Marcado (T1)-11



Estacionar fue una pesadilla y caminar por la vereda llena de gente con bolsas llenas de comida para llevar y mi portátil resultó ser un reto interesante, pero lo hice y la puerta de vidrio pintada con una interesante mezcla de viejos tatuajes de marineros se abrió antes de averiguar cómo hacer malabarismos con las manos llenas con el fin de abrirla. Hyukjae tomó la comida, presionó un rápido y duro beso en mi sorprendida boca y me guió al salón de tatuajes. Volteó el letrero  en la puerta para cerrar y me guió más allá de un largo mostrador de mármol que tenía una serie de portafolios encima y una enorme computadora de alta tecnología apoyada en la parte superior.
Cada una de las estaciones de trabajo estaba dividida por un muro a la altura de la cintura y una televisión pantalla plana montada. Todo era  brillante y brillaba de limpio, había diversas ilustraciones cubriendo las paredes y todo tipo de diseños interesantes de tatuajes de la vieja escuela para que las personas escogieran salpicando el espacio disponible de la pared.
Era visualmente estimulante. Todo era muy Hyukjae, era como si hubiera encontrado un lugar para trabajar completa y totalmente con quien era como persona y era realmente especial de ver. Me llevó a una habitación trasera que tenía una mesa y un sofá, así como un mini refrigerador y un montón de diferentes estaciones que tenía mesas de dibujo y luces especiales para que los artistas usaran. Sentado en la mesa había un hombre de mediana edad que fácilmente podía haber sido uno de los amigos de golf de mi padre, excepto por el hecho de que él estaba sin camisa y el centro de su pecho estaba cubierto no de un pelo gris sino de un contorno en color negro de un águila calva y una bandera de Corea.
Hyukjae vertió las bolsas en la mesa y empezó a cavar en ellas.
—Donghae, este es Mark, Mark, este es Donghae, espero que no te importe si él se queda por acá un rato ya que es bastante agradable por traernos la comida.
Él empezó a repartir las cosas en unos platos que sacó de la nada.
—Algo seguro, no sabía que saliste y encontraste a alguien Hyukjae, y alguien bonito.
Me guiñó un ojo por encima de la cabeza del sujeto y me entregó un plato cargado que probablemente yo no reduciría.
—Seguro que lo es.
Comimos en un silencio compatible por unos cuantos minutos, pero seguí revisando el audaz contorno sobre el pecho de Mark. Era enorme y parecía hacer un enorme compromiso para alguien ya en sus cincuenta.
—Esa pieza es bastante impresionante. —Bajó la vista hacia sí mismo y luego volvió a subirla hacia Hyukjae.
—El chico tiene verdadero talento. Busqué por toda la ciudad hasta encontrar a alguien que le haría justicia a lo que quería. Hyukjae lo consiguió enseguida y no dolió que su hermano estuviera enlistado por lo que entendió la importancia detrás de ello.
—Mencionó que era una pieza en recuerdo de su hijo.
—Desafortunadamente. Bomba en la carretera hace algunos años, era mi hijo mayor y nada pareció una manera apropiada para honrar lo orgulloso que debía estar de ser su padre.
Extendí  la  mano  y  apreté  la   del anciano mientras parpadeaba para alejar la humedad que se amontonaba en mis ojos.
—Creo que es hermoso.
—Mi chico era una ventosa para los buenos tatuajes de la vieja escuela. Me preocupaba por él cada vez que llegaba a casa con algo nuevo. Lo emocionaría hasta los huesos que esta fuera la manera que escogí para mantener viva su memoria.
—¿Lo terminarás hoy? —le pregunté a Hyukjae quien estaba comiendo de pie mirando atentamente la interacción entre el cliente y yo.
—No. Algo así de grande toma varias sesiones. Hoy machacaremos el resto del sólido negro y el gris, conseguir algunos destaques y terminar todo el sombreado, su siguiente sesión será de una hora más o menos y le pondré el color. Va a ser un clásico cuando esté todo terminado.
Terminamos de comer y ofrecí limpiar el desorden, mientras Hyukjae  salía para acomodar a Mark. Estaba sacando mi computadora y mis libros en la habitación trasera cuando asomó la cabeza en el cuarto y meneó su dedo hacia mí.
—Ven aquí y acomódate en una de las estaciones vacías.
—No quiero estar en el camino.
