Había sido capaz de oír sus gritos desde el pasillo y sólo podía imaginar lo doloroso que era para su cuerpo volverse sobre sí mismo. Ahí está, ¿ves? Voy a ayudarlo al darle la morfina para mantenerla bajo control, y entonces no va a sentir el dolor hasta que Jihoon pueda curarlo.


Apaciguando su culpa, volvió el pomo de la puerta y entró en una habitación llena de gente preocupada, un Alfa emocionalmente fuera de control, y los gritos de un chico muy enfermo.

Gracias a Dios, ante la vista de una persona enferma el médico en él le dio una patada y se concentró en ese papel, en hacer algo para ayudar.

Para el momento en que el doctor Lee entró en la habitación todo el mundo estaba allí, revistiendo la
pared de la habitación.

Cada rostro estaba envuelto en preocupación y miedo por Leeteuk. Kangin escuchó la puerta abrirse. Se volvió a ver a el doctor Lee de pie en la sala, y antes de que nadie pudiera hacerle una pregunta él
levantó la mano y se dirigió a la cama de Leeteuk. Sólo se oía los gemidos y los gritos de su compañero.

—Por favor, haga algo por él. —Kangin se encontró rogándole al doctor Lee, desesperado por algo,
cualquier cosa para ayudar a Leeteuk.

El doctor Lee escuchó el corazón de Leeteuk, y luego destelló una luz en cada ojo. Apartó las manos de Leeteuk lejos de su estómago y comenzó a empujar en diversos lugares, provocando que un grito
emergiera. Kangin gruñó pero el doctor Lee no se dejó intimidar.

—Guárdatelo, lobo. No le puedo ayudar si tú esperas que no haya ningún dolor. —Metió la mano en su bolsillo y sacó algo que Kangin no reconoció. Lo vio recorrerlo al otro lado de la frente de Leeteuk y luego observó una  pantalla equeña a un lado—. Es un escáner térmico para tomarle la temperatura.
Está en grados centígrados lo que significa que si no logramos que la temperatura disminuya o bien
tendrá un ataque, entrará en coma, o ambos. —El doctor Lee miró a Junjin—. Voy a tener que llevarlo a la UCI. No se permite a nadie allí, los pacientes están demasiado enfermos para ser expuestos a los gérmenes que las personas inocentemente podrían traer dentro. ¿Entiendes lo que esto significa?

Junjin asintió.

—Voy a cuidar de él.

Vieron como él doctor pulsó un botón que hizo que una alarma sonara, entonces todos oyeron pasos desplazándose rápidamente hacia la habitación. Lo siguiente que Kangin supo era que estaba siendo
empujado fuera del camino. Siwon y su padre lo agarraron antes de que pudiera arremeter contra el
personal del hospital, a medida que estos transferían a Leeteuk en una camilla. 

Él no podía concentrarse en lo que el doctor Lee estaba diciendo mientras observaba a su compañero siendo apartado de él a donde sea que él no pudiera ir… otra vez. Una vez que Leeteuk se perdió de vista finalmente miró a el doctor.

—¿Qué pasa con él? —gruñó.

—No lo sé todavía, Kangin. Tendrás que ser paciente y dejar que haga mi trabajo. El hecho de que
estés gruñendo y lanzando ataques masivos de Alfa no ayudará a que Teukkie mejore.

Kangin se sorprendió por la audacia de el doctor, pero se encontró con que lo respetaba por ello.

—Sólo haga que se sienta bien otra vez. Por favor.

El doctor Lee puso su mano sobre el hombro de Kangin.

—El va a estar bien. —Dio un paso atrás entonces de modo que pudiera mirar a todo el grupo hacinados en la pequeña habitación—. Les haré saber tan pronto como sepa algo. —Y luego se dio la vuelta y se marchó.

La habitación se quedó tranquila, nadie atreviéndose a romper el silencio, porque entonces tendrían
que reconocer el miedo que amenazaba con consumir a uno por uno. El silencio fue roto por una
maldición de parte de Hee.Todo el mundo se volvió hacia él y lo observó mientras luchaba con la cinta que le sujetaba la vía intravenosa en su lugar.

No estaba prestando atención al hecho de que todo el mundo se centró en él.

—Oye, dijo la enfermera idiota número uno, mira esta vía que acabo de poner en este chico, ¿crees que he usado suficiente cinta? Por supuesto que no, dijo la enfermera idiota número dos, tienes que
envolver un rollo entero alrededor de su brazo para que nada menos que un milagro permita que se
despegue.

Murmuró Hee el diálogo en voz baja cuando finalmente consiguió sacar la cinta fuera de la vía
intravenosa en su brazo

— ¡Por fin! —anunció triunfalmente mientras sacaba la vía de su brazo, la sangre corrió por su mano.
Levantó la vista y vio a todos mirándole—. ¿Qué? —preguntó. Sus ojos se agrandaron cuando Siwon
comenzó a caminar hacia é. Estaba tan cerca que Hee tuvo que estirar el cuello hacia atrás para mirarloa la cara.

—¿Por qué te sacaste eso? —Su rostro era duro, ilegible.

