Marcado II -9



Al llegar a casa estacioné en la calle con toda la intención de solo seguir rápidamente para ver lo que la pequeña bola de fuego rubia estaba haciendo. Cuando estaba saliendo del auto, la puerta de entrada de la casa se abrió de golpe y un  hombre que no conocía salió volando por los escalones de entrada, con Heechul pisándole los talones.
Sentí mi mandíbula caer abierta cuando me di cuenta de que estaba agitando una Taser y gritando obscenidades a todo lo que daban sus pulmones. Iba a moverme, para correr el tipo, pero antes de que cualquiera de nosotros pudiera llegar a él, pasó una pierna por encima de una moto que estaba estacionada junto a la acera y salió como alma que lleva el diablo. Traté de mirar la matrícula, pero Heechul tiró su pequeño cuerpo en mi pecho tan fuerte que di un paso atrás y casi nos fuimos abajo.
—¿Qué demonios?
Temblaba un poco, así que saqué la Taser de su mano en caso de que accidentalmente me electrocutara.
—No lo sé. Alguien llamó a la puerta y solo pensé que era un vecino o un abogado. Tan pronto como la puerta estuvo abierta, me empujó hacia atrás y comenzó a entrar en la casa. Corrí a la cocina, porque todavía tengo todas esas cosas que compré para protección cuando Donghae vivía aquí y estaba preocupado por su ex. Vino tras de mí y siguió preguntando en dónde estaba la cosa.
Negué con la cabeza en confusión porque estaba hablando a mil por hora.
—¿En dónde estaba qué cosa?
—No lo sé. Solo la cosa. Se asustó cuando vio la Taser y creo que escuchó tu auto detenerse. Salió corriendo.
—Tenemos que llamar a la policía. —Le di unas palmaditas en la espalda porque podía sentir su temblor. Heechul era un jovencito duro, y no mucho lo agitaba, pero tener a un extraño forzando su entrada en su casa tenía que haber sido terrible. Dejó escapar un pequeño suspiro contra mi pecho, donde estaba escondido y me dio un suave puñetazo en mis costillas.
—No.
—¿Qué? ¿Por qué demonios no?
—Porque no pueden hacer nada. No se llevó nada, y nunca tuvo la oportunidad de poner sus manos sobre mí. Vendrán a hurgar y nos dirán mala suerte. Soy un idiota por abrir la puerta de todos modos. Lo sé muy bien.
Lo aparté con un gesto brusco.
—Podrías haber sido gravemente herido.
Desdeñó mi comentario con un gesto.
—No, no podría haber sido herido. Estaba buscando algo, no iba tras  de mí. Simplemente me asustó, eso es todo. ¿Qué estás haciendo aquí, de todos modos? Pensé que ibas a jugar con Zhou.
No me gustó ni un poco. Todo dentro de mí decía que llamara a la policía, que un joven que me importaba ya había sufrido por una bala perdida. No iba a dejar que sucediera de nuevo. Lo recogí en un abrazo de todo el cuerpo que lo hizo chillar y reír al mismo tiempo.
—Tienes que tener cuidado, Heechul. No sabríamos qué hacer sin ti.
Se burló.
—¿De verdad crees que voy a dejar que ustedes vaguen por la ciudad sin supervisión? La población nunca sobreviviría. Tenemos que estar seguros de decirle a Zhou que tenga cuidado. No sé qué hubiera pasado si él hubiera estado en casa y no yo.
Eso me gustó incluso menos. No sé cómo podría retener toda la furia y fuego que apenas contenía si algo le sucediera a Zhoumi. Si eso llegaba a pasar, no solo ardería en llamas, sino también habría una posibilidad de que terminara quemando a cualquiera cerca de mí hasta las cenizas.
—No   me gusta esto,  Heechul.  Quiero que  ambos   estén a salvo.—Enganchó su brazo con el mío.
—Vamos a estar bien, Henry. En serio, probablemente solo se equivocó de casa, o estaba buscando dinero para drogas o algo así. Ningún lugar es perfecto y  nosotros  podemos  cuidarnos  por  nuestra  cuenta.  Nunca  me  contestaste. —Sus locos ojos se estrecharon sobre mí—. ¿Arreglaste las cosas con Zhoumi?
Suspiré y dejé que me arrastrara en la casa.