—Vamos Nemo, tú haces que la vista mejore.
Puse mis ojos en blanco hacia él y me moví para acomodarme frente a él. Me acomodé en la silla sorprendentemente cómoda y apoyé la  computadora en mi regazo.
—¿Qué estás estudiando?
Alcé la mirada hacia Mark que estaba haciendo una interesante mueca mientras Hyukjae estaba inclinado sobre él, el constante zumbido de la máquina de tatuajes sorprendentemente adormecedor y reconfortante.
—Quiero ser doctor. Finalmente me gustaría trabajar en emergencias.
—Esa es una meta bastante grande. ¿Por qué emergencias?
Tire  de  mi  cabello  hacia  arriba  en  un  descuidado  nudo  sobre  mi cabeza.
—Siempre quise ser doctor, mi papá es cirujano del corazón, pero perdí a un amigo realmente cercano hace unos cuantos años en un terrible accidente de auto y supongo que sentí que si quizás hubiera tenido mejores cuidados cuando llegó a la sala de emergencias, él lo habría logrado. Quiero hacer una diferencia cuando más importa.
Hyukjae alzó la mirada y nos miramos fijamente entre nosotros por un largo momento antes que bajara su cabeza y volviera a lo que estaba haciendo. Mark gruñó.
—Es un joven bastante especial el que tienes aquí, chico. Será mejor que hagas las cosas bien con él.
Él murmuró algo que no escuché y volví mi atención al proyecto en el que todavía tenía un montón de trabajo restante por hacer. Escribí y la máquina zumbó por unas sólidas dos horas. No hablamos mucho, yo porque estaba trabajando e inadvertidamente mirando a Hyukjae, Mark porque estaba claro que esta vez le estaba doliendo, y Hyukjae porque cuando trabajaba se concentraba únicamente en lo que estaba haciendo y eso era algo extraordinario de ver.
Realmente estaba poniendo un poco de sí mismo en lo que estaba haciendo sobre Mark y no se conformaba con menos que un perfecto producto terminado. Creo que observarlo trabajar, observarlo diligentemente cambiar el cuerpo de este hombre para siempre me hizo enamorarme de él un poco más.
Mark tuvo que tomarse un par de descansos y cada vez que él se levantaba Hyukjae se acercaba a mí. La primera vez soltó un beso en la cima de mi cabeza, la segunda me haló a una sesión de cuerpo entero de besuqueo que hizo que reajustara mi ropa cuando Mark regresó al interior de fumar un cigarrillo. En términos generales, fue una manera agradable de pasar una tarde y terminé mucho de mi trabajo.
Cuatro horas más tarde Hyukjae estaba limpiando manchas de tinta negra en la irritada piel de color rojizo de Mark y la imagen que tenía en su pecho era un tatuaje bellamente grabado que sería un honorable tributo a su hijo caído. Le dije nuevamente lo hermoso que pensaba que era y que me encantaría verlo cuando estuviera completo, me dio un abrazo como un verdadero papá haría y me dijo que me cuidara. También él pagó a Hyukjae lo que me hizo oponerme. No tenía idea de cuánto constaba ser tatuado y luego le dejó una gigantesca propina encima de ello.
Hyukjae me dijo que empacara y luego fue a limpiar su estación y a cerrar la tienda por la noche. Nos tomó otra hora finalmente irnos y para entonces  yo estaba dando bandazos y durmiéndome. Mi auto estaba lo bastante cerca por lo que decidí tan solo dejarlo y no intentar encontrar un lugar  más cercano a su apartamento y Hyukjae me prometió levantarse a primera hora de la mañana y llevarme si yo quería. Saludamos a Kyuhyun, pensé que quizás él quería sentarse por un segundo y charlar, pero soltó mis cosas sobre la mesa de café, agarró un par de cervezas del refrigerador y me arrastró a su habitación.
No hablamos, no parecía ser necesario. Por el momento le estaba agarrando el truco a toda la cosa del sexo, o mejor dicho toda la cosa del sexo trabajado con Hyukjae. Él era muy táctil, muy de poner las manos encima y me beneficiaba de todo ello. Luego de revolcarnos no una sino dos veces me  quedé quieto felizmente extendido sobre su pecho desnudo trazando al azar las escamas de la serpiente de su brazo junto a mi cara. Estaba apoyado sobre una almohada y bebiendo una de las cervezas y molestando con su teléfono mientras dibujaba alguna especie de diseño en mi espalda con su dedo. Estaba saciado y casi dormido cuando su voz resonó a través de mi cabeza.