—Porque si voy a tener que tener un soporte atado a mí, preferiría que sea uno del que pudiera
conseguir un cierto uso. Pero como era este soporte en particular mi compañero constante, debo
decir que simplemente no estaba funcionando para mí. —Hee batió sus pestañas hacia él—. Además,
¿qué diablos importa? ¿Mi mejor amigo acaba de ser llevado a toda prisa a la UCI y tú estás preocupado por mi estúpida vía intravenosa?

—Ponla de nuevo. —Sus ojos fulguraban dorados mientras él lo aferraba del brazo.

—Oh, sí, seguro. Ahora mismo me pongo en eso —dijo sarcásticamente mientras quitaba la mano de él alrededor de su brazo. Prestándole mucho menos atención que si se tratara de un mosquito, lo rodeó para así poder ver a los demás

— Entonces, ¿cuál es el plan, Junjin? —Oyó el rasgar de un material y cuando se volvió hacia el ruido vio como Siwon arrancaba un pedazo de la sábana de la cama y lo llevaba hacia él. La tomó del brazo, suavemente esta vez, y envolvió el material alrededor del punto que todavía estaba sangrando por donde había arrancado su vía intravenosa. Sin decir una palabra, regresó al lugar en el que previamente había estado de pie, mientras Hee le veía retroceder.Junjin respondió como si la escena en particular no hubiera tenido lugar.

—Por ahora tú y Donghae se quedarán aquí, y yo voy a poner un guardia en la puerta. Kangin y Siwon permanecerán en la sala de espera de la UCI. Kangin — Junjin miró a su hijo—, no intentarás desafiar lo que el doctor Lee ha dicho. ¿Está claro?

—Como tú digas, así será —respondió formalmente Kangin, el cuello al desnudo en sumisión.

—Bien —continuó—, Hyesung y Sora se irán a casa y descansarán. —Sora empezó a interrumpir, pero Hyesung la detuvo con una mano en el brazo y dio un brusco movimiento de cabeza. Sora se tragó las palabras que iba a decir.

—Sora, entiendo que quieres estar aquí por tu hijo, pero necesitas descansar y no lo conseguirás aquí.
Confía en mí, ¿de acuerdo? —Junjin esperó su respuesta antes de continuar.


—Está bien —respondió ella con voz firme. Junjin miró su reloj, marcaba las 9:30 p.m.

—Creo que es hora de declarar la noche. Tan pronto el doctor Lee tenga información se pondrá en contacto conmigo y todos estarán informados en cuestión de minutos. —Junjin se volvió para salir y Hyesung le siguió. Sora se acercó a Hee y la abrazó y luego hizo lo mismo con Donghae.

—No se preocupe, señora P —le dijo Hee—. Teukkie es la persona más testarudo que conozco. Él va a estar bien.

Sora asintió y con los ojos llenos de lágrimas contenidas, se fue también.

Kangin les dio a cada una un abrazo también y les dijo que lo llamaran si necesitaban algo, a lo que Hee le arrojó:

—Creo que Teukkie patearía mi trasero si te llamo para lo que necesito. — Siwon gruñó, pero al menos logró una pequeña sonrisa de Kangin. Eso era lo que Hee había estado pretendiendo lograr. Se volvió hacia Siwon y le enseñó la lengua como un niño caprichoso.

Mientras él y Kangin se iban, Siwon se volvió una vez más.


—Ustedes dos. No hagan nada que consideren brillante. El resto de nosotros lo considerará estúpido.
—Cerró la puerta justo cuando Hee arrojó la cosa más cercana que pudiera tener en sus manos.

—Arrrrrgh, lo voy a despellejar la primera vez que lo vea como un lobo y lo convertiré en una bonita
alfombra para poner en frente de la chimenea —gruñó Hee.

—Um, Hee, no tienes chimenea —señaló Donghae.

—Mi chimenea hipotética, Donghae. Vamos, ponte al día, ¿quieres?

—Oh, mi error. Olvidé que se supone que debo estar tomando notas de tu vida hipotética de manera
que cuando hagas referencia a ella voy a saber exactamente de qué mierda estás hablando.

—Bueno, al menos eres capaz de admitir cuando te equivocas. Ese es un paso en la dirección correcta. —Hee le dio unas palmaditas a su amigo, y luego saltó hacia atrás justo antes de que el puño de Donghae pudiera conectar con su hombro—. Hombre, es bueno no tener ese estúpido soporte pegado a mí.

Donghae se sentó en la cama y miró a Hee, su cara ya no juguetona.

—¿Cuál es el plan, Hee? Sé que estás cocinando uno porque eso es lo que mejor sabes hacer, así que,
¿qué vamos a hacer?

—Colarnos en la UCI, por supuesto —dijo Hee, con toda naturalidad.

—Genial. —Donghae sonrió con complicidad y luego escuchó con atención mientras Hee le explicaba su plan.



1 comentario:

  1. Y la pregunta del millón es...
    Si Hee y Siwon son compañeros, porque Hee no tiene marcas como Tukkie~ ...
    Es porque no tienen la misma cantidad de gen lobo o qué!???
    Ay ño....pobre Tukkie~

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...