—Más o menos. Le pedí disculpas por ser un idiota anoche y le dije que no podía luchar contra esta cosa entre nosotros. No sé cómo es para él pero puedo llevar las cosas poco a poco por ahora.
—¿Estuvo de acuerdo con eso?
—Supongo, sinceramente, creo que ésa es la única manera de que esté bien con eso. Es una persona difícil de atrapar.
—No seas estúpido, Henry. Tienes mucho que ofrecer a cualquier persona. Lo interesante es que Zhoumi no es el tipo de joven que tome algo. Puede proveerse a sí mismo, y ser feliz simplemente tomando lo que quiere de ti. Todo depende de ti en hacerle ver lo mucho que estás dispuesto a dar y lo bien que estará con todo el paquete. Haz que quiera ser atrapado y no solo en la forma sexy y divertida.
Simplemente lo miré en silencio. Este pequeño duendecillo nos rodeaba todo imperfecto y a veces creo que había descifrado nuestras vidas mucho mejor que nosotros mismos.
—Lo tendré en cuenta. —Me dio unos golpecitos en la barbilla con  su dedo.
—Bien.
—Todos los chicos se fueron a los bolos. ¿Quieres ir? Kyuhyun estaba preocupado ya que no contestabas el teléfono, así que decidí venir a ver cómo estabas.
Arrugó la nariz y se pasó una mano por su rubio cabello en punta.
—No. Creo que ya he tenido suficientes emociones por un día. Además, ya tuve mi buena porción de mal humor antes de la entrada y huida del día. Creo que me gustaría terminarlo.
Sentí que mis cejas descendieron bruscamente. Heechul no era una persona malhumorada. Era alegre y honesto hasta la exageración.
—¿Por qué estás enfurruñado por ahí? Eso no es de ti. Suspiró y se dejó caer pesadamente en el sofá.
—Ver a Hyukjae cuidar tan bien de Donghae es un poco difícil para mí. Nunca pensé que fuera a enamorarse, nunca pensé que nadie sería capaz de hacerle ver más allá de sí mismo, pero él lo hizo, y ellos son tan perfectos juntos. Pensé que los chicos como él, chicos como tú, eran imposibles. Ahora me pregunto si yo soy el que es imposible. Quiero decir, tú eres increíble, Zhoumi es increíble. Así que, sea lo que sea que ustedes tienen está obligado a ser increíble y siento como que me falta algo.
Éramos amigos y me preocupaba mucho por él. Había un montón de espejos en la casa, así que sabía que Heechul sabía que era lo suficientemente atractivo como para volver a los hombres estúpidos. Realmente no lo  entiendo, pero lo único que pude averiguar era que estaba solo, porque quería estar solo.
—Heechul, vamos. Puedes encontrar un tipo en, como, un segundo. La mitad de los chicos de la banda te tienen en su lista laminada.
Puso sus expresivos ojos en blanco.
—Quiero algo real, Henry. Algo que cambie mi vida y sea dramático, algo que me haga olvidar que cualquier otra persona alguna vez existió. Simplemente no puedo ver que eso suceda y me pone triste.
—Creo que tal vez estás buscando algo que no existe.
—Mira a Hyukjae y Donghae. Existe.
Realmente no podía discutir ese punto con él, pero no sabía qué más decir. Yo creía en el amor. Simplemente no confiaba en él y en cualquier cosa que pudiera ser el resultado final si dos personas no fueran en última instancia el uno para el otro. Cada gran canción era cantada desde un lugar de amor. Sabía que el amor era lo suficientemente fuerte como para cambiar a la gente.
Mi mamá se aferraba a su amor por mi papá, como si fuera una balsa en el centro del océano de horror que era su vida. Era solo en mi experiencia que el amor nunca cambiaba a nadie para mejor, con Hyukjae siendo la excepción a la regla. Él siempre hacía lo suyo de todos modos, así que no era como que fuera a amar a alguien, incluso dentro de las convenciones de la regla en que por lo general funcionaba.
—Bueno, si un sujeto aparece, ésa va a ser una enorme cantidad de presión para poner en él.
—Lo sé, y por eso estoy destinado a estar solo y de mal humor por el resto de mi vida. Por no hablar de frustrado sexualmente.