—¿Quieres venir a otro espectáculo conmigo el sábado? Tatué a uno  de los sujetos de SJM y tengo pases tras bastidores.
Dejé que mis ojos se abrieran de golpe y me puse rígido, lo cual estuvo obligado a sentir ya que yo estaba usándolo como una almohada humana. Aparté mi cabello de la cara y alcé la mirada hacia él. Sus ojos estaban medio cerrados y somnolientos también, pero vi que realmente quería saber cuál era mi respuesta. Tragué un poco y me mordí la lengua como hacía cuando estaba nervioso.
 —Tengo que ir el sábado a la casa de mi appa por el fin de semana. Voy a irme el sábado y no volveré hasta el domingo a la tarde.
Ahora él fue el que se puso rígido debajo de mí.
—¿Vas solo?
—No. —Mi voz apenas fue susurro—. Le dije a Sehun que lo dejaría en la casa de sus padres en el camino.
—¿Le dijiste al chico que te está acechando y acosando que le darías un aventón? —El tono incrédulo me puso nervioso.
—Sí, lo hice.
—¿Por qué?
—Porque sería más fácil eso que lidiar con el viaje de la culpa y las cantidades infinitas de decepción que mi appa me lanzaría si no lo hacía. No lo entiendes.
—Oh, lo entiendo perfectamente. Tu appa dice que saltes y tú lo haces directo en los brazos de ese loco. No puedo creer esto, Donghae, apenas llego a entenderlo, me vuelvo malditamente demente la mitad del tiempo porque me levanto en medio de la noche para tocarte y no estás aquí y tú estás planeando una escapada de fin de semana con el psicópata de tu ex-novio. Increíble.
Rodé lejos de él y tiré de la sábana alrededor de mí sintiéndome expuesto y vulnerable, nada que ver con el hecho de que estaba desnudo.
—No es así y lo sabes. No quiero ir, no quiero pasar el tiempo con Sehun pero dejar que mi appa consiga lo que quiere es más fácil que intentar desafiarlo.
—¿Cómo lo sabes? ¿Alguna vez has intentado desafiarlo?
Aspire aire frío a través de mis dientes.
—Es mi appá, Hyukjae.
—Como sea. Podemos hablarlo mañana. —Rodó sobre su costado lejos de mi y conocía a Hyukjae lo bastante bien para saber que no hablaría sobre ello mañana. De hecho, mientras me dejaba en mi auto la mañana siguiente hubo cero charla, cero besos, cero contacto visual, cero de lo que sea por su parte que indicara que una conversación podría arreglar lo que de alguna manera había hecho.
Le mandé un texto luego del trabajo al día siguiente, que lo sentía y quería verlo pero no obtuve respuesta. Lo llamé el martes para ver si quería ir a comer y hablar sobre las cosas y fui mandado directamente al correo de voz. El miércoles prácticamente estaba frenético y listo para aparecer en la tienda o en su apartamento y exigir que me hablara, solo que Siwon estaba de regreso  en la ciudad y me ordenó que cenara el miércoles y soltó que iba a caer en el apartamento de Hyukjae por unos días ya que la familia de su otro amigo estaba  en la ciudad durante la semana.
Mi corazón casi se devoró a sí mismo cuando me di cuenta que Hyukjae ni siquiera se molestó en dejarme saber que Siwon estaba en la ciudad. Yo muy bien podría haber aparecido y comportarme  como un completo idiota en frente de su hermano, y a él no le importaba siquiera. Pasé el jueves y el viernes llorando sobre el hombro poco compasivo de Zhoumi e intentando pasar a través de mis turnos en el trabajo. Yo era un desastre y el sábado a la mañana cuando me detuve en la panadería para recoger a Sehun todo lo que quería hacer era atropellar su petulante y sonriente rostro con mi BMW.
Intentó inclinarse para darme un beso en la mejilla y me retiré tan violentamente que estrellé mi cabeza contra la ventana del lado del  conductor.
—No. —Casi podía ver los carámbanos colgando de mi voz, pero no me importó. Extrañaba a Hyukjae, estaba enojado por tener que escoger entre él y otra familia y estaba enojado con él por no poder ver lo que yo tenía que  hacer. A lo largo de toda la semana había estado plagado con visiones de su habitación volviendo a convertirse en una puerta giratoria de conquistas sexuales y eso me hizo hiperventilar. Podía ver por qué estaba enojado conmigo, pero odiaba que estuviera ignorándome.
—Vamos Donghae, ¿no puedes al menos intentarlo y hacer este fin de semana agradable? Nuestros padres estarían encantados si pudiéramos arreglar las cosas entre nosotros.
Encendí la radio y dejé que la música llenara el vacío donde debería haber conversación. Abofeteé la mano de Sehun cuando la extendió hacia el control del volumen.
—Ni siquiera lo pienses.
—Vamos Donghae, tenemos que hablar.
—No.
—Deja de ser tan terco.
—Sehun, estoy con alguien más, no hay nada sobre lo que tengamos  que hablar. La única razón por la que voy a ir este fin de semana es para que appá deje de molestarme.
—¿El punk tatuado? No puedes pensar en tener algo serio con él, Donghae, en serio, ¿qué estás pensando? ¿Vas a regresar a casa luego de un turno de setenta y dos horas en el hospital y él va a estar sentado esperándote como una especie de amo de casa? ¿Realmente piensas que es una descripción exacta de cómo se ve tu futuro con alguien como él? Más cuando empieces tu residencia y tan pronto como vea cuánto tiempo estás fuera y cuánto tiempo tiene que pasar solo empezará a traer a todos esos jóvenes que estaban allí antes de ti. Abre los ojos, sujetos como ese no están a largo plazo, solo están hasta que el brillo desaparece.
Me enfurecí porque estaba golpeando un poco demasiado cerca de casa ahora mismo así que elevé la música e hice mi mejor esfuerzo para ignorarlo por el resto del paseo. Lo hice bien, conduciendo más rápido de lo  que debería, pero desesperado por conseguir salir del espacio confinado con Sehun.
Sehun había intentado varias veces empujarme a una conversación, pero cada vez aumentaba el volumen de la radio a un nivel ensordecedor haciendo ridículo intentar hablar. Finalmente entendió el punto y cerró la boca. Prácticamente lo empujé por la puerta sin detenerme cuando llegué a su casa en Mopko. Se movió hacia mí para que bajara la ventana y así poder hablarme, pero yo apreté los dientes y me alejé haciendo chirriar los neumáticos.
Mis padres vivían en una comunidad cerca de Mopko así que mientras atravesaba la ciudad, decidí detenerme en el Starbucks a donde había llevado a Hyukjae la última vez que estuve aquí y me tranquilicé. Solo para torturarme un poco más saqué mi teléfono y morí un poco más cuando mostró que no había mensajes o textos. No sabía qué hacer y sentí que todo lo que siempre quise se estaba resbalando a través de mis dedos.
—¿Donghae? ¿Choi Donghae, eres tú? —Alcé la mirada de mi café y sofoqué un gemido cuando el joven vino disparado hacia mí. Debería haber recordado que él susodicho y este Starbucks iban de la mano.
—Claro que sí, ¿cómo estás?
Él me dio en la cara un beso en el aire y me dio una sonrisa dentuda. Nunca había fingido ser así de agradable conmigo en la secundaria por lo que al instante estaba en alerta máxima.
—Oh, estoy bien. Acabo de terminar la escuela de estilista y estoy trabajando en un estupendo salón de modas de alta categoría en Seul, estás viviendo allí también, ¿verdad?
Asentí y vi sus ojos arrastrarse sobre mi nuevo y mejorada cabello.
—Bueno, estoy emocionado de encontrarte, estaba pensando en buscarte.
Levanté una ceja.
—¿Por qué?
—Bueno, estuve en casa hace unas semanas y me topé con uno de los gemelos Lee, el que está lleno de tatuajes, de todos modos, recordé que eras cercano a ellos y me estaba preguntando si me pudieras conseguir su número de teléfono. No puedo recordar cuál es pero Dios, estaba magnífico. Escuché que se mudaron a Seul también y estaba esperando poder ser capaz de empezar algo con él.
Sentí mis entrañas tornarse hielo. Casi le lancé mi café a su bonito y perfecto rostro, pero a duras penas por la piel de mis dientes conseguí refrenarme.