—Deja de ser ridículo y sacúdete esta porquería. Ve a ponerte unos zapatos y ven a los bolos con nosotros. Va a ser divertido.
Se quejó hasta que finalmente me cansé de ello, y simplemente lo levanté y arrastré hasta su habitación. Discutió todo el trayecto, pero después de señalar que llevaba pantalones que estaban obligados a hacer imposible lanzar una bola pesada por todo el camino sin que se rompiera por  la mitad, a regañadientes se puso unas zapatillas y me siguió hasta la puerta.
Me negué a montar en su pequeño auto de circo, así que nos subimos en el auto y rugimos calle abajo.
El boliche estaba iluminado en azul y tenía sofás de terciopelo esparcidos por todo el lugar. Personalmente, pensé que se parecía más a un club de striptease que a un boliche. Los chicos tenían cerveza y parecía que estaban pasando un gran rato bromeando entre sí mientras rotaban de turnos.
Había un grupo de adolescentes unos carriles abajo abiertamente embobados, y pensé que iban a necesitar que llamaran a los paramédicos cuando Kyuhyun les dio un guiño cuando se levantó para tomar su turno. Me senté junto a Heechul en uno de los bancos y me agaché justo a tiempo para evitar ser golpeado en la cabeza con la palma de la mano de Hyukjae. Le fruncí el ceño, pero su mirada glacial dejó en claro que no estaba jugando.
—Vuelves actuar alguna vez como lo hiciste anoche y voy a utilizar tus intestinos para encadenar tu Les Paul.
Tragué saliva, ya que de la mayoría de las personas ésa era una amenaza vana, pero no viniendo de él. Asentí con la cabeza.
—Lo sé, amigo, lo sé. Traté de hacer lo correcto. Estamos bien, él no me odia.
Esos fríos ojos me contemplaron con seriedad y debe haber decidido que cualquier cosa que vio era sincera, porque parte de la tensión abandonó su cuerpo.
—Bien, porque si te odia, entonces Donghae tiene que odiarte, y por defecto, eso significa que yo tengo que patear tu culo por toda la ciudad y no me gustaría tener que hacer eso.
Me reí y tomé una cerveza que Jjong me entregó.
—No odiarías hacer eso en absoluto.
Se encogió de hombros y asintió a Heechul quien estaba teniendo algún tipo de discusión con Kyuhyun sobre intercambiar sus zapatillas por zapatos de boliche.
—¿Qué pasa con él?
Sentí mi boca descender en las esquinas y mis ojos afilarse solo una fracción. Jjong se sentó en la mesa baja del salón y los tres inclinamos las cabezas juntas para que me pudieran escuchar cuando bajé la voz.
—Cosas malas han pasado en la casa, chicos. Cuando llegué allí, estaba persiguiendo a un tipo por la puerta. Dijo que se abrió paso en el lugar y estaba exigiendo saber dónde estaba “la cosa”. No tiene idea de lo que estaba buscando, pero estaba muy conmocionado. Él se fue en algún tipo de moto trucada demasiado rápida para que yo hiciera algo al respecto.  Después  de todo lo que pasó con Donghae, no me gusta ni un poco.
Jjong silbó y Hyukjae gruñó como un animal salvaje.
—¿Has llamado a la policía?
Me senté de nuevo y entrelacé los dedos detrás de mi cabeza.
—Heechul no me dejó. Ya lo conoces, piensa que esto es el Salvaje Oeste todavía y que cosas como esas simplemente no suceden aquí. Parece pensar que es un evento de una sola vez y que el sujeto era solo un drogadicto o alguien en busca de dinero. Esa moto era nueva y no había forma de que simplemente escogiera nuestra casa al azar. Estamos demasiado lejos del centro para un drogadicto que solo buscaba ganar un poco dinero.
—Esto no es bueno. —Hyukjae sonaba un poco desquiciado y no podía culparlo. Había perdido un poco la cabeza cuando Donghae había sido atacado y todos estábamos ahora empezando a recuperarnos de todo eso.
—Lo sé, pero no quiero alarmar a todos sobre algo si resulta no ser nada. Le diré a Zhoumi para que se mantenga alerta y le recuerde a Heechul que las cosas aquí pueden ser tan malas como en cualquier sitio, pero estoy esperando que esto fuera un incidente aislado.