—Eunhyuk murió, queda solo Hyukjae, ha sido solo Hyukjae como por tres años y estoy seguro de que él amaaaaaaría escuchar de algún joven idiota que ni siquiera sabe quién era, solo uno de los gemelos Lee. Me haces querer vomitar y eres afortunado de que estemos en un lugar público o habría una buena oportunidad de que te golpeara repetidamente en la cara ahora  mismo.
Me miró boquiabierto con asombro cuando lo empujé para pasar junto a él y lanzar mi café en la basura, todo el sabor perdido debido a eso
—No voy a darte su número porque él es mío y si te acercas a él te juro por Dios que las cosas que te haré serán narradas en descubrimiento de la investigación en los años por venir.
Estaba temblando para cuando regresé al auto y solo tomó un segundo que las lágrimas vinieran. Extrañaba a Eunhyuk, extrañaba a Hyukjae y extrañaba a Jihoon y a Kangta. Hyukjae tenía razón, no sabía lo que se sentía desafiar a mi  appa porque nunca lo hice y ahora él era solo una persona más interponiéndose entre la persona con la que quería estar y yo. No tenía problemas en reclamarlo con un joven guapa como ese, pero mi appa, bueno, eso era más difícil de hacer.
Siempre he sabido que él vale la pena, que es lo que estaba esperando tan desesperadamente para que sus padres vean, pero cuando la oportunidad había llegado para demostrarlo yo había hecho lo que todos los demás le hicieron y dejé que mi appa me presionara para hacer algo que lo alejara. Presioné mi frente contra el volante y levanté mi teléfono. Lo miré fijamente por unos sólidos cinco minutos con el auto en marcha intentando pensar en que decirle y todo lo que se me ocurrió fue:

Realmente lo siento, nunca quise herirte. Debería haberme quedado.
Realmente te extraño.

Lo alejé antes de volverme loco viendo si él iba a escribir algo y me dirigí a casa de mis padres. La casa era más como una especie de elegante chalet de montaña que una verdadera casa. Todo más allá de las puertas era elegante y caro, y mientras me estacionaba y me dirigía a la puerta principal recordé lo pequeño que me sentía junto a la grandeza.
Cuando Eunhyuk había entrado a mi vida y llevado bajo su ala, había tomado la oportunidad de pasar cada segundo que podía con los Lee, para todos sus defectos, hicieron   una casa donde era claro que las personas eran amadas y cuidadas, las casas de mi appa y padre no habían sido nada de eso. Estaban llenas de sirvientes y  piezas para mostrar y mientras era llevado a la sala de estar me llamó la atención una vez más lo mucho que no quería estar aquí y cómo si no podía arreglar las cosas con Hyukjae luego de este fin de semana había una buena probabilidad de que iba a tener que comprometerme porque perdería la cordura.
Mi appa en todo su refinado esplendor se acercó a mí con ojo crítico. No hubo abrazo, ni cómo estuvo tu viaje, ni lamento haberme perdido tu cumpleaños, cariño, solo un rápido barrido de su helada mirada desde la cima de mi cabeza a los dedos de los pies atados en mis botas de cuero. Su boca ya apretada tiraba de un ceño fruncido.
—¿Qué le has hecho a tu cabello, Donghae? Se ve terrible y espero que trajeras la ropa adecuada para el country club, vamos a cenar, no a una comida comunitaria.
Una vez más había fallado en cumplir sus estándares. Mis manos se curvaron apretadas alrededor de la bolsa que me había negado a darle a la sirvienta que abrió la puerta. Mi Heechulzón se encontraba en mi garganta, bueno, en realidad estaba en Seul actualmente ignorándome pero no estaba allí ni aquí.
—¿Asumo que tú y Sehun hablaron camino aquí?
—No es cierto. Te dije que no tenía nada que decirle.
Si fuera posible que su boca se estirara incluso más en un ceño más fruncido, parecería como si estuviera chupando un limón. Mi appa era un joven hermoso, pero mientras lo miraba objetivamente por, posiblemente, la primera vez en mi  vida me di cuenta que toda esa belleza era dura y estaba encajonada en tanto hielo y amargura que era dura de ver.
—Te  pedí  que   dejaras  de   ser  ridícula,  jovencito.  Serás  cortés  y encantador este fin de semana. No toleraré ninguna hostilidad o grosería dirigida a Sehun o su  familia ¿me entiendes?.
De algún lugar profundo dentro de mí, el Donghae que fui cuando estaba con Hyukjae, el Donghae que debería haberse negado a venir a esta farsa de un fin de semana, levantó su cabeza, rocé a mi appa al pasar junto a él para dirigirme a las escaleras donde estaba localizado mi cuarto.
—Me ordenaste que estuviera aquí, appa, así que ahora tendrás que lidiar con eso ya sea te guste el resultado o no. —Gritó algo detrás de mí en una voz estridente pero no le hice caso diciendo sobre mi hombro—: Déjame saber cuando estés listo para cenar.
Cerré la puerta a la habitación que nunca había sentido realmente como mía y dejé caer mi bolsa en el suelo. Era la habitación que una persona disfrutaría  si quisiera dormir en el lujo y rodeado por un millón de sábanas de hilo para disfrutar, para mí siempre se había sentido sin vida y opaco.
No había fotos personales, ni toques de color, ni TV o radio simplemente nada para describir algo sobre la persona que se suponía que vivía allí. Me instalé con las piernas cruzadas en el centro de la enorme cama y le envié a Zhoumi un texto. Había estado actuando un poco raro desde la noche que Henry lo había llevado a casa desde el bar, pero no quiso hablar sobre ello y ya que estaba con mi propio drama de chicos no quise pelear para sacárselo.
—Ni siquiera había dado dos pasos antes de que mencionara mi  cabello y mi ropa. Que bueno es estar en casa.
—Eso apesta, cariño.
—Sí, y Hyukjae sigue sin responderme.
—Uhmmm….
—¿Qué?
—No sé si debería decirte
—¿Decirme que?
—Tienes que prometerme no volverte loco.
—Bueno, ¡ahora estoy obligado a volverme loco!
—Daesung estaba hablando de salir anoche; dijo que vio a Hyukjae y a los chicos en el bar en el que estaba.
—Oh, Dios mío….
—Sí, bueno, mencionó que iba a intentar hablar con él o lo que  sea porque es una ramera despistada, pero él tenía a un pelirrojo encima de él, Daesung dijo que ni siquiera se acercó a él.
—Mierda.
—Sí, bueno, también dijo que él se fue con la pelirroja, quiero decir que toda la banda se fueron juntos y Daesung es un chismoso atroz y le gusta causar problemas, pero pienso que deberías estar advertido ya que no puedes ponerte en contacto con él.
—Gracias.
—¿Estás bien?
—No, para nada.
—¿Quieres que lo lastime en tu nombre?
—Quizás, te llamaré más tarde después de pasar por esta estúpida cena. Te quiero, chico.
—Yo también. XOXO
Pasé un dedo sobre la pantalla y me tomé un segundo para contener la respiración antes de soltarla en un furioso chillido y aventar el lujoso dispositivo contra la pared. Enterré la cabeza en mis manos. No podía creer que esto estuviera pasando. Había tenido todo lo que siempre quise por unos cuantos segundos y todo lo que tomó fue un  solo golpe, un pequeño desacuerdo para arruinarlo todo.
No debería doler que yo fuera  tan  fácil  y  rápidamente  reemplazado.  Conocía  a  Hyukjae,  sabía    cómo operaba, pero igualmente se sentía como si alguien estuviera clavando hoyos en la misma fibra de mi alma con un atizador al rojo vivo. Estar enamorado de Hyukjae nunca había sido algo fácil de hacer, y ahora que sabía cómo era realmente amarlo no estaba seguro de cómo volver al antes.
Pasé el resto de la tarde acuartelado en mi habitación. Mi appa envió a alguien del personal para ver si quería comer, pero me negué a responder a  la puerta cuando golpearon. Envió a su esposo como a las cinco para decirme que nos íbamos en una hora al club y mientras una gran parte de mí quiso más que nada usar jeans ajustados y mis botas de motociclista, decidí que tener esa pelea con mi appa en frente de mis medios hermanos solo me haría parecer infantil y ridículo así que me puse mi atuendo de niño elegante.
Mi appa me miró maliciosamente cuando bajé las escaleras y Jack me ayudó a ponerme mi chaqueta. Nadie dijo nada mientras nos apilábamos en el Escalade de la familia y nos dirigíamos al club campestre.
La traición del chico se clavaba de un lado a otro mientras me preocupaba por Hyukjae y algun pelirrojo desconocido, esperando que no significara lo que pensaba y deseando que al auto se le reventara un neumático para así poder evitar a Sehun y a su familia. No sucedió eso, y cuando llegamos al club y tuve que forzar una sonrisa y dejar que Sehun me diera un beso en la mejilla y retirara mi silla, literalmente tomó cada gramo de fuerza de voluntad que  tenía para no correr gritando en la dirección contraria.