Hyukjae se llevó las manos bruscamente por su cabello en punta y entrecerró los ojos que brillaban como el hielo en un lago congelado.
—Más vale que sea así porque no voy a poder pasar por algo como lo que pasó con Donghae de nuevo.
Levanté una ceja.
—Voy a mantener un ojo sobre ellos. Yo vivo allí, sabes, y estoy tratando de arreglar las cosas con Zhoumi.
Negó con la cabeza.
—No es eso. No tienes ni idea de lo que es tener a alguien que te importa, alguien a quien amas, frente a un peligro así. Eso te cambia, te convierte en una persona diferente. Apenas lo logré cuando Donghae fue lastimado. Si alguien hiere a Zhoumi o a Heechul, nadie sabe lo que va a suceder.
Jjong se estiró y le dio un empujón con una de sus manos. Hyukjae lo fulminó con la mirada, pero había algo en Jjong que daban ganas de escuchar lo que tenía que decir.
—Todos nos preocupamos por esos jóvenes, Lee. Nadie quiere que le pase nada a ninguno de los dos. Deja que Henry se encargue del frente interno. Tú dile a Donghae que mantenga los ojos abiertos y recuérdale a Zhoumi que tenga cuidado y al acecho. Somos un maldito equipo y más vale que nadie lo olvide.
Tomó un minuto antes de que Hyukjae cediera, pero cuando lo hizo sus hombros se relajaron y sus manos tatuadas se aflojaron. Asentí de acuerdo, pero la conversación se vio interrumpida ya que Heechul se dejó caer en el sofá entre Jjong y yo, y puso mala cara ya que Kyuhyun lo forzaba a usar los  regulados zapatos de boliche.
El tema esencialmente cayó, pero no podía dejar de pensar en lo que él dijo, que cuando te importaba alguien tan profundamente cambiabas, te convertías en una persona diferente. En su caso, la decisión de poder amar a Donghae, y más importante aún, que él pudiera amarlo, lo había convertido en un hombre totalmente diferente. Seguía siendo un dolor en el culo, pero ahora era un dolor en el culo que podía ver más allá de sí mismo, y era un brillante ejemplo de que el amar a alguien cambiaba a cualquiera para mejor.
No sabía cómo pasar de amigos a algo más fuera a funcionar para mí y Zhoumi, o que necesariamente tenía que ser mejor o peor. Lo único que sabía con certeza era que estaba dentro de mí como frías gotas de agua al lado de todas las cosas ardientes que habían vivido allí durante años. No tenía ninguna prisa en sacarlo, porque algo en él era tan fresco y relajante para todas las partes de mí que habían estado en llamas desde hace demasiado tiempo.


Estaba cansado cuando llegué a casa. Había estado ocupado en el trabajo, lo que era muy agradable porque estaba cansado de esquivar las preguntas de Donghae y las   miradas especulativas acerca de mi relación o no relación con Henry. No estaba listo para discutir de eso con él, demonios, ni siquiera estaba listo para entrar en esa relación con Henry.
Cuando Hyukjae se había presentado a buscarlo, prácticamente puso su fuerte brazo para llevarme a casa. Cuando se distrajo con Lou, literalmente desaparecí por la puerta trasera para tomar mi propio auto e ir a casa. Algo raro estaba pasando, porque aunque Hyukjae normalmente era mandón y dominante, por lo general lo atenuaba conmigo porque no le consentía nada en lo más mínimo.
Cuando estaba saliendo del estacionamiento, leí un texto de Heechul diciéndome que tenía que estacionar en la calzada y que habían dejado todas las luces encendidas para mí. Todo era clandestino y demasiado cauteloso, haciendo que se me erizara el cabello de la parte posterior del cuello.
La casa estaba en silencio cuando llegué a la puerta principal. La luz de Heechul estaba apagada. Todavía no estaba seguro acerca de este nuevo territorio que estaba pisando con Henry, a pesar de que su luz estaba encendida debajo de la puerta, decidí que necesitaba una ducha y recoger mis pensamientos por un minuto antes de tratar de hablar con él. Recogí un par de pantalones de yoga y un top elástico antes de ir al baño silenciosamente.
Compartía el segundo cuarto de baño con Henry, y antes de que hubiera empezado a meter la lengua hasta su garganta realmente nunca pensé en lo íntimo que era. Por ejemplo, toda la basura que utilizaba en su cabello se esparcía por todo el mostrador, junto a todas las cosas que solían hacerlo oler bien y lucir hermoso.
Tenía una colección de gruesos anillos de plata en un lado del lavabo y un manojo de arbitrarias púas de guitarra en la jabonera, al lado de las botellas de perfume de lujo que he dejado fuera porque era demasiado perezoso para guardarlos. Uno de sus cinturones con tachuelas de metal estaba enroscado en la parte posterior de la taza del baño y mi uniforme de animador estaba en una pila desechada en el suelo. De algún modo, sin darme cuenta, mi vida se había cruzado con la suya tan a fondo que era simplemente perfecta y fácil. Me gustó tener todas mis cosas mezcladas  con las suyas. Convirtiéndose en un lío más interesante, un poco como nosotros.
Cuando estaba caminando a mi habitación, tuve que pararme fuera de la puerta debido a la música que venía desde el otro lado del pasillo. No eran los chillidos que hacían sangrar tus oídos, o el dolor de cabeza que normalmente inducía el ruido a todo volumen, era una suave guitarra y la voz más hermosa que jamás había escuchado.
No podía entender la canción  porque no sonaba familiar, pero era lo suficientemente atractiva que tiré todo sobre mi cama y me fui al otro lado del pasillo sin ninguna vacilación. Llamé a la puerta y la guitarra se detuvo el tiempo suficiente para que me dijera que podía entrar, cuando lo hice, mi respiración se detuvo en algún lugar en el medio de mi pecho, y mi corazón hizo un lento descenso todo el camino hasta la parte inferior de los pies y subió a mi garganta.
Henry estaba sentado en el centro de la cama, con sus largas piernas cruzadas en los tobillos. No tenía camisa, lo que ya era caliente y entretenido, y el enorme tatuaje negro y gris que cubría todo su torso parecía amenazante detrás de la guitarra acústica que sostenía.
Era todo un espectáculo que me  hizo contener mi aliento y recordarme por qué ponía toda buena intención que tenía a prueba. Tenía su oscura cabeza inclinada garabateando algo en un cuaderno que tenía abierto junto a él. Se veía despeinado y sexy, la estrella de rock en reposo, pero las cosas que estaba haciendo con la guitarra y la forma  en que sonaba cuando cantaba el siguiente verso hizo que mis rodillas se debilitaran. Crucé la habitación aturdido, inconsciente que su voz tiraba de mí. Me hundí hasta el borde de la cama y lo miré con los ojos muy abiertos.
No me reconoció hasta que finalmente terminó, y para entonces yo tenía una película de lágrimas en mis ojos y sentí que algo en mi alma había sido tocado por lo que este chico podía hacer. Se inclinó sobre mí y puso la guitarra en el suelo y metió el bloc de notas en un cajón de su mesilla de noche. Sus ojos oscuros me miraban en silencio y no pude dejar de extender la mano y tocarlo. Agarré su muslo y me incliné por lo que estábamos al mismo nivel.
—¿Si puedes cantar de esa manera por qué demonios en el escenario gritas y gritas para que nadie pueda entenderte? Eres increíble. Eso era tan hermoso, que hizo doler mi Corazón.
Se aclaró la garganta y se encogió de hombros. Había una gran  cantidad de piel tatuada expuesta y aunque estaba acostumbrado a verlo en el escenario o en el pasillo, pero de cerca y personalmente era bastante impresionante y una gran distracción, quise tocar todo eso. No estaba seguro de dónde fijar mi mirada, así que decidí que la mirada de medianoche con el halo dorado era mi mejor opción.
—Es solo música, Zhou. Todo habla de algo dentro de nosotros.
—Pero tienes una hermosa voz. Puedes ser famoso, como famoso a un nivel ridículo.
Se metió las manos detrás de la cabeza y se echó hacia atrás, haciendo contraer y flexionar sus abdominales, dignos de babear, bajo la tinta que los cubría. Mis dedos picaban por recorrerlos a lo largo del débil rastro de vello negro que asomaba por la parte superior de sus pantalones demasiado  ajustados y por sus provocativos abdominales definidos bajo una cubierta de tinta negra y gris.
—Podría ser famoso sobre un nivel ridículo cantando metal o  cantando canciones infantiles. Eso no es lo que quiero.
Me mordí el labio, porque era mucho más complicado de lo que yo le había dado crédito. Pensé que la banda era solo una forma en que mataba su tiempo, una manera de darse a conocer. No tenía ni idea de lo hábil que era, o que estaba evitando activamente ser una maldita gran cosa.
—¿Qué es lo que quieres a largo plazo, Henry? ¿A dónde quieres llegar  con todo esto? Perder un talento así debería ser un crimen.
La esquina de su boca se inclinó en una sonrisa que hizo hormiguear mi piel.
—Mientras pueda seguir escribiendo canciones que sean lo suficientemente buenas para que las parejas hermosas, de cabello rojizo  llamen a mi puerta en medio de la noche, puedo ser feliz. Te cantaré todo lo que quieras, Zhou, si eso significa que puedas seguir mirándome de la forma en que me estás mirando ahora mismo. La larga carrera puede esperar.
Sabía que si lo dejaba, me iba a tener. Si me cantaba con esa hermosa voz y tocaba la guitarra para mí, con esas manos cubiertas de anillos pesados y con las uñas en esmalte negro, simplemente me poseería.
Estaba cerca y yo estaba haciendo mi mejor esfuerzo para mantenerlo a distancia. Sabía que  nada de esto, su hermosa voz, su cabello despeinado o la tinta cubriendo su piel, pertenecía a mi futuro, pero dejar que todo tomara su curso estaba sonando cada vez mejor. Deslicé mi mano un poco más arriba de su muslo y vi como pequeñas chispas se disparaban del borde dorado de aquellos irises de medianoche. Era mi tentación, y lo ha sido por un largo tiempo. El bueno o malo Zhoumi, ambos lo querían, solo a él.
Me incliné aún más sobre él, para que mis manos se mantuvieran a ambos lados de su cadera. Estábamos frente a frente, y solo nuestro aliento separaba nuestras bocas. Ninguna parte de nosotros se estaba tocando, pero podía sentir prácticamente el salto de electricidad de su vistosa piel a la mía.
—¿Por qué siento que soy siempre el que está detrás de ti, Henry?
Mi voz era apenas un susurro, y vi cuando tocó sus labios, los hizo temblar. Sacó las manos por detrás de la cabeza y sentí el frío de su roce con los anillos a través de mis mejillas mientras excavaba sus dedos en el cabello de mi frente.
—No lo sé, Zhou.
Probablemente habría tenido una observación inteligente para devolverle, pero me estaba tirando a través de las piernas y nos giraba de  modo que estaba sobre mi espalda y él se cernía sobre mí en toda su tonificada y tatuada gloria. Había tenido su boca en la mía antes, así que no debería ser sorprendente, no debería ser alarmante, pero había algo acerca de estar acostados y no tener nada más que finos pantalones de algodón entre una impresionante erección y yo que hizo que nuestros besos anteriores parecieran como práctica para el evento principal.



3 comentarios:

  1. pero que carajos!!!!
    quien andaba en la casa de los chicos!esto no me gusta nadita! por que creo que Mimi anda en problemas!!!!
    ahhhhhh
    ya!!!! que se coman eso!

    ResponderEliminar
  2. que bien que no le paso nada malo a la chula espero el proximo capitulo

    ResponderEliminar
  3. Que pesar lo Henry y su mamá...la señora no quiere ayuda y Henry sufre al verla así,eso no le ayuda en nada,así nunca tendra confianza y demostrar lo que puede ofrecerle a Mimi.
    Yo digo que...Hee se lleve a Sieon a su casa,digo,así los cuida de quien sea que este llamando a Mimi y del tipo que se metio a su casa a buscar la "cosa" .....no puede ser el mismo...o sí?...
    Si de por sí mimi quiere a Henry o lo dedea desde hace mucho,luego este toca y canta sin querer una canción que hace a Mimi sentirse así...Mimi no puede contenerse más.
    Henry debería rascar la picazón de Mimi y viceversa...joder si lo están desesndo.
    Y junto a eso se están haciendo daño,quizás más porque lo dudan.

    ResponderEliminar

yota´s news : De regreso?

 Buenas tardes a todas las lectoras. Después de un año  y casi 4 meses regreso a saludarlas y comentarles nuevas.  Me gustaría decirle...