Me ubiqué entre Sehun y mi appa y me preparé para sufrir la cena más incómoda y horrible de mi vida.


6 comentarios:

  1. Hay dios, Hae en verdad sufres porque quieres. Espero que Hyuk no la haya embarrando con algún pelirrojo

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  2. TT___TT
    Ahhhh pescadito baboso!!!
    Ahhhhhh Nooooo
    No inventes, tona tus cosas y ve a buscar a tu mono Sexoso!!!
    Pero ya!!!

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  3. Hae me desespera porque no puede tan solo revelarse ante sus Padres y no permitir que se sigan metiendo en su Vida, hyuk tiene razon en estar molesto aunque tampoco se justifica que al primer desacuerdo vaya a meterse con otro, los dos se merecen un par de cachetadas.

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  5. Vaya familia que se carga cada uno,por esta y otras razones es que se complementa uno al otro,y lo hacen tan bien,punto a su favor es que lo saben.
    Aquí el de la culpa es Eunhyuk,por andar complaciendo a todos,ya que Siwon y mucho menos Hyukjae lo hacian,el se adjudico el papel,ahora miren al appa como trata a Hyukjae y lo que quiere de sus hijos...y ahí va Hae dándole alas por tres años...al menos ya se harto de eso y dejo a los padres de Hyuk pensar en ello y las cosas que les dijo...tres años,ya va siendo hora.
    Y bueno,Hyukjae es otro,no hay a cual irle de la familia Lee,ni a los padres por ser los padres y los mayores,ni a los hijos por ser ya ahora unos adultos. Del muerto no puedo hablar(aunque ya haya dicho que es su culpa) porque esos secretos de los que habla Hae al principio,dan en qué pensar.
    Y bueno,ahora que ya Hyuk le dio a Hae algo que deseaba desde hace mucho y con tantas ganas,ahora que ya medio han hablado de lo quieren,ha habido un avance en su forma de tratarse y la han llevado a otro nivel,uno que al parecer se ha visto empañado con la pésima decisión de hacerle de chofer al idiota que tenía por novio. Fue algo realmente bobo por no decir estúpido de parte de Hae,si ni siquiera soportaba sus llamadas,ahora le dio por darle el aventón. Va a casa de sus padres por la amenaza de su appa,le dijo que lo quería ahí,para qué demonios se lleva al otro en su auto...no hagas cosas buenas que parezcan malas.
    Y como Hae no tiene suficiente con que Hyuk lo este ignorando,con el viaje y la insistencia del idiota,más lo que su appa quiere que haga,luego viene Mimi dándole el chisme de que alguien le dijo que vio a Hyuk con un pelirrojo y que se fue con Hyuk y los demás...al menos todo ese coraje y todo lo que Hae se está conteniendo,salga a flote cuando se esté quemando más la cabeza pensando en que su Hyuk ha estado con un pelirrojo despampanante, y que cuando sus padres le digan algo,explote y por una vez en su vida se defienda un poco...de verdad espero que para eso sirva el chisme y el pelirrojo...pero toca esperar lo que hará al final,igual y se aguanta como lo ha hecho.
    Conchale,si ya hasta dejo en su lugar al del starbuck solo por pedirle el numero de SU Hyuk e insinuarle que quiere algo con él,que no haga algo por él...pliiiiis
    Y luego está Hyukjae...¬¬
    Yo de verdad espero que no haya hecho algo estúpido,que este enojado,sentido y todo lo que quiera,menos,que se le haya subido la calentura a ciertas partes...le doy el beneficio de la duda porque no sé nada de él(pov-Hyuk) desde que dejo a Hae en su auto
    Ay...yo quiero que Hae le pida a Hyuk que le haga un tatuaje...la cereza del pastel *0*

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  6. Si bueno, no puedo disculpar a Hyukjae pero tampoco puedo decir que no actuaria de la misma manera, imaginate nomas, Hae muy bueno para criticar y conocer los defectos de la familia Lee, pero cuando se trata de su propia familia decide solo seguir la corriente y obligar a su actual pareja a ver y callar todo, pues yo espero que no haya gato encerrado en esta cena....gracias por el cap.

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yